InkDeep by enchanted nightingale

Traductora: nekoumori

Disclaimer: Los personajes no me pertenecen. Solo son usados por diversión.

Pareja: Harry Potter/ Neji Hyuga


8 ...Peek into the Future


Neji frunció el ceño. "Esto no me gusta."

"A mi tampoco." Contestó Ibiki. El Hyuga era uno de sus mejores ANBU en años y el hombre odiaba no estar en activo, pero algunas veces no se puede tener lo que uno quiere. Neji no podía dejar la villa por un tiempo porque tenían información de que Kumo había vuelto a empezar a tratar de poner sus manos en un Hyuga. No el gobierno oficial, sino parientes y gente de los Clanes que había muerto intentándolo la última vez. Normalmente eso no le afectaría ya que el Sello del Pájaro Enjaulado prevenía que el Límite de Sangre de los miembros de la rama derivada de la familia fuera robado. Neji, mientras no formaba oficialmente parte de la rama principal de la familia, no llevaba el Sello del Pájaro Enjaulado ya que su tío lo había desactivado a petición de su prima Hinata. A demás que Neji era uno de los blancos principales ya que su padre había sido el que había matado el shinobi de Kumo que había tratado de secuestrar a su prima.

Aun así, Neji aceptó que por un tiempo debería pasar desapercibido hasta que el rumor desapareciera o el problema se solucionara. La Godaime ya estaba moviéndose diplomáticamente pero Neji no se quería arriesgar. Especialmente cuando los problemas de su última misión pasaron por culpa de Kumo.

"No vas a estar inactivo del todo." Continuó Ibiki.

Neji ladeó la cabeza.

Ibiki lucía complacido consigo mismo y un poco sádico cuando dijo las siguientes palabras.

"Te van a asignar un equipo genin."

Neji se lo quedó mirando.


Hanabi pestañeó.

Hinata estaba boquiabierta.

Harry dejó caer la cabeza hacia un lado.

Y Hiashi, Los labios de Hiashi trataron de no formar una sonrisa.

Entonces los cuatro empezaron a reírse a costas de Neji.

"No es graciosa." El chico más joven de los Hyuga los asesinó con la mirada.

"P-Perdón, primo." Rió Hinata.

"Pobres genin." Hanabi suspiró.

Harry se tragó la risa. "Estoy seguro que no puede ser tan malo." Le dijo a su amante.

Neji luchó la necesidad de rodar los ojos. En su lugar miró a su tío pero Hiashi estaba obviamente divertido.

"Limítate a no matar los críos." Le dijo Hinata.

"Sin importar lo mucho que quieras hacerlo." Acabó Harry.


No fue solo la familia de Neji que se divirtieron por el estatus del nuevo instructor jônin.

Las noticias viajaron rápido y la siguiente vez que el Hyuga fue a la armería del padre de Tenten a comprar shuriken, la kunoichi se rió a sus expensas.

"¡Hola sensei!" Ella se puso a sonreír.

Neji la fulminó con la mirada.

"Vigila con esa mirada asesina." Le dijo Tenten. "Lo último que necesitas son niños llorando."

"Solo tráeme lo que quiero comprar." Le dijo Neji.

La kunoichi rodó los ojos. "En serio, no seas tan tieso."

Justo antes de dejar la tienda la chica le dijo.

"¡Y acuérdate!" Le gritó para que la oyera. "¡No puedes mandarlos la hospital por pesados que sean!"

Neji la ignoró.


Su siguiente confrontación vino de si propio instructor jônin. Gai le acorraló en algún punto y estaba realmente emocionado sobre el hecho que Neji fuera a tener su propio equipo genin. Cuando el hombre que vestía en un traje verde ajustado trató de aconsejar a Neji, el Hyuga trató de hacer que se marchara. En el momento en que Gai empezó a hablar sobre uniformes a juego y 'Llamas de la juventud' Neji corrió, sin importarle que fuera poco digno.


Harry sonrió. El antiguo compañero de equipo de Neji, Lee, había venido a su tienda con Sai y Naruto. Estaba contento de verlos.

"¿Cómo estáis?" Les saludó el hombre de ojos verdes.

Lee empezó a hablar sobre las 'llamas de la juventud' y Naruto estaba igualmente excitado. Sai estaba esperando silenciosamente.

"¿Y como es que estáis aquí?" Preguntó Harry.

"Soporte moral." Contestó Naruto y empujó el que aún no había hablado hacia él.

Harry pestañeó.

"Sai quiere un tatuaje." Dijo Naruto.

El mago encaró el antiguo shinobi de ROOT.

"¿Te llamas Sai verdad?"

"Si." Contestó Sai.

"¿Qué es lo que quieres?"

"Un tatuaje que trabaje con manipulación de tinta." Dijo Sai.

Harry sonrió. "Creo que puedo hacer algo. ¿Lo quieres hoy? No tengo nada más planeado."

Sai tomó esa oportunidad para sacarse un papel del bolsillo y pasárselo a Harry.

El artista lo abrió. "¡Muy buen dibujo! Nightingale, ¿verdad?"

"Si, lo es. Gracias." Dijo Sai.

Naruto se lo estaba mirando con los ojos como platos, sorprendido que Sai fuera tan educado.

"Voy a hacerlo." Decidió Harry. "Vamos a preparar todo."

"Así que Harry." Dijo Naruto. "He oído un rumor de lo más interesante."

Harry sonrió. "¿Sobre Neji?"

Naruto asintió.

"Van a asignarle un equipo genin." Confirmó Harry.


Neji no había estado en la Academia desde que él mismo se había graduado.

La habitación estaba llena de mocosos y el Hyuga estaba ansioso y quería irse y acabar con eso de una vez.

"¡Equipo Dos!" Gritó. "Quedamos en la zona de entrenamiento 12 en los siguiente diez minutos. No lleguéis tarde." Dijo y se largó, dejando a los tres nuevos graduados de la Academia corriendo tras él.


"Soy Hyuga Neji, jônin." Dijo. "Decidme vuestros nombres, edad, rango, cosas que os gusten, cosas que no os gusten y vuestra mejor técnica."

El primer genin empezó. Era bajito, con marcas en la cara, cabello largo recogido en una cola, pantalones marrones y camiseta roja. "Inuzuka Yoshi, doce, genin. Me gusta mi perra Keya, entrenar con ella y comer ternera. Odio los gatos y levantarme temprano. Mi mejor técnica... supongo que henge y las técnicas familiares."

"¡Siguiente!" Dijo Neji.

"Ootori Kaoru." Dijo la kunoichi. Era bajita, con el cabello negro azulado y los ojos marrones. "Doce. Genin. Me gustan las flores y leer. Odio las arañas y mi mejor técnica... puedo usar senbon y unos pocos jutsus medicinales."

Neji se giró hacia el último. Un par de ojos Hyuga le encararon.

"Mi nombre es Hyuga Mamoru. Voy a cumplir los doce en dos semanas. Genin. Me gusta la caligrafía y entrenar. Odio los días lluviosos. Mi mejor técnica es el Taijutsu."

"Ya veo." Dijo Neji. "Tenéis tres horas para pasar mi test. Si lo hacéis, entonces y solo entonces voy a aceptaros como mi equipo genin. ¿Entendido?"

Los tres chicos asintieron seriamente.

"Quiero que me encontréis. Voy a estar en algún lado de Konoha. Vais a necesitar rastrearme. ¡Empezad!"


Harry masajeó las sienes de su amante, deslizando los dedos por los densos, sedosos, oscuros mechones de cabello de vez en cuando, haciendo gruñir a Neji.

"Tu dolor de cabeza no puede ser tan malo." Observó el artista. "Yo tuve a Naruto y a Lee en mi tienda. Y aparentemente Sai es reservado solo mientras le estoy haciendo el tatuaje. Luego se volvió suficientemente pervertido para hacerme sonrojar."

"Tengo un equipo genin. Oficialmente quiero decir."

"Voy a evitar felicitarte. Pero que conste que mi día ha ido peor."

"Si, bien, los meses siguientes van a ser un infierno para mi. Tengo que supervisar Misiones de rango D ahora." Neji se echó a temblar.

"Pobre Neji." Susurró Harry, con una sonrisa en la cara. "¿Cómo podría ayudar?"

Neji abrió los ojos. Luego tiró de Harry que cayó con un pequeño grito en el regazo de Neji. Entonces el prodigio del Byakugan juntó sus labios con los de Harry y el mago gimió. Se quedaron así, besándose, sus manos tirando de sus ropas lentamente.

"Hace demasiado." Harry estuvo de acuerdo cuando Neji metió las manos bajo la camiseta del hombre de ojos verdes y le tocó la piel.

"Estuvimos en la cama ayer."

"Pero Hanabi quería que cocinara." Harry suspiró cuando Neji le pasó los dedos por el pecho.

"Cierto." Recordó Neji.

"Y antes de eso los Ancianos vinieron a suplicar, bajo las instrucciones de Hinata.

"Ya lo pillo." Dijo el shinobi y besó a Harry de nuevo.

El mago se rindió y acercó aún más a Neji.

Justo entonces alguien llamó a la puerta y la pareja gruñó.

"Ignora la puerta." Suspiró Neji.

"No puedo. ¿Recuerdas la última vez que ignoramos la puerta y tu tío nos pilló?"

"Estábamos vestidos."

"¡Por poco! ¡Déjame levantarme!"

Neji suspiró. ¿Por qué no le daban un respiro?


Anko rió. "Así que, época de sequía."

Harry la asesinó con la mirada. "No es necesario que te rías de mi."

"Está entrenando a los mocosos, ¿verdad?"

El mago de ojos verdes asintió. "Pero tengo un plan."

"¿Oh?" Preguntó Anko.

Harry se negó a contarle.


un año después


Era el cumpleaños de Neji.

Harry había hablado con Hinata y Hanabi y los tres habían organizado una pequeña fiesta en la casa principal y habían invitado a todos los amigos y camaradas. Neji había estado gruñón al principio pero Harry no le había dejado protestar. Así fue como el gran y ruidoso gentío se reunió. Harry había preparado algo de comida y el resto lo compraron en algunos de los restaurantes que había por Konoha. Hiashi les había dado vía libre con la casa y se retiró a sus aposentos para dejar a la generación más joven divertirse. Fue una noche larga y todos los invitados estaban placenteramente borrachos en algún punto y empezaron un par de juegos.

Neji, mientras notaba el envalentonamiento del alcohol, decidió no jugar. Harry jugó un par de rondas con el Rookie 9 (ocho al no contar su amante) más Sai y unos cuantos Hyuga. El prodigio del Byakugan vio como su amante interactuaba con sus compañeros. Harry era amable y caía bien a la gente. Era mucho más social de lo que Neji nunca fue. Todavía se preguntaba como fue que acabaron juntos. La mitad del tiempo pensaba que no se merecía a Harry, con su estoica e inexpresiva cara. Pero el hombre con esos hermosos ojos verdes le miró en ese momento.

"¡Lo siento chicos!" Les dijo y se levantó tambaleándose un poco, antes de ir hacia Neji y abrazar a su novio.

Neji tomó a Harry en sus brazos y apretó al hombre en sus brazos, aguantándole.

"Estás borracho." Observó Neji.

"¡Meh! Solo un poquitín." Dijo Harry articulando como lo hacen los borrachos. Levantó la cabeza y la restregó contra le cuello de Neji. "Hm, olor a Neji."

"¿Apesto?"

"¡No! ¡No! Solo pasa que hueles a Neji. Adoro el olor a Neji."

Neji rodó los ojos. "Tu... mejor será que te lleve a la cama."

Miró como Hinata y Shino estaban hablando y sonrojándose. Ambos estaban borrachos ya que sabía que de otro modo Hinata no hablaría y se desmayaría ante el chico que le gustaba. Neji dejó la pareja a solas y fue con su amante a descansar.. En el momento en que los dos amantes llegaron a su cuarto Harry pareció revivarse un poco y besó agresivamente a Neji. El shinobi sonrió.

"¿No estás borracho?" Bromeó el Hyuga.

"¿Y? Te deseo." Harry tomó el lóbulo de la oreja de Neji y mordió suavemente. "Mucho." Respiró en el oído de su amante.

Neji tembló. "Harry..."

"Te deso tanto..."

El amante de Harry gruñó. Entonces el artista de ojos verdes se movió y acorraló a Neji contra la cama.

"¿Desnúdame?" Preguntó.

Neji obedeció fácilmente y cuidadosamente desvistió a Harry y luego a si mismo bajo la insistencia del mago.

Pronto estaba ahogándose en sus esencias y toques y gustos. Incluso borracho, Harry estaba prestando mucha atención a todos los puntos que hacían enloquecer a Neji de placer. Es más, Harry parecía tener menos inhibiciones que de costumbre y el Hyuga lo disfrutó inmensamente. Harry molestó los sentidos de Neji cuando molestó el pene del shinobi lentamente y gentil, haciéndolo lentamente a propósito de manera lenta y torturosa.

"Harry..."

"¿Mmm?" El hombre de ojos verdes soltó a Neji. "¿Si?"

"¿Realmente te encanta molestarme verdad?"

"Sip." Admitió Harry. "Y hoy es especial así que voy a asegurarme que pierdes la cabeza. ¿Cuánto hace que no me tomas? ¿Una semana? ¿Un mes?"

Neji gimió cuando notó la boca de Harry de nuevo en su cuerpo, no en su erección sino en si cadera, marcando la carne y dejando chupetones por su piel.

"¿Qué pasa amor? Te he hecho una pregunta." Le dijo el mago a su amante, haciendo que Neji abriera los ojos y mirara mal a Harry.

"Te odio."

Harry sonrió. "Mentiroso." Se deslizó hacia arriba hasta que se encontró cara a cara con el shinobi de ojos pálidos. "Sabes que me amas."

"Lo hago." Admitió Neji. Presionó sus labios contra la barbilla de Harry. "Eres el único hombre al que he amado tanto. Tanto..." Suspiró y besó a Harry, haciendo que el mago se inclinara para acercarse y poder profundizar el beso. Los dos se quedaron besándose por un rato, disfrutando la intimidad y la cercanía hasta que sus cuerpos exigieron atención. Entonces Neji se hizo cargo de la situación y gentilmente revirtió sus posiciones, cubriendo la delicada figura de Harry con la suya. Fue gentil cuando preparó lentamente a Harry y se mantuvo gentil y cuidadoso cuando finalmente entró en el hombre de ojos verdes. Harry era muy escandaloso, urgiéndole a ir más rápido pero Neji lo quería alargar lo más posible.

"¡No voy a romperme!" Se quejó Harry.

"Lo sé." Admitió Neji mientras jadeaba. "Pero tu cuerpo es tan frágil; tus uñas me están dejando marcan por todo el cuerpo, y no falta mucho..." Paró por un rato, el placer haciendo que no pudiera hablar. "Para que empieces a gritas mi nombre."

"Creído."

"Me amas tal y como soy."

"Lo amo incluso." Contestó Harry.


Estaban todos colocados para poder ver la Torre Hokage.

Harry había sido incluido y estaba al lado de Hyuga Hiashi junto al resto de los clanes. Los civiles estaban más atrás ya que filas tras filas de shinobi estaban allí, esperando a que nombraran al nuevo Hokage.

"He visto a muchos Hokage mientras he vivido." Le dijo Hiashi a Harry. "Naruto... Es el ninja más sorprendente que ha tenido el título y el que tiene el corazón más grande."

"Se lo merece." Suspiró el hombre de ojos verdes. "Es realmente un buen chico."

Hiashi asintió.

La Godaime salió y el gentío se acalló.

Luego la charla y finalmente...

"... Y os presento al Rokudaime Hokage, ¡Namikaze Uzumaki Naruto!"

La gente se volvió loca.

Harry aplaudió junto al resto de gente.

"No veo a Neji."

"Está patrullando." Admitió Hiashi y Harry supo que no debía preguntar nada más.

"Nos han invitado a la mansión Namikaze. Van a reconocer a Naruto como al hijo del Yondaime..."

Harry no acabó la frase.

"Debería haber pasado antes." Admitió al Cabeza del Clan Hyuga. "Pero mejor tarde que nunca. Así que, ¿he oído que va a haber una fiesta?"

"Toda la gente que creció con Naruto que son sus amigos." Respondió Harry. "Naturalmente el Kazekage y sus hermanos y un poco más de gente de fuera de Konoha."

"Dile que estamos todos muy orgullosos de él. Creo que lo sabe," Dijo Hiashi, mirando la brillante sonrisa en la cara del nuevo Hokage. "Pero le va a ir bien oírlo."

"Lo haré." Prometió Harry.


Seis meses después...


Harry llamó a la puerta del estudio de Hiashi aunque la puerta estaba abierta. El tío de Neji le invitó a pasar.

"¿Querías verme?" Le preguntó al hombre.

"Si." Admitió Hiashi.

"Eso son un montón de documentos." Dijo Harry mirando una pila de papeles.

"Hinata va a ser la Cabeza del Clan en diez días, tengo que acabar esto ahora." Murmuró Hiashi. "¿Quieres ayudarme?"

Harry ser rió. "No, te lo dejo todo a ti."

Hiashi rió. Apartó los papeles y le hizo un gesto a Harry para que se sentara.

"Quería hablar contigo sobre un asunto. Neji tiene un equipo si, pero en tres meses los mocosos van a entrar los exámenes chunin."

"Lo sé." Dijo Harry.

"Eso quiere decir que va estar en activo para ANBU."

Harry suspiró. Neji finalmente le había mostrado su tatuaje ANBU y mientras Harry odiaba el hecho que su amante estuviera en peligro, también entendía y sentía orgullo por el shinobi de cabello oscuro. Para que su novio fuera tan bueno era ambos increíble y peligroso. Harry no se lo reprochaba a Neji igual que Neji aceptaba que Harry fuera mago. Hiashi y sus hijas eran de las pocas que sabían sobre las habilidades de Harry junto con unos pocos miembros de confianza del clan. Eran más cercanos los unos a los otros, como una familia de verdad. De hecho, Harry estaba dispuesto a proponer una ceremonia de enlace con Neji, pero no lo hacía por los efectos secundarios. Neji era un shinobi. Harry odiaba el hecho que cada misión tuviera el riesgo de que Neji fuera asesinado.

"Lo entiendo." Contestó el hombre de ojos verdes.

Hiashi asintió. "¿Te acuerdas de hace unos días? Pasamos por al lado de un orfanato."

Harry pestañeó. "Me acuerdo. Esos enanos eran astutos." Admitió con una sonrisa cariñosa en la cara. A Harry realmente le encantaban los niños.

"Ese día dijiste algo."

Harry pestañeó de nuevo y su mente recordó la conversación que tubo con Hiashi.

"Dije que los niños eran adorable."

"Y también dijiste que te gustaría adoptar un niño algún día." Dijo Hiashi. "Y cuando te dije que pocos miembros del Clan tienen nuestro límite de sangre hoy en día dijiste que había maneras alrededor de eso."

Harry suspiró. "Sí, me acuerdo."

"¿Cómo?" Preguntó Hiashi.

El mago de cabello oscuro ladeó la cabeza. "¿Por qué lo quieres saber?"

"¿Me lo puedes decir?"

"Me gustaría que Neji y las chicas estuvieran aquí." Decidió Harry.

Hiashi asintió.


"Adopción." Repitió Neji.

Hanabi y Hinata estaban sentadas junto a ellos en el salón familiar justo como Hiashi les había pedido. Las dos hermanas miraban la conversación pasar con interés.

"¿Habéis hablado sobre esto?" La pregunto Hiashi a la pareja.

Harry y Neji intercambiaron una mirada.

"Lo hemos hecho." Dijo el sobrino de Hiashi.

"Pero todavía es demasiado pronto." Ofreció Harry. La pareja quería pasar más tiempo juntos, aprender el uno del otro, disfrutarse mucho más. Había habido charlas sobre ellos agrandando la familia. Neji había visto a Harry interactuando con niños antes que Hiashi pudiera. Sabía lo bueno que Harry era con los niños, lo gentil y juguetón que era y como les hacía sonreír. Neji sabía que Harry iba a ser un gran padre. Y en caso de Harry, había visto como Neji se volvía gentil cuando estaba con niños, como se le suavizaban los ojos. El hombre de ojos verdes sentía que su pareja iba a ser un buen padre. Ahora, el tema estaba en la mesa.

"Harry." Empezó Hiashi. "¿Podría hacer que los niños que adoptéis tengan las características familiares?" No estaba preguntando si era posible, sino que si el hombre de ojos verdes podía hacerlo.

El mago asintió lentamente. "Color de cabello, color de los ojos."

"¿Van a tener el Límite de Sangre?" Preguntó Hiashi de repente.

Era una pregunta crucial que hizo que Neji y sus primas miraran a Hiashi con los ojos como platos. Entonces Harry asintió rápidamente, confirmando las expectaciones de Hiashi. Todos los Hyuga se miraron a Harry con gran sorpresa. Hiashi, que había discutido el rol de Harry en el Departamento de Misterios un par de veces antes.

"Os dije que solía usar sellos y rituales en mi antiguo trabajo." Elaboró Harry. "Uno de los Rituales en los que trabajé necesitaba la adopción de sangre de un niño en una familia. La sangre de los padres dispuestos a adoptar. El niño debería ser menos a tres años. El dolor es mucho y normalmente los niños mayores no sobreviven bien el proceso. Tienen dolores crónicos o enloquecen del dolor."

"Este ritual." Preguntó Hinata. "¿Como funciona?"

"¿Y todavía saber cono hacer este … ritual?" Preguntó Neji.

Harry se miró a su novio.

"Ahora no." Le dijo Neji. "Pero en unos años... me gusta la idea de nosotros teniendo niños juntos. En todo caso, creo que vas a ser un maravilloso padre."

Harry sonrió.


Dos años después


Los Hyuga de la rama derivada estaban todos reunidos fuera de la casa del Cabeza del Clan. Dentro Hinata estaba mareada. Hanabi también estaba sonriendo y moviéndose excitada y Hiashi lucía orgulloso y emocionado. Harry y Neji estaban en medio de un círculo con varias runas grabadas con tiza en el suelo de madera. Los dos hombres estaban sosteniendo un bebé entre ellos. La chica, Mika, era una huérfana que Neji en una misión. Fue una decisión del momento. Había visto al bebé vestido en trapos, hambrienta y fría en un orfanato de la Nieve y había sido incapaz de resistir las ganas de cogerla y calmarla. Ella había abierto los ojos por unos segundos. Fue lo suficiente. Esos orbes verdes le recordaban a Harry demasiado como para que Neji pudiera dejar a la bebé sola. Él había vuelto a Konoha con ella y Harry había cuidado de la pequeña como un padre lo haría. Adoptarla era algo que los dos hombres acordaron al momento. El resto del Clan habían sido informados que iba a haber una nueva Hyuga para que la recibieran pero nada más. Hinata, la Cabeza de Clan del momento había estado eufórica sobre la nueva adquisición de la familia. Hanabi también estaba emocionada por la nueva bebé de la familia y buscaba a su sobrina siempre que podía. Hiashi había estado contento y también había empezado a visitar más a Harry para ver a su primera nieta. Harry dejaba que el hombre hiciera de canguro a menudo ya que sabía que Hiashi quería pasar tiempo con el bebé.

Las runas estaban dibujadas, la poción estaba lista. Harry y Neji sangraron en la poción y entonces Harry puso algo de la mezcla en los labios de la pequeña. El bebé lo lamió y las runas empezaron a pulsar y a brillar.

"Eres bienvenida en la familia Hyuga Mika." Dijeron el shinobi y el mago a la vez. Las palabras activaron la segunda fase de las runas y la magia se despertó. Mika empezó a llorar y la magia de sangre empezó a actuar. El bebé brilló con luz dorada unos momentos y los padres también y entonces el brillo desapareció. Harry estaba sonriendo ahora, sintiéndose más confiando ya que el ritual iba bien.

Hinata jadeó de preocupación pero Hiashi la cogió a ella y a Hanabi también.

"Todo va a estar bien." Les aseguró. "Mirad."

Efectivamente, tenía razón. Mika aún estaba llorando pero estaba lentamente bajando de volumen. El círculo de runas estaba brillando menos y menos hasta que dejó de hacerlo y desapareció como si nunca hubiera existido antes. Eso hizo jadear a Hanabi.

Harry empezó a tranquilizar a Mika y la meció en sus brazos.

"Voy a por el biberón." Comentó Neji.

"Deja que conozca a la familia primera." Le dijo Harry.

Neji hizo un gesto para que su tío y sus primas se acercaran.

"Decidle hola a Mika." Les dijo el shinobi, su voz suave.

Harry les pasó el bebé. Todavía tenía los ojos verdes, pero su antiguo pelo marrón había pasado a ser rojo.

"¿Rojo?" Preguntó Hinata.

"Luce como mi madre." Dijo Harry con la voz llena de cariño.

"Entonces ella es como tu, mágica." Comentó Hiashi.

Harry lucía un poco preocupado. "Yo... yo no pensé en eso. ¿Va a ser un problema?"

Hiashi negó con la cabeza. "Nunca."

Visiblemente aliviado, Harry besó la frente de su hija y luego se la dio a Neji quien estaba esperando para darle de comer.

"Voy a anunciarla a la familia." Dijo Hinata. "Deberíais quedaron aquí y disfrutar del momento."

"Gracias." Le dijeron ambos Harry y Neji a la amable kunoichi quien sonrió dándole una suave caricia en la pierna a Mika antes de deslizarse fuera de la casa.

"Pequeña bruja hambrienta." Observó el artista de ojos verdes.

"Toca felicitaros de nuevo." Les dijo Hiashi.

"Y esta pequeña no va a tardar a tener compañía." Comentó Hanabi.

Hiashi pestañeó. "¿Qué?"

"Hinata." Aclaró Hanabi.

"¿Está embarazada? ¿Mi pequeña bebé?"

Los demás se rieron.

"No aún." Le aseguró Harry al pobre hombre.

"Pero es cuestión de tiempo." Arregló Neji. Sabía cuanto se amaban su prima y Aburame Shino.

Hiashi se quedó tambaleándose.


Seis años después


"¡Mika!" Gritó Harry. "¡Para de meterte con Nami!"

Las dos niñas de pelo oscuro pararon en medio de su pelea. La chica mayor, Mika, tenía cinco años, tenía el pelo corto y pelirrojo y ojos verde claro y contra todo pronóstico podía usar magia pero también desarrollar el Byakugan, algo que había sido una sorpresa algo desagradable para Neji y Harry considerando que la primera vez que la niña lo activó había pillado a sus padres en una posición comprometedora.

La segunda niña se llamaba Nami. Neji y Harry estaban de vacaciones a la Ola cuando se la habían encontrado. Nami tenía seis mese, la hija de un shinobi del Sonido y una chica del pueblo que había muerto al dar a luz. Nadie quería al bebé y la pequeña había estado en un orfanato desde su nacimiento. Harry y Neji supieron en el momento que la había cogido que ella iba a formar parte de la familia. Ahora tenía tres años, con cabello negro rojizo y un par de ojos Hyuga.

"¡Perdón papi!" Gritaron las dos niñas. Se giraron y se miraron mal entre ellas.

Harry rodó los ojos. Antes que una nueva pelea pudiera empezar les señaló la merienda.

Anko bufó. Ambos estaban sentados en el porche. La casa de Neji había sido expandida un poco ahora que él y Harry añadían un tercer miembro a la familia.

"¿Donde está el mocoso?"

"Neji ha ido a recoger a Haru." Contestó Harry. Haru era el tercer niño que los dos hombres habían recibido en la familia. Era de la Tierra del Fuego, aunque no de Konoha y había sido una sorpresa para los dos hombres. Neji, en una de sus misiones había tenido que matar a un traficante de esclavos. Una de las chicas estaba embarazada. Ella sabía que el parto no iba a ser fácil ya que estaba enfermiza y débil de la falta de comida y el abuso. Dio a luz antes que Neji dejara el pueblo y Anko, que había sido la compañera de Neji para la misión lo fue a buscar a petición de la muchacha. Le pidió al Hyuga ayuda para su bebé.

"Podría adoptarlo." Le dijo Neji a la mujer. Ella se animó al oírlo y tuvo suficiente tiempo para darle el nombre del pequeño, un nombre que Harry encontró adecuado. El bebé, antes de la adopción tenía signos de cabello rubio y ojos azules, después, obtuvo el cabello oscuro Hyuga y los ojos verdes de Harry, y el Byakugan, pero no magia, justo igual que Nami. Llegó justo a tiempo a Konoha para conocer los gemelos de Hinata y Shino, Kagome y Hizashi. Los gemelos iban a ser los futuros jefes de sus clanes. Hizashi ya tenía todas las características del Clan Aburame y Kagome era Hyuga.

"Todos estos niños, corriendo y gateando por todo el complejo." Musitó Anko. "Le tienen dominado. A toda la familia, en serio. No sabía que los Hyuga eran tan endebles."

Harry se encogió de hombros. "¿Y qué tal tu? ¿Has decidido si tu y Kakashi queréis un bebé?"

Anko sonrió. "Hemos hablado de ello. Ambos pensamos que estamos demasiado locos como para ser buenos padres."

"Si bien, no es como si Neji y yo tengamos buenas infancias." Le dijo Harry. Viendo que Anko lucía mal decidió no presionar el tema. "Quiero que sepas que cuando necesites la poción estoy aquí."

"Gracias Harry."

"Ni lo menciones."


Cuatro meses después


Neji terminó gentilmente de vestir a su hijo por el día.

Todavía encontraba difícil de creer que tenía a Harry, tenía tres niños maravillosos, un sobrino y una sobrina y si Hanabi y Gaara conseguían lo que querían iban a haber más niños en camino. La familia entera estaba en Suna ya que el Kazekage se iba a casarse con Hyuga Hanabi. Nadie se había imaginado que eso iba a pasar, el que menos Hiashi pero cuando la kunoichi se lo anunció a la familia Harry había estado contento de él mismo. Neji había dejado el ANBU cuando Haru se unió a la familia, contento solo con ser parte del rango de jônin y estaba planeando tomar un segundo equipo genin.

"¿Chicos estáis preparados?" Preguntó Harry. Tenía cogidas las manos de sus hijas. Ambas chicas lucían bonitas en sus kimonos y parecían ansiosas para ver la ceremonia. Las dos adoraban a Hanabi y su hermana; sus dos tías las malcriaban .

"Estamos listos." Dijo Neji, cogiendo en brazos a Haru. "¿Vas a cogerlo?"

"Si, pásamelo." Contestó el mago de ojos verdes cuando aceptó el chico quien estaba alerta aunque aún era demasiado pequeño para hablar. "Solo para que lo sepas." Añadió Harry. "Hiashi quiere hacer de canguro para los niños."

Los ojos de Neji se iluminaron. "En serio?"

"Si, y Temari ha mencionado un oasis no lejos de Suna, un lugar muy recluido."

Neji sonrió de lado. "Interesante. Es bueno saberlo."

"Pensé que iba a gustarte." Harry sonrió y le dio un casto beso en los labios antes de tomar a Haru y salir de la habitción.


End of story


N/A:

Eso es todo, amigos. No va a haber una secuela.

Gracias a todos por leer y apoyar la historia.

N/T:

Bien, tal y como la autora ha dicho, esto es todo.

Espero que nos leamos en alguna otra historia.

Y muchas gracias a tods los que habéis comentado!