Ran: ohayoou! a sé que he estado mucho tiempo sin pasarme por fanfiction, pero más vale tarde que nunca noo? he estado -y estoy- muuy ocupada con la facultad así que no he podido actualizar aquí, espero que me perdonéis
bueno pues os traigo el próximo capítulo de you¡re my first love, recordaros que esto es una traducción al español de un fanfic escrito originalmente en inglés
disclaimer: no tengo ganas de hacer disclaimer asi que podeis empezar a leer xDD *que vaga soy*
4. Huyendo:
- Hiroto, dónde estás?! -Ryuuji estaba buscando a Hiroto a lo largo de todo el Sun Garden, pues de repente había huido de él. La última vez pasó lo mismo. Cada vez que le ayuda con Haruya, él huye de él cuando le da las gracias o se le acerca.
- Ahh Hitomiko-nee, viste a Hiroto? -Preguntó el peliverde a la chica, pues ella solía ayudar a todos en el orfanato.
- No está aquí -respondió.
- Ohh … Dónde podrá estar?
- No lo sé.
- Ahh -suspiró desilusionado- Arigatou Hitomiko-nee, continuaré buscándolo -dijo para luego irse y seguir buscando. Cuando la pelinegra vio que ya estaba lejos, volteó para observar una figura familiar que se escondía bajo un árbol.
- Para de esconderte y sal de ahí, ya se fue -dijo mientras que esa persona salía de su escondite y se descubría que era … Hiroto (NA: ok, estaba claro nooo?¬¬ …).
- Hermana, gracias por ayudarme -trató difícilmente de mostrar una sonrisa pero ella se dio cuenta.
- Normalmente se lo habría contado, pero como estabas así, no quise hacerlo -Hiroto permaneció en silencio.
La pelinegra empezaba a preocuparse por él, pues rara vez actuaba de esa forma.
- Es por Ryuuji, verdad? -los ojos del pelirrojo se abrieron sorprendidos, su hermana adivinó completamente lo que estaba pensando- Me di cuenta de que lo estás evitando últimamente. No crees que estará muy preocupado por ti?
- Está bien, onee-san -contestó cabizbajo.
- No, no está bien en absoluto. No resolverás nada si sigues evadiéndole -le regañaba la chica.
- Lo siento, hermana … necesito tiempo para pensar, así que … por favor, no le digas a Mido que me escondo aquí -a continuación, fue hacia el árbol y volvió a ocultarse tras él.
- Hiroto … lo entiendo, pero no sigas ahí mucho más tiempo o harás que Midorikawa esté aún más preocupado -suspiró y se fue dejando al pelirrojo allí.
- Sé que lo que dijo nee-san es cierto … incluso si continúo haciendo esto … nada cambiará, pero … -estaba pensando es estas cosas cuando la cara del chico ojinegro apareció en su mente- si escucho su voz … mi corazón comienza a latir fuertemente … y cuando su rostro se aproxima a mí … está tan lindo que siento ganas de bes- … -el pelicarmesí se interrumpió sorprendido de lo que acababa de pensar, su cara se tornó tan roja como un tomate y su cabeza cayó como agua derritiéndose- OH POR KAMI! HIROTO KIYAMA, QUÉ DEMONIOS ESTÁS PENSANDO? CÓMO PUEDES TENER UN PENSAMIENTO TAN SUCIO? -sintiéndose muy confuso y alterado por esta idea, golpeó su cabeza fuertemente contra el tronco varias veces, aunque se sentía apenado por el pobre árbol, solo esperaba que pudiera sobrevivir al dolor.
Dos minutos después…
Hiroto se encontraba sentado suspirando pesadamente tras descargar todo su estrés sobre el pobre árbol, pero aún se encontraba pésimo. Su frente llena de heridas de los golpes y más que eso, su cabello sucio como la basura de los contenedores. Nadie le vio pues se encontraba solo por esa área, y tampoco deseaba que le encontraran, pero pensó que debía tratar sus heridas lo más pronto posible.
-Supongo que debería ir allí… -susurró.
Mientras tanto, Ryuuji seguía la búsqueda del ojiverde sin resultado. En ese momento, estaba buscando en el almacén, pero era lo mismo.
-Maldita sea, sigo sin poder encontrarlo -se quejaba molesto el peliverde cerrando el puño con enfado- ese bastardo, cuando lo encuentre… definitivamente le cantaré las cuarenta.
-Ryuuji, qué estás haciendo aquí? Escuhó una voz familiar, volteó y descubrió que se trataba de su mejor amigo, Hiromu- pasa algo malo? Por qué estás tan enojado?-preguntó.
-Ah… es solo Hiroto.
-Hiroto?
-Sí, está muy extraño. Me evita, sigue huyendo y escondiéndose en algún lugar. Hoy lo hace incluso aunque intente darle las gracias por salvarme de Haruya la última vez y ahora me cabrea. No piensaas eso, Hiromu…? -el ojinegro parpadeó y se dio cuenta de que el otro solo mantenía su mirada clavada en él- Hiromu?
-Huh… debes tener razón, la forma en la que se está comportando es extraña, cierto? -siseó nervioso lo que hizo sospechar a su amigo- y Ryuuji… no tienes ninguna pista de dónde puede estar?
-No… he buscado en todos lados pero… -calló cuando un pequeño recuerdo le vino a la mente.
"Te ha ocurrido algo, sentado así como una bola?" esas palabras volaban en la mente del de ojos oscuros haciendo que se le ocurriera una idea.
-Sí… ese lugar… aún no he buscado allí -rápidamente corrió fuera de la sala- Hiromu, gracias por tu consejo -volteó para agradecerle y se fue en el momento en que el rostro del otro se enrojecía y mostraba una leve sonrisa.
-Me dijo… "gracias" a mí… Ryuuji…
El peliverde salió fuera y se dirigió a la parte trasera del Sun Garden, buscando con la mirada a Hiroto.
-Este es el único lugar donde no he mirado -murmuró y siguió buscando hasta que oyó un crujido proveniente de un arbusto. Lo miró con atención y sonrió satisfecho como si hubiera hecho una travesura.
-Encontré al ratón -caminó lenta y silenciosamente hacia el arbusto y metió la cabeza a través de este, encontrando al pelirrojo en su interior.
-UAHHHHHH!- sorprendido y shockeado, Hiroto salió rápidamente del arbusto, su cabeza acabando estrellada contra el árbol. Lloriqueó sujetando su cabeza mientras el peliverde repentinamense te presentó ante él ruidosamente.
-HAHAHAHHAHAHA! OH POR KAMI, PARECES TAN IDIOTA. NO ME PUEDO CREER QUE TE ESTÉS COMPORTANDO ASÍ! AHAHAHAHA! -el chico reía tanto que lágrimas empezaron a salir de sus ojos, cayendo rodando al pasto mientras el de cabello carmesí intentaba pararle en vano.
Después de un rato, Ryuuji finalmente volvió a su estado normal aunque su amigo aún parecía molesto, por lo que el ojinegro cambió a mirarle serio.
-Hiroto… qué te pasa? por qué me has estado evitando últimamente?
-Qu… qué estás diciendo Midorikawa? No entiendo en absoluto- con una mano peinó su cabello haciendo como si nada hubiese pasado para luego empezar a caminar en sentido contrario, pero desafortunadamente su mano fue atrapada por el otro.
-Hiroto, no intentes huir y esconderte. Qué te está pasando exactamente? Hay algo que no quieres contar o … tú me odias? -susurró el de ojos azabache mientras lágrimas resbalaban por su rostro. El pelirrojo se dio cuenta de ello y le miró con tristeza.
-No -elevó su mano limpió las lágrimas de sus ojos delicadamente. Ryuuji recordó la primera vez que conoció a Hiroto. Aún podía sentir lo que el chico ojiverde le trasmitió aquella vez… comodidad y …calor.
-Midorikawa… tú no has hecho nada mal -sus ojos se encontraron con los del otro, se miraron entre sí y se dieron cuenta de que se encontraban a escasa distancia.
-Qu-qué me está pasando? No puedo mover mi cuerpo ni aunque quiera -pensó el peliverde nervioso mientras sus mejillas se volvían rosas. Entonces el ojiesmeralda apartó su mano y le sonrió.
-Ves? Luces mejor así. Las lágrimas no te quedan en absoluto.
Ryuuji se mostró más sorprendido ante esto. Se parecía a lo que ocurrió hacía ya 6 años.
-Hi-Hiroto…
-Qué?
-Tu frente está dañada -este tocó su frente, quejándose al contacto, estaba muy mal.
-Ah, no te toques o empeorará -le aconsejó rápidamente Ryuuji.
-Está bien…
-No del todo, sígueme -el chico arrastró a Hiroto consigo de manera que el otro no pudo hacer nada más que seguirle- y… gracias por ayudarme con Haruya a última vez- susurró y escuchó una afirmación por parte del otro. Ahora Ryuuji se sentía feliz, pues pudo al fin hablar con su amigo y agradecerle. Hiroto sentía lo mismo, o le agradaba evitar al ojinegro y el tenerlo a su lado de nuevo le gustaba.
Pero cuando se fueron, lo que ninguno de ellos sabía era que alguien les estaba observando. Sus dientes rechinaron mientras veía con el rostro lleno de envidia las dos figuras que iban juntas y se miraban con diversión.
-Maldito seas, Hiroto. Por qué siempre tienes su atención tú y no yo? Por qué tienes lo que yo no? Tan injusto, es tan injusto pero no puedo dejártelo.
~continuará~
...
Ran: bueno, os gustó?a veces cambio varias cosas o expresiones del relato original para que se adapten mejor al español o tengan mejor sentido, espero quw todo esté claro y no os perdáis en la historia ^^