NA: Glee no me pertenece..

Espero que les agrade...la historia!

Era verano la habitación estaba en paz, se podía escuchar el monótono ruido del aire acondicionado, la luz del reloj de plasma marcaban las 10:30 am, había ropa por todos lados, en el centro del cuarto se encontraba la cama con una rubia plácidamente dormida.

Un "Bip", dos "Bip", tres "Bip", cuatro "Bip"… quince "Bip"

-Rachel te voy a matar-

"Sabes que me adoras Brittany Pierce…ahora mueve tu trasero que te espero para almorzar en media hora"

-Ayer me dormir a las 4 de la mañana y parece ser que tu también, no tengo hambre solo sueño-

"Eres una floja desperdiciaras todo el día durmiendo"

-No te preocupes…es como ahorrar así no saldré temprano a comprar nada-

"Buena idea"

-Ahora déjame dormir prometo cenar contigo hoy-

"Promesa, quiero llevarte a un nuevo lugar que me recomendaron"

-Ok…adiós…sueño…dormir-

Nadie hacia empezar un día a Brittany S. Pierce, ella elegía: Cuando, Donde y él Porque de iniciar. Después de un "merecido" descanso se levanto y empezó su rutina de belleza. Anoche había sido especialmente aburrido y cansado. Técnicamente las cenas sobre alguna beneficencia no eran divertidas, era un baile de hipocresía y lujos. Te gustaba ayudar pero más activamente siempre decías que "Un brindis no alimenta ni alegra a los niños pobres" pero tu papá te respondía diciendo "Pero llena las cuentas que lo hacen". La misma sonrisa congelada y los saludos prefabricados. "Mucho gusto", "¿Cómo va el trabajo?", "Sus hijos están enormes", "Que bella luce esta noche", "Ese traje lo hace parecer mas como si fuera mi hermano"

Pero hoy era uno de tus tantos días libres, no sabías que ponerte porque no conocías el lugar donde te iba a llevar Rachel. Mientras esperabas te pusiste a bailar siguiendo ningún ritmo solo a moverte por toda la habitación.

-¿Bailar semidesnuda es ahora tu pasatiempo favorito?-

Giraste y allí estaba Rachel.

-Me gusta más sin ropa pero no quería perturbar tu mente con semejante belleza- dijiste

-B, no eres mi tipo- te dijo

-Ni tu el mío- y sacaste la lengua.

Entras a tu armario buscando algo casual pero elegante así iba la morena. Tardaste aproximadamente unos 15 minutos en encontrar el atuendo perfecto. El maquillaje debía ser discreto nada muy arriesgado y perfume algo no muy empalagoso, nadie olía igual que tu, todos los perfumes que te ponías eran hechos especialmente para ti así como mucha de tu ropa que usabas. Una Land Rover Freelander las esperaba.

-Entonces…sin Limo, ¿A dónde vamos?- preguntaste

-A un nuevo lugar del que escucho que hablan mucho y quiero experimentar aunque no sabían quién era "Rachel Berry" repetí dos veces mi nombre puedes creerlo- termino tu amiga de hablar con un toque de drama.

-Espero que la comida sea buena tengo mucha hambre-

-Yo pediré por ti, quiero probar al chef- la voz de Rachel sonaba rencorosa.

-Siempre debes descargar toda esa frustración de "chef reprimido", no quiero que alguien le ponga cosas extrañas a mi comida Rachel-

-Hemos llegado-

Un edificio con una fachada moderno y sobrio, unas grandes ventanas donde se podía ver que el restaurante estaba lleno, no había fila para esperar mesa lo que decía que todos sabían que debían tener reservación.

Joe, el chofer de Rachel las ayudo a bajarse, todo estaba tranquilo, realmente en paz, la zona donde estaba el restaurante era una zona muy exclusiva de Boston.

-Buenas noches señoritas- dijo la host en el recibidor del restaurante.

-Rachel Berry- dijo tu amiga

Rápidamente comenzó a buscar en la lista y sonrió.

-Por aquí por favor-

Entraron y el restaurante te dejo sin aliento las mesas estaban apartadas, las lámparas eran hermosas, se escuchaba solo el sonido de la pequeña cascada artificial que estaba a medio restaurante. Los colores predominantes eran un rojo algo quemado con una línea crema en los manteles. Lucia algo sencillo pero muy elegante cada cosa tenía un rastro de buen gusto, su mesa estaba en una zona muy aislada de las demás personas algo intima, un lugar perfecto para una cita.

-No crees que todo mundo pensara que tu y yo salimos- dijiste

-En tus sueños- te dijo

El camarero rápidamente las atendió.

-Buenas noches señoritas, bienvenidas, esta noche yo estaré a sus órdenes-

-Gracias- dijeron ambas chicas.

-Ahora les dejo el menú, a su servicio- dijo y se retiro

Rachel se abalanzo rápidamente y lo abrió, siempre hace eso le gustaba ver todos los platillos para poder pedir el más difícil o el más sencillo solo para evaluar al chef. Todos parecían estar disfrutando la comida, algo en ese ambiente parecía extraño…todos sonreían mientras comían como si fuera lo mejor del mundo lo que probaran.

-Creo que este chef es algo ambicioso, muchos platillos muy diferentes.- te dijo con voz pensativa.

-Estoy muriendo de hambre si no pides rápida por las dos…pediré lo que se me venga a la mente- dijiste

-Ok…ok solo una pregunta ¿Cordero o Codorniz?-

-Solo quiero comer Rachel…solo quiero comer.- dijiste

-Muy bien-

El camarero llego casi inmediatamente después de que Rachel cerrara el menú y lo pusiera sobre la mesa.

-¿Todo está bien? ¿Les puedo tomar su orden?-

-Si todo está bien primero podría traer unos aperitivos de hongos silvestres salteados, para la señorita Pierce el cordero a la NZ y para mí la codorniz sobre verduras ponchadas, el vino se lo dejo a su elección- dijo Rachel sonando algo con vos pomposa.

-Excelente señorita, le podría sugerir que observara el menú de postres tenemos un excelente chef repostero.-

-Suena tentador- dijiste

-Muy bien, podría mostrármela- dijo Rachel

Después de unos diez minutos

-No puedo decidirme-

-Rachel Berry no puede elegir un postre esto es e-n-o-r-m-e – dijiste riendo

El camarero se acerco con una botella de Rose Laudun y le dijo.

-Podría decirle al Chef que dejo los postres a su elección-

-Por supuesto sus órdenes ya están en cocina en unos minutos se los traeré a la mesa, les dejo un exquisito vino rosado-

Estabas muriendo de hambre no habías comida nada y los olores provenientes de los otros platillos empeoraban todo.

-Moriré de hambre- dijiste

-Claro que no, tienes la culpa, no has comido nada solo por dormir unas horas más-

-Ayer estuvo aburrido no soportare otra cosa así, no había chicas guapas ni nada-

-Tus papas se notan tolerables respecto a lo de las chicas- dijo Rachel

-Claro ellos están seguros que tú y yo acabaremos juntos aparte que tener estas cenas, solo aumentan los rumores de una supuesta relación que tenemos-

-No sé porque la gente piensa que tengo gustos tan terribles-dijo Rachel sonriéndote

-Querida yo estoy fuera de tu alcance-

En ese momento llego la entrada, cuando los probaste pensaste que nunca habías comido algo tan delicioso.

-dios están deliciosas-

Rachel se quedo en silencio.

Unos minutos después llegaron los platillos que se veían tan apetitosos que se te hizo agua la boca.

De nuevo tu paladar se deleito estaba extraordinariamente delicioso.

-Rachel debes admitir esta delicioso déjame probar el tuyo-

La morena seguía absorta comiendo pero dejo que tomaras de su platillo y ella hizo lo mismo.

-Sabe tan bueno-

Seguiste comiendo.

-Sabias que este restaurante no tiene ningún chef famoso- mención Rachel

-¿No?-

-No, son estudiantes aun, los mejores estudiantes de algunas universidades son algo así como "genios" –

-Los genios me caen mal siempre se creen mejor que toda las personas deben ser tipos egocéntricos- las palabras que decían eran ciertas habías conocido a mucha gente que se creía muy inteligente y solo eran una bola de egoístas.

-Solo necesito una prueba más que será dulce- dice Rachel

El vino sabia delicioso una mezcla de frambuesas y cerezas.

-Señoritas- dijo el camarero

Les había dejado dos pedazos de torta de chocolate cubierta con una crema que se veía rosada lucia demasiado apetitosa.

-Una torta de chocolate…creo que me ha decepcionado el chef.- menciono Rachel mirando con desconcierto al platillo frente de ella

Cuando el pedazo de torta y crema toco tu paladar te sentiste casi en el cielo, era la pieza perfecta para terminar el festín que habías tenido.

-Rachel debes probarlo sabes exquisito-

Después de que la morena probara la torta, rápidamente llamo a camarero.

-Quiero darle mis felicitaciones al chef-

-Queremos- corregiste

-Personalmente- dijo Rachel

-Claro señoritas en un momento, solo una pregunta solo a un chef o también al chef repostero-

-a los dos- dijo Rachel

El camarero fue hasta la cocina.

-Nunca pensé decirlo pero los genios tiene algo de bueno aunque no me gustaría aumentarles el ego pero se lo merecen… ¿Cómo serán?- dijiste

-Solo espero que no sean unos bobos o tenga un aspecto raro- dijo Rachel mientras llevaba otro pedazo de postre a su boca.

Comenzaron a reírse cuando.

-Buenas noches Señoritas nos avisaron que requerían nuestra presencia-

Al voltear se encontraron con dos chicas hermosas, una rubia y otra morena ambas lucían su uniforme con algo de elegancia y sonreían amablemente.

-Claro…¿son los chefs?- dijo Rachel titubeando tu no podías hablar te habías quedado sin habla, la chica morena era hermosa, su piel se veía suave, sus ojos lucían como si guardaran luz en su interior su sonrisa parecía producir que tu corazón latiera a mil por hora.

-Sí, mi nombre es Santana Lopez la chef encargada de la cocina hoy y ella es Quinn Fabray la mejor Chef de repostería que conozco.-

La chica rubia sonrió y dijo

-¿Estuvo bien todos los platillos?, ¿Alguna recomendación que quisieran hacer?-

-Oh, nada estuvo perfecto solo…queríamos felicitarlas por los deliciosos platillos- dijo Rachel

Entonces reaccionaste.

-Estaban magníficos y la elección del postre fue la mejor…Soy Brittany Pierce y ella es Rachel Berry-

-Mucho gusto- dijeron ambas chicas

-¿Chef encargada?- dijo Rachel con curiosidad

-Somos en total 6 Chef nos dividimos para abarcar toda la semana asi que hoy yo estoy a cargo de aquí- dijo Santana

-Bueno, si nos disculpan debemos seguir atendiendo a algunos clientes- dijo Quinn

-Claro, un gusto conocerlas…¿Están todos los Sábados?- preguntaste

-Sábados, viernes y domingos- dijo Quinn sonriéndole

Ellas volvieron a sonreírles y se retiraron.

-La chica morena estaba hermosa.- y suspiraste

-No más que la chica rubia- de ataco Rachel

-Claro que no-

-Si-

-No.-

-Debemos venir a comer aquí todos los días- dijiste

-Claro- contesto Rachel

-Compremos el restaurante y que ellas sean nuestras chef personales-

-Me encanta tu idea Britt-

Durante el transcurso del viaje de regreso al departamento la imagen de la sonriente chica morena se te quedo grabada, Santana López…ella era hermosa. Mañana volverías al restaurante aunque una duda salto a tu mente.

-¿Crees que ellas dos sean pareja?- preguntaste

-¿Quiénes?- dijo Rachel

-Quinn Fabray y Santana Lopez-