Leí una historia sobre una seria de One-soht, y me dieron ganas de hacer uno. Hasta que hace poco tiempo una amiga me pidió hacer una así, dándome al fin la oportunidad que necesitaba.

No soy lo que se dice una gran escritora, mi gramática y de vez en cuando mi ortografía dan que desear.

Pero me esforzare al igual que mi amiga por cumplir sus expectativas.

Si a las dos autoras que me dieron la idea les parece mal, por favor decidlo y pararemos el fic.

También estamos abiertas a ideas, por si alguien quiere que escribamos sobre mini historieta sobre algo en concreto.

Bueno sin mas que decir me callo, que se que soy muy pesada.

Fanfic compartido entre Rashi Itami y Pitukel.

Naruto © Masashi Kishimoto.

One-soht © Pitukel.

Pareja: Gaara/Hinata.

-Advertencias de este One-soht:

-OoC

-Lime

-Crack

-PwP

-UST

-Chocolate-

Salio de la sala de estar, para dirigirse a la cocina.

Abrió la nevera sacando la mantequilla y los huevos frescos, poniéndolos sobre la mesa. Se dirigió hasta la alacena, para coger los boles que le hicieran falta para cocinar. Junto con la harina, el azúcar y la vainilla.

Del cajón de la encimera saco un hermoso delantal blanco con bordados en encaje rojo, que le quedaba algo ajustado alrededor de su busto.

Se hizo una cola alta de caballo y se envolvió un pequeño pañuelo en la cabeza para que no cayera ningún pelo a la comida

Los utensilios restantes los dejo también sobre la mesa al lado de todos los ingredientes.

Entusiasmada y muy animada, decidió preparar el postre favorito de su chico.

Galletas con trocitos de chocolate.

Echo los ingredientes uno a uno en el bol, para empezar a removerlos con la varilla, al tiempo que alegremente movía sus caderas.

-¡Ah se me olvido que tengo que hacer el chocolate para las galletas!

Con rapidez puso una cacerola al fuego para empezar a hacer el chocolate.

Viendo como este se iba derritiendo, se puso a tararear una alegra cancioncilla mientras removía la cucharilla de madera para que no se pegara.

Terminado de una vez el dulce lo vertió en un tarro para que se enfriara.

No pudo evitar meter el dedo y probarlo. En sus mejillas sin más empezó a notar un agradable cosquilleo.

-¡Que rico me ha salido! esta tan dulce, solo espero que a el también le guste…

Nuevamente siguió con el resto de la receta mientras volvía a tararear y a mover graciosamente las caderas.

Hasta que unos brazos alrededor de su cintura la distrajeron.

-Ya estoy de vuelta Hinata-chan… Una voz monótona e impasible resonó en su oído.

-¡Ga…Gaara-kun! ¿Cómo estas tan temprano en casa?

-Hoy no tenía mucho papeleo que hacer, por eso termine antes.

-Aaah… Se le noto un poco desanimada.

-¿Qué te pasa? ¿Te encuentras mal?

-¡No que va! Es que quería darte una sorpresa cuando llegaras de trabajar… pero ya no puedo…

-Oh… Lo siento. Hinata le sonrío de forma cariñosa mientras le negaba con la cabeza. El la acerco aun más a su pecho, para recostar su barbilla sobre uno de sus hombros y besaba su mejilla. – Pero de todas formas… ¿Qué quieras darme?

-Te estaba preparando galletas con trocitos de chocolate, se lo mucho que te gustan. Ella se sonrojo e inconscientemente chocaba sus dedos índices en un gesto infantil. –Quería cocinarte algo que de te hiciera feliz.

Enrojeció aun mas al notar a Gaara morder ligeramente su cuello.

-No tenías porque, lo que más me gusta eres tú.

Lamió despacio desde su hombro hasta la parte de atrás del lóbulo de su oreja. Hinata no pudo evitar soltar un suave suspiro sintiendo como perdía la fuerza de sus piernas.

Como si la peliazul estuviera echa de plumas, la tomo de la cintura y la sentó sobre la mesa de la cocina. Con el brazo aparto todo a un lado menos el bol con el chocolate.

La tumbo y se recostó sobre ella.

¡¿Gaara-kun qu…que haces?

-Lo que tendría que hacer es arrancarte la ropa que llevas, echarte el chocolate encima y comerte a ti entera.

Sin más le quito el estrecho delantal, soltó el lazo y el pañuelo que sujetaban su cabello, para verlo caer, esparciéndose por la mesa. Metió dos de sus dedos en el chocolate y los paso por sus clavículas hasta llegar a sus labios.

Con su lengua siguió el recorrido que había hecho.

Cuando hubo llegado a sus labios, la beso con urgencia. Hinata no podía ni jadear, el pelirrojo no la dejaba siquiera respirar; mucho menos gemir.

Empezó a acariciarle las piernas, subiendo hasta sus rodillas y seguir hasta sus muslos. Tomo los extremos del final de su camiseta y tiro de ella hacia arriba para quitársela dejándola con una simple de red y su sostén negro.

Volvió a su cuello donde le unto mas chocolate, que fogosamente iba eliminando con húmedas lamidas.

Jamás lo había visto tan ansioso.

-¿Ga…Gaara-kun…? Ahhj…Paso sus manos por sus pechos donde los masajeaba con ardor.

-¿Hmmm? Mascullo enfrascado en saborear su ahora dulce piel.

-Pa…Para, tenemos vi…visita… Susurro entrecortadamente.

-¿Visita? Alzo la cabeza para encontrarse a las amigas de Hinata y a su hermana, que se levantaron de los sillones del salón al escuchar el jaleo que estaban montando en la cocina.

Para quedarse en estado de shock por la impresión al verlos.

-Hola hermanito…. Estaba demás decir que estaba sorprendida.

No todos los días encontraba a su hermano pequeño sobre su cuñada pareciendo un animal en celo.

-Ho…Hola Gaara-san… Sakura e Ino no sabían que decir.

El pelirrojo no dijo absolutamente nada. Le dio el bol con el chocolate a Hinata y acto seguido la tomo al estilo nupcial, pasando ante las demás como si no existieran rumbo al pasillo.

Antes de poner el pie en el primer escalón se volteo a verlas.

-Ya sabéis donde esta la puerta. Tras las escasas, concias y directas palabras, se les perdió de vista al final de las escaleras, donde a doblar la esquina, rápidamente se escucho una puerta cerrarse.

FIN.