INMORTAL

CAPITULO 15

DESPEDIDA

El frío de la noche era incomodo, Shinji no paraba de dar vueltas en la cama sin conseguir dormirse, pero su cabeza no estaba concentrada únicamente en el frío que hacía, sino también en el gélido beso recibido por la vampira peliazul a la que él conocía como Rei Ayanami.

`` Me gustó, ese beso me hizo sentir bien y a gusto por primera vez en mucho tiempo ´´ pensaba el joven mientras tocaba suavemente su mejilla con los dedos.

Estaba claro que encerrado en su cuarto no iba a poder dormir, las imágenes de todo lo ocurrido con Rei en los últimos momentos se agolpaban en la mente del chico de ojos azules y eso le causaba una inquietud que solo desaparecería de una forma.

`` Creo que lo mejor será quedarme esta noche con ella, solo así me sentiré tranquilo ´´ pensó Shinji con una determinación impropia de él.

El joven se levantó de la cama, se puso unos pantalones y la camiseta negra que llevaba debajo de la camisa de su uniforme escolar y salió con sigilo de su habitación. Al salir escuchó unos leves ruidillos que provenían del cuarto de Misato y que indicaban que estaba dormida.

``Debe estar agotada ´´ pensaba el chico mientras abandonaba la casa de su tutora.

Shinji dio unos pasos lentamente hasta quedar en frente de la puerta de su vecina, no sabía como llamar a la puerta sin hacer ruido para que nadie le escuchase, pero antes de que pensase en una solución la puerta se abrió y reveló la figura de la antes mencionada vecina.

-Ikari- dijo Rei con un poco de sorpresa en la voz-no sabía que se tratase de ti-

-¿me me escuchaste llegar?-preguntó el muchacho tartamudeando

-si-contestó ella recuperando su tono habitual-me lo permite mi nueva condición-.

Él sabía que se refería a su actual condición de criatura sobrenatural, no estaba seguro, pero era probable que aquellos que se transformaran en vampiros experimentaran la agudización de todos sus sentidos. Ahora Ikari comprendía por fin como era posible que Rei hubiese escuchado su mensaje en código Morse la primera vez que hablaron a través de la pared.

-Per perdona si te desperté, pero necesitaba visitarte-dijo el chico sonrojándose un poco

-no me despertaste, ya te dije que no suelo dormir mucho por las noches-

-oh es verdad-comentó él al acordarse de nuevo de esa primera conversación en código Morse-supongo que también es debido a tu nueva condición-

-si-dijo Ayanami con cierta pesadez.

Lo notaba, Shinji notaba que a Rei no le gustaba ser lo que era, puede que incluso no le hubiese contado la verdad por pura vergüenza, esa era un opción extraña tratándose de la chica de ojos rojos, pero después de haberla visto avergonzarse con lo de los fideos aquella no era una idea tan descabellada. La joven se hizo a un lado para que él entrase por segunda vez en su piso.

-Ayanami ¿te importaría que me quedase aquí por esta noche?-preguntó inseguro el joven una vez estuvo dentro

-si-contestó la muchacha-pero quédate fuera de mi habitación-.

Ikari no se esperaba eso, realmente no pretendía quedarse dentro del cuarto de la chica, pero aun así le extrañó la explicita orden que ella le había dado, no creía que Rei se hubiese vuelto tan pudorosa, tenía que haber algo mas.

-Bu bueno vale-.

Ayanami le ofreció a su amigo quedarse en el cuarto que antes ocupaba la doctora Akagi, este aceptó enseguida, no le apetecía dormir en el suelo. La muchacha abrió el armario del cuarto y sacó una sabana y una manta limpia, Shinji pudo ver entonces la ropa de Ritsuko dentro del armario y algunas de sus cosas, por lo visto la joven no se había desecho de nada.

-Gracias- dijo él cuando Rei le entregó la sabana y la manta

-Buenas noches-comentó ella antes de abandonar la habitación

-Buenas noches-le correspondió Shinji mientras se acostaba con una sonrisa en los labios.

Mientras todo esto sucedía, en Nerv un hombre estaba preocupado por el inminente cumplimiento de la decisión tomada por la persona que antes era su discípulo.

-Comandante no se precipite-recomendó el vice-comandante Fuyutsuki-la muerte de esta Rei podría traernos mas problemas que soluciones, además ya no tenemos a la doctora para que realice el reemplazo-

-descuida Fuyutsuki, yo puedo ocuparme de realizar ese reemplazo, además esta Rei se ha convertido en una amenaza y su muerte me conviene-respondió el aludido.

-Comandante ¿me mandó llamar?-preguntó un agente de la unidad de inteligencia de Nerv.

-si entre, esto es urgente-dijo el hombre con gafas

-¿para que requiere de mis servicios señor? ¿Debo investigar algún asunto?-preguntó el agente de pelo negro y corto.

-no, necesito que se deshaga de alguien que ha puesto en peligro la seguridad de todos nosotros-explicó Ikari-debe usted eliminar a Rei Ayanami-

-po por supuesto comandante-dijo el hombre de porte firme asombrado por la petición.

El agente salió del despacho aun con el asombro en el cuerpo, querer asesinar de la noche a la mañana a alguien con quien pasas todo el día y a quien pareces proteger a toda costa no es muy normal. La noche transcurrió sin ningún incidente, Shinji aun notaba el frío, pero se sentía mas tranquilo al saber que estaba en casa de Rei, unos débiles rayos de sol se colaron por la ventana del cuarto anteriormente habitado por Ritsuko.

`` Parece que se ha despegado un poco el cartón ´´ pensó el chico, después cogió la esquina y volvió a pegarla con el trozo de celo que había en ella ``Mejor será que la deje así para que a Ayanami no le pase nada ´´.

Él sabía que el sol podía perjudicar a su amiga, e incluso podía llegar a matarla si se exponía directamente a sus rayos, esa era una de las peores desventajas de ser una criatura de la noche. Justo entonces Shinji escuchó como se abría la puerta de salida y se imaginó lo peor.

`` No me puedo creer que vaya a salir de aquí ahora ´´ pensaba el joven mientras se levantaba alarmado e iba hacia la puerta del dormitorio.

Ikari abrió un poco la puerta y miró por la rendija que se formó al hacerlo, entonces vislumbró el cuerpo de un hombre alto y de complexión fuerte, su pelo era corto y negro, se parecía mucho a un militar pero sin serlo, el hombre fue hacia la cocina y la inspeccionó, después miró un poco por el salón y se dirigió al cuarto ocupado por Shinji, este se escondió tras la puerta cuando esta fue abierta.

`` ¿Qui quien es este hombre? ´´ pensó el muchacho sintiendo que el corazón le latía a mas no poder.

El miedo se apoderó del chico de ojos azules que se sentó en el suelo mientras permanecía aun detrás de la puerta, dedujo que si salía de allí algo malo le pasaría, apoyó la cabeza en sus rodillas y simplemente esperó a que el hombre se fuera, pero otra pregunta vino a su mente.

`` ¿Qué hace este hombre aquí? Habrá venido a por… ´´ ese pensamiento hizo que el chico se pusiese en pie de repente.

Ayanami, Ayanami era seguramente el objetivo de ese hombre, en esa casa no había nada importante salvo ella, era a ella a quien el hombre buscaba, Shinji no conocía el motivo, pero sabía que su amiga estaba de una forma u otra en peligro, así que con todo el valor del que disponía en ese momento se dirigió hacia la habitación de Rei.

``Vuelvo a sentir hambre ´´ pensaba la peliazul mientras se colocaba en posición fetal sobre su futón `` pero no puedo permitirme perder el control ´´.

Estaba realmente hambrienta, Rei sabía que la solución para acallar su apetito se encontraba a tan solo unos metros de ella, en la antigua habitación de la doctora, pero no era capaz de hacerle daño a nadie y menos al chico que ahora mismo era la única persona que estaba a su lado. Entonces oyó algo, el sonido de la puerta de su cuarto abriéndose, después unos pasos que se acercaban a ella, se imaginó que podría tratarse de Ikari y no reaccionó.

`` No me habrá hecho caso después de todo ´´ pensó la muchacha con desgana, se sentía impotente para echarle.

Pero lo que no se imaginó ella fue que ese no era Ikari, sino el hombre que había entrado en la casa y que ahora estaba sacando una estaca de madera de su chaqueta para usarla contra la chica. Poco a poco el hombre se acercó a Rei con la intención de apuñalarla directamente en el corazón, pero cuando estaba a punto de agacharse y cumplir su cometido alguien intervino.

-¡NO!-exclamó Shinji desde el umbral de la puerta del dormitorio.

Rei escuchó el gritó del verdadero Ikari y se dio la vuelta para observar que un hombre misterioso estaba a punto de atacarla y causarle la muerte, inmediatamente transformó su rostro y dejó ver sus colmillos y sus ojos amarillentos, mostrando una expresión de rabia, hambre y ferocidad contenida.

-¿Chico que demonios haces?-preguntó el hombre antes de notar un peso en su espalda.

La vampira peliazul se encaramó con todas sus fuerza sobre su atacante, apretó la piernas alrededor de su cintura y los brazos alrededor de su cuello, dejando únicamente el espacio necesario para poder morder y alimentarse, cosa que no tardó mucho en hacer. El hombre sentía dolor en cada una de las partes que estaba apretando la criatura, pero cuando notó como le clavaba los dientes en el cuello sintió como la vida se le escapaba lentamente. Rei sorbió la sangre de su victima bajo la mirada atónita de Shinji, luego este se alejó de la habitación y se quedó parado en medio del salón.

``Lo hace solo para defenderse ´´ pensó el chico de ojos azules mientras escuchaba el final del ataque.

La joven recuperó su aspecto normal, después salió de su habitación dejando el cuerpo sin vida del hombre en el suelo y con la boca cubierta de sangre fresca. Muy despacio se acercó al muchacho que esperaba en el salón, este sintió entonces unos brazos rodeándole, él se dejo abrazar y luego se dio la vuelta.

-Ayanami yo…-las palabras no pudieron salir de su boca porque algo la taponó.

Los ensangrentados labios de Rei besaron con delicadeza los de Shinji, él pudo notar el sabor de la rojiza sustancia introduciéndose en su boca, pero ese desagradable sabor era insignificante comparado con la embriagadora sensación de confort que le proporcionaba el beso de la chica, aquello le hacía sentirse amado y cualquier sentimiento de culpa que antes pudiese sentir se esfumó. Por fin la peliazul rompió el beso y miró al muchacho directamente a los ojos.

-Ikari me marcho, me debo ir esta noche, ya no hay nada que me retenga-dijo ella observando la mirada de tristeza que mostraban los ojos del chico-tú también deberías volver a la casa de la Mayor Katsuragi-

-pe pero yo no quiero que te vayas, además no puedes dejar ahí a ese hombre, podrían descubrirte-

-yo me ocupare de eso, adiós- se despidió Rei acompañando al joven hasta la salida.

Shinji abandonó el apartamento con un gran peso en el corazón, quería decirle a la muchacha el gran sentimiento que había experimentado cuando le besó, el amor que ahora sabía con certeza sentía por ella, pero no pudo y simplemente se metió en el piso de su tutora y se encerró en su cuarto. Pasadas unas horas, el joven Ikari miró por la ventana y vio como la peliazul subía a un taxi y abandonaba para siempre la ciudad de Tokio 3.

``Ya es de día ´´ pensó el chico de pelo color café cuando los primeros rayos de sol le dieron en la cara.

Inmediatamente después recordó a la muchacha de ojos escarlata y deseó que hubiese encontrado un sitio donde resguardarse de la luz solar, ahora que no estaba a su lado solo podía desear que por lo menos estuviese bien. El nuevo día también había llegado a las instalaciones de Nerv.

-Ya lo ha visto comandante-le comentó Fuyutsuki a su antiguo alumno- Rei ha abandonado la ciudad y nuestro agente no da señales de vida, el plan ha fracasado-

-no, todavía tenemos una oportunidad de recuperar a esta Rei para poder acabar con ella-

-¿Qué oportunidad?-

-mi hijo-dijo el hombre con gafas esbozando una sonrisa malévola.

Shinji salió de su cuarto con la moral un poco baja, por suerte Misato no se encontraba en casa ya que había salido, y eso le facilitaba la tediosa tarea de comenzar el día sabiendo que la chica a la que amaba no estaba cerca de él, pero si había algo que ella le había dado antes de irse era una cierta confianza, cosa que le serviría para seguir adelante. De repente el sonido característico del teléfono se escuchó en todo el piso.

-Dígame-dijo Shinji al contestar la llamada

-¿es usted Shinji Ikari el piloto del Evangelion 01?-preguntó una voz femenina al otro lado del teléfono-el comandante requiere su presencia en Nerv, a ser posible ahora mismo-.

El joven de ojos azules colgó el auricular nada más oír como mencionaban el rango que ostentaba su padre. No sabía porque, pero dudaba entre acudir a ver a su progenitor o quedarse en casa sin mover un solo dedo por ayudar al hombre que tanto le habría hecho sufrir, esta ultima opción significaría huir del dolor y eso era algo que la reciente confianza que le había proporcionado Rei no le permitía hacer.

``Por eso estoy dudando, antes ni me hubiese planteado el volver a ayudar a mi padre ´´ pensaba él mientras cogía un abrigo y se dirigía hasta la puerta `` ella ha hecho que me de cuenta de que no puedo seguir huyendo ´´.

Tras cerrar la puerta que acababa de abrir, el muchacho se encaminó hacia las instalaciones de Nerv. Una vez llegó fue informado del lugar en el que le esperaba su padre. Todo parecía tranquilo, el lugar estaba casi desierto y la poca gente que quedaba estaba preparándose para irse, Shinji apenas se fijo en ese detalle, solo le importaba acabar cuanto antes.

-Padre-dijo el chico cuando entró en una sala oscura y espaciosa

-Veo que no te has retrasado-comentó Gendo saliendo de entre las sombras-mejor, así ella tampoco lo hará-

-¿a que te refieres?- preguntó el joven Ikari con extrañeza.

Sin darle tiempo a su hijo para reaccionar el hombre con gafas sacó un revólver de su chaqueta y apuntó al chico con él.

-¿Padre que esta haciendo?-dijo Shinji muy alarmado

-tú no me interesas, solo me interesa ella y la criatura en la que se ha convertido-

`` La quiere a ella, solo quiere que Ayanami vuelva ´´ pensó el muchacho – e ella se ha ido y no volverá-

-volverá únicamente si tú estas en peligro- después de pronunciar esas palabras el comandante no dudó en apretar el gatillo y disparar en dirección al hombro de Shinji.

-AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH-gritó el joven cayendo al suelo intentado resistir el dolor.

Gendo miró con frialdad el cuerpo indefenso y dolorido de su hijo mientras este se retorcía e intentaba detener la sangre que brotaba sin cesar de la herida de bala, luego miró los alrededores de la habitación esperando descubrir con la mirada la silueta de Rei.

`` Espero que llegues pronto, porque debo proseguir con mis planes sin que tú interfieras ´´ pensó el hombre con gafas.

Justo en ese momento se escuchó un ruido, un ruido que le correspondía a la abertura de las puertas de la oscura sala en la que estaban tanto el padre como el hijo, unos pasos lentos y firmes comenzaron a oírse en el interior, dichos pasos se acercaban cada vez más hasta el comandante.

-Veo que tú tampoco te has retrasado-dijo él-no vas a salir de aquí, lo sabes ¿verdad?, dentro de poco mis guardias te atraparan Rei-.

La chica de ojos rojos no detuvo su avance, simplemente continuó acercándose hasta su creador. No se podía distinguir su aspecto actual debido a la escasa iluminación del lugar, pero aun así se escuchaban claramente sus pasos que no mostraban ningún tipo de inseguridad ni temor.

`` ¿Pero que ocurre? ¿Por qué no actúan los guardias? ´´ pensaba el comandante mientras le temblaban las manos.

Rei llegó por fin hasta uno de los pocos focos que le proporcionaba luz a la tenebrosa sala, entonces fue cuando su figura quedó expuesta a la luz y Gendo pudo observar como la camisa con la que se vestía la chica estaba cubierta de sangre al igual que sus manos y su boca.

`` Los ha matado, no me lo puedo creer ´´ pensó él antes de empezar a apuntar a la muchacha con el revólver.

La peliazul se desplazó en un abrir y cerrar de ojos hacia donde estaba Ikari, después le fracturó la mano obligándole a soltar al revólver que cayó sonoramente al suelo, luego le sujetó el cuello con la mano y sin apenas esfuerzo se lo rompió de un simple apretón, pero como no deseaba tener dentro la sangre de aquel hombre lanzó el cadáver hacia otro lugar de la sala, además ya había calmado su hambre con los guardias.

`` Nadie volverá a hacerte daño ´´ pensó Rei mientras se arrodillaba junto a Shinji.

El pobre muchacho se había desmayado a causa del dolor, pero cuando la joven de ojos escarlata colocó su cabeza encima de su regazo el chico comenzó a despertar lentamente.

-A Ayanami-dijo él en un hilo de voz.

Ella solo le dedicó una sonrisa al joven Ikari como respuesta y él a pesar de ver su rostro cubierto de sangre que evidentemente no le pertenecía le devolvió tiernamente el gesto. Los empleados de Nerv regresaron a las instalaciones a la hora que el comandante les había ordenado, poco después descubrieron horrorizados los cuerpos sin vida de Gendo y los guardias.

-¿Cómo es posible que Shinji haya desaparecido?-preguntó Misato muy alterada

-No lo sabemos- le comunicó un técnico-solo sabemos que le llamaron para comunicarle que debía hablar con el comandante y luego no se supo nada de él, al menos no está entre los cadáveres-

`` Shinji espero que estés bien ´´ deseó la Mayor para sus adentros.

Mientras tanto un chico y una chica se encontraban dentro del vagón de un tren que todavía estaba en la estación de Tokio 3, el chico se había quitado una camisa blanca que formaba parte de su uniforme y estaba vestido con una camiseta negra que siempre llevaba debajo y que disimulaba mejor la sangre de su hombro.

-¿Están seguros de que no desean subir la persiana de la ventana?-preguntó un revisor

-si estamos seguros, gracias-dijo el joven de ojos azules.

-Ikari ¿vas a dejar que Soryu se ocupe de todo ella sola?-

-sí, cuando tú la salvaste ella me dijo que estaba bien, creo que podrá recuperarse y vencer a los ángeles ella sola-.

Ahora Shinji y Rei estaban dispuestos a marcharse de Tokio 3. El muchacho aun estaba dolorido por culpa del disparo que le propinó su padre, pero tras extraerle la chica la bala sabía que podía aguantar hasta recibir una mejor atención en otra ciudad. No abandonaban Tokio 3 para huir, sino para comenzar una nueva vida lejos de allí, Shinji estaba dispuesto a permanecer junto a Rei hasta el fin de su propia vida, pues comprendía que la vida de la joven no terminaría nunca, ella era inmortal.

FIN

Bueno esta historia se ha terminado por fin, yo no sé si este final satisfará a los lectores exigentes, pero aun así espero que vuestro buen criterio juzgue adecuadamente este fic en su conjunto, ya sea para bien o para mal os pido que por favor seáis objetivos y me deis vuestra más sincera opinión, yo me he esforzado todo lo posible para ofreceros el mejor entretenimiento posible únicamente porque vosotros os lo merecéis y porque yo disfrutó mucho dando siempre lo mejor de mí como escritora. Gracias a todos los que habéis leído hasta aquí y a todos los que por lo menos os habéis leído algún capitulo que otro, chaito.