Antes de iniciar el capitulo, quisiera agradecer a todos los que se tomaron la molestia de leer este fic, especialmente a aquellos que dejaron sus reviews.
Antes de que lean este capítulo hice algunas modificaciones al capítulo 4 (de nuevo). Me di cuenta que avance muy rápido en la historia, por lo que el capitulo 4 fue modificado un poco para hacer como si hubiesen pasado varios días en el entrenamiento de paz interior de Tigresa.
Este es el ultimo capitulo y también el ultimo fic de Kung Fu Panda que escribiré por ahora. Algún día volveré, pero por ahora quiero dedicarme a otros proyectos que tengo pendientes.
Además de que quiero actualizar mi primer fic de kung fu panda "Las 5 reliquias" eso incluye mejorar los diálogos, añadir algunas cosas y corregir todas las faltas de ortografía.
Bueno sin más que decir doy inicio al capítulo final de "Buscando mi Paz Interior"… disfrútenlo…
Capitulo 7: Paz Interior (2° parte)
La maestra del estilo del Tigre giro las orejas hacia atrás escuchándolos, dio media vuelta mirándolos con furia quería matarlos con sus propias manos pero mientras tuvieran ese cañón no podría ni acercárseles. Bajo lentamente a Po y lo recargo contra una pared cercana, lo miro una vez más acariciando su mejilla…
"Gracias…"-pensó-"Por ser como eres… te debo todo… mi vida, la reconciliación con mi padre, fuiste el primero que me hizo reír, me enseñaste que él no sentir nada no te fortalece solo te hace más débil… gracias me ayudaste a encontrar mi paz interior"-le dio un pequeño abrazo- "Ahora yo me encargo"-separándose de él, encaro una vez más a los gorilas…
Sus adversarios rieron confiados de su victoria sobre los furiosos y el guerrero dragón. Cargaron el arma solo les quedaba un tiro y era lo único que necesitaban para terminar con ella y el panda.
Tigresa cerró los ojos, respiro profundo dibujo con su pierna derecha el semi circulo en el piso, mientras movía sus brazos…
"Mírala"-dijo uno de ellos en tono de burla-"cree que podrá hacer lo que hizo el panda"
"Lo dudo"-respondió el otro apuntando el cañón hacia ella-"estará muerta antes de que se dé cuenta"- encendió al mecha
Tigresa cerró los ojos nuevamente, pensando en sus amigos, en Po, en lo que les ocurriría si fallaba. No, no podía pensar en eso, dejo su mente en blanco solo concentrándose en una cosa.
El cañón disparo con un fuerte boom, la bala se dirigía hacia ella con una velocidad sorprendente, ella esperaba, escuchando el sonido de la bala moviéndose por el aire dirigiéndose hacia ella.
"Es tu fin"-grito un gorila
"Paz interior"-Escucho la voz de Po en su mente
Abrió los ojos, justo en el momento en que la bala se encontraba frente a ella. Los gorilas sonrieron por su victoria pero lo que estaba a punto de pasar les borraría esa sonrisa de sus rostros…
Tigresa extendió sus brazos tomando la bala entre sus manos, la fuerza del disparo la obligo a retroceder unos centímetros, le tomo menos de un segundo tomar el control sobre el disparo. Levanto la vista hacia los gorilas, mirándolos seriamente pero con una sonrisa…
"Imposible"-se miraron mutuamente incrédulos
"¡Aaaaaaghhhhhh!"-grito girando sobre su pierna, arrojando la bola de fuego de regreso hacia ellos
"Esto va doler" -abrazándose uno al otro-"¡AAAAAAAHHHHHHHHH!"
La explosión fue más grande de lo normal, debido al barril de pólvora que tenían consigo, ambos salieron disparados varios metros en el aire lejos del Valle…
Tigresa cayo hincada al piso, respirando agitadamente pero en un segundo se había recuperado, miro sus manos tenía quemaduras en sus palmas, le ardían un poco, pero no tenía tiempo de preocuparse de ella misma, se apresuro a ir con Po…
"Lo… hiciste"- abrió los ojos por un momento
Tigresa se sorprendió un poco al escucharlo, pero se sintió aliviada de que siguiera con vida
"¿Me viste?"
"Al… alcanzaste… la paz… interior…"-su respiración era irregular y forzada se notaba que no estaba del todo bien-"Y… a tan… corta… edad"
Tigresa sonrió por la ironía, esas eran las mismas palabras que dijo el Maestro Shifu
"Tuve un buen maestro"-abrazándolo firme pero suavemente-"Ya no hables, te llevare con un medico… ¿Po?"-no hubo respuesta, se había desmayado una vez más…
En el palacio de Jade…
Po yacía tumbado en su cama. Unos vendajes cubrían todo su brazo derecho. Ya habían pasado varias horas desde que Tigresa lo trajo al palacio lo más rápido que pudo. Aunque su estado estaba fuera de peligro Tigresa y los demás furiosos se veían bastante preocupados.
El señor Ping se preocupo al ver el estado de su hijo, por lo que pidiendo permiso del maestro Shifu se quedo en el palacio hasta saber si su Po estaría bien.
Los demás no habían sufrido heridas graves, el único que había sufrido un poco mas fue Grulla pero aun así su estado no era tan delicado como el del panda, solo debía pasar más días sin volar, lo cual frustro más al ave…
La noche llego antes de que se dieran cuenta, cada furioso se retiro a su habitación, todos excepto Tigresa quien insistió en quedarse con él hasta que despertara…
"Por favor despierta"-Le tomo la mano frotándola suavemente contra su rostro, por un momento sintió como si los dedos del panda se hubiesen movido pero quizás solo fue su imaginación. Le habían dicho que quizás no despertaría esta noche pero ella quería ser la primera que el viera al despertar. Soltó la mano de Po, se puso en pie dando media vuelta, estaba a punto de salir de la habitación cuando…
"No te vayas"-dijo una voz detrás de ella haciendo que se detuviera
Se sorprendió de escuchar su voz pero no se dio la vuelta, pensando que una vez más fuera su imaginación. Espero…
"¿Tigresa?"-la voz de Po se escuchaba débil casi como un suspiro
Ahora estaba segura de que era él, sin pensarlo dos veces regreso a su lado, tomando su mano una vez más…
"Aquí estoy Po"-dijo ella acariciándole la frente-"Todo está bien ahora"
"Necesito preguntarte algo"
"¿Qué cosa?"
"Lo que dijiste… eso de… decirle a alguien que lo amas… ¿lo dijiste en serio?"
Tigresa se quedo callada, no pensó que Po le fuera a preguntar algo tan complicado en el momento en el que despertara pero con esta ya eran varias veces que estuvo a punto de morir, no podía pasar más tiempo sin confesarle lo que sentía, ya que la siguiente podría ser la última…
"Si Po"-contesto sinceramente y volvió a guardar silencio
"Pero… ¿por qué?"
"¿Por qué, que?-pregunto confundida
"¿Por qué yo?... no entiendo que vería una chica como tú en alguien como yo"-dijo mirando su barriga
Tigresa respiro profundo-"Po, es difícil explicarte lo mucho que significas para mí. Lo que me haces sentir cuando estoy junto a ti, va más allá de las palabras. Siempre sabes que decir para hacerme sentir mejor, de mis amigos eres quien mejor me comprende. Eres la persona más dulce y amable que he conocido. La verdad me…"-sintió como sus mejillas se sonrojaban por lo que estaba a punto de decir-"… me pareces lindo"
"Wow"-dijo el panda con sorpresa-"No sabía que me veías de esa forma"
"No es tu culpa… solo me gustaría que…"-guardo silencio
"¿Te gustaría que sintiera lo mismo?"
"Si"-dijo intentando aguantar algunas lagrimas en sus ojos-"pero está bien, no tienes que hacer nada"
"Tigresa… que acaso no es obvio"
"¿Qué cosa?"
"Que estoy enamorado de ti"-Po espero que ella sonriera o dijera algo, pero en lugar de eso las lagrimas en sus ojos se dejaron venir confundiendo al panda
"Es muy dulce de tu parte Po… pero no tienes por qué hacerlo"- Po estuvo por decir algo pero ella continuo-"Solo lo dices para hacerme feliz. Es imposible que alguien tan dulce como tu se enamore de alguien como yo… aun así te lo agradezco"
"Tigresa es en serio"-dijo aumentando su tono de voz-"¿Acaso no es obvio?... de los cinco eres mi favorita, lo que paso en Gongmen, todo lo que hago es para impresionarte, cuando me lo dijiste en la cueva me quede callado porque siempre pensé que sería yo quien te lo diría primero"-Con trabajo logro levantarse y sin aviso abrazo a Tigresa ignorando el dolor que sentía en su brazo-"Te amo Tigresa"
"Po"- susurro dejándose llevar por el abrazo, de nuevo volvió a llorar pero esta vez no eran lágrimas de tristeza sino de alegría
Po se separo un poco de ella y sin pensarlo dos veces la beso en los labios. El rostro de Tigresa expresaba sorpresa pero lentamente se fue relajando dejándose llevar por el beso.
Ella fue la primera en terminar el beso, poniendo su cabeza sobre el hombro de Po. Sus brazos estaban alrededor del cuello del panda y los de él, alrededor de su cintura. Po realmente podía sentirlo, sabía a ciencia cierta que la amaba.
El sueño les iba ganando terreno, sentían sus parpados cada vez más pesados. Había sido un día muy duro para ambos. No pudieron soportarlo, el sueño fue mas fuerte que ellos y se quedaron completamente dormidos…
Unas horas despues, Shifu se dirigía a la habitación del Guerrero Dragón, pensando que este podría seguir dormido, abrió la puerta lentamente, cuál fue su sorpresa al ver a aquellos dos…
Po dormía sobre su espalda plácidamente su mano lastimada descansaba por un lado de la cama mientras con la otra sujetaba a manera de protección la figura de Tigresa recostada sobre su barriga.
Como su padre normalmente habría dicho algo al ver aquella escena pero un sonido proveniente de Tigresa lo hizo salir de ahí sin hacer ruido, un ruido que no había escuchado hacía mucho tiempo desde que ella era pequeña. Tigresa ronroneaba cual gatito y su rostro reflejaba una paz que hacía tiempo su maestro no veía hace mucho tiempo…
Una sonrisa se dibujo en su rostro, porque por fin su hija había encontrado su Paz Interior…
FIN