Epílogo

Se recolocó por tercera vez la corbata verde y luego suspiró al ver su reflejo en el espejo de la habitación.

"Qué tal?" preguntó volviéndose hacia Craig, que levantó la mirada de su portátil para darle una respuesta.

"Bien."

"Solo bien?" alzó una ceja Broflovski. "Genial… el día de la presentación de mi nueva novela, estoy 'bien' a la vista de mi novio."

Bufó y se volvió de nuevo hacia el espejo mientras el moreno rodaba los ojos.

"Es que no quiero que te pongas sexy… Y si seduces a alguien sin querer?" comentó Tucker. Aquello le robó una sonrisita al pelirrojo, quien se volvió de nuevo y caminó hacia él, parando delante.

"Craig… haz el favor de empezar a vestirte ya o te quedas en casa." Amenazó medio de broma medio en serio. El otro sonrió de lado.

"Si te vas sin mi cambiaré la cerradura antes de que vuelvas." Contestó. Kyle apretó los dientes y le cerró la pantalla del ordenador de golpe. "Eh! Tenia un artículo a medias!"

"Pues no me amenaces con echarme de casa, también es mia!" contestó él sacándole la lengua. Tucker se levantó y le revolvió el pelo. "Craig! Había conseguido peinarlo bien por una vez!"

"Eso creías?" se burló el otro. Kyle empezó a darle golpes en los hombros y el moreno se defendió como pudo, hasta que consiguió sujetarle las muñecas. "Mmm… me gusta que te pongas salvaje…"

El pelirrojo soltó un gruñido de protesta, pero antes de poder soltarse Tucker le besó. Kyle intentó apartarse solo por molestarle, pero como siempre ocurría, todas sus fuerzas se le fueron con el roce de aquellos labios y acabó abrazándole con cariño mientras movía su lengua dentro de la boca de Craig.

Poco tardó el moreno en quitarle de nuevo la corbata y empezar a desabrocharle la camisa mientras le besaba con impaciencia, y Kyle por su parte se batía en duelo con los botones del pantalón del otro.

Tucker gruñó y le cogió a horcajadas, llevándole a la cama.

OOOOO

"Claaaaahd, vaaaamos!" se quejó Cartman por enésima vez. "De qué vas? Haces que me vista de gala para la presentación del libro de un judío y ahora te retrasas!"

"Lo siento, ya termino!" decía el castaño mientras corría de un lado para otro en la cocina del Dolce Vita, mirando unas ollas y controlando algunas sartenes.

"Tranquilo, Clyde, el primer chef se las arreglará sin ti" dijo Token divertido.

"Pero…!" empezó Donovan. No pudo continuar, porque Cartman se hartó de esperar y le cogió en brazos para llevárselo. "Eric! Qué demonios…?"

"Nos vamos de una vez, me muero de hambre!"

Tweek y Token, incluso algunos trabajadores más, no pudieron evitar reir mientras el crítico se alejaba llevándose con él a su segundo chef, que no dejaba de patalear y lloriquear.

"Eres un dictador!" se quejó Donovan ya en el coche.

"Llevamos casi un año juntos y aun no has aprendido a respetar mi autoridad!" contestó el otro. Clyde le sacó la lengua, pero cuando Eric le miró sonrió con inocencia. El otro frunció el ceño, suspicaz.

"Por qué estás tan cabreado?" sonrió de nuevo el joven cocinero. Cartman carraspeó molesto y él notó que se ruborizaba un poco. "Mmm… donde es la presentación?"

"En el Clear Nights." La cara de Donovan cambió al momento, pero luego empezó a reir sin más, con esa carcajada tan infantil y sonora que tenia. "Qué carajo, Clahd?"

"Deja de ponerte celoso cada vez que Kevin y yo estamos en la misma habitación. Solo somos amigos!" jugueteó él, haciendo que el otro gruñera.

"Sí, lo se, él tiene a William…" masculló el crítico. "Pero eso no quiere decir que sea de fiar."

"Y yo te tengo a ti." Sonrió el castaño mirando por la ventana. Eric no pudo evitar enrojecer y lentamente puso su mano sobre la de Donovan, apretándola ligeramente con cariño.

OOOOO

"Mierda, mierda, mierda!" mascullaba Kyle vistiéndose de nuevo. "Voy a llegar tarde a mi propia presentación por un jodido calentón de última hora!"

"Irresponsable" sonrió Craig todavía tumbado en la cama, estirándose un poco. El otro le lanzó una camisa negra y una corbata azul.

"Y todavía tenemos que pasar a recoger a Stan! Vístete ahora mismo, Tucker!"

"Vale, vale… ya voooy" rió el moreno.

OOOOO

El Clear Nights estaba igual de reluciente y elegante que siempre, sin contar la novedad de la prensa y los editores que tomaban ahora unas copas en la barra de entrada, esperando a que empezase la presentación de la novela. Clyde no pudo evitar admirarlo una vez más y se maldijo un poco por no haber aceptado la oferta de Stoley para trabajar con él.

Encontraron a Kevin en la cocina, con su uniforme de cocinero negro, supervisando cada canapé que salía para los invitados. Con él estaba William y los dos parecían inmersos en una conversación muy interesante, aunque a Clyde le pareció escuchar algo sobre Star Wars antes de interrumpirles.

"Hola, Clyde." Saludó el moreno con su sonrisa habitual. Cartman rodó los ojos.

"Qué tal todo?" dijo el otro.

William sonrió tímidamente, pero cuando Donovan empezó a preguntarle por los progresos de sus estudios en ingeniería mecánica se animó un poco más. Kevin y Cartman se miraron y alzaron las cejas, curiosos ante la amistad que llevaban un tiempo forjando aquellos dos.

"Bueno, vamos fuera, la gente de calle no debe estar tanto tiempo en la cocina de un restaurante." Indicó el crítico, estirando del castaño.

"Os veré en la presentación." Se despidió Clyde divertido dejándose arrastrar.

"Puedes ir también. Yo aun tengo trabajo aquí." Le indicó Kevin con cariño a William, pasándole una mano por la espalda que hizo que se estremeciese.

"No, me quedaré." Sonrió el otro, sentándose en un taburete. Miró a su alrededor. Aunque había más trabajadores, la cocina era tan enorme que parecía que estaban solos en aquel rincón. "No puedo ayudar, pero al menos te haré compañía. Y…" se encogió de hombros. "Fuera hay demasiada gente."

Kevin soltó una risita suave al escuchar aquello y le cogió de la barbilla para darle un pequeño beso en los labios.

"Soy tan afortunado de tenerte, Will…" susurró contra su frente, mientras él otro se notaba enrojecer sobremanera.

"Y yo de tenerte a ti…" murmuró él cerrando los ojos y abrazándole.

Stoley no pudo evitar recordar aquel día, mientras le insistía para que saliese de la habitación y le repitiese lo que le había dicho. Al final la solución llegó sola, ya que la lluvia provocó un pequeño corte de electricidad y el miedo a la oscuridad de Will era comparable a su miedo a las alturas. Sonrió para sí mismo al revivir aquel momento, cuando el castaño abrió con brusquedad la puerta y se lanzó a sus brazos.

Y ahora no dejaría que se escapase de ellos.

OOOOO

Kyle llamó al timbre y esperó, dando pequeños botes con nerviosismo. Craig le agarró de la cintura y le besó la mejilla.

"Deja de preocuparte, todo saldrá bien." Dijo.

"Lo mismo me dijeron con el primer libro." Masculló el otro. "Y por una maldita critica me jodieron." Tucker sonrió sin poder evitarlo y volvió a besarle.

"Pero como dice siempre Ann, acostarse con el crítico ayuda, verdad?"

"Bastante." Jugueteó el otro. "Pero esta vez, por mucha mierda que quieras escribir sobre mí, superaré el récor de ventas." Sonrió alzando la barbilla.

"Lo sé." Dijo el moreno mirándole con cariño.

Entonces escucharon voces en el interior de la casa y ambos se miraron con curiosidad. La puerta se abrió y apareció Stanley, despeinado, sin camisa y con el pantalón a medio abrochar.

"Ah… Kahl, Craig! Pensé que vendríais más tarde!" empezó sonrojado.

"Mmm… pues no" dijo Kyle sonriendo con picardía.

Como era de esperar, pronto se asomó detrás del moreno un rubio igual de agitado y sonrojado.

"Pero qué se supone que hacéis? Llegaremos tarde!" se quejó el pelirrojo. Tucker carraspeó con significado, pero él le ignoró, aunque se sonrojó también.

"Lo siento, Kyle! Iré a vestirme!" aseguró Stan, corriendo hacia el cuarto.

La pareja entró, quedándose con Kenny, quien se abrochó la camisa de nuevo.

"Tu novio es muy fogoso." Se burló Craig.

"No es mi novio, no tenemos nada serio" contestó McCormick rodando los ojos. Pronto salió Marsh de nuevo y le pasó una corbata por el cuello, anudándosela. Kenny se ruborizó y le miró con cariño y cuando el moreno terminó le besó la frente.

Tucker y Broflovski no le dieron más importancia, ya que Stan y Kenny llevaban todo el año con un extraño juego de 'No somos nada' y sin embargo todos sabían que aquellos dos estaban jodidamente enamorados. Y se acentuó cuando el pasado San Valentín los dos se quedaron juntos en casa de Marsh, y según Craig, Kenny jamás había tenido una cita de San Valentín.

OOOOO

"Joder, ya era hora!" exclamó Cartman al verles llegar por fin al restaurante.

"Qué delicado, Eric…" murmuró Emily mirándole mal, mientras todos les miraban al escuchar aquello. "Hola, chicos!" saludó. "Nervioso, Kyle?"

"Kyle? Ése es Broflovki?" empezaron a murmurar el resto de periodistas.

En un momento, el pelirrojo asombrado se vio rodeado de cámaras de fotos y gente, que le hacían preguntas sobre su segunda obra y querían saber si seguiría publicando para el New York Times.

Kenny se sentó en la barra y miró hacia los libros que habían amontonado sobre una mesa elegante en una tarima, junto a un par de micrófonos. Suspiró y pidió una copa también.

Hacía seis meses que Clyde se había mudado con Cartman y él y aunque le gustaba la idea de tener al violable cocinero cerca, la verdad era que no soportaba mucho los ruiditos nocturnos de la pareja. Así que decidió que ya era hora de buscar un nuevo apartamento con alguien más.

Un cordón con una pequeña llave apareció delante de él y cuando lo vio alzó la cabeza, sonriendo al portador.

"Sigue en pie mi oferta." anunció Marsh.

"Nunca, me niego a que me monopolices." Jugueteó el otro. Stan ladeó la sonrisa y le cogió del brazo, levantándole y atrayéndole.

"Te encanta que te monopolice." Sentenció.

"Mierda…" masculló Kenny antes de besarle.

"Entonces… eso es un sí?" canturreó el otro.

"Es un tal vez." Contestó el rubio divertido jugando con su corbata.

"Entonces al final del día conseguiré el sí." Sonrió el moreno besándole de nuevo.

Y lo consiguió.

….

Los editores consiguieron acercarse a Kyle. Entre ellos estaba el jefe de Global Words, quien no se había ofrecido para publicar la segunda obra, pero ahora se veía algo arrepentido de ello al ver a toda la gente que había y al ver como el nuevo editor hablaba ya de cifras con sus compañeros.

Un nombre hacia mucho. Y aunque todavía no se había estrenado la película que contendría el nombre de Kyle Broflovski en sus créditos, la voz ya había corrido y cuando Kyle terminó su segunda novela, fueron muchos los que lucharon por tenerle en su editorial.

El editor que consiguió captar a Kyle esta vez se subió a la tarima y carraspeó. Hizo un movimiento de mano para indicarle al pelirrojo que subiera también y empezó la presentación cuando todos dejaron de aplaudir.

"Debo darte las gracias, Emily." Dijo Tucker entonces. Ella le miró asombrada y sin entender, y él apartó la mirada con cierto orgullo. "Quiero decir… Si tú no le hubieras dado esa segunda oportunidad, no estaríamos aquí hoy."

"Mmm. Me siento halagada, Craig." Sonrió ella divertida dándole un golpecito en el hombro. "Pero es lo que debía hacer. Todos necesitamos segundas oportunidades, verdad?"

Desde la tarima, mientras el editor hablaba, los ojos verdes del joven escritor buscaron los ojos negros del crítico. Cuando ambos se encontraron, Kyle le sonrió con timidez y cierto nerviosismo. Craig sonrió también y tomó una copa que le ofrecían.

"Siempre."

-The End-

Bueno, se acabó lo que se daba x3 Como siempre con una felicidad inmensa de haber atraído a tantos lectores y que me hayan seguido hasta el final, así que muchas gracias a todos por darme ánimos!

Y a sonicalaeriza, que ha leído y releído cada capítulo antes de la publicación, corrigiendo y ayudándome en todo lo que podía. La verdad es que es el único fic que he hecho con ayuda de Beta, pero creo que ha estado bien^^ Y también por dejarme a will, pero no me repetiré más XD

Y bien, espero tener el placer de leeros a todos también en la continuación de The Right Kind of Wrong, la cual espero que consiga el mismo afecto que ha tenido esta historia de mundo alternativo :3

Gracias a todos y nos leemos!

South Park no es mio