Mundos Diferentes

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Disclaimer:CCS No Me Pertenece.

Género: M

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Shaoran Li es un chico que lo tiene todo, hijo de un importante magnate en los negocios y nieto de un Rey. Según él, es feliz, o por lo menos eso creyó antes de conocer a Sakura Kinomoto, una chica de clase media con muchos deseos de vivir, ayudar a su familia y salir adelante. La vida de Shaoran se pone patas arriba con la entrada de Sakura a esta, lo que no sabe es que al momento en que Sakura entra a su vida un grave secreto de su familia amenaza a ser descubierto. Él tiene que amar y aprender a perdona y ella está dispuesta a enseñarle.

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―"Teléfono"―

―Pensamientos―

Capítulo 20

Hablemos de boda

Estaba de camino hasta el invernadero, ya era hora de salida, pero los chicos todavía estaban allí. Pensaba en lo sucedido en la tarde, no entendía por qué el comportamiento de Shaoran. Luego de lo de las canchas de tenis lo había notado enojado, y desde entonces no le había hablado. Encontró a los chicos en el claro del invernadero, donde estaban los muebles y donde compartían.

―¿Estás bien?― le preguntó Tomoyo al verla acercarse.

―¿Shaoran realmente se enojó?― les preguntó con tristeza. Ni Yukito ni Shaoran estaban allí.

―Shaoran tuvo un problema con el tenis― le dijo Tomoyo al verla preocupada. ―Fue luego de cumplir los 17, como ocho meses atrás―

La castaña se sentó al lado de ella, para escucharla. ―¿Qué pasó? ― preguntó con curiosidad.

―No creo que sea cosas que tengamos que hablar, Shaoran es quien debe decirle que pasó― las interrumpió Eriol.

―Sí, pero conociéndolo, no creo que le diga― le dijo. ―Shaoran estaba practicando para una competencia, él y Kerberus…―

―Basta, Tomoyo, no es algo que nos incumba contar, es problema de Shaoran― volvió a interrumpirla su novio. ―Es algo que Shaoran te tiene que contar si desea―

―Si hay dos cosas que realmente le gustan a Shaoran, son el tenis y la natación― esta vez habló Meiling. ―Según él, es lo único que hace sin que el apellido Li esté en el medio― prosiguió. ―Él estaba practicando para unas competencias, Kerberus y él iban a representar el colegio, pero Shaoran se lastimó gravemente la muñeca y lo tuvieron que operar. El doctor dijo que su mano no quedaría igual y que no podría volver a jugar tenis…―

―Diablos, ustedes son exasperantes― se quejó el moreno molesto. ―No saben cuando callarse la boca―

―No creo que Shaoran nos vaya a matar por decirle el porqué no puede jugar tenis― dijo Chiharu.

―No, pero no es asunto nuestro― dijo Yamazaki, sentado al lado de su novia.

―El hecho es que Shaoran no puede jugar tenis, se fracturó por los duros entrenamientos de Kerberus― terminó la rubí. ―Kerberus…― calló cuando una mano le tapó la boca. Yue.

―Si quieres saber que pasó, espera que Shaoran te lo diga... Aunque ya ésta te ha informado― dijo mirando a la rubí. ―Y no te atrevas a morderme― la amenazó sonriendo.

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―¿No deberías descansar? ― le preguntó el gemelo menor. El castaño llevaba largos minutos nadando. ―Vamos, Shaoran, no es algo que puedas impedir, si Sakura quiere jugar tenis no creo que puedas hacer nada― le recordó.

―No me interesa si quiere jugar, lo que no quiero es que sea con ese estúpido― dijo con la mandíbula apretada.

―Pues creo que es algo difícil, Kerberus es el capitán, todos los nuevos pasan por su mano―

El castaño dejó que el agua lo haga flotar, observando el alto techo del salón de natación.

―Nunca te había visto tan interesado en una chica― le dijo al castaño y sonrió de medio lado.

―Claro, por eso no intentaste ligártela― le dijo con burla.

―Pues no negaré que cuando la vi me quedé intrigado, pero nunca pensé en algo con ella― le confesó.

―¿Debo agradecerte?― le preguntó con una ceja levantada. Que Yukito le dijera aquello no lo hacía olvidar la manera en que vio a su novia con ese rubio de pacotilla.

―Vamos, hombre, necesitas confiar en ella, que esté cerca de Kerberus no quiere decir que dejará que se le acerque o…―

―Se la quiera follar― terminó el castaño cuando el gemelo guardó silencio.

―Bueno― Yukito vio que era inútil seguir hablando de ello. Sabía del resentimiento que su mejor amigo le guardaba al rubio y que aquello simplemente no cambiaría. ―¿Qué hace Chikai en Japón?― le preguntó con curiosidad. Sabía que estaba pasando algo que el castaño no le decía, y juraba que era algo relacionado con la visita del moreno.

―No sé― le mintió. No deseaba involucrar a los chicos, sabía de lo que era capaz su abuelo. ―Seguramente vigilándonos, pero no me interesa―

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―¡¿Te has vuelto loca?!― le preguntó con voz demasiado alta Tsubaki a Sonomi. ―¿Quién te crees que eres para decidir así el futuro de mi hijo?― le dijo enojada.

―Cariño, tranquila― le pidió su esposo al ver como la mujer se empezaba a alterar. ―Sonomi, no dudo de los sentimientos de mi hijo hacia tu hija, pero me parece demasiado apresurado una boda― le dijo con tranquilidad.

―Son adolecentes, hay que forjar su futuro, un matrimonio es lo más perfecto para ellos dos―

―No, no casaré a Eriol. Si él y tu hija deciden casarse ya es cosa de ellos, pero nosotros no somos quienes para decir su futuro. Son jóvenes, pueden hoy quererse, y mañana olvidar ese sentimiento― no entendía el afán de aquella mujer por casar a sus hijos tan jóvenes, algo allí estaba mal.

―Hablé con el señor Wei― dijo con tranquilidad, dando un sorbo de la taza de té.

―Claro, ahora lo entiendo todo― dijo con algo de sarcasmo. ―Tu afán por querer casar a nuestros hijos deja mucho que decir, querida―

―Tsubaki― la llamó Ran con tono serio y cortante, escuchaba la burla y desagrado en la voz de su mujer. ―Wei no tiene nada que ver en la vida de mi hijo, Sonomi, no creo que le concierna si Eriol se casa con Tomoyo o no―

―Eriol es el nieto mayor, casándose con mi Tomoyo tendrá que asumir su titulo― por qué ir con rodeos, era una mujer práctica y si tenía que hacer cualquier cosa para la felicidad de su hija, lo haría, además Tomoyo siempre quiso al moreno.

―¿Planeas que Tomoyo se case con Eriol para obligarlo a asumir su posición como príncipe?― le preguntó con incredulidad Tsubaki. Estuvo tentada a írsele encima a la mujer, pero el apretón de mano que le dio su esposo la detuvo. ―Por un momento llegué a pensar que realmente te interesaban los sentimientos de nuestros hijos, pero claro, solamente es la posición― se puso de pie, ignorando que su esposo la mirara de manera desaprobatoria. ―Si Eriol se casa con Tomoyo, lo hará, pero no por darle una posición―

―Por el bien de mi hija haré cualquier cosa― dijo con simpleza.

―Si quieres el bien de tu hija, no uses artimañas―

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No sabía cuanto tiempo había pasado desde que Yukito se marchó, pero observando el techo del lugar podía decir que era ya de noche, la brillante luna llena era visible a través del techo de cristal del salón de natación. Había pensado una y mil veces en por qué Sakura ahora mostraba interés en el tenis. Le podía dar cualquier cosa, estar con ella en cualquier momento, pero no podía apoyarla en aquello. Se detuvo justo en medio de la piscina, era mejor salir para ir a su apartamento, ya era tarde. Miró sobre sus hombros al oír que alguien estaba entrando al agua, frunció las cejas e hizo una mueca de desagrado. Era Aya, completamente desnuda.

―¿Qué haces aquí?― le preguntó con desagrado, no pensaba que ella volvería a buscarlo. ―Te dejé todo muy en claro…― la mujer se acercó a él, rodeándole el cuello y frotando todo su cuerpo contra el masculino.

―Sabes que no te dejaré ir tan fácilmente― le susurró, inclinando su rostro sobre el de Shaoran e intentándole besar, pero el castaño desvió el rostro, lo suficiente como para que lo besara apenas en la mejilla.

―Déjame tranquilo― le dijo con desagrado, separándose de ella. ―Te dejé todo muy claro, no quiero nada más contigo, tengo novia― esto último lo dijo sonriendo.

―Esa mocosa no tiene nada que ofrecerte, es una niñita, desabrida y común.. ― pero el castaño la tomó fuertemente de la barbilla, obligándola a mirarlo.

―Cuidado con lo que dices, es mi novia, profesora― le dijo con enojo, por alguna razón la manera en la cual ella se refería a la castaña le enojaba. ―Deja de estar suplicando para que vuelva contigo, eso no pasará, ya te lo dije― le dijo apretando su agarre contra el rostro de la mujer.

―Sí, deja de estar suplicándole a un estudiante― aquella voz causó que ambas miradas fueran al pie de la piscina. Chikai. El castaño lo observó con ojos fríos. ¿Qué demonios hacía él allí? ―Me pregunto qué haría la junta del colegio si supieran que una profesora está acosando a unos de sus estudiantes, a un menor de edad― miró a la mujer, ésta estaba pálida, pues el chico sostenía una cámara de video en sus manos.

―No te metas en esto― le dijo Shaoran, alejándose de la mujer y saliendo finalmente del agua. ―No son tus asuntos, Chikai― le recordó.

―Su abuelo ya me dio órdenes― le dijo con tranquilidad. ―Deseo intercambiar unas palabras con usted, señorita Nanami―

Hizo una mueca de desagrado con la boca y decidió marcharse. Chikai le parecía un perro faldero, no entendía como alguien como él podía hacer lo que su abuelo deseaba. Definitivamente, él sería aquel nieto que un hombre como Wei necesitaba. Respetuoso y obediente.

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―Te amo― le dijo dándole un tierno beso en los labios cuando la limusina se detuvo frente a su casa. El moreno le invitó a cenar y ella no podía estar más contenta, todo entre ellos marchaba demasiado bien, como siempre lo imaginó. Eriol era realmente el chico que quería.

―Tomoyo, yo…― pero ella lo interrumpió poniendo su dedo sobre sus labios. Era obvio que para él quizás era muy pronto para decir esas palabras; sin embargo, cuando estaban a solas, juntos, no necesitaba decírselo, sino que lo sentía. ―Escúchame, por favor― tomó sus manos entre las suyas, mirándola al rostro. ¿Por qué él no se sentía completo con Tomoyo? La quería, cuando estaba con ella sentía una especie de magia; sin embargo, desde lo sucedido con Meiling no se sentía igual. Por más que deseaba sentirse como antes, por más que tenía esa necesidad, sentía que engañaba a Tomoyo y a él mismo. ―¿Has pensado en hacer formal nuestro noviazgo?― él no era tonto. El hecho de que habían tenido una cita de compromiso dejaba obvio lo que pasaba detrás, y quizás eso era lo que necesitaba.

―No…― le dijo sonrojada. Ella sabía que eran muy jóvenes para casarse. No deseaba apresurar las cosas, estaban demasiado bien. ―Estamos muy jóvenes― le dijo desviando la mirada, nerviosa.

―¿Eso crees?― la tomó del rostro, haciendo que lo mirara. ―¿No te gustaría un compromiso conmigo?― le pregunto con una sonrisa.

―Claro que sí, pero no quiero que nos apresuremos― le dijo. Él se inclinó un poco hacia sus labios y la besó con suavidad.

―Yo lo deseo, que sepan que eres mi novia, mi futura esposa― susurró, dando pequeños besos sobre sus labios.

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Ese Chikai, mierda, no entendía qué deseaba. Ya le había dicho que no regresaría, así que ese tonto se tenía que largar y dejarlo tranquilo. Entró al invernadero. Eran las 8:30 p.m. Ya era muy tarde, pero seguía allí porque por alguna razón sentía que tenía que ir a ese lugar, y apenas se acercó a los muebles, supo el porqué. Sakura.

―Sakura― la llamó, pero ésta no le respondió. Se acercó con pasos lentos, comprobando así el porqué no le hubo contestado, estaba dormida. ―Tonta― susurró. Se sentó en otro de los muebles y la observó. Su castaño cabello caía sobre su frente, sus labios estaban entreabiertos y su respiración era tranquila. Todo indicaba que ella lo había estado esperando. Definitivamente era una despreocupada por quedarse allí, si no hubiese ido, seguramente se hubiese quedado hasta mañana. Apoyó la mejilla contra una mano, observándola dormir. Sakura se veía tan inocente. Todo se estaba complicando, su abuelo no iba a descansar hasta que fuera a Londres y se alejara de la esmeralda. Suspiró, todo era tan difícil; pero por ahora era mejor despertarla, se hacía tarde. Se puso de pie y se acercó al mueble donde ella estaba, inclinándose sobre sus talones para poder quedar frente a ella. ―¿Saku?― la llamó, una de sus manos fue sobre su frente, apartando un mechón de pelo. ―Despierta, dormilona― susurró, pero ella no daba señales de despertar. Deslizó los dedos a sus labios, acariciando, se inclinó un poco para así poder unir sus bocas. ―Despierta, bebé―

Algo húmedo contra sus labios la obligó a abrir los ojos, eso no era normal. ―Shao― dijo en voz baja, cuando abrió los ojos y reconoció el rostro de su novio. ―No, no estaba dormida― dijo sonrojada, intentó ponerse de pie, pero él se lo impidió. ―Yo…― desvió la mirada del rostro de su novio. ―Lo siento―

―¿Por qué?― le preguntó sentándose a su lado. ―No hiciste nada― le dijo acomodándose los lentes y recostando la cabeza contra el mueble.

―Mírame― lo tomó de las mejillas y lo obligó a mirarla, el castaño pestañeo con sorpresa al ver la firmeza en la mirada de su novia. ―No quería que te enojaras, yo no sabía lo sucedido― le dijo con tono serio, firme.

―No quiero hablar de eso― le contestó, desviando la mirada.

Se observaron en silencio, pues ella acababa de quitarle los lentes, y lo que hizo luego lo dejó perplejo. De repente, ella se le acercó y lo besó. ¿Desde cuando hacía aquello? La sostuvo de la cintura cuando ella se sentó sobre su regazo. La lucha entre sus lenguas fue intensa, caliente y húmeda.

―¿Qué quieres?― le preguntó entre besos mientras sus manos iban hacia su trasero, apretando con suavidad. ―No deberías provocarme así―

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―Xiao Lang no está preparado para escucharte o hablar contigo―

―¿No deseas que hable con él?― le preguntó con indignación.

―Claro que no lo deseo― le dijo mirándola con dureza. ―¿Crees qué? ¿Que es algo de días, meses? No, fueron 17 años, Ieran― le recordó.

―No me impedirás que hable con mi hijo, Hien, tengo todo el derecho del mundo―

―Vaya, ahora eres valiente― se burló con sarcasmo. ―Estuviste en silencio por 17 años, no creo que Xiao Lang necesite escucharte luego de tanto tiempo―

―¡Es mi hijo!― dijo llena de indignación frente a lo que siempre tuvo miedo, que Hien le negara acercarse a su hijo.

―Vete Ieran, si Xiao Lang desea escuchar tu historia, él te buscará― le espetó. ―No quiero que regreses a mi casa, tienes prohibido volver aquí nuevamente― ni siquiera podía estar bajo el mismo techo que esa mujer, sentía su sangre calentarse apenas estaba a solas con él, le enojaba, le fastidiaba mirarla, ver que seguía tan hermosa como siempre, que a pesar de los años ella seguía igual. ―¡He dicho que te largues de mi casa!― le gritó, tomándola del brazo y arrastrándola hacia la salida de su despacho.

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―Tranquila― le susurró, tomando su rostro entre sus manos, y uniendo sus labios nuevamente. Mientras él permanecía sentado, ella estaba sobre su regazo. Ambos completamente desnudos. ―Apoya las manos en mis hombros, ya lo hicimos una vez― le dijo, delineando su labio inferior con la lengua. Aquella posición la habían probado cuando ambos estuvieron lejos, aunque esa vez había sido placer, lujuria y deseo solamente. Se deslizó con suavidad entre sus húmedos pliegues, jadeando por el delicioso placer de sentirse en su mojado canal. Había estado extrañando esa sensación, desde que regresaron no habían tenido un momento íntimo. La castaña enterró las uñas en la piel de los hombros de Shaoran cuando él estuvo completo en su interior. La última vez no había sentido todo lo que estaba sintiendo ahora, lo sentía mucho más grande de lo normal, se sentía más llena. ―Delicioso― dejó sus labios, separándose un poco de su rostro y mirándola, ella permanecía con los ojos cerrados y apenas él dejó de besarla, se mordió el labio inferior. ―Mírame, Saku― llevó sus manos hasta su trasero, empezando un lento y largo vaivén contra ella, hundiéndose de manera profunda en su interior.

Casi gimió de placer cuando ella hizo lo pedido y sus miradas se encontraron, sus verdes orbes estaban oscurecidos por el placer, por la intensidad de la entrega. Mierda, la amaba tanto, no podía dejarla como su abuelo le había ordenado. Sakura se había convertido en algo demasiado importante en su vida, desde que la conoció sintió que su vida cambiaría. Aunque al principio no le agradaba o intentaba aparentar eso, ella ahora era lo que más deseaba, añoraba y amaba. Los jadeos y gemidos de su novia lo hicieron volver a la realidad, se veía adorable así toda agitada, excitada y con las mejillas sonrosadas. Le gustaba todo en ella. Se besaron, un beso lleno de ternura cubierto por la pasión y entrega del momento, y los movimientos entre ambos se hicieron intensos, rápidos y luego más rápidos, llevándolos a ambos al tan necesitado orgasmo. Mientras ambos castaños se entregaban y compartían aquel momento tan íntimo y lleno de sentimientos, desde la oscuridad, siendo cubierto por un árbol, estaba Chikai, observando la escena con seriedad, sin muestra de pudor, y sosteniendo en sus manos una cámara de video. Aquello le serviría. Wei Li le hubo ordenado que usara cualquier artimaña para que el castaño volviera a Londres, definitivamente, aquella carta sería la que haría reaccionar al joven Li.

―No quería llegar a esto, Xiao Lang― susurró mientras observaba como ambos castaños se besaban con ternura. Sonrió, pues en el tiempo que conocía al castaño, nunca lo había visto sonreír de la manera que le sonreía a aquella chica, parecía que realmente la quería. ―Me pregunto que pasará de ahora en adelante―. Decidió marcharse, no sin antes echarles una última mirada a ambos amantes. En ese momento, él la ayudaba a vestirse. Aquella chica parecía que quería de verdad al castaño, llevaba observándola desde su llegada a Japón. Siendo sincero, todavía no entendía porqué su rey no quería a la chica, pero estaba seguro que no era simplemente por su posición social. ―Solamente hago mi trabajo, joven príncipe―

Continuará

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Bueno chicas, lamento la tardanza, pero os digo que fue porque no podía escribir, me fracturé la muñeca y cuando ya me estaba recuperando me la fracturé nuevamente, se me hacía difícil escribir y tuve que esperar hasta recuperarme, siento haber tardado tanto; pero espero que les guste el capitulo y que lo disfruten ^^…Muchas gracias a mi bella beta Estela, me ha ayudado muchísimo con este capitulo *-*…Muchas gracias guapa n_n

El capitulo, pues que os puedo decir, primero; el titulo, pues se me hizo difícil encontrar uno, tenía varios y ese creo que fue mejor, pues aquí vemos el asunto de la madre de Tomoyo, lo que ella realmente desea y luego la platica de Eriol y Tomoyo, no se sabe que se puede esperar de ellos. Segundo; Chikai, pues éste tiene mucho más de lo que realmente vino a buscar a Japón, necesita pruebas para con Aya y parece que realmente ahora si las tiene, pero claro, ahora también tiene aquella escena intima entre nuestros castaños, esperemos que nada pase respecto a ese pequeño asunto.

Ahora a contestar sus reviews

Ary pricxsaku: Hola, que bueno que te haya gustado el capitulo anterior, pues sí, Shao le dejó muy claro a Aya lo que quiere y a quien quiere, pero ésta no parece rendirse, ya la vemos como ataca nuevamente, parece que Chikai si la ha de poner en su puesto xDDD...Que linda, Touya, pues él es muy él xDDDD, veremos que más pasa entre él y Mei *-*...Espero que te guste el capitulo y que lo disfrutes *-*

dianita -chan: xDDD...Pues parece que sí, tiene algo contra el tenis xDDD...Espero que te guste el capitulo que lo disfrute y que te haya dejado una mejor idea de porqué Shao se comportó así con Saku por ella estar jugando tenis :P

Maru-chan1296: Que bueno que te gustó, pero pues Aya regresó en este capitulo, no parece darse por vencida aunque Shao le advirtiera. Espero que te guste el capitulo y que lo disfrutes ^^

Misuky-Chan: Holaaa, lamento actualizar hasta ahora, pero tuve problema con una mano, me descompuse la muñeca dos veces y me hera muy incomodo escribir y ya sabes, había que esperar que se sanara completamente x_x...Pues veremos que sucede ahora que Chikai tiene aquel video x_x...Besos y gracias por tu review.

Elfenixenlasllamas: Bienvenidaa!...Que bueno que te haya gustado la historia, espero que la estés disfrutando y que según vayan pasando los capítulos pueda aclarar toda pequeña intriga *-*...Muchas gracias por tu review y nuevamente te doy la bienvenida n_n

cristi-anitaXD: *-*...Pues Aya es muy insistente la vieja x_x...y en este capitulo lo demostró, esperemos ahora que no intente hacer algo más, pues...¿Qué le hubo dicho Chikai? xDDD...Besos y espero que disfrutes del capitulo.

twilight-love1694: Pues yo también espero poder escribir algo algún día de EB *-*...Bueno, pues esos cuatros tienen un enredo terrible, y ahora con esto de la palabra compromiso, a ver que pasa :P...Espero que te guste el capitulo y que disfrutes **

saoricl: Muchas gracias, que bueno que lo hayas entendido mejor, espero que disfrutes del capitulo.

didi: Bueno, todavía falta para ver si Eriol le dice lo que sucedió a Tomoyo, pues aquí en lo último que piensa es en el que ella se entere, esperamos a ver que sucede. Thanks por tu review, espero que te guste el capitulo y que disfrutes del capitulo.

: Que bueno que te haya gustado, bienvenida y espero que te siga gustando la historia ^^

sakuritamoon70: Holaaa...Muchas gracias por tan lindo review...Bueno hay que esperar más avance para ver como terminará todo ^^...Supongo que te refieres a Entre las Sombras, pues ayer subí el capitulo 12 ^^, no pienso dejar ninguna historia, así que no os preocupéis...Lo del grupo del facebook, si me puedes pasar el link, pues lo busco con ese nombre y no lo consigo -w-...Muchas gracias y espero que te guste este capitulo.

flor de cerezo con crema: Hola, que bueno que te haya gustado el capitulo, bienvenida, espero que sigas leyendo y que disfrutes ^^.

Espero que sea de su agrado y por favor dejen reviews.

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Besitos...

Hasta el próximo capítulo...