Declaimer: Los personajes aquí mencionados son parte del anime Hetalia el cual es propiedad de Hidekaz Himaruya.

POV de Alfred

~.~

I lose my sanity when I feel you near me;
your mouth causes disasters in me with every word.
The truth is that for you feel a thousand things I can't say…
You are to me!

~.~

Nuevamente estás ebrio y yo debo ir por ti antes de que Francis decida "divertirse". Maldita rutina realmente me comienza a cansar. Tomo las llaves de mi camioneta y salgo en tu búsqueda, al bar de siempre.

He llegado al fin, entro al bar pero ¿dónde rayos están? Veo en los alrededores y ¡oh sorpresa! ahí está Francis intentando aprovecharse de un pobre borracho y la novedad es que eres tú Arthur, curiosamente tu sarcasmo ha comenzado a ser parte de mi vocabulario.

–Oh~ Alfred veo que has llegado por Monsieur Angleterre, es una pena, yo quería pasar más tiempo con él –su sonrisa lasciva realmente me repugna.

–Hahaha lo siento Francis pero me temo que tendré que llevármelo ahora – ¡en tu cara maldito pelafustán! Jamás dejaré que le toques ni un solo cabello en mi presencia.

Voy hacia ti, estás casi inconsciente en el suelo, lo mejor será que te levante para irnos de una vez de este lugar.

– ¡Miren es Alfred! Te lo dije Luby* me debes 5 libras – ¿con quién rayos hablas? ¿Quién es "Luby"? Llegué justo a tiempo, un poco más y en verdad Francia hubiera gozado contigo.

–Arthur debemos irnos, ya es tarde –sacudo tu hombro pero parece molestarte.

– ¡No quiero irme! Aún me queda bastante ron por beber, ¡estoy casi sobrio! ¡Bloody hell! –ese fue un buen chiste, te aseguro que ni siquiera puedes estar de pie 10 segundos, pero bueno, ahora mi pequeño plan en marcha.

–Mira Arthur –pongo frente a tu rostro una botella de ron añejo.

– ¡Mía! –te abalanzas hacia ella pero no permito que la alcances.

–Por supuesto que será tuya, únicamente debes venir conmigo y listo –sabía que no podrías resistir tal tentación.

Después de una pequeña discusión y de pagar tu cuenta, finalmente llegamos a la camioneta, una vez arriba de ésta partimos hacia mi casa, no puedo mandarte así de regreso a tu país, por lo que ésta noche la pasarás conmigo, tontamente me sonrojo al pensar en ello pero no entiendo el por qué.

Llegamos, te ayudo a bajar del vehículo, ya sabía que no podrías caminar y para colmo sigues abrazado a la botella de ron que te di, como si de ello dependiera tu vida. Abro la puerta de mi apartamento y te recuesto en mi sofá.

–Vaya noche –no me queda más que exclamar eso y justo cuando creo que las cosas no pueden empeorar, te veo bebiendo el ron como si nunca en tu vida lo hubieses probado, con una sed implacable logrando que algunas gotas traviesas se escapen.

Las gotas de ron añejo que resbalan por tus secos labios, humectando cada centímetro de trayecto transcurrido, hacen florecer la envidia en mí. Envidio a esas gotas inconscientes de sí mismas pues no saben la dicha que a mí me provocaría estar en su situación, tocarte, sentirte, extasiarte tal como ellas lo hacen...

¡¿Qué carajo estoy pensando?! Me siento como Francia ¡oh por Dios!, mejor me iré a dormir.

–Oye Arthur, ya es hora de dormir –no debí llamarte, tu rostro ¡maldita sea! Tu rostro…

¿Y qué tal? Espero os haya gustado, si ven faltas de ortografía háganmelo saber. Va el primero faltan 2 (o quizá más).

*Luby: es una de las hadas de Inglaterra, soy un asco con los nombres así que si alguien tiene un mejor nombre dígamelo por favor.

Hasta luego~