Esa misma mañana me desperté algo tarde ya que Leo se había preocupado tanto por mi estado después de todo lo sucedido la noche pasada, así que me dejo dormir hasta que mi propio cuerpo decidiera que ya era suficiente. Al parecer llegaríamos tarde al colegio pero Leo me tranquilizo diciéndome que temprano había hablado con Amnon y Omer para avisar que llegaríamos un poco tarde al colegio pues anoche tuvimos un altercado que me había dejado exhausta y que por más que el había intentado despertarme (según la versión que conoce Amnon) no lo había conseguido.

Así que muy lentamente me desperece y me dirigí al servicio para asearme y comenzar a alistarme para asistir al colegio, pero aun así no podía quitar de mi mente el hecho de que alguien había intentado… intentado qué? Ni siquiera estoy segura aun de que rayos habían intentado hacerme, pero aun así, nada bueno podía ser si Leo no podía protegerme verdad? Después de vestirme con el uniforme y haber terminado de arreglarme me dirigí a la especie de cocina que Leo había improvisado en la residencia para cubrir mis necesidades humanas, el ya me estaba esperando hay con un gran vaso de jugo y unas tostadas, solo pude beber un poco de jugo y evite totalmente la comida ya que no tenia apetito y lo único que quería era llegar al colegio eh intentar olvidarme de mi condición de dividida por un par de horas.

Leo y yo caminamos hacia el colegio en un silencio cómodo, tomados de la mano fuertemente, cuando entramos al colegio Amnon ya se encontraba ahí esperando nuestro arribo para asegurarse de que me encontrara en perfecto estado. Una vez librados del reten Leo y yo nos dirigimos hacia clases e intentamos pasar lo mas desapercibidos posible, algo absolutamente imposible puesto que Leo por si solo ya llama bastante la atención de todos, ahora llegando tarde y en mi compañía, por supuesto que todos tenían su atención fija en nosotros.

-Ella, Leo… que amables en acompañarnos, hablare con ustedes después de la clase. Muy bien en que estábamos? Ah sí, las propiedades curativas de la sábila según los pueblos indígenas…- lo siguiente que escuche fue puro y simple parloteo de parte de mi padre ya que todos seguían volteando a observarnos a Leo y a mí y eso me tenia lo suficientemente incomoda. De pronto un proyectil de papel aterrizo justo frente a Leo y ambos lo miramos sorprendidos y después nos miramos el uno al otro desconcertados. Leo arque una ceja y por lo que supuse comenzó a escanear las mentes de los demás para saber de qué se trataba pero yo no quería hacer eso mismo, de pronto comenzó a reír en un pequeño susurro para después añadir. –es para ti, lo envía Omer… Al parecer su puntería jamás cambiara- voltee sorprendida en dirección a mi mejor amigo y lo vi tratando de hundirse en su asiento y todo sonrosado. Solo pude sonreír levemente y estirar la mano para leer el dichoso proyectil y enterarme de una vez por todas de que iba todo esto.

Ella,

Todo en orden? Leo me llamo esta mañana para decirme que llegarían retrasados a la escuela ya que te encontrabas exhausta después de unos acontecimientos recientes,(de los cuales, por cierto, aun espero enterarme) y me quede realmente preocupado. Me gustaría que platicáramos.

Omer.

Solo dirigí mi mirada hacia él un microsegundo por el rabillo del ojo y después empuje la nota levemente hacia Leo. El solamente se limito a asentir imperceptiblemente con la cabeza dándome a entender que ya lo había leído en la mente de Omer.

Arranque cuidadosamente una hoja de mi libreta y me dispuse a responder la nota de mi mejor amigo:

Omer,

Hola, si tranquilo todo está en orden. Leo no debió preocuparte en vano. Solo sucedió que mi parte humana salió a relucir y decidió que era tiempo de dormir en el horario normal para ustedes y no pudo despertarme a tiempo esta mañana eso es todo. No puedo asegurarte la plática para esta tarde ya que hay reunión con el consejo y debo estar presente.

Ella.

Doble cuidadosamente la nota y después la extendí hacia Leo para que el la arrojara hacia su destino por mí. Leo mira detenidamente mi mano por medio segundo y después, como si de una bomba o algo así se tratase, rápidamente la tomo y en una fracción de segundo se encontraba aterrizando en el escritorio frente a Omer. No dirigí mi mirada hacia atrás en ningún momento ya que estaba segura que de hacerlo vería el rostro demacrado de Omer y me arrepentiría de haber respondido su nota de esa manera. Pero debía ser sincera y tenía ciertas obligaciones como la elegida de sangre que debía cumplir antes de volver al mundo normal y fingir ser solo Ella Rozen.

Cuando la campana sonó, todos los alumnos se apresuraron a recoger sus cosas para poder salir lo más pronto posible del aula y dirigirse a casa, o algún lugar que no fuera este. Leo y yo nos limitamos a guardar nuestras pertenencias en orden sentados esperando a que todos se fueran para acercarnos y poder charlar con mi papa. Omer fue el último en salir pues se notaba reticente junto a la puerta y en un par de ocasiones dirigió su vista hacia el lugar que ocupábamos Leo y yo. Después de un par de vistazos finalmente se marcho al ver que no pensábamos movernos de nuestro sitio hasta que él se marchara.

Mi padre rápidamente se acerco a nosotros mientras nos poníamos de pie y me atrapo entre sus brazos en un fuerte abrazo – Ella cariño, nos tenias muy preocupados. Estas bien? Que sucedió? Si no es porque Guy puede hablar telepáticamente con Leo hubiésemos salido en la madrugada a buscarte- Desde mi prisión busque los ojos de Leo para reprocharle con la mirada el haberme omitido ese pequeño detalle.

-Papá! Tranquilo estoy bien, no paso nada. Sabes que Leo puede cuidar perfectamente bien de mi. Además solo salí a atender un asunto importante. Pero mi parte humana salió a flote y me sentí demasiado cansada para regresar hasta la casa asi que Leo me llevo a la residencia y llegué directamente a dormir hasta hace un par de horas que me aliste lo más pronto posible y llegamos al colegio. Nada de lo que debas preocuparte papá, ambos sabemos que la falta de sueño la mayor parte de la semana me pasa factura en el momento menos esperado.- le dije cuando finalmente pude liberarme de la prisión que sus brazos creaban sobre mí. Busque a Leo con la mirada y le rogué mediante la misma que por favor omitiera el detalle del embuste, ya lo discutiríamos más tarde los dos solos en la residencia, ya que mis planes eran pasar ahí el mayor tiempo posible a partir de hoy. No sé porque pero tenía la sensación de que ningún lugar me daría tanta paz como solo la residencia podía otorgarme. Leo pareció comprender mi mirada porque se limito a mantenerse a un costado escuchando atentamente nuestra conversación e interviniendo solo cuando mi padre le hacia alguna pregunta o yo no sabía que decir. Sin duda amo a ese hombre y esta tarde veré como agradecerle tanto apoyo y confianza de su parte. Al parecer mis palabras junto a las de Leo lograron tranquilizar a mi padre y después de una media hora aproximada nos despedimos de él y le dije que tal vez esta noche no iría tampoco a la casa ya que había reunión con el consejo y no sabía cuánto tardaría y la residencia estaba lo suficientemente cerca para mantenerme a salvo y poder descansar algo.

Así pues Leo y yo nos encaminamos a la salida del colegio Green con dirección al museo para reunirnos con el consejo y deliberar una vez más ante las leyes que el señor le enmienda establecer al dividido de sangre. Solo esperaba poder encontrar respuesta de todo lo sucedido anoche lo antes posible pues no me gustaba mentirle a mi familia pero, su seguridad esta primero y si yo atraigo el peligro hacia ellos, entonces tendré que mantenerme alejada de ellos algún tiempo. Leo pasó su brazo por mis hombros, clara señal de propiedad y protección que yo agradecía internamente ya que su presencia lograba tranquilizarme en gran medida. Sabía que y yo teníamos aun una conversación pendiente y muchas cosas que discutir, solo esperaba que las cosas pudieran mejorar pronto porque…

Cuantos misterios mas podrían existir detrás de mi existencia entre ambos mundos? Podría haber algo más que aun no ah sido revelado? Algún problema más se ensañara en terminar con mi paz y felicidad? Espero con toda el alma que no… pero uno nunca puede saberlo, o si?