No es alguien malo, solo es estúpido…

Le daban ganas de … de algo estúpido sin duda. Como era posible, era inadmisible, era, era … si tan solo pudiera volver el tiempo atrás. Regresar al día donde todo cambio.

(Día, fecha y lugar que todos conocemos):

En ese momento estaba molesto, odiaba ser "demasiado" joven para que las mujeres de Japón lo eligieran como el hombre que deseaban abrasar. Y lo de menos era que el idiota de Tsuruga Ren se llevara el primer puesto, si no los otros cinco idiotas a los que tenía que alcanzar antes de siquiera competir por el primer puesto. Una cosa es quedar en segundo o mínimo tercero, y otra muy diferente y frustrantes es ser el séptimo lugar. ¡SÉPTIMO!, un golpe muy fuerte a su orgullo.

Le había dado vueltas al asunto mucho tiempo su meta de ser famoso, tenia demasiados obstáculos. Y si bien Tsuruga Ren nada tenía que ver con él, el actor era considerado el Sex-simbol del momento y eso le obligaba a luchar en su contra. Se había resignado apenas, pero al escuchar el estúpido mensaje de Kyoko: "Incluso aunque otras chicas no lo entiendan, yo lo se…" solo lo llevo a un sentimiento de impotencia mayor.

Su amiga de la infancia quería animarlo, era obvio; pero de nada servían ahora sus palabras, lo que necesitaba eran más fanáticas gritando su nombre, no ser el numero uno de la boba de Kyoko, es más no ser el numero uno de su mejor amiga ¿supone alguna diferencia?, claro que no, por eso el mensaje le pareció tan ridículo. O tal vez no, la verdad solo quería quejarse de su mejor amiga, y Shoko le siguió el juego.

¿Dejar a Kyoko?, claro que podía dejar a la tonta de Kyoko Mogami atrás, bueno en realidad no puede hacer algo tan desabrigado. Pero no podía decir la verdad frente a otros, tenía una imagen de tipo cool que proteger. Ademas Kyoko ayudaba a esa imagen mucho, ella es una estúpida que trabajaba día y noche solo por hacerle feliz; alguien tan tonta, poco atractiva y aburrida que había preferido escapar de casa y traérsela como su sirvienta antes que tener una vida tediosa en casa de sus padres; donde seguramente al final terminara por casarse con ella. O al menos así pinto las cosas para todos los que sabían que vivía con una chica. Por que desde hace muchos meses ya no necesitaba que Kyoko siguiera trabajando como una esclava para mantenerlos a ambos, pero no la ha detenido, ya que así se mantenía entretenida. El sabe muy bien que su mejor amiga jamás se quedaba quieta, en algún momento se daría cuenta que estaba desperdiciando su vida a su lado.

¿Pedirle que regresara a casa?, era una opción, se negaría al principio pero podía convencerla con volver a la escuela y ser una profesionista. Ya estaba maquinado la manera de decírselo, mientras coqueteaba a Shoko, cuando todo se fue al traste; lo admitía era un idiota. Aun así tenía que seguir con sus actitud de chico importante, no podía dejar que todo se cayera solo porque a la niña le dio por ir a escuchar: "No llores es molesto" -por favor no me metas en estos problemas- era lo que intentaba decir, ya se sentía suficientemente mal como para verla llorar. Pero algo raro sucedió, Kyoko hecha una furia arremetió contra él y todo termino abruptamente: se la llevaron como una friki loca.

Después de esa noche, no la vio durante meses, tampoco se atrevió a volver al apartamento por puro y estúpido orgullo. Y aun si estaba preocupado que de hiciera alguna idiotez, no la busco. Solo "siguió" con su vida, viviendo en un nuevo lugar, componiendo nuevas canciones, coqueteando y dejándose alabar por otras tontas. Pero existían días donde creía que Kyoko estaba detrás de él observándolo, o que era una fanática en la calle, o una persona del Staff de algún programa, -simple paranoia- se dijo a si mismo, habría de estar en algún lugar sola, odiándolo y llorando, pero eso ya no era su problema.

Hasta que tiempo después volvió a atormentarlo. Al principio lo sospecho sin fundamentos, ya que con su abrupto cambio de estilo no la reconoció. Pero si había algo o alguien que lo entendía bien era a esa chica. Desenmascaró su juego y logro burlase de ella un poco. Pero, sin preverlo, al ver su impecable semblante de Ángel de repente sintió escalofríos; no podía dejar de observarla incrédulo: Esa joven tan encantadora, quien lo miraba con tanto odio, no debería ser Kyoko. Es decir ... sí, Kyoko siempre fue bonita, pero mas en el sentido tierno; como una "mascota", nunca un refinado ángel bajado del cielo para cegarlo. Pero lo peor fue grabando la escena donde ella se desmorono en llanto; en menos de un segundo congelo su razón, haciéndole sentir un misero gusano.

Desde entonces habían tenido encuentros mas bajos, que altos. Primero le abofeteo debido a que le había cantado algunas verdades en su cara, luego mientras se hundía gracias al estúpido de la banda de perros, ella le reprendió y lo levanto del hoyo; claro a cambio la tuvo que defender del estúpido de Reno; por que si él sabe bien una cosa sobre Kyoko, es que tiene cero experiencia en como lidiar con los hombres.

De que otra forma el maldito de Tsuruga Ren literalmente lleva su mano hasta sostener su cintura, dejando muy claro que pretende a Kyoko más que como una protegida. Y ella no retira la maldita mano lejos , pero tampoco se da por enterada de lo que el tipo pretende. Un completo fastidio, que a dado paso a un sin fin de tergiversaciones entre Kyoko y él, con Tsuruga-teme y Reno-inu de por medio; sobre todo en San Valentine.

Pero nada, absolutamente nada, ni siquiera cuando se imaginaba a esos dos como una melosa pareja de recién casados comiendo bento, es comparable con lo que le provocaban las imágenes frente a sus ojos.

-he estado luchando para que Sho no se enterara- dijo la mánager.

-lo siento, pero lógico que se iba a enterar ... fue la comidilla durante días- intento menguar la directora.

Las imágenes eran de entrevista por la fiesta del final de Dark Moon. Al principio se pregunto si era mentira, si era una clase de sueño. Por que ese elegante vertido azul y extensiones de cabello que le llegaban a la cintura, le daban a su ex-mejor amiga una apariencia que la hacían ver mas mayor de lo que era… bueno, no es su intención decirlo en el mal sentido; si no que parecía más madura y más seductora de lo que se llego a ver como Mio, o en el propio vídeo promocional. Y en un instante estaba tan molesto que ni siquiera termino de ver el video.

-Me las pagaras Kyoko Mogami, por que no pudiste simplemente bastarte con el estúpido mensaje; en lugar de perseguirme hasta la estación ese día.-