Hola Feliz navidad primeramente, debo decir que esta es mi primera historia de Haruka y Michiru, espero sea de su un (AU) universo alterno.

Acoto que todos los derechos son de la increíble mente de Naoko Takeuchi, solo me baso en sus personajes para escribir. Sin más que añadir, aquí les dejo el primer capitulo y de ante mano gracias por leer.

Capitulo 1: Prologo

Existen secretos tan grandes que queman paulatinamente tu pecho al tratar de ocultarlos, son como el fuego ardiente dispuestos a acabar con todo lo que te rodea, y lo peor es que nadie esta excepto de ello, pues todos en esta vida tenemos secretos…

_Alguien se esta volviendo poeta_ añadió rápidamente un chico pelinegro al notar una enmarañada cabellera rubia moverse entre las sabanas blancas.

_Nuestra niña esta creciendo Darien_ respondió el chico rubio de hermosos ojos que caminaba por toda la habitación al tiempo que trataba de organizar un poco el lugar.

Abrió los ojos lentamente, con pesadez, la luz del sol se reflejaba en las cortinas y la habitación parecía ser mucho mas iluminada, se fregó los ojos un par de veces tratando de despertarse verdaderamente y un grito se escapo de su boca al escuchar a su amigo leer en voz alta sus anécdotas mas profundas escritas como toda chica en un diario.

_¡pero que demo...!

_Hey que vocabulario es ese para una señorita tan guapa_ le regaño Andrew coquetamente guiñándole un ojo. Buenos días preciosa, vístete el día esta hermoso, y tu desayuno esta listo.

_¿Me pueden explicar que hacen aquí?_ pregunto la chica exasperada saliendo de su cama rápidamente para despojar su diario de las perversas manos de su amigo pelinegro.

_Vivimos en el edificio_ le recordó Andrew con una sonrisa divertida.

_Ya lo sé genio, me refiero a mi habitación, mi departamento.

_Ah… ¿tu padre no te dijo?_ rió nuevamente con esa risita pegajosa que solo él tenia_ Ruka somos tus nuevos tutores.

_Estas de broma, imposible… ¿ustedes dos? ¿mis tutores?_ pregunto alarmada.

_Si, tu padre considera que dos personas tan agradables y calificadas como nosotros seremos el ejemplo a seguir perfecto para una chica tan problemática como tú_ respondió Darien seriamente.

_¿Calificadas?_ la rubia estallo en carcajadas sonoras. Si son los chicos más egocéntricos, fiesteros y mujeriegos que conozco.

_Oye… te falto súper guapos_ añadió Andrew fingiendo enojo.

_La verdad es Haruka, que tu padre esta preocupado después de todo lo que ocurrió el año pasado y no es para menos_ apoyo una de sus manos en el hombro de la rubia_ puede que seamos un poco divertidos noche a noche, pero recuerda que Drew y yo tenemos los mejores promedios de la universidad, y no habrá dos personas que te cuiden y te protejan mas que nosotros_ termino de decir Darien.

_¿a si que serán mis nuevos niñeros? ¡fabuloso! bufo por lo bajo la rubia.

_Haruka, solo nos aseguraremos que estés bien y que no te metas en problemas, a menos que sea con nosotros dos_ intervino Drew al ver la negativa de la rubia, quien no se mostraba nada contenta al saber que sus dos mejores amigos serian sus tutores.

_Tendrás un nuevo año para enmendar todo, para disfrutar con nuevas personas. ¿Qué acaso no te alegra?

_Si, Darien no sabes cuanto _dijo con una mueca de fastidio dibujada en su rostro. Ansió pasar un año entero en un colegio para niñitos ricos y mimados_ ¡que felicidad! ¡ que suertuda soy! Agrego con sarcasmo. Me deleita saber que dejaré las pistas, que no podré correr para hacer amiguitos nuevos.

_No digas eso, si quieres podrás tener una vida nueva. ¿Qué tal si este año eres una chica guapísima en busca de su príncipe azul?

_Claro, y echar por tierra toda la mentira de Haruka Tenoh el gran piloto joven, el conquistador. Ahórrate ese tipo de ideas Andrew.

_Sabes que vístete, se hace tarde_ le pidió amablemente Darien. Ya veremos como seguimos manteniendo esa mentira otro año más.

Como una niña malcriada termino de salir a regañadientes de la cama, se ducho y se coloco su pantalón a cuadros.

Tomo un poco de venda y lo utilizo para cubrir sus pechos como era costumbre desde hace algunos años atrás, al terminar se coloco la camisa blanca y una corbata a juego de cuadros parte del uniforme así como también un bléiser vinotinto.

_¿Seguirás haciendo eso por toda tu vida? ¿vendándote?

_Ella río, acaso no querías tener un hijo. ¡felicitaciones! Lo has ganado.

_Hay otras maneras de competir, otros deportes, Haruka.

_Nadie me tomará en serio, ningún hombre competiría conmigo sabiendo que soy mujer_ su enojo se hizo presente en su rostro, estaba dolida, ni siquiera aquel hombre entendía lo mucho que deseaba ser piloto. Así que si, señor Tenoh, seguiré haciendo lo posible por ser un chico si con eso puedo correr_ respondió azotando la puerta y saliendo de la habitación.

Suspiro y volvió a la realidad, de vez en cuando esos recuerdos invadían su mente y su corazón comenzaba a palpitar a un ritmo lento, tristeza se decía a si misma al tratar de identificar lo que sentía.

Se observo al espejo, lucia fantástica. La mentira continuaba, seguía siendo el guapo joven del automovilismo, el piloto por el cual todas suspiraban, la envidia de otros pilotos, y en el fondo la hermosa chica aturdida por todo.

Salió del departamento junto a sus dos amigos, ambos le sonrieron en señal de apoyo, y ella solo asintió dando a entender que estaba bien. Subió al auto sin decir una palabra, su mente estaba en otro sitio, en otro momento.

_El primer día es el más importante recuérdalo.

_Lo haré_ dijo ella.

_Prométeme que te portarás bien, y que tendrás muchos amigos y amigas.

_Esta bien_ aseguro la rubia con una sonrisa tomando su mano.

_Haruka…

_¿si?

_No me olvides, por favor_ pidió.

_Nunca, ni en mil años.

_¿En serio?

_Eres la chica de mi vida, te amo_ se acercó y tomo sus manos entre las suyas, tú y yo tenemos un vínculo que nadie podrá romper jamás.

_Lo sé, solo quería estar segura_ sonrió.

El viento seguía ondeando sobre su cabello, el trayecto se hacia corto, el camino estaba llegando a su fin y ella se acercaba a su destino.

_Ya déjalo Haruka, no puedes estar enojada por siempre.

_Por favor di algo para que Andrew este tranquilo, o no me dejará en paz en todo el día_ pidió Darien con cara de puchero.

_Estamos bien, entiendo que me quieran ayudar.

_Bien, mucho mejor guapa_ recuerda que si te aburres o algún idiota te molesta en clase, no dudes en llamar, correré al rescate y lo matare a golpes. O te animaré un rato_ coqueteo el rubio.

_Drew…le llamo el pelinegro.

_Si, ya lo sé. Es broma Ruka. Solo tengo una demanda antes que entres al colegio.

_Tu dirás…

_Nada de conquistar chicas feas, ah_ estaré pendiente de eso. Ella rió, como es que ese par podía ser tan divertido y tierno a la vez. Sinceramente los quería bastante, eran sus amigos, su familia, sus hermanos.

_Hasta luego par de feos_ se despidió bajando del auto.

_No mates a nadie.

_Consigue muchos números de chicas hermosas, para que salgamos este fin.

_Lo haré.

Colegio Infinito leyó en el letrero que se situaba en la entrada, siguió las indicaciones de una profesora que hablaba a mas no poder al darle la Bienvenida, parecía poseída por una de esas fanáticas locas, ya que le preguntaba cosas de su vida personal, hasta si tenia novia. Otra mujer que me ama, ¡ que bien! Por lo menos si me meto en problemas, ella me ayudará pensó la rubia y asintió a todo lo que aquella mujer de cabellos castaños le decía.

Las primeras clases fueron algo aburridas, llena de incomodas miradas por parte de los chicos, y risas coquetas de chicas que la miraban con amor. Ya se había corrido el rumor de que el popular chico era el nuevo estudiante del colegio, por lo que los chismes de pasillo no paraban.

Camino un largo rato durante el receso, no sin antes disfrutar de una rica merienda preparada por sus nuevos tutores, suspiro al darse cuenta de su nueva vida en ese inmenso colegio.

Llego al área de las piscinas, cuando aquella imagen se poso en su mirada, su corazón latió fuertemente sin saber por que, y siguió inmutada vislumbrado a la chica que nadaba aferrándose al agua con movimientos sincronizados, hermosa se dijo a si misma.

_¿Disfrutas del espectáculo?_ pregunto saliendo poco a poco del agua, a una lentitud que Haruka creyó desesperante, la imagen de la chica de cabellos aguamarina deleitaba sus ojos, era hermosa, toda una sirena si quería citar a algún bello ángel mitológico, sus curvas, sus piernas, su rostro todo era absolutamente perfecto.

Y ella lo sabía, Michiru Kaio sabía el sentimiento de deseo que provocaba en todos los chicos de la escuela, bastaba con sonreír para tenerlos a sus pies implorando por una oportunidad, por una mísera palabra suya y eso era algo deprimente a su parecer.

_La verdad es que sí_ respondió con confianza sin dejar de observarla fijamente. Rápidamente tomo una de las toallas blancas que se encontraban a su lado para envolver a la chica en ella. Ella sonrío agradecida y se alejo un poco del chico, esta vez sería su oportunidad de apreciarlo por completo. Se trataba de un rubio alto, delgado con facciones finas y ojos verdes penetrantes. Su corazón dio un brinco al constatar que aún la devoraba con la mirada.

_No es para menos, todo chico que estudia aquí muere por mí. No creía que fueras la excepción Haruka Tenoh.

_No sabia que tenia admiradoras tan guapas_ comento pícaramente mientras llevaba sus manos a su cabello rubio y lo despeinaba un poco, gesto que solía derretir a cualquiera más no a ella, quien parecía inmutable a su actitud de coqueteo.

_No te confundas_ sonrío la chica_ no soy una de tus seguidoras, solo estoy al tanto de que eres nuevo en el colegio gracias a los rumores.

_Rompes mi corazón_ dijo haciendo una mueca con sus manos. Pero eso puede cambiar, solo basta con que salgas conmigo para que te des cuenta que querrías seguirme el resto de tu vida_ susurro a su oído con su voz aterciopelada.

_Por supuesto_ acoto riendo_ estoy cayendo bajo el embrujo de tus palabras Tenoh. Tal vez cuando dejes de ser un tonto, podamos salir, pero esta claro que aún no maduras.

_Eres ruda. ¿todo un reto?_ la miro_ así me encantas_ sonrió coquetamente. En tus manos estoy seguro que maduraría bastante rápido_ le guiño un ojo pícaramente.

_Ni siquiera sabes mi nombre atontado_ le espeto riendo.

_Pero esta claro que mis palabras te han caído en gracia, así que mis técnicas han funcionado_ agrego con una mueca de satisfacción en su rostro.

_Quisieras tú_ sonrió con arrogancia dándose la vuelta para caminar hacia los vestidores.

_Espera_ la tomo de la muñeca_ de verdad me gustaría llegar a conocerte_ la miraba profundamente tanto que sintió como su cuerpo se quemaba cuando los ojos verdes del chico se posaron en ella_ Para que me recuerdes y pienses en mí_ termino de decir al mover una de sus manos y sacar una rosa roja.

_Es preciosa. Gracias.

No tanto como tu pensó Haruka pero se inmuto a decir algo, el aroma de la chica penetraba en su piel, jazmín, ese olor a flores le transmitía mucha seguridad.

_De nada sirena, para que estés consiente de que no soy solo apuesto y perfecto, también soy mágico. Ella rió.

_¿Me dirás tu nombre?_ pregunto. Aún sostenía la muñeca de la chica, y una especie de calor recorría su cuerpo una y otra vez.

_Se llama déjala en paz y márchate o te golpearé_ espeto una voz ruda a sus espaldas.

No tuvo más remedio que voltearse para encontrarse con el chico pelinegro de aspecto tosco quien lo miraba lleno de odio.

_Se que eres nuevo niñito rubio, pero aquí las reglas las pongo yo. Y ella es intocable, así que olvídala y lárgate, antes que tu rostro de niño rico quedé arruinado_ amenazó el pelinegro.

_No tengo por que hacerte caso, si ella no se queja de mi presencia. No vendrá un bruto como tú a decirme que me aleje de ella.

_Cuidado con tus palabras_ le advirtió_ no querrás que sean las últimas.

_A mi no me amenaces_ le espeto rudamente el rubio_ no sabes con quien te estas metiendo.

_Vaya, vaya, ¡que tenemos aquí! ¿Un valiente o un tonto?.

_Solo alguien que no se deja pisotear por tipos como tú_ respondió enojado.

_Ya basta_ la voz de la chica de cabellos agua marina resonó en el ambiente_ Haruka por favor vete_ le pidió_ nadie quiere problemas el primer día de clases.

_Bien, solo por que me lo pides tú Sirena.

Camino sin dejar de mirar la escena que se presentaba a sus espaldas, cuando fue interceptado por varios chicos.

_Hola_ saludo amablemente un chico pelinegro de contextura menudo y bastante alto. Mi nombre es Seiya. Las personas famosas deben estar juntos ¿no crees?

_Si eso quieres creer, créelo_ agrego en un tono arisco, aun seguía molesto por el incidente anterior.

_Mala idea, fijarte en la novia del jefe, a menos que quieras que te muelan a golpes_ añadió un chico igual de alto de blancos cabellos.

_Él es Yaten, y yo soy Taiki_ se presento un chico de cabellos marrones que aparecía de la nada.

_Somos los Three Lights…

_Estoy impresionado, quieren un aplauso o un grito de euforia.

_Solo queremos ser tus amigos, no te enfades rubio_ comento sinceramente Taiki.

_Bien.

_Chico de pocas palabras, ah, y eso que todas las revistas dicen que eres un fantástico conversador.

_Lo siento, ese tipo me ha sacado de mis casillas es todo_ se disculpo el rubio. Por cierto mi nombre es

_Haruka Tenoh_ dijeron los tres chicos al unisonido. Eres lo suficientemente famoso para que todos aquí hablen de ti, me sorprende que las chicas no se tiren sobre ti.

_Espero que eso siga así, digamos que quiero pasar desapercibido por un tiempo.

_Te entendemos, tranquilo socio, te ayudaremos a ser común y corriente aquí_ sonrió el pelinegro amablemente.

_Gracias, en serio.

_No las des aún, no sin antes tener claro que esa chica significa peligro, problemas y corazones rotos_ le espeto Yaten con dureza.

_Nunca me ha gustado que me digan lo que debo hacer.

_No lo hacemos, es solo un pequeño consejo Tenoh, nadie sale con ella sin desear estar muerto al final del día.

_Ya veremos si al final del día ese es mi deseo_ sonrió el rubio. No había nada que considerara imposible y menos si se trataba de una chica guapa.

_Ya vamos a clases Tenoh.

Tomando como referencia la majestuosa obra de Homero, La Ilíada, les pregunto a ustedes jóvenes vale la pena luchar por una mujer, reconociendo que ella fue la causante de tal desgracia, la guerra de Troya, pregunto la joven profesora a sus estudiantes.

El silencio reinaba en la clase de historia, hasta que la puerta se abrió dando paso a cuatro caballeros cuya respiración cesaba producto del cansancio al correr evitando el llegar tarde. Cosa que no habían logrado.

_¿y bien cual es su nueva excusa señores?

_Lo lamento ha sido culpa mía profesora, me he perdido y amablemente los chicos me han ayudado a llegar a clases, no volverá a suceder_ sonrió coquetamente el rubio.

_Esta todo bien, por favor tomen asiento. A cualquiera puede sucederle en su primer día.

_Gracias, y me tomo la molestia de interrumpirla para responder su pregunta, lucharía hasta que mi corazón dejará de latir por una mujer si es tan hermosa como usted, sin importarme que ocasionara guerra alguna.

_Que amable señor Tenoh, por favor siéntese junto a la señorita Kaio_ señalo la profesora Mónica con una sonrisa.

_Kaio, saludo el rubio guiñándole un ojo.

_¿Seduces a todas o solo a profesoras y a mí?

_No te enojes preciosa, necesitaba zafar de problemas, tu misma dijiste que no quería problemas un día como hoy, y tienes razón.

_No sé como haces para que todas babeen por ti, incluida la profesora Mónica que es una docente completamente responsable y sensata.

_Fácil, el encanto Tenoh, respondió él, ella evito rodar los ojos, pero lo que no pudo evitar fue sonreír.

_¿Pondrás atención a la clase?, pregunto por lo bajo.

_¿Que te parece si te observo a ti?, y tu miras lo que quieres.

_Eres un atontado.

_Y tu una chica muy guapa_ susurro a su odio.

_¿dejaras de molestarme?

_Por supuesto, si sales conmigo.

_No lo creo_ respondió ella.

_Entonces acostúmbrate, a verme cerca de ti_ agrego él con una sonrisa traviesa.

45 minutos exactos, observando sus hermosos ojos azules, detallando sus delgadas líneas faciales, y la caída de su cabello sutilmente sobre sus hombros en perfecta armonía con el viento suave que se colaba en el aula de clases.

Vaya que esa chica la había impresionado y eso no sucedía nunca.

_Te regalare una foto para que dejes de mirarme así.

_¿no te gusta?

_No, es incómodo_ aclaro ella. Gracias a Dios, la hora de la clase termino y tendré el placer de ya no verte más por el resto del día de hoy.

_Lo dudo, sé que estarás ansiosa por ver este hermoso rostro, tranquila sirena_ estaré en tus sueños.

_Querrás decir en mis pesadillas, y no te engañes Tenoh, tú y yo no es algo que vaya a funcionar.

_Lo que digas sirena, nos vemos.

Vio como se perdía a través de la multitud de estudiantes, una sonrisa se poso en sus labios, Adiós Tenoh, se despidió.

Y son esos secretos por lo que luchamos, morimos o vivimos…

Verifico el reloj, la hora era la justa, sentía su cuerpo pesado, y esa sensación de angustia se apoderaba de su pecho. Abrió la puerta, la habitación era tal cual era como la recordaba, rosa tapizada con corazones de colores. El mismo hospital, la misma habitación y la misma persona acostada en aquella cama que parecía ser inmensa para alguien tan pequeño.

Se acerco a la cama, se sentó en la orilla de esta y sonrió al notar la mirada fija de la pequeña sobre ella. Una mascarilla se posaba sobre su rostro permitiendo que pudiera respirar mejor.

_Has venido, Haruka_ dijo emocionada, las lagrimas se escapan de sus ojitos claros.

_Te dije que no te olvidaría. Eres la chica de mi vida.

_Gracias_ sonrió_ Eres la mejor hermana del mundo. ¿Qué tal tu primer día de clases?

_Genial, soy amiga de los Three Lights ¿Qué te parece?

_Increíble, son muy guapos, tienes que pedirle sus autógrafos.

_No, tu misma lo harás cuando mejores. Por que estoy segura que falta poco para ello. La niña sonrió.

_Ahora en que quede la última vez… pensó… ah si_ vamos recuéstate Hotaru… hace mucho tiempo en un reino lejano….

Continuará…

Si te tomas el tiempo de leer, por favor tomate el tiempo de comentar.

Espero hayan disfrutado al leer este capitulo, me gusto mucho a la hora de escribir.

Besitos y abrazos. Acepto opiniones, sugerencias, críticas, todo es válido… Comenten ayúdenme a mejorar. Saludos y besos. Por fa díganme si les gusto o no. Actualizo según comentarios.