Princess: Quiero agradecer a los lectores y a los que comentaron mi historia:
Nana Mizuki Nadeshko sakura: Muchas gracias por comentar mi historia y seguirla
Barby24119: Gracias, Gracias. Siempre has seguido mi historia y estoy agradecida por ello :3
Cutevampkitten03: Thanks for Reviews
Eternal-Illusion: Gracias por comentar ;3
XxXxxVampiritacool938xxXxX: Gracias por comentar mi historia
Konan-soul: Gracias por comentar mi historia
Sandra: Gracias por apoyarme
Saku-bonita: Gracias por apoyarme
KarinChibichan: Muchas gracias por comentar mi historia y seguirla
xXMinako35cutexX: Muchas gracias por comentar mi historia y seguirla
xXMarikoXxchanxXdokiXx: Muchas gracias por comentar mi historia y seguirla
RimaChibi1257: Muchas gracias por comentar mi historia y seguirla
Mizuki Kamira chan: Gracias por creer que mi historia es genial
Gracias a los que se suscribieron a la historia y la añadieron a favoritos:
1° Nana Mizuki Nadeshko sakura
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Capítulo Final: Un Nuevo Amanecer
Después de lo sucedido todo ha retornado a una aparente calma, el matrimonio de Utau y Kukai está mejor que nunca; Rima se va a casar con Nagi, así que todas están trabajando muy duro con los preparativos para la boda.
-Amigas todavía no puedo creer que nos vayamos a casar, no saben cómo me sorprendí cuando me lo pidió, Dios mío casi me muero de la emoción, por cierto ¿dónde está Hikaru?-dice Rima
-Te entiendo a mí me sucedió igual cuando Kukai me pidió casarme con él, y Hikaru se quedo con mi nana Suu, bueno ahora es su nana, por cierto ya le están saliendo los dientes-dice Utau sonriendo
-¿Los dientes? tan rápido, si aún no se le ven- dice Amu
-No se le ven pero ya se sienten muy bien-dice Utau
-¿Te mordió?- pregunta Rima quien se contiene la carcajada
-ok disculpa supongo que debe haber sido doloroso, cambiemos de tema, dime, has sabido algo del desgraciado de Kazuomi-pregunta Rima mirando seriamente a Utau
-No, y eso me preocupa de una manera que no se lo imaginan, sé que está allí en algún lado solo esperando el momento oportuno para intentar matarme, lo que más me atemoriza no es lo que pueda hacerme sino lo que pueda hacerle a las personas que amo, por su culpa casi perdí a Kukai y estoy segura que eso no lo hubiera resistido-dice Utau con su flequillo tapando sus ojos
-Utau creo que lo mejor sería que contrataran seguridad privada, que andes con guardaespaldas, no sé que tomes alguna medida para alejar a ese maniático de ti, porque si no lo haces ten por seguro que esto va a terminar en tragedia-dice Amu
-Lo sé Amu, la casa la vigilan todo el día, con respecto a la seguridad hay un auto que me sigue todo el día con dos guardaespaldas que Kukai contrato para que no se me despeguen, afortunadamente si les digo que no me sigan dejan de hacerlo-dice Utau
-Mujer eres más necia que una mula, ya ponte un cartel luminoso que diga "Kazuomi aquí estoy, mátame" por cierto llego esto para ti- dice la pelirosa extendiéndole un sobre.
-Ten cuidado no vaya hacer que contenga ántrax- dice Rima
-Rima deja de decir estupideces- luego de ver la dirección abre el sobre.
-¿Qué es?- pregunta la pelirosa sumamente intrigada.
-Es una invitación para asistir a la inauguración de la nueva sala de exposición de la mansión Himura-dice Utau
-Wow He escuchado que desde hace unos 50 años esa mansión fue convertida en un museo donde solo hay cosas sumamente antiguas que no vas a encontrar en ningún otro lugar del mundo, según sé queda como a una hora de la ciudad ¿qué hiciste para que te invitaran? Diste algo para su museo, o se equivocaron de dirección-pregunta Rima
-Que buen chiste Rima, no se equivocaron les diré que es lo que hice para que me invitaran, mi padre siempre contribuyo con ellos y al morir él yo seguí su ejemplo ya que me encantaba ir a pasear por los jardines de esa casa, recuerdo que la estancia era una sala de pintura del siglo XVI, algo incomparable, ya que tengo tantos años apoyándolos bastante bien, según esto soy una de sus principales contribuyentes me quieren de organizadora en el cóctel de inauguración que se llevara a cabo dentro de una semana-dice Utau
-Vaya que te lo tenias bien guardado ¿Por qué nunca no habías dicho de eso?- pregunta Amu
-No lo considere importante, mejor sigamos elaborando la lista de invitados-dice Utau
-Utau ¿cómo te fue con tus amigas?-dice Kukai que la pega a su cuerpo para besarle el cuello, rodeándole la cintura.
-De maravilla, por cierto aun es temprano ¿Qué haces aquí?- lo besa muy apasionadamente, revolviéndole el cabello.
-Tenía ganas de ver a mi esposa y a mi hijo, acaso eso es un crimen, porque si lo entonces condénenme a pena de muerte- dice Kukai
-Por supuesto que no y por favor no vuelvas a decir eso, pero mira que me vas a mal acostumbrar a verte tan temprano y luego no te vas a librar de mí por ningún motivo, por cierto me invitaron a un evento donde seré organizadora, podrá usted mi guapo esposo hacer el honor de acompañarme-dice ella rozando sus labios con los de él.
-Al mismo infierno si me lo pides mi amor-dice Kukai
-No exageres solo es un cóctel, algo rápido y nos venimos ¿Dónde está Hikaru?-dice Utau como sus manos recorren la amplia espalda de su esposo.
-Aquí- dice una señora que lleva al pequeño recién bañado entre sus brazos quien al ver a su madre extiende los bracitos.
Ante aquello Utau se separa de Kukai para voltearse algo sonrojada
-hola mi niño ¿extrañaste a mami?- carga al niño el cual balbucea algo inentendible.
-Claro que Hikaru te extraño quien sería capaz de no extrañarte preciosa desu-dijo Suu
-Suu muchas gracias por cuidar a Hikaru ya puedes retirarte, a partir de este momento yo me hago cargo-dice Utau
Una vez que se encuentran solos en la sala
-Utau, respóndeme sinceramente, tú crees que de verdad Hikaru pueda no ser mi hijo-dice Kukai mientras observa al niño que está afanado con un mordedor.
-Kukai te lo he dicho una y un millón de veces al verlo siento que es tu hijo, pero por algún motivo no me has querido dar la tranquilidad de tener esa seguridad al 100, no entiendo el por qué, aunque imagino que si él no fuera tu hijo las cosas van a cambiar radicalmente-dice Utau
-Discúlpame pero me atemoriza lo que pudiera revelar ese examen, no tanto por mí sino por ti, por Hikaru, porque aunque lo niegues estoy seguro que las cosas nunca podrían ser iguales, así que prefiero otorgar el beneficio de la duda al menos por un poco más de tiempo-dice el
-Como gustes-responde Utau
Mientras Tanto...
-Un cóctel en la mansión Himura, excelente, es un buen lugar para olvidarme un poco de esa mujer y pensar en otras cosas que no sea en matarla ya que esta tan bien vigilada que moriría antes de poder acercármele, aunque me gustaría destruir todo lo que ella ama y luego exterminarla con mis propias manos-dice Kazuomi mientras el exhala una bocanada de humo con mucha calma.
-Kazuomi entonces confirmo tu reservación para ese cóctel ¿sí? O ¿no?-dice Ichinose
-Por supuesto que sí Ichinose confírmalo-dice Kazuomi
-Excelente Kazuomi me alegra que te animes a salir de este lugar para aclarar un poco tus ideas, realmente esa locura de matar a esa mujer no me agrada para nada-dice el
-Pues lo siento porque ya lo decidí, es ella o soy yo, ambos no podemos seguir existiendo-responde Kazuomi
Luego de acostar a Hikaru, Kukai y Utau entran a su habitación besándose muy apasionadamente él rodeándole la cintura con sus manos y ella alrededor de su cuello, al poco rato los labios de Kukai comienzan a descender por el cuello de su esposa quien le desabotona la camisa sin ninguna prisa, cuando ella llega al último botón él la coloca delicadamente sobre la cama mientras se pierden en sus miradas.
-Kukai hazme el amor con mucha pasión, muy despacio-susurra Utau
-Lo que ordenes- se recuesta sobre ella besándola muy apasionadamente.
Al sentir un roce sumamente delicado en su rostro la rubia decide abrir los ojos para encontrarse con su guapo esposo quien la acaricia con una rosa.
-Gracias por llevarme al infinito- se incorpora parcialmente para besarlo suavemente.
-Mi vida no hay nada que agradecer sabes que lo hago con gusto, por cierto quería darte algo, iba a ser una sorpresa creo que este sería un excelente momento para dártela- se sienta y de una de las mesas de noche saca un sobre.
-¿Qué es?- dice ella
-Es el resultado de un examen de paternidad que le practicaron a Hikaru y a mí. Por favor ábrelo-dice el
Ante aquella respuesta que no se la esperaba para nada el corazón de Utau comienza a palpitar de una manera muy acelerada, en segundos rompe el sobre y al leer el papel que trae dentro varias lágrimas y sollozos entrecortados se le escapan.
-Utau, cálmate, no es para que lo tomes así- trata de parecer lo más tranquilo posible.
-¿Y cómo quieres que lo tome?- intenta calmarse.
-Pues con tranquilidad-dice el
-¿Desde hace cuanto lo sabías?- pregunta ella
-No sé los resultados, pero los tengo desde hace más de una semana, esperaba a que tú los vieras primero y tu reacción me dice lo que tanto temíamos- dice el
-Eres un tonto- le da un manotazo en el hombro
-Me has tenido con una angustia que bien habrías podido evitar ¿Por qué?-dice el
-No había encontrado un buen momento ya que has estado muy ocupada con los preparativos de la boda de Rima, no habíamos tenido un tiempo solo para nosotros, por eso no te entregue los resultados antes, discúlpame- la abraza.
-No tengo nada que disculparte, gracias mi amor-ella lo besa muy apasionadamente haciendo lo caer sobre la cama
-No sabes el peso que me quitas de encima ahora que tengo la completa certeza que Hikaru es tu hijo, te mereces un premio ¿qué quieres?-dice Utau
-Que jures amarme mientras el sol aparezca por el oriente en las mañanas, mientras el viento susurre entre los árboles, las abejas vuelen de flor en flor, y el mar bese tibiamente las arenas de las playas-dice Kukai
-Lo juro- con sus dedos dibuja sus labios.
-Pero no solo eso- luego de trazar un camino de besos por todo el cuello de Utau al llegar al oído le susurra algo.
-Nunca te cansas de hacerlo ¿eh?- Utau sonríe de lado al sentir las manos de Kukai recorrer su cuerpo.
-Contigo no Utau, además, tenemos pendiente darle hermanitos a Hikaru- unen sus labios para fundirse en un apasionado beso.
-Nagi, Ikuto les juro que creí que como mínimo me iba a cachetear por no haberle dado antes el bendito sobre antes y por el contrario, me premió-dice Amu
-Mujeres, quien las entiende-dice Ikuto
-Por eso dicen que son de Venus- dice Nagi
-Ikuto, Nagi no tienen que entendernos, sería demasiado pedir- dice la rubia quien va a sentarse junto a Kukai
-Sabias palabras- dice Rima
-Bien se supone que nosotras vamos de compras, crees que estos hombres sobrevivan sin nosotras-dice Rima
-Lo harán- dice Amu
Tras volver de comprar medio centro comercial las amigas se dirigen a la casa de la rubia para ver a Hikaru pero al llegar se encuentran con que en la casa solo están los empleados.
-Suu ¿dónde está mi hijo?-dice Utau
-El señor vino con sus amigos y se llevo a Hikaru creo que no deben tardar en volver ya que se fueron poco después de ustedes desu- le dice Suu a Utau
-Nagihiko la verdad fue muy divertido- dice Ikuto quien va carcajeándose.
-Yo no le veo nada divertido-dice Nagi
-¿Qué pasó?- pregunta Rima
-Pues salimos y Nagi se ofreció para cambiarle los pañales a Hikaru y cuando le quito el pañal bam él le orino encima, según tú ¿qué es lo que trae en la camisa?-dice Ikuto burlándose de el
-Que te calles-grita Nagi
-Tranquilos no es para tanto, Nagi cálmate y no hagan más escándalo que se va a despertar- dice Kukai que lleva al pequeño profundamente dormido.
Bueno chicos ya es suficiente, supongo que esta linda pareja tiene mucho que hacer, así que mejor vámonos- dice Amu. Luego de despedirse todos salen.
En la habitación
-Mi amor, por cierto al cóctel del que me hablaste no podré acompañarte pues acabo de recibir la confirmación de unos inversionistas alemanes con los que me interesa trabajar desde hace mucho tiempo, te juro que si pudiera cancelarlo lo hago, pero es algo que esta fuera de mi alcance, además, cuando hable con ellos les dije que no importaba el día y ellos sin saberlo eligieron esa fecha, no sabes cómo me atormenta pensar que estarás hecha una deidad y que no podré estar a tu lado- se disculpa Kukai
-No importa, te entiendo, no lo pudiste controlar solo que esto me lo tendrás que compensar con intereses bastantes altos-dice Utau sonriendo
-Como quieras pero luego no te quejes-responde Kukai
La noche del cóctel la rubia está frente a un gran espejo viendo el vestido que se acaba de poner, que es color negro, hombros descubiertos, un leve escote, la mitad de la espalda descubierta, ajustado, abierto en la pierna derecha, cabello recogido parcialmente, tacones altos y una cadena de oro blanco con un pequeño diamante tallado en forma de corazón.
-¿Sabes qué? me valen mis socios, quiero ir contigo a ese cóctel, te ves hermosísima- le besa el hombro.
-Será en otra ocasión, no puedes dejar a esas personas que viene desde tan lejos esperándote, aunque me encantaría que fueras conmigo- se pega a Kukai
-Preciosa, no hagas eso porque luego ni tu ni yo salimos de esta habitación, mira haremos algo, te voy a dejar y si la reunión termina temprano me voy a acompañarte ¿estás de acuerdo?-dice el
-Excelente-responde Utau
Al llegar a la mansión donde se celebra el cóctel y observar como Utau era el centro de atención poco falto para que Kukai se quedara con ella.
-Mi amor, tus socios te esperan, yo ya no soy una niña, sé cuidarme sola, además aquí hay seguridad hasta de sobra-dice ella
-Me resigno, Princesa te amo- la besa suavemente y algo dudoso se va a su reunión.
De entrada a la rubia le toca recibir a los invitados pero dado que son varios turnos hay constantes rotaciones, así que cuando Kazuomi llega junto con su amigo Utau está con unos camareros en otro extremo de la mansión.
-¿Utau eres tú? Es increíble cómo has crecido- dice una señora que se le acerca.
-Disculpe pero ¿usted quién es?- intenta recordar a aquella mujer.
-Es lógico que ya no te acuerdes de mí, soy Annie Ayuzawa, fui muy amiga de tu madre, además tu maestra en la primaria durante 2 años recuerdas, realmente me sorprendió muchísimo no verte en el funeral, mira las vueltas que da la vida, que lugar para verte de nuevo, te ves tan parecida a tu madre, ella adoraba este tipo de eventos.
Una sonrisa fingida se dibuja en los labios de Utau ante tal comparación
-Un placer volver a verla señora, ahora si me disculpa estoy muy ocupada dando instrucciones a los camareros, si me desocupo un momento me gustaría que continuaremos esta conversación-dice Utau dándole una sonrisa
En la nueva sala de exhibición Kazuomi está embelesado viendo todas las armas que hay allí catapultas, pistolas de todo calibre automáticas y semi automáticas, mosquetes, ballestas, espadas, katanas, jabalinas, arcos, flechas en fin es una colección impresionante pero lo que más le gusto son unas armaduras las cuales sostienen unas alabardas.
-Me encantaría verte atravesada en una de estas mientras agonizas lentamente- dice Kazuomi que habla consigo mismo observando una alabarda en ese momento sin estar muy seguro del porque decide voltearse, su sorpresa es mayúscula al observar entre la multitud a Utau quien conversa con el embajador de Inglaterra y con otras personas
- Estás aquí, que hermosa jugada del destino, esta noche morirás-dice el cómo se confunde entre la multitud.
Como le decía señores uno de los más grandes atractivos de este lugar es que además de la colección única que usted está viendo, es el techo, debido a la edad de la casa ya estaba bastante deteriorado así que para evitar accidentes mandaron a quitar todo lo que antes tenía y lo hicieron de vidrio, realmente a mí me encanta solo hay que levantar la cabeza y se puede ver perfectamente el cielo estrellado pero de día es todavía más increíble, parece que las armaduras fueran a cobrar vida aunque todavía hay que hacer unas reparaciones en los balcones.
Tienes razón es una maravilla y respecto a las reparaciones te aseguro que tendrán nuestro apoyo, sabes me gustaría ir a otra sala estar entre tantas armas me estremece, además quiero ir a ver a otras de las maravillas con las que cuenta este lugar- dice uno de los embajadores presentes.
Con mucho gusto, francamente a mí también me estremece esta sala.
Desde ese momento Kauzomi sigue muy de cerca cada uno de los movimientos de Utau pues debido a que se confío se encuentra muy a gusto conversando con varias personas de importantes, al verla tan tranquila su único deseo era sacar su pistola y dispararle pero sabía que aún no era propicio así que siguió esperando el momento oportuno como un tigre por su presa.
Después de varias horas casi todos los invitados ya se han marchado solamente quedan los organizadores los cuales se encargan de ver que todo esté en orden. Ya que Kukai no llego a recogerla Utau llama a su casa para pedir que le manden al chofer, fastidiada de saber que tendría que esperar decide irse a uno de los balcones el cual queda justamente debajo de la sala de armas, está a punto de apoyarse cuando recuerda que barandales estaban en mal estado, así que centra su atención en las bases y verifica que en realidad el barandal está en muy mal.
-Perfecto resulta que no puedo ni siquiera apoyarme aquí Me voy a aburrir como una ostra esperando a que llegue el chofer- por lo tanto se queda a una buena distancia para contemplar la belleza de la noche, ante tanta majestuosidad se pierde en sus pensamientos más el sentir que no está sola la hacen voltearse, justo para escuchar tremendo portazo y ver frente a ella a Kazuomi
-Que bien al fin te tengo como te quería- la sujeta del mentón.
-Tú aquí, si que eres un perfecto imbécil, como se te ocurre aparecerte, sabes que si grito inmediatamente vendría alguien, entonces no podrás hacerme nada-dice ella
-Ja, ja, ja me encanta tu perfume, me excita, te daré un consejo ahórrate tus gritos, la mayoría de la gente ya se fue y los que quedan están en el otro extremo de la mansión, pero no te preocupes será bueno contigo, te matare rápidamente-dice el
-MALDITO CRETINO- lo empuja y se dirige a la puerta más antes de llegar a Kazuomi la sujeta y hace por aventarla al suelo, pero ella únicamente trastabilló.
Muérete- coloca sus manos alrededor del cuello de la rubia la cual le clava las uñas en los brazos en un intento por liberarse de aquella presión que le impedía respirar arrinconándola contra el barandal mientras una sonrisa sádica se dibuja en los labios de Kazuomi
-Que hago matarte tan sin gracia, no, no sería digno ni de mí, ni de ti, antes quiero que recordemos todo el placer que hemos sentido juntos, yo fui el primero y voy a ser el último- se acuesta sobre ella para después quitar sus manos de la garganta de Utau la cual esta semiconsciente mas al sentir los labios de Kazuomi recorrer su piel recupera la consciencia por completo, dándole una cachetada tras lo cual él se levanta de sobre la ella sumamente molesto aprovechando eso Utau vuelve a ponerse de pie.
-Para que no sufras ahora mismo voy a matarte- saca la pistola y presiona el gatillo del arma, la bala pasa muy cerca de la rubia quien hace por correr.
-IMBÉCIL-grita ella
-Creíste que te me ibas a escapar tan fácil OLVÍDALO! Esta noche te mandare al infierno- la sujeta de los brazos para comenzar a forcejear bastante cerca del barandal luego de unos segundos se separan.
-Que divertido pones resistencias vamos a seguir jugando- respira bastante rápido.
-Si das un paso más te juro que no respondo-dice ella
-Ay sí que miedo me das ja, ja, ja sabes porque me da algo de pena de acabar contigo es porque mi hijo no tendrá a su madre- da un paso observándola muy atentamente y continua hasta quedar frente a ella- despídete- le susurra.
-Hikaru no es tu hijo perro desgraciado- lo empuja haciendo que él retroceda, al apoyarse en el barandal una expresión de asombro se dibuja en el rostro de Kazuomi al sentir que este cede y cae al vacío.
-DESGRACIADA –luego de eso se escucha el ruido de cristal rompiéndose y a continuación un golpe; Utau se acerca al borde del balcón para horrorizarse al ver el techo de cristal completamente destruido y el cuerpo de Kazuomi atravesado de lado a lado en una de las alabardas.
En ese momento se escuchan voces que se acercan al lugar así que Utau sale del balcón para reunirse con todo el grupo que no paran de preguntar ¿qué pasó ¿Qué fue ese ruido ¿De dónde vino el disparo?
Un grito hace que la atención de todo el mundo se concentre en la sala de armas donde Kazuomi a pesar de estar clavado en la alabarda se encuentra escupiendo sangre y aunque intento decir algo todo era inentendible pues se ahogaba en su propia sangre. Ante aquel espectáculo la castaña siente deseos de vomitar.
Mientras se escucha una voz decir
-Pobre señor Souma debimos de haber colocado el rotulo de balcón en mal estado, prohibido el acceso- después de eso Kazuomi muere ante la mirada de varias personas.
A los pocos minutos llega policía, luego los forenses y al poco rato Kukai, quien escucha
-"tuvo una muerte espantosa"- siente un escalofrío recorrer todo su cuerpo.
-Kukai- dice ella que sale del cerco policial para abrazarlo.
-Utau, estás bien, gracias a Dios ¿Qué pasó?- abraza muy fuerte a su esposa.
Ella no responde nada.
-¿Qué pasó?- pregunta él nuevamente al ver que llevan un cuerpo cubierto.
-Sr. Souma tengo que darle una muy mala noticia su padre murió, cayó de uno de los balcones, lo siento mucho- dice otra de las organizadoras.
-Kukai me siento mal- se abraza a él con los ojos cerrados intentando no desmayarse.
-Llévesela con usted para que descanse. Han sido demasiadas impresiones para una sola noche-dice una organizadora
-Muy bien, Utau cálmate- le susurra llevándola al auto mientras intenta asimilar la noticia de la muerte de su padre.
En el auto…
-Yo lo mate, está muerto porque yo lo empuje-dice ella
Kukai frena abruptamente para luego observarla muy atentamente
-Utau yo no podría vivir si te pierdo-dice Kukai como le besa la frente
-descansa Utau, esto debe haber sido tan traumático para ti. Cuando llegan a la casa Kukai sube con Utau en brazos la cual se durmió profundamente acurrucada a el
La muerte de Kazuomi fue el encabezado de todos los medios, el funeral fue sumamente concurrido y antes de que comenzaran a echar tierra sobre el ataúd, Utau quien viene de observar el amanecer arroja un clavel
-Al fin se acabo este infierno-susurro Utau mientras es abrazada por su esposo.
Ella sentía que ese amanecer que había presenciado hace unos momentos no era un amanecer más, era un amanecer que marcaba una nueva etapa en su vida y una ligera sonrisa se formo en sus labios.
Princess: Les agradezco una vez más por seguir la historia
Rima: Y por comentar
Amu: Ahora veremos un Adelanto de la próxima historia que Princess chan publicara mañana o pasado mañana :3
xXxXxXxx Adelanto de la Próxima historia de Princess chan xXxXXxXxXxXXxXx
-Utau chan- dijo
-¿Qué?-pregunte
-Mi casa es por el otro lado- dijo, pare al instante
-Lo Siento, por donde es-le pregunte
-Ven- me dijo sonriendo tomándome de la mano y llevándome a una gran casa
-Wow- dije
-Es un poco grande- dijo Nagi
-Es muy grande Nagi-dije mirándolo
-Mi casa antes era una academia de baile- dijo
-Bien vamos a ensayar mucho entonces- dije con fuego en los ojos
-Sí pero también debemos cantar, solo se hace en este baile- dijo Nagi
-QUE QUE- grite mirándolo. Suspire
-Bien- dije
-Nagihiko sama- vi a una señora en el portón que iba con un kimono
-Gracias- dijo pasando y me tomo la mano y caminamos a su casa
-Solo somos amigos, Utau tanquilizate- pensé sonrojada
-Con permiso- dijimos al mismo tiempo yo y Nagi
-Bienvenido Nagihiko san- dijo una hermosa mujer de ojos dorados y cabello café chocolate con un kimono purpura
-Mucho Gusto señora me llamo Tsukiyomi Utau y soy la compañera de Nagihiko- dije inclinándome un poco
-Igualmente- dijo inclinándose un poco. Saque el detergente de la bolsa y vi que era muy grande
-¿Ese no es?- pregunto la madre de Nagi
-El detergente- dijo la abuela de Nagi
-Nuevo- dijeron ambas con estrella en sus ojos
-Esto- dije con una gota de sudor estilo anime
-Ven Utau- me dijo Nagi tomándome la mano llevándome a un cuarto estilo japonés
xXxXxXxx Fin del Adelanto de la Próxima historia de Princess chan xXxXxxXxX