Disclamer: Getbakers no me pertenece. Yo solo utilizo sus personajes sin ningún fin lucrativo, lo único mío es la trama de lo que leerán aquí.

Advertencias: Errores ortográficos. OCC (Creó, estoy algo oxidada en este fandom)

Personajes: Amano Ginji & Natsumi Mizuki

Drabble: 6/10.

Estación: verano.

Género: Amistad/Romance/ y algo de drama ligero.

Frescor

¿Qué era él para ella?

¿Amigo, confidente, compañero, conocido…?

Los calificativos-que eran pocos pero en su mente parecían no tener fin-enfilaron en su cabeza, como una lista que debía leer dos veces para asegurarse de que no se equivocaba o olvidaba algo, como cuando haces la lista para el supermercado.

Pero no era algo tan sencillo.

—Mamá ojala estuvieses aquí—se lamentó la joven, abrazando la almohada de su cama.

Dispuesta a dejar aquel debate sobre el rol de aquel amable y bondadoso chico de cabellera rubia y ojos marrones, similares a los de un inocente perrito, cerró los ojos.

Pero la escena del beso, así como el roce, el tacto de ambas bocas, el tiempo que pareció haberse congelado y el fantasma del aroma que él emano en aquel instante, golpearon su mente.

Abrió los ojos, y se sonrojo a medidas que hundía su cara en la almohada.

—"Solo fue un beso, solo fue un beso. No es gran cosa. ¡Estaba medio dormido!"—se repitió con vehemencia mientras negaba con la cabeza (y cara) contra el colchón de su cama.

Con una ansiedad creciente en su pecho, Natsumi se encamino al pequeño pero improvisado tocador que tenía enfrente de su lecho. El espejo ovalado y decorado en la parte superior con alguna que otra pegatina animada y algunas fotos le daban la bienvenida a verse reflejada en el cristal.

Sus ojos grises tenían un brillo extraño. Apretó los labios en un intento de verse neutral, más no lo consiguió.

El brillo seguía ahí.

¿Cuántas novelas había leído con los años?, tal vez tres o cuatro, algunas por recomendación de sus amigas, otras con su madre, alguna que otra por placer. Por ello, y porque su memoria era tan buena como la de los elefantes, reconoció el significado de que sus iris brillasen con una luz interna.

Era amor.

Estaba enamorada lo sabía, puede que inclusive siempre lo supiese, pero se negase a admitirlo.

¿Porque? ¿Qué podría ver alguien tan bueno como Ginji en ella?, era una niña que solo sonreía, y lo saludaba, que le daba comida por pena de su situación económica. No era alguien tan cercana. Era consiente sí, de su pasado, pero solo de la superficie, jamás de la profundidad del mismo.

No lo conocía. No sabía quién era realmente Ginji Amano. Había ocasiones en que la tentación parecía ganarle a su cabeza, pero antes de que sus labios soltasen la pregunta, él estaba mirando en dirección a la Fortaleza Ilimitada.

Sus ojos estaban tristes. Parecía distante, inalcanzable.

Era entonces que Ginji no comprendía al joven, que no podía decir que conociese a Ginji Amano.

Podía citar muchas cosas buenas, algunos defectos de él. Pero ninguna de las cosas que expresase en bromas, cuando le servía café, le daba algún emparedado o trozo de pizza; pertenecían al hombre sentado en la barra.

Era un extraño.

—Ginji-san no haría eso si no tuviese un motivo. —

Las palabras de Madoka volvieron a su mente. Era cierto que Ginji no era de los que mintiesen, al menos en estas cosas, después de todo lo conocería poco, pero podía apostar con su vida que él no era la clase de hombre que jugase con las mujeres.

Acaso eso significaría…

Dejó que sus reflexiones se convirtieran en fantasías que le brindaron un calor indescriptible por el cuerpo, causando que su corazón imitara a un tambor. Una sonrisa radiante se presento en sus labios.

Había una oportunidad, tal vez.

Y era ese único pensamiento el que le permitió dormir, decidida a salir adelante. No se escondería, no señor, se enfrentaría a la realidad fuese cual fuese.

Fue así que el frescor de la noche le acaricio las mejillas sonrosadas por la alegría de sus nuevos descubrimientos.

N/A: No se si cometí OOC, pero bueno, he de admitir que este no me salió muy bueno que digamos. Además continúo con mis estudios. Por ello disculpen mi retraso.

Se aproxima el final queridos lectores, pero no crean que no habrá drama, la tensión del par solo fue una entrada al verdadero dramón-que es ligero, pero ¡demonios!, deberé hacer que encaje en tres drabbles.