hello! No estaba segura si sacarle conti a esto o no, dije que dependería del manga, y chanchan! otro manga donde salen ellos dos juntos! y son dos cuadros-la obsecionada que se emociona solo por dos pinches cuadros dond no hablan mas que de cosas de trabajo-. Pero bueno otra vez vino a mi la inspiración y le puso todo un trasfondo a lo escrito por kishimoto! el capi de hoy se basa en el manga 525 de Naruto, el cual altamente recomiendo porque está muy muy bueno!

Para aquellos fans de esta historia y que gustan también de facebook, los invito a ver mi album de "Frame" -esta historia- que abrí en mi perfil, el link se los dejo aki: h t t p : / / w w w . f a c e b o o k . c o m / a l b u m . p h p ? a i d = 2 0 9 5 9 4 1 & i d = 1 0 1 7 6 0 5 8 2 9, así sin los espacios, en donde estoy recopilando todos los cuadros que utilizo en la historia n.n

sin más! De antemano, pido y suplico su review!

Moving towards the battle- Two frames

El calor era insoportable. ¿Por qué su división tenía que moverse justo por la parte más desértica de todo el campo de batalla a esperar al enemigo?

Claro se trataba de Sabaku no Gaara, el líder de ese escuadrón…

Podía sentir como cada hebra de su cabello se calcinaba y la piel le escocía un poco, en la nuca se acumulaban las gotas de sudor y caminar se hacía tedioso. Todo el camino él lo veía igual, repentinamente una roca diferente, o incluso un granito de arena más, pero el paraje árido pintaba todo el mismo plano…

Pero no podía quejarse mucho…

Temari caminaba a su derecha, como la más campante y fresca de todos entre ellos. Una sonrisa se dibujaba en su cara, no sabía él si de la emoción por la batalla, o por sentirse como en casa, o alguna de esas razones extrañas que pasan por la cabeza de una mujer. En cualquiera de los casos, dudaba que su compañía fuera la razón de la sonrisa femenina, por eso trata de mantener en bajo perfil su desgano y su lenta y calurosa agonía bajo el fiero sol.

Tornó sus ojos perezosamente a su derecha, encontró dos grandes orbes verdes mirándole de reojo, tal vez burlándose de su desgano. Al verse atrapada, desvió rápida la mirada, sonriendo más abiertamente…

¿Eran esas sus mejillas sonrosadas? No debo estar alucinando…

Miró a su izquierda. Chouji caminaba también, abatido por el sol infranqueable, arrastrando los pies. Tenía cara de cansancio y una bolsa de papitas a medio comer en su mano, la otra caía lánguida al costado de su cuerpo. EL sudor corría por su cara.

-Hermano, a mi no me va a matar ningún shinobi, será el calor el que me lleve a la tumba…

-Bebe un poco de agua, Chouji-le recomendó Shikamaru, señalando una cantimplora que traía su amigo.

Chouji la abrió y bebió un poco, e hizo una mueca de disgusto…

-Está caliente-dijo casi llorando.

-Toma, quédate con esta-intervino Temari, quien había escuchado la conversación de los dos amigos.

Chouji la abrió, y bebió. Para su sorpresa estaba fría como recién salida de un manantial. Tomó con gana hasta acabar.

-Gracias Temari-sonrió el Akimichi-¿cómo lo lograste?

-Pues vivir en Suna enseña como huirle al calor-sonrió ella-aquí está muy fresco en comparación con la aldea… ¡Qué te lo diga Shikamaru!

-Aquí me estoy deshidratando, en Suna me estaría deshidratando. ¡Todo el calor es igual!

-Llorón- le dijo Temari, logrando que el Akimichi riera un poco.

-Mendokusai, ¿ni el calor te aplaca las ganas de decirme así?

-Para nada, más bien me das más razón para decirlo.

-Esto será largo entonces-suspiró Shikamaru, mientras sus dos amigos reían.

Siguieron avanzando, Gaara subió a un peñasco alto. Divisó varios puntos a la distancia. Cerró su ojo izquierdo y colocó sus dedos frente a él, extendió la palma de su otra mano, y en ella se formo un ojo de arena. Este comenzó a flotar en dirección a lo divisado por Gaara. Las tropas esperaron abajo las órdenes de su capitán.

La imagen se fue aclarando a través de los nervios de chakra que conectaban al ojo con la formación de arena. Pronto pudo divisar las figuras.

-Son cuatro…

Sintió un escalofrío en la espina y perdió la concentración un momento, enfocó de nuevo… NO había duda, incluso después de muerto seguía igual que a como él le conoció…

-… y uno de ellos es papá-musitó más para sí mismo, al tiempo que alzaba la mano en una elegante ola, alertando a las tropas abajo.

-Esa es la señal-dijo Shikamaru levantando su vista hacia la seña de Gaara- el enemigo está cerca.

-No recibimos ningún aviso de la Alta Inteligencia-dijo Temari, haciendo lo propio y tapando el reflejo del sol con su mano- me preguntó por qué…

Los cuchicheos no se hicieron esperar, toda la tropa comenzaba a especular acerca de la batalla que pronto se avecinaba. Chouji se apuró a comer sus papitas.

-Me pregunto contra quienes nos enfrentaremos-dijo Chouji después de tragar la última papita sabor Barbacoa.

-Deben ser ninjas que ni siquiera Alta Inteligencia puede detectar-concluyó Shikamaru- digo, él solo está despertando a los ninjas más fuertes de la historia.

-Hermano… Me estoy empezando a asustar-dijo Chouji con una cara muy preocupada.

Shikamaru le miró serio, había razones de sobra para asustarse. Temari entendió el intercambio de miradas. Ella intervino.

-Descuida, podrán haber sido los ninja más geniales en su tiempo, pero ahora no son más que un montón de marionetas vacías que conservan sus técnicas. Derrotarles llevará trabajo pero es posible-y sonriendo altanera agregó- además ya sé que tendré que cubrir a este llorón, yo te cubro a ti también.

Shikamaru chistó sonriendo y Chouji se relajó un poco.

-Gracias Temari.

-No hay por qué, no hay nada mejor que desmembrar a unos cuantos cadáveres resucitados.

-Podría ser mi nuevo pasatiempo-bromeó Shikamaru.

Rieron fuerte hasta verse interrumpidos por Gaara.

-Shikamaru-san, Temari, suban un momento-dijo Gaara con su voz imparcial.

-Ya volvemos-señaló Shikamaru a Chouji, antes de subir la cumbre donde estaba Gaara, Temari asintió y subieron juntos.

Gaara veía hacia el norte, cuando los dos llegaron arriba.

-Shikamaru, son cuatro oponentes los que he divisado.

-¿Cuatro?

-Sí.

-NO será ningún trabajo derrotarles, deberíamos mandar un equipo de unas veinte personas solo para asegurarnos.

-Recuerda que esta técnica de resurrección hay que tratarla con cuidado, son cuatro oponentes, pero no son cualquiera. Entre ellos están el segundo Mizukage, el tercer Raikage y el segundo Tsuchikage…

-NO me extraña entonces que no nos hayan informado los de Alta Inteligencia-intervino Temari-el segundo Tsuchikage era capaz de mantener oculto su chakra y presencia… Pero Gaara, dijiste que eran cuatro oponentes, ¿quién es el cuarto?

-El cuarto Kazekage…-dijo sin miramientos.

Temari abrió los ojos, se le ensombreció el rostro. Shikamaru se desconcertó.

-¿Pa…Papá?-preguntó casi sin voz.

Gaara se limitó a asentir.

Con el corazón el puño, Temari miró en dirección hacia donde Gaara vigilaba. Shikamaru imaginó debía ser difícil reencontrarse con su padre… El hombre que ordenó el asesinato de su hijo menor, que nunca tomó en serio a su hijo de en medio y que no se interesó por su propia primera hija, la princesa de Suna. La mismísima Temari.

Temari apretó los puños y frunció e seño.

-Entendido, esperaremos tus órdenes-dijo antes de dar la espalda y bajar.

Shikamaru se excusó con el Kazekage y salió detrás de ella.

Llegó abajo, ella se veía un poco alterada. Chouji no parecía entender el porqué.

-¿Estás bien?-fue todo lo que Shikamaru supo preguntar.

-Seguro, ese hombre de allí no es mi padre-Chouji miró a su amigo sorprendido- como ya dije es solo un cadáver. Aparte… él no fue una figura paternal ejemplar…

Giró su cabeza y con eso dio por terminado el tema. Chouji guardó silencio y Shikamaru nada más se quedó mirándola.

Ya no era el clima el que era crudo. La guerra estaba empezando y estaba poniéndose cada vez más cruda…

-Recuerda el trato-dijo Temari de nuevo, con voz dura-y recuerda que quienes están allá afuera aunque en algún momento fueron nuestros familiares o amigos, ya no son más que sacos de polvo…

Él miró al horizonte, recordó el trato, su sonrisa y luego su expresión al saber que su padre estaba allí. Entornó su rostro hacia a ella y se limitó a asentir con una media sonrisa.