El Punto de vista de un panadero: Los Juegos del Hambre
Los Juegos del Hambre desde el punto de vista de Peeta— Ninguno de los personajes o acontecimientos me pertenecen, son de Suzanne Collins, la interpretación de la acciones y pensamientos de Peeta son propiedad de BRIGHTSIDEash. Solo me adjudico la traducción ;)
Siento la demora, no hay peros que valgan ni excusas baratas, simplemente lo siento :(
Este capítulo está dedicado a Zaira :) Una gran amiga que siempre me ayuda mucho y es casi es una hermana virtual
Capítulo 5
Una capa de fuego. Ese es el plan maestro de Cinna y Portia. Quieren matarnos a Katniss y a mí incluso antes de que empecemos el entrenamiento. Portia me viste con una malla negra de cuerpo entero y unas botas muy glamurosas, pero nada para nada prácticas, aunque caminar con ellas no es tan difícil como había imaginado. Ella saca algo de un jarrón y lo pone en mi cabello, se siente como gloop, pero lo usa para alisar mi cabello y darle forma según cómo a ella le parezca más conveniente. Para finalizar, pone un tocado para asentar mi cabello. Aparentemente, ella y Cinna, estaban planeando encender el fuego artificial cuando estemos en las carrozas.
Portia y el equipo conversan emocionados mientras vamos a reunirnos con Katniss y Cinna. La vestimenta de Katniss es igual a la mía, solo que tiene un toque femenino. Sus ojos me recorren brevemente— o quizás solo a mi atuendo, no estoy seguro. Cinna, el estilista de piel morena, es mucho más calmado que el resto de la gente del Capitolio que nos rodea, ojalá me hubiese tocado tratar con él en vez de la conversadora mujer que está a mi lado. Portia me guía hacia nuestra carroza y Cinna hace que Katniss avance, así que estamos uno al lado del otro en el vehículo, pero los estilistas aún revolotean alrededor nuestro viendo nuestra postura y la posición de las capas alrededor y detrás de nuestros cuerpos.
Las capas están demasiado cerca como para estar cómodos, no importa lo mucho que Portia haya tratado de asegurarme que el fuego no nos hará daño y que probablemente ni lo sintamos. Su voz aguda y extraña no me consuela mucho y me pregunto cuál será la mejor manera de quitarme la capa rápidamente.
— ¿Qué piensas? De fuego, quiero decir— Katniss susurra, mis ojos se dirigen hacia donde está ella. No la han cargado de maquillaje y me encuentro agradecido por eso porque aún luce como Katniss… hermosa.
—Te arrancaré la capa si tú me arrancas la mía— le respondo, entre dientes, para que los estilistas no nos escuchen.
—Trato hecho— responde, lo que hace que una sonrisa aparezca en mis labios brevemente—. Sé que le prometimos a Haymitch que haría todo los que nos dijeran, pero creo que no tuvo en cuenta este detalle.
— Por cierto, ¿dónde está?—pregunto al percatarme de su ausencia—. ¿No se supone que tiene que protegernos de este tipo de cosas?
—Con todo ese alcohol adentro, no creo que sea buena idea tenerlo cerca cuando ardamos— dice ella y su comentario es tan gracioso, tan fuera de lugar tomando en cuenta nuestra situación, que no puedo evitar reírme. Y Katniss está riendo conmigo, y a pesar de que nuestra risa esté teñida con los nervios, el momento es tan agradable que decido guardarlo en mi memoria. Especialmente la cara que Katniss pone cuando ríe, la sonrisa en sus labios que ilumina su rostro en una manera favorecedora.
El pequeño momento de felicidad es interrumpido por la música de apertura, a todo volumen para que pueda ser oída por todo el Capitolio y sea imposible no escucharla. Solo tenemos que soportar veinte minutos en los ojos del Capitolio antes de ser confinados en el Centro de Entrenamiento, pero tenemos que impresionar a las personas en esos veinte minutos. Este quizá sea la mayor oportunidad para impresionar a las personas ricas de la ciudad, quienes nos podrían patrocinar en la arena.
Apenas me percato de los otros tributos, pero hay gran cantidad de aplausos y gritos de la multitud, especialmente para el primer distrito, quienes sin duda brillan en todo tipo de joyas. Poco después Cinna da un paso hacia nosotros y me percato de que el distrito 11 acaba de salir, todo mi cuerpo se tensa mientras veo la antorcha de reojo. Él está encendiendo nuestras capas.
Katniss deja escapar un pequeño jadeo y yo estoy preparado para arrancar la capa de la espalda de Katniss. Sin embargo, no hay un calor abrasador, mis brazos no se están quemando y mi cabello no está chamuscado; solo hay un pequeño cosquilleo.
Cinna suspira de alivio y sonríe para sí mismo.
—Funciona— dice con gusto.
No estoy seguro acerca de cómo me siento por el hecho de que haya dudado de esto. Coloca una mano bajo la barbilla de Katniss y hace que levante un poco la cara, no puedo evitar que una chispa de celos me recorra el cuerpo.
—Recuerda, la cabeza alta. Sonríe. ¡Te van a adorar!
Creo que la última parte es más para Katniss que para ambos y me doy cuenta de lo amargo que sueno en mi cabeza. ¿Qué rayos me pasa?
Cinna salta del carro, pero voltea antes de irse, gritando algo hacia nosotros por debajo de la música, haciendo gestos con las manos. ¿Qué quiere decir? Entonces me doy cuenta de que está apuntando a nuestras manos, pero ¿quiere decir lo que creo? Luego Katniss me mira, sus ojos se detienen en mi cara un instante más de lo habitual. Es ese momento cuando miro a ella, las llamas falsas iluminando su cara y haciéndola más hermosa de lo que nunca ha estado antes. Katniss, la chica en llamas.
—Creo que ha dicho que nos cojamos de la mano— yo le digo, aunque no estoy totalmente seguro de que es lo que quiere, pero es sin duda lo que quiero así que tomo su mano con la mía y los dos estamos mirando a Cinna. Él asiente con la cabeza, entusiasmado, y pone un pulgar hacia arriba. Luego avanzamos al centro de la ciudad.
La gente se alarmó al principio, hasta que se dan cuenta de que el fuego es una parte de nuestro show , y luego enloquecen, repitiendo nuestro Distrito y de repente estoy muy al tanto de todos los ojos fijos en el carro del Distrito 12. El agarre Katniss en mi mano se aprieta un poco, pero no me importa, porque me siento como que podría empezar a aplastar la mano con el fin de sostenerme. Hay pantallas de televisión por todos lados así que puedo ver cómo estamos a los ojos de todos los del Capitolio. Las llamas iluminan nuestros rostros de una manera casi tenebrosa y es como si hubiera un rastro de fuego detrás de nosotros. Tengo que admitir que nos vemos atractivos, más atractivos de lo que cualquiera de nosotros alguna vez ha estado. Sin embargo, todavía nos vemos un poco como nosotros. No puedo quitar mis ojos de Katniss en las pantallas.
Me doy cuenta de que tengo una cara seria y me obligo a poner mi más deslumbrante sonrisa, Katniss hace lo mismo. Elevamos nuestras cabezas y sonreímos a la multitud, saludando en todas direcciones, y parece que nos quieren. Es realmente abrumador, todas las sonrisas y aplausos, nos colman de flores de colores y me doy cuenta de que no están gritando nuestro Distrito, si no nuestros nombres. Es estimulante y no puedo evitar que una sonrisa forzada se convierta en una verdadera sonrisa, saludando con entusiasmo con la mano libre mientras me aferro a Katniss con la otra.
Cuando estamos en el Círculo de la ciudad me doy cuenta de Katniss baja su mirada y siento su mano soltando la mía, lo que me asusta un poco, su mano parece ser lo único que me mantiene conectado a tierra.
—No, no me sueltes—le digo, volviendo la mirada en sus ojos grises—.Por favor, puede que me caiga de esta cosa.
—Está bien—ella está de acuerdo, para mi alivio.
Los carros están llegando a su parada en el círculo y la música se está acabando, el presidente Snow nos da la bienvenida tradicional de los Juegos del Hambre - que no dura mucho tiempo y el carro está en movimiento otra vez.
Estamos por fin en el Centro de Formación, pero no hay mucho tiempo para relajarse ya que los equipos de preparación vienen instantánea hacia nosotros.
Si todo sale de acuerdo a la previsto, el jueves hay cap.
-Sammy