DISCLAIMER: Los personajes y el mundo Potter le pertenecen a JK Rowling y a WB TM. Yo no hago dinero al escribir ésta historia ¿OK?

LA ERA OSCURA

CAPÍTULO UNO

"Sobreviviente"

Por: TlalGalaxia

Alenka Sawicki llegó temprano a trabajar ese día, estaba contenta pues todo aquello que podía haber salido mal para que ella llegara tarde, ese día no había sucedido. Primero había logrado tomar al autobús doscientos quince cinco minutos después de las seis de la mañana; esto le había garantizado llegar a tiempo a la estación del metro de Moorgate para tomar la línea roja en dirección a Nothing Hill Gate, donde caminaría por unos escasos cinco minutos antes de llegar a su destino final. De haber sabido Alenka lo que encontraría al llegar, hubiera preferido no ser la primera en abrir la puerta.

De familia emigrante polaca, Alenka se había dedicado a la limpieza doméstica desde que era una adolescente. Su poco dominio del inglés le había impedido conseguir un mejor trabajo, pero con el tiempo había llegado a aceptar que posiblemente eso de las labores domésticas era algo para lo que estaba hecha. Trabajaba para cinco familias diferentes pero ahora le tocaba ayudar a la familia de doctores. De todas las familias a las qu ayudaba a Alenka le parecía que ellos eran los más agradables. Eso sí, estrictos con la limpieza pero Alenka era lo suficientemente hábil como para evitar que se le llame la atención. De hecho, recordaba solo una vez haber sido reprendida y eso había sido una distracción que no había llevado a futuras represarias salvo una promesa a tener más cuidado la siguiente vez. Incluso podía decir que les tenía un poco de cariño, sobre todo luego del nacimiento de su pequeña hija. Es por eso pues que encontrar una escena tan despiadada al abrir la puerta, le rompió el corazón.

Alenka había llamado a la policía apenas había recobrado la cordura. Un par de detectives se presentaron apenas minutos después de haber realizado la llamada y le hicieron muchas preguntas que Alenka apenas pudo responder en parte por el shock de una escena tan sangrienta y por otra parte debido a su poca habilidad con el idioma nativo del país en el que vivía. A los quince minutos después de las ocho, se encontraba de nuevo montada en la línea roja del metro esperando trasbordar en alguna otra estación para llegar a London Bridge.

-Un desastre total,- dijo uno de los detectives en la escena del crimen.

-Parece ser que han perdido el tacto.

El primer hombre miró a su compañero con represalia, evidentemente era superior a él en el cargo o por lo menos tenía más años de experiencia.

-¿Cuándo han tenido tacto antes?

El segundo negó con la cabeza y continuó revisando la escena sin hacer más comentarios.

-Dos mujeres y un hombre,- señaló el superior,- una de ellas tiene alrededor de cincuenta años, la otra, no más de treinta. Posiblemente hija de la primera.

-¿En serio?- replicó el otro que se encontraba observando al hombre en el charco de sangre.

-Mira, el parecido es innegable.

El detective más joven asintió antes de hablar.

-Éste de acá también tiene alrededor de treinta años, según la mucama es el esposo de la mujer joven. Ambos son médicos.

-Dentistas,- aclaró el hombre mayor,- mira eso, Shacklebolt. Esos deben ser sus títulos.

El joven de piel oscura y amplios ojos negros se acercó a la pared de donde colgaban los cuadros que su compañero le había señalado y luego pasó la mirada a la repisa de la chimenea donde vio varias fotografías.

-¿Muggles?

-Eso parece.

-¿Pero por qué atacar Muggles?

-Aun no lo sabemos… ese Snape se ha vuelto cada vez más cobarde y casi no nos pasa información. Desde el asesinato de los Longbottom, el asunto se ha vuelto fuera de control. A veces no sé si Dumbledore es muy idiota o si Snape es buen engaño…

-O tal vez es honesto,- finalizó Shacklebolt.

Su superior no dijo nada más, siempre le molestaba abordar el tema del supuesto doble agente de Dumbledore. Había algo en él y en la manera en que el caso Longbottom se había manejado que nunca le había gustado. Luego de deshacerse de cualquier indicio de magia o de seres sobrenaturales, desocuparon la sala para dar paso a los policías muggles que no tardaban en llegar.

Cuando los policías muggles llegaron a la escena del crimen reportaron homicidio calificado en primer grado. Intentaron encontrar huellas dactilares pero descubrieron asombrados que no había nada con qué trabajar. Luego que los forenses terminaron de recoger las pocas muestras que tenía, se dispusieron a limpiar la escena del crimen. No fue hasta entonces que alguien se percató de que algo extraño sucedía. Inconsciente y dentro de la rejilla de la chimenea estaba el cuerpo de una niña de dos años. Su piel se veía oscura y llena de hollín.

-¿Está muerta?- quiso saber la detective temiendo que el hollín fuera más bien el cuerpo calcinado de la infante.

El otro extrajo la rejilla y sacó el cuerpo del orificio. Buscó su pulso y comprobó aliviado que la niña solo estaba inconsciente pero seguía con vida ¿Cómo había llegado ahí? ¿Acaso se había escondido o la habían escondido antes del ataque?

-Niña lista,- le dijo la detective acariciando su cabeza.

El informe médico señaló que estaba bien y al día siguiente fue puesta en manos de una trabajadora social hasta que se encontrara algún familiar que pudiera acogerla. Para su desgracia, todos los parientes que tenía en la vida habían muerto la noche anterior y el gobierno no tuvo más remedio que colocarla en una casa hogar en espera de una familia adoptiva.

Nunca se enteró Albus Dumbledore que la niña seguía con vida cuando los Aurores llegaron. Simplemente había optado por creer que había sido secuestrada por mortífagos o posiblemente algo peor le había pasado ya que al aparecer su nombre en la lista de gente mágica y siendo hija de muggles, se había convertido en blanco principal de ese tipo de ataques ya que Hermione Granger no había sido la única niña cuya familia había sido asesinada por procrear sangres sucias. Al igual que los suyos, los Clearwater habían muerto meses antes y luego de ellos los Creevey con su pequeño bebé Collin. El mundo mágico se había puesto de cabeza pues todo aquel que tuviera un historial impuro corría peligro y todos actuaron con afán de ponerse a salvo. Nadie podía pararse a pensar si había sobrevivido o no una niña en el hogar Granger. O qué sería de ella ahora que no le quedaba ningún familiar en el mundo.

Hermione Granger se había convertido, en efecto, en la niña que vivió. Pero no había nada heroico en eso. Nadie habría de recordar su nombre o pensar en hazañas al escuchar su nombre. Hermione se había condenado a una vida muggle, lejos de los que eran como ella o de cualquier fuente de cariño al crecer.

Siempre quise escribir una de esas historias de realidad paralela. Así tipo efecto Mariposa donde un pequeño cambio en la historia te trae un universo totalmente alterno. Luego de hablar con una de mis amigas que me sugirió escribir la historia de "Harry Snape" me pareció que era imposible para mi escribir este universo sin Harry Potter, y fue por eso que en lugar de darle el giro "Harry Snape", cambié varias cosas que conforme avanza la historia se darán cuenta cómo es que esto le ha pasado a Hermione. Espero les guste pues llevo semanas trabajando en el borrador de ésta historia. Gracias por leerme =)

TLAL