Disclaimer: Harry Potter no me pertenece, es de la señora J.K. Rowling y de Warner Bros.

Hola. Aquí estoy con mi primera historia larga en fanfiction. Los capítulos serán, pues son entradas del diario de Harry.

Espero que os guste.

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13 de Noviembre de 1996

Querido Diario:

Me llamo Harry Potter y tengo dieciséis años. A mediados del curso pasado, mi quinto año en Hogwarts, derroté al mago oscuro más poderoso del mundo magico, Lord Voldemort, en una batalla épica que ya contaré otro día.

Mi vida ha cambiado, ya no voy a Hogwarts, sino a un instituto muggle

¿Por qué? Fácil, dejé el colegio, y con él, el mundo mágico, mis amigos y conocidos. Todo.

¿Por qué? Porque son unos hipócritas, mientras me necesitaban para acabar con El-que-no-se-puede-nombrar-porque-todo-el-mundo-se-caga-de-miedo la gente estaba a mi lado, apoyándome, ayudándome, ocultándome cosas por mi propio bien, presionándome de forma disimulada…, pero en cuanto le volé el trasero, el mundo me dejó de lado, y no, no hablo de la prensa, el ministerio o los posibles fans, no, hablo de mis amigos, o de los que yo creía mis amigos. Los Weasley, Hermione, Dumbledore…todos me han abandonado, de hecho, estaban conmigo para que hiciera el trabajo sucio. Y aún por encima me lo dicen a la cara.

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Una tarde, en la Sala Común de Gryffindor, Ron y Hermione estaban sentados ante la chimenea haciendo los deberes cuando me acerqué. Llevaban varios días ignorándome y me estaba hartando. Decidido, inicié lo que podría llamar una conversación.

—Hola

—Hola—respondieron a dúo.

—¿Se puede saber qué os pasa?—les pregunté un poco enfadado

—¿A nosotros? Nada—me contestaron—¿Qué nos iba a pasar?

—No sé, decidmelo vosotros—ahora me estaba enfadando de verdad—, lleváis días ignorándome, no me fuisteis a visitar a la enfermería…

—¿Acaso crees que por vencer al Lord eres el centro del mundo? Te lo digo yo. No.—Hermione dijo eso como si la sola idea de que ellos pasaran tiempo conmigo fuera absurda.

—No se trata de eso, Hermione—respondí con toda la calma posible—. Pero vosotros sois mis amigos, ¿no? No me importa que la comunidad mágica al completo pase de mí, seria feliz si lo hiciera…

—Nosotros no somos tus amigos, Potter—eso sí me descolocó.

—¿Qué dices, Ron?—mi cara era de total desconcierto.

—Eso, que no somos tus amigos. Dumbledore nos pagó para que te apoyáramos y tuvieras algo de motivación para acabar con Quien-tú-sabes-empezó a contar mi ex-amigo pelirrojo—. Como ya acabaste con él, nosotros nos desligamos de ti. Chao.

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Pronto me enteré de que, menos tres personas, todos estaban conmigo por conveniencia desde el principio. ¿Quiénes son esas tres personas? Sirius, Remus y Snape. Sí, Severus me apoya por mi mismo y no por ordenes del viejo comecaramelos.

Ahora vivo en Liverpool y voy a un instituto muggle. Tampoco vivo con mis tíos, vivo con Severus Snape en una casita a las afueras de la ciudad. Y ya no me llamo Harry Potter, ahora soy Alexander (Alex) Snape, hijo de Severus y, supuestamente, una muggle. El cómo pasé de ser un Potter a ser un Snape te lo cuento otro día, Diario.

Chao

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¿Qué os ha parecido?

Se aceptan todo tipo de críticas y maldiciones, sólo no seáis muy crueles.

Nos vemos pronto