EPILOGO II
Ahora soy yo quien me encuentro en la situación que hace dos años estaba Ronald, soy yo quien se encuentra nerviosos por todo lo que este día representa, y ahora es él el que me tiene que tranquilizar, pues aunque no lo deje a relucir el me conoce y sabe que por dentro estoy temblando.
Ronald esta a mi lado, junto con Sirius y Remus. Alguien llama a la puerta y aparece Harry junto con Lily, la pequeña ya tiene poco mas de un año y en las facciones de la cara es igual que su madre, Hermione, aunque los ojos...esta claro que es una Potter, pues los ojos tienen la misma forma y color, verde esmeralda, que su padre.
-¡Mi nieta favorita ya ha llegado!- Sirius se abalanza hacia su ahijado para quitarle a la pequeña de los brazos.
Sirius se ha convertido en un abuelo consentidor, no para de hacer regalos a sus "nietos", tanto Jack como Lily son sus ojitos, todo se lo permite a ellos. Estoy seguro que cuando cumplan la mayoría de edad les regalara un coche impresionante a cada uno, aunque Hermione le diga que no lo haga el no hará caso ninguno.
La pequeña le encanta estar con su "abuelo", le gusta jugar y tirar de su pelo largo. La veo y observo que lleva un vestidito morado, y su negro pelo recogido en dos coletitas que la hacen ver realmente adorable.
Remus también se acerca a ella y la abraza, la quiere muchísimo, que al igual que Sirius, adora a Lily, Remus tiene un poco de debilidad por Jack.
Harry deja a Lily en el suelo, pues ya se puede mantener en sus dos piernecitas. Se acerca hacia Ronald y hacia mi, con una sonrisa en su cara. Extiende los bracitos para que la cojamos cosa que yo me adelanto hacer. Siempre he sido muy serio, pero esos dos niños me llegan al corazón, al igual que se que lo harán los futuros hijos de Ronald y Remus, ya que Luna esta con 6 meses de embarazo y Tonks de 7.
La pequeña se abraza a mi cuello, es muy cariñosa, pero solo con los que conoce, como le ocurre a su padre. Alguien vuelve a llamar a la puerta y aparece mi madrina de bodas, junto con el otro pequeño, Jack y Hermione están con nosotros.
Un recuerdo me pasa por la mente, cuando en la boda de Ronald tuve que ir a buscar a Hermione para que se fuera con el mientras yo me quedaba con Luna. Ahora es algo parecido, Hermione se tiene que quedar conmigo mientras Ronald se va hacia donde esta Pansy, mi prometida, y dentro de poco mi esposa.
Aun no se como sucedió todo. Yo solo veía como todos estaban felices con su matrimonio, pues aunque no lo haya comentado, Hermione y Harry se casaron seis meses después del nacimiento de los mellizos. Sirius no paraba de ir de una mujer a otra, pero últimamente se había centrado en solo una, y parecía que todo iba bien.
Yo era el único soltero y sin pareja de mis amigos, pues hasta las locas amigas de Luna habían congeniado bien con alguien, Lavender con Seamus y Pavarti con Dean. Me sentía fatal.
Pero todo llego en una visita ha Harry por causas de negocios, cuando vi a su nueva secretaria, una jovencita a veces tímida, a veces con muchísimo carácter, Pansy. Entre el matrimonio nos logro concertar una cita y bueno...este es el resultado. Ahora soy yo quien tiene que dirigirse hacia el altar con Hermione a mi lado como mi madrina.
No hay mucho más que contar, la verdad, yo escribí toda esta historia de amor de Hermione, Harry, Ronald y Luna. Yo fui un espectador, pero a la vez me encontré dentro de esa historia, que por suerte salió bien. Me quedo mirando los verdes ojos de mi ahijada, se que es raro, pero Herms quiso que yo fuera el padrino de Lily junto con Luna, al igual que Sirius y Tonks lo fueron de Jack.
-Draco, Draco.- oí que me llamaban.- ¡Draco!
-¿Qué pasa?- pregunte aun un poco perdido en mis pensamientos.
-Estabas en las nubes. Lily te va a acabar manchando el impecable traje.- me dijo la madre de la niña.
-No me importa.
Alguien me tiraba del pantalón, baje la cabeza y vi los ojitos mieles llorosos de Jack, los dos hermanos se llevaban bien, pero era necesario que no hubiese favoritismos hacia uno, pues el otro se ponía llorar.
-Ven Jacky,- le dije.- también te puedo coger a ti.- y así lo hice, ahora tenia a los dos pequeños en brazos.
-Vamos, Draco, -me volvió a decir Hermione.- lo mejor será que vayamos saliendo.
Deje a los enanos, como me gustaba llamarlos, con Harry quien salió con ellos.
-Hermione, esto es muy raro.
-¿El que?
-Esto, nunca pensé que precisamente yo me fuera a casar.
-Mira, yo pensaba lo mismo hace años, y ya ves como ha sido mi vida en estos dos últimos años. Las cosas no son como pensamos, todo puede cambiar en un minuto.
-O un segundo.
-Exacto. Ahora, vamos hacia el altar, hoy es tu día, tienes que ser feliz también.- y me sonrió.
Así salimos de la habitación dirigiéndonos hacia el altar para esperar a mi futura esposa. Mire a todos mis amigos, a los mellizos, y a los vientres abultados de los que nacerían dentro de poco. Realmente estaba feliz.
Conté la historia de una boda, no podía terminarla si no contaba la mía también ¿no?. Todos podemos encontrar el amor cuando menos nos lo esperemos, en un buffet de abogados, en el instituto, en tu mejor amigo, o en una secretaria alocada y divertida, totalmente opuesta a ti, pero que sabes que te complementa en todo.
Esta es la historia de mis amigos, y la mía...
Draco Malfoy.
Hola Gente!
No me maten, queria actualizar antes, pero es que de este finde estoy hecha polvo, recorrer tofo Paris en dos dias y con unas botas con algo de tacon es matador, tengo agujetas!
Aqui os dejo el ultimo capitulo, espero que os haya gustado la historia.
Un besazo para todos, y muchas gracias por los animos que me habeis dado a lo largo de los capitulos.
Muchas gracias!
Hasta la proxima historia!