Jojo! y aquí vengo con un extra de "Los rumores de Hinato".
Descubrir como y en que situación supo Naruto que iba a ser...papá?
-Naruto…-
-NO!-este respiró profundo, intentando controlar el tono de su voz- no me digas nada- y se metió en una de las tiendas, dejando a Hinata sola.
Esta suspiró, triste, mirando la pequeña fogata que habían hecho y en las que unos cuantos ninjas comieron.
No pensé que Naruto se fuera a enfadar tanto. Pensó, rompiendo una ramita en trozos. Yo solo quiero ayudar... Además, también soy ninja. No sé porque se enfada tanto.
Apartó su cabello hacia un lado, que ya le había crecido hasta casi sus rodillas y empezó a hacerse una trenza.
-Hinata-ella alzó la cabeza y le sonrió a Lee, que se sentó a su lado- como se lo ha tomado?-preguntó mirando hacia la tienda
Hinata negó y suspiró, dejando de hacerse la trenza.
-Ya veo. Así que está enfadado.-
-Más que eso, está furioso.-respondió ella frunciendo el ceño-Y no sé porque se enfada tanto. Esta es una misión cualquiera. Solo tenemos que rescatar a una princesa-
-Y luchar contra los guardias, y contra los espías que nos van siguiendo y que saben que vamos hacía ellos, contra consejeros, capitanes…-
-No hace falta que sigas...-interrumpió ella, abrazándose las piernas- Naruto no ha hecho más que recordármelo des de que llegué-
Lee sonrió.
-Compréndele. Eres su prometida y se preocupa por ti-
-Lo sé.-hizo un puchero, empezando a sentirse culpable- pero también soy una ninja. Puedo hacer cualquier tipo de misión. Estoy capacitada y entrenada para lo que sea-
-No para Naruto.-ella alzó la mirada, mirando a su amigo- Hinata, para Naruto solo eres Hinata. La chica de la que se enamoró y a la que está comprometido. La chica que ama- ella se sonrojó y volvió a mirar al fuego- no te enfades con él, sabes que no es justo-
Hinata sabía que no era justo pero, no podía evitarlo. No entendía tanta preocupación por su parte. Ella era una ninja, una que sabía muy bien lo que hacía. Ella solo les había seguido por…bueno, sí, les había seguido por curiosidad. Quería saber qué tipo de misiones era las que realizaba Naruto. Y únicamente quería ver, jamás pensó que iba a ser descubierta hace dos noches - por Sasuke-sensei- aunque este ya supiera de su existencia des de que salieron de la aldea.
Por el camino se había topado con espías y otro malos que, como siempre, al verla, fueron a por sus ojos. Más cuando estaba preparada para golpear, Naruto se le puso delante y él solo, con sus compañeros acabaron con todos en un abrir y cerrar de ojos. Y ella que? ella también tenía derecho a pelear no?
Pues no, Naruto, tan ofuscado y enfadado que estaba, no le dejó pelearse con nadie, siempre le ordenaba que se escondiera y Hinata por supuesto, tenía que hacerlo si no quería que su prometido se enfadara más de lo que estaba.
Suspiró recordado eso, frustrada. Naruto llevaba sin dirigirle la palabra, excepto cuando le gritaba que se apartara, des de que la descubrieron. Y eso la molestaba, porque simplemente no podía entender porque se enfadaba tanto. Ella también era ninja, demonios!
Además, porque no la miraba tampoco? Tan enfadado estaba que ni siquiera la miraba.
-Me odia-masculló Hinata escondiendo su rostro en sus piernas mientras Lee sonreía.
-Todo lo contrario Hinata, te quiere demasiado.-y tras darle dos palmaditas en la espalda, se alzó del suelo y caminó hacia una de las tiendas.
Ella volvió a quedarse sola en la noche, con el fuego crepitando. Alzó la cabeza y miró el fuego.
Si me quisiera tanto como dicen me dejaría pelear. Pensó frustrada. Estiró sus piernas y apoyó sus manos en el suelo, mirando el cielo estrellado, que brillaba ante todo el conjunto de estrellas.
Hermoso.
Pero no era nada comparado con lo que tenía, con aquello que crecía dentro de su vientre. Puso la mano sobre este, no se notaba mucho ya que solo estaba de un mes, pero podía sentir como este crecía en su interior.
-Creo que tú y yo deberemos portarnos bien si no queremos hacer enfadar mucho a papá- murmuró sonriendo
Y tras eso, se alzó del suelo, se sacudió los pantalones y caminó hacia el gran lago que había encontrado momentos atrás antes de acampar.
-Vamos a bañarnos?-le preguntó a su bebé mientras caminaban hacia el lago.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Al rato, Naruto salió de la tienda y buscó a Hinata con la mirada; al no verla sentada cerca de la hoguera. Caminó entre las tiendas de sus compañeros, esperando escuchar su voz por algún lado, pero nada oyó así que salió un poco por la periferia, mirando sobre árboles y alejándose algo de las tiendas.
No, ella no podía haberse ido tan lejos. Le dijo que se quedara en el campamento. Sopló, cruzado de brazos y con el ceño fruncido, caminando de nuevo hacia el campamento.
-Dónde demonios ha ido- masculló empezando a ponerse nervioso.
Odiaba que se marchara sin decirle nada. Estaban en medio de una misión, como podía salir sin decirle nada?
-Está en el lago- dijo Neji apareciendo sin camisa y el cabello húmedo.
-Y me lo dices sin más?-exclamó incrédulo –porque no te has quedado con ella!-
Neji alzó una ceja.
-Solo va a bañarse.-
-Y acaso mientras se baña no podrían atacarla?-y sin más se dirigió al lago, molesto.
-La proteges demasiado- dijo el castaño, entrando en su tienda. Naruto se detuvo y se volteó, mirando la tienda por donde había entrado Neji.
-No lo hago-
-Sí lo haces-respondió Sasuke saliendo de su tienda mientras Naruto le miraba de mala manera. Neji también salió de su tienda – Día y noche.-
Naruto entrecerró su mirada.
-Bueno, y qué si lo hago. Hinata es mi prometida y me preocupa lo que le pase.-respondió él
-Te dije que ella ya sabe defenderse sola- dijo Neji, sentándose cerca del fuego. Sasuke se sentó, apoyando su espalda en un tronco.
-Sé que sabe defenderse…-y miró a un lado- solo…estoy preocupado por ella.-sus mejillas se sonrojaron un poco-últimamente, parece que no se ha encontrado muy bien. Tiene mareos, vomita por las mañanas, se cansa muy rápido…luce más pálida y sin fuerzas-
-Yo ni siquiera lo he notado- dijo saliendo de la tienda Lee, seguido de Shikamaru.
-Y como os vais a dar cuenta, si solamente pensáis y veis para vosotros-masculló Naruto.
Lee sonrió, mientras que Sasuke cerraba los ojos, relajándose, Shikamaru se sentaba cerca del fuego y Neji suspiraba.
-Le pasa algo, lo sé.-murmuró frotándose la barbilla, que rascaba algo por la barba que empezaba a salirle- y tengo que averiguarlo-
-No la atosigues Naruto.-dijo Shikamaru, conociendo a su amigo- si algo le pasa debe ser ella quien nos lo cuente-
Naruto miró a sus "amigos", porque en ese momento no sabía si lo eran.
-Vais a dejar en paz de una vez o seguiréis dándome consejos estúpidos.- y tras eso volteó de nuevo, reanudando su camino hacia el lago.
-Lo siento mucho por tu prima Neji- sonrió Lee- pero al lado de Naruto, no lo tendrá nada fácil-
-Ese idiota….-murmuró Neji
-No crees que la princesita acabara cansándose de él y sus estúpidos celos-preguntó Sasuke
-El día que eso pase, prometo que celebraré una fiesta en mi casa- dijo Neji, mientras sus amigos sonreían.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Hinata sacó la cabeza del agua, sonriendo. Abrió sus ojos y acarició el agua; haciéndola mover entre sus dedos y su cuerpo como si de una danza se tratara.
A lo lejos, apoyado contra un árbol, Naruto observaba a su prometida, viendo cómo se mezclaba con el agua y sonreía cuando esta la rozaba. Sonrió. Hinata era como una niña, una niña en el cuerpo de una mujer.
Hinata sintió que alguien la observaba y miró hacia la costa, donde se sonrojó al ver a Naruto, apoyado contra un árbol y sonriendo. Miró al agua de nuevo, avergonzada.
Des de cuando llevaba ahí, observándola?
-Hinata - Hinata le miró cuando le llamó y él le indicó con la cabeza que saliera.
Que! salir! Desnuda! Delante de él? Bueno, no es que no la hubiera vista ya desnuda pero…una cosa era cuando estaban juntos y otro muy diferente que ella saliera del agua sin nada. Era muy vergonzoso.
Pero tenía que salir de ahí, sus dedos empezaban a arrugarse y el frio veraniego de la noche se hacía presente. Así que, respirando profundo, nadó hasta la orilla y cuando sus pies tocaron suelo, se puso en pie y caminó hacia su ropa.
Naruto supo que esa imagen jamás la olvidaría. Su prometida, saliendo del agua, con su cabello cubriendo sus pechos y llegaba hasta las rodillas, sus mejillas sonrojadas, su cuerpo húmedo y brillante por las gotas de agua que se perdían por los caminos de su piel y que Naruto conocía a la perfección. Sonrió de nuevo.
Hinata era una autentica diosa.
Hinata llegó a su ropa y rápidamente se empezó a vestir, temblando ante la mirada penetrante de Naruto, que la hacía sentirse débil. Cuando por fin se puso sus bragas y pantalones, respiró aliviada, pero sobresaltándola, unos brazos le rodearon por su cintura.
-N-Naruto…-
-Eres preciosa- murmuró, apartando su cabello para besar su hombro. Hinata cerró los ojos, entregándose a ese placer que sus besos le proporcionaban. Este la volteó y subió sus manos a su rostro, acercando el suyo al de esta.-y eres solo mía- juntó sus labios, moviéndolos lentamente sobre los de ella. Sus manos bajaron des de su rostro, acariciando sus brazos y enredándolas en su cintura, pegando los pechos de Hinata a su cuerpo.
Hinata le rodeó el cuello con sus brazos, enterrando sus manos en su cabello y correspondiendo a ese beso con la misma intensidad. Pronto los dos profundizaron el beso, enredando sus lenguas y notando como el calor empezaba a calentar sus cuerpos.
-Naruto…-dijo ella separándose de sus labios- hay algo que…-pero este volvió a besarla; sintiendo sus manos subir por su espalda y acariciarla.-Naruto…-puso las manos sobre su pecho, alejándose, lo poco que él le dejo. Él rodó los ojos, pero no la soltó.
-Lo siento, no quería gritarte, ni mucho menos enfadarme contigo. Sabes que odio que estemos peleados. Pero debes comprender que lo que has hecho no está bien…-ella frunció el ceño ante eso- sí, no me mires así, porque es cierto. Te has portado mal y por ello, cuando regresemos a la aldea…-acercó su rostro a su oído y sus manos se deslizaron hasta su trasero, donde lo agarró, provocando que pegara su cuerpo y ella pudiera notar su excitación-… te voy a castigar por eso.-
Hinata enrojeció al completo y al momento empujó a Naruto, que se tambaleó sonriendo con malicia mientras ella se abrazaba.
-Vístete antes de que te resfríes. No querrás ser una molestia para el equipo no?-le guiñó el ojo y se volteó, silbando una canción mientras se dirigía al campamento.
Hinata le siguió con la mirada, avergonzada.
Como podía Naruto decirle tales palabras en medio de una misión? Agarró su top y su malla y se lo puso rápidamente, queriendo volver al campamento cuanto antes y dormir. Pero antes de que pudiera dar un paso, tuvo que saltar para esquivar una Kunai que vino directa a ella.
Cuando se volteó, tenía a un hombre alto, muy fuerte y –para que mentirnos, alguien que parecía un enemigo- de cabello corto y negro y de ojos muy verdes.
-Tú eres una Hyuuga-dijo este con una voz muy profunda mirándola de pies a cabeza- No estas nada mal para ser uno de ellos-y sonrió con cinismo al que Hinata se enfadó y se lanzó contra él. Aunque estaba sin armas, pero intentaba acercarse y golpearle en los puntos vitales.
El hombre tuvo que apartarse cuando des de su lado intentaron golpearle. En un momento, Hinata se vio cubierta por Naruto, Neji, SHikamaru, Lee y Sasuke.
-Aléjate Hinata, nosotros nos haremos cargo de él- dijo Naruto sonriendo de lado mientras se crujía los dedos.
-De hecho, con que vaya solo uno es suficiente- dijo Sasuke de brazos cruzados mirando al hombre que sonreía- y de que demonios te ríes?-
-Creéis que vengo solo?- dijo irónico con aquella sonrisa que Hinata había empezado a odiar por segundos. Y como si nada, aparecieron 20 hombres más, rodeándoles.
-Esto es mucho mejor- dijo Shikamaru mirando a los hombres con otra de sus características sonrisas.
-Empecemos- dijo Neji a la par que ellos salían disparados hacia los enemigos.
Hinata se quedó en medio sin saber qué hacer, hasta que uno de ellos decidió ir a atacarla. Ella lo esquivó, le atacó y por fin consiguió abatirlo. De hecho, eso le llevó tan solo diez minutos, pero se sintió como si hubiera entrenado una hora entera.
Puso una mano sobre su vientre, respirando agitada.
-Tranquilo bebé, prometo que no dejare que nada te pase- y tras decir eso, tuvo que saltar de nuevo para evitar que aquel hombre la golpeara.
El hombre se acercó, con una kunai dando vueltas en su dedo y todavía sonriendo.
-Dos Hyuugas y el jinchūriki del Kyuubi en un mismo lugar. Que más podríamos pedir-
Hinata le miró de mala manera mientras él sonreía más.
-Tú eres la que hizo que las chicas fueran ninjas. Sabes, te agradezco eso, ahora las chicas usan ropa mucho más corta y estrecha. Aunque no a todas les queda bien…-y la miró de nuevo de aquella forma que a Hinata le repugnó- todo lo contrario que a ti, preciosa.-y la miró a los ojos- te veías hermosa en el agua-
Sus mejillas se sonrojaron furiosamente y se lanzó contra el hombre, molesta.
Que se creía ese hombre! Había estado espiándola!
-Naruto-dijo Sasuke cargándose a uno. Naruto le miró, mientras agarraba a un tipo por el cuello. Sasuke le indicó con la cabeza hacia un lado y él miró, abriendo sus ojos al ver a Hinata pelear contra aquel tipo.
Naruto lanzo de mala gana al hombre hacia el agua y se acercó a ellos, preparado para golpear a ese hijo de su…que estaba peleando con su mujer. Pero enseguida se le volvieron a poner en medio y él tuvo que librarse de ellos, antes de llegar a Hinata.
Hinata intentaba golpearle, pero él rápidamente los esquivaba, y aunque se llevó varios de sus golpes, el hombre siguió peleando contra ella. En un momento de despiste, ella recibió un golpe en su pecho que la mandó a caer cerca del lago, mojándose por completo.
Se incorporó, intentado recuperar el aire, mirando con desprecio el hombre que se acercaba a ella con una gran sonrisa. Se puso en pie, posicionándose para atacarle de nuevo, pero este se le adelantó y la agarró del cuello. Ella se debatió, sintiendo la voz de Naruto pronunciar su nombre.
Este la acercó a su rostro, todavía sonriendo.
-Es una lástima que debamos matar algo tan hermoso como tú- murmuró mientras que con la otra mano acariciaba su mejilla- pero...las ordenes son ordenes, verdad? Bien que debes saberlo- y su mano se deslizó des de su mejilla, pasando un dedo por su cuello, por sobre su pecho y llegando hasta su vientre, donde abrió su mano.
-NO!-exclamó Hinata asustada agarrando la mano que estaba sobre su vientre- no por favor! Por favor! N-no lo haga…-Hinata podía notar como algo se formaba en la mano de este y sus ojos se llenaron de lágrimas- no le haga nada…por favor…-sollozó- por favor…-
Y antes de que este pudiera contestar, agarró a Hinata contra su cuerpo y saltó con ella hacia otro lado. El hombre miró a la persona que ahora estaba frente a él, con los ojos rojos y esa aura demoníaca rodeando su cuerpo. Sonrió de lado, maravillado.
-Naruto…-murmuró preocupada Hinata
-Kyuubi-san…-murmuró viendo la forma del Kyuubi casi en aquel hombre rubio- hazlo salir, Namikaze, vamos…enfádate más-
Y puso una kunai sobre el cuello de esta, clavándole la punta. Naruto apretó fuerte sus puños, su respiración se volvía fuerte y agitada y cada vez podían ver más al kyuubi. Una cola salió de él.
-Naruto!-exclamó Lee echando una mirada rápida al ver a su amiga envuelto en esa aura roja.
-Joder!-exclamó Sasuke matando a uno- el dobe está perdiendo el control!- les gritó a Shikamaru y Neji.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
-Suéltala- dijo con una voz muy profunda Naruto acercándose a ellos.
-Naruto no…-sollozó Hinata. Se movió, intentando salir de agarre de ese hombre- suéltame idiota- masculló mirándole con rabia- suéltame-
Pero el hombre solo sonreía mientras miraba a Naruto.
-Es perfecto- dijo maravillado mirando a Naruto-un poder increíble- y bajó su kunai de su cuello a su vientre.
-Q-que…no..-y tuvo que detenerse- no por favor…-el hombre la miró, alzando una ceja
-Que ha pasado con esa valentía de hace unos momentos, princesa? acaso..-y miró su vientre; Hinata se asustó mientras él volvía a mirarla- así que…-y miró al Kyuubi, sonriendo-menuda sorpresa.
-No!-exclamó ella justo cuando Naruto se lanzaba contra ellos. Hinata consiguió soltarse y alejarse un poco de esa pelea.-Naruto!-
-Hinata.-Neji la agarró por detrás de los brazos, impidiendo que fuera- espera aquí-
Y tanto él como sus amigos fueron a ayudar a Naruto, o al menos intentar controlarlo.
Hinata cerró sus ojos y se limpió sus lágrimas. Puso la mano en su vientre, intentando respirar profundo.
Ahora todo pasará…
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Hinata se encontraba sentada cerca de la hoguera, delante de la tienda de Naruto, esperando a que este despertara. Llevaba durmiendo casi todo la noche de ayer y parte del día de hoy.
Incluso se estaba haciendo de noche de nuevo. Suspiró, sintiéndose una inútil.
Quizá Tsunade tenía razón, y no le convenía hacer misiones hasta que tuviera a su bebé.
-Deja de soplar- dijo Sasuke sentado a un lado de ella, comiendo lo que ella les había preparado-es molesto-
Hinata encogió sus piernas y escondió su cara.
-Es que no puedo evitar que todo lo que ha pasado… es culpa mía-
-Y lo es- soltó este sin mirarla. Hinata se sintió peor- haces que el dobe se descontrole demasiadas veces-
-Lo siento.- dijo con voz rota.
-Sasuke no le hagas sentir peor- dijo Lee, llegando de un baño en aquel gran lago-Hinata no te preocupes, tú no tienes la culpa-
Y Hinata volvió a suspirar, haciendo un puchero. Quizá, había sido la hora de contarles la verdad. Bajó sus piernas y miró a sus amigos comer tranquilamente alrededor del fuego, con aquellas vendas cubriendo sus brazos, cuerpo o cabezas. Como si nada hubiera pasado.
Como podían estar tan tranquilos después de aquella masacre?
-Nos vas a decir que te pasa o no?-preguntó Neji, que había estado mirando a su prima. Ella bajó la cabeza, sonrojada. Su primo era demasiado perceptivo.
-Anno...yo…-sus mejillas enrojecieron más al ver que todos le miraban y empezó a jugar con sus dedos -s-siento haberme colado en vuestra misión, no quería ser ninguna molestia.-
-Pues acabaste siéndole-
-Sasuke!-exclamó Lee mientras Neji miraba al pelinegro de mala manera.
-Y-yo solo…quería… yo quería…no podía esperar a deciros que…-cerró sus ojos y cogió aire, intentando calmarse.
Alzó la cabeza y miró a sus amigos.
-Estoy esperando un hijo- ella rápidamente bajó la cabeza, sonrojada.
Hubo un profundo e incomodísimo silencio de muchos minutos en los que Hinata se sentía morir de vergüenza.
Porque no decían nada?
-Que tú que?-preguntó una voz tras ella, provocando que al momento se volteara. Sus ojos se abrieron como platos y rápidamente se alzó del suelo.
-N-Naruto…-y sonriendo, le abrazó; feliz de verle despierto-que bien que despertast…-pero este la agarró de los brazos y la separó, sin soltarla.
-Que tú qué?- ella movió los labios, sin saber que decir- Hinata, acabas de decir que…que…estas…-y ella, bajando la cabeza, asintió. Naruto la soltó lentamente, mientras ella jugaba con sus dedos.
-E-estoy embarazada-Naruto se alejó unos pasos-quería decírtelo, pero como siempre ibas de misiones y nos veíamos tan pocas veces…además, todas las veces que estábamos juntos tú solo…y yo…te seguí, bueno…os seguí p-por eso...-
-Un momento!-exclamó Neji acercándose a ella- estas embarazada! De este!-exclamó señalando con el pulgar a Naruto, que frunció el ceño ante eso.
-De quien más va a ser sino- masculló este-yo soy el único con el que ha estado.-y miró a Hinata- verdad?-
-Pues claro!-exclamó ella ofendida y molesta por la duda, cruzándose de brazos y volteándose- de quien más crees que iba a ser…-
-De Suzaku, tal vez-respondió Sasuke, siguiendo con su cena.
-De Kiba-dijo Lee
-o de Shino-dijo Shikamaru
-O de ese chico nuevo que no deja de perseguirte-dijo Neji
-Que chico nuevo?-preguntó Naruto con el ceño fruncido- quien no deja de perseguirte?-
-No!-exclamó ella, sintiendo la mirada de todos- n-no es cierto yo…-y pegó una patada al suelo, moleta- os odio!- y se encaminó hacia el bosque, pero antes de que pudiera ni dar el paso, Naruto la sujetó del brazo y la abrazó.
-No hagas caso de estos idiotas, Hinata-ella se abrazó a él, enterrando su cara en su pecho, sonrojada- yo soy el único con el que puedes estar-murmuro sonriendo, estrechando más fuerte a Hinata mientras sus amigos rodaban los ojos, cansados de esa escena amorosa. Sonrió aún más cuando ella asintió y besó su cabeza- voy a ser padre – y miró a sus amigos con malicia- lo habéis oído no? voy a ser padre, PA-DRE- remarcó sonriendo con superioridad.
Los demás le miraron "algo" molestos mientras él sonreía y alzaba al aire a su prometida, feliz.
Iba a ser padre, y no solo del primero, no. Sino también de todos los que llegaran a partir de ahora. Porque iban a llegar un par más, eso lo tenía ya decidido.
Por supuesto, eso, se lo iba a echar en cara a cada momento y a cada uno de sus amigos. Porque, no todo el mundo podía tener la misma suerte que él. Y eso de molestar a sus viejos amigos echándoles en cara que él, antes que nadie iba a ser padre, era algo que no podía perderse.
Porque iba a ser padre, iba a tener un hijo - otro par más por supuesto- porque tenía una mujer que amaba más que a nada y unos amigos únicos.
Que más podía pedir?
FIN!
jeje, que os ha parecido este pequeño one-shot de nuestros amados protas?
Si, lo sé, la insipiración me viene con una serie, luego con esta, pero no es preocupeis, que el otro fic estara lo subido dentro de poco.
Es que han venido examenes y ahora...tngo derecho! no puedo quedarme a escribir!
Pero como hoy es viernes, intentare continuarlo. "me refiero a Enamorada de mi profesor"
Nos vemos!
JAN DI-CHAN