Inuyasha y todos sus personajes son propiedad de Rumiko Takahashi.

Consecuencias inesperadas

Capítulo 8

Los planes de Izanami


Cuando Sesshomaru estuvo de nuevo en el castillo, su madre fue a recibirlo al gran salón.

-Hijo mío, que bueno que has regresado, ¿dónde has estado?

-En ningún lugar que te interese… madre.- Intento seguir de largo, ignorándola, pero Izanami no lo dejaría ir tan fácil.

-Confirmaste los rumores de los últimos días, ¿no?

- ... – Sesshomaru no la miraba, su madre estaba a su espalda. Esperaba que continuara.

- ¿No quieres que te cuente lo que sé?

Él giro su cuerpo lentamente hasta quedar de perfil, pero aun no la miraba. – Habla.

-Te pones más cooperativo cuando algo te interesa, está bien. La energía de las tierras que he estado visitando antes de volver a este castillo me indicó que un demonio desconocido anda buscando poder, y ahora que esa perla de las almas fue fragmentada, muchos demonios andan en busca de estos fragmentos, tal vez a causa de estos haya una guerra Sesshomaru o un demonio como el que te mencione reúna estos fragmentos y busque apoderarse de las tierras del norte, sur, este y oeste. Es lo más lógico, pero es lo único que sé. ¿Qué averiguaste tú, hijo?, por eso te fuiste, ¿porque las energías están fluctuantes?-

Sesshomaru la miro fijamente unos minutos antes de responder.- Es culpa de ese demonio, está reuniendo esos mencionados fragmentos de esa esfera… estúpido y débil que necesita de una joya para ser más fuerte.- Se encamino a la salida de la habitación luego de esas palabras.

-Sesshomaru, ¿No te preocupa?, esa esfera puede hacer muy fuerte a quien la posea, ese demonio puede venir aquí, recuerda que le diste ese fragmento a la humana que tienes cautiva.

-No.


Mizuki caminaba por el castillo tarareando en voz baja, se dirigía a la habitación de su ama, le había pedido ir a verla en cuanto revisara el estado de la humana, aun no lograba entender el interés de su ama en esa chica, tenía un increíble poder espiritual, pero no estaba desarrollado, es decir, era inútil.

Una vez frente a la puerta, no se molestó en tocar, simplemente entró. Una vez ahí vio a su ama escribiendo sobre un pergamino, sentada junto a la ventana, su cabello suelto ondeaba con el viento y los últimos rayos de sol chocaban con su perfil, parecía que la luz rodeara su cuerpo, haciéndola lucir etérea.

-Mizuki, ya estás aquí, siéntate.- Ella detuvo su escritura y le señalo el lugar a su lado.

Una vez sentada, Izanami empezó a hablar. –Te voy a contar una historia Mizuki, algo que ocurrió antes de conocernos hace tantos años y tiempo después de separarme de Sesshomaru y mi señor Inu no Taisho.

Mizuki asintió curiosa, sobre la vida de su ama antes de conocerla no tenía mucho conocimiento, solo sabía que el señor Sesshomaru era su hijo y que había abandonado a su señor cuando este tuvo descendencia con una humana.

-Conocí a una encantadora hembra demonio, tenía forma humanoide como nosotros, era muy poderosa. En esos tiempos vagaba por diversas tierras sin meterme con nadie, hasta que la encontré a ella, también era nómada, pero la diferencia era que estaba preñada, de un demonio líder del norte, también poderoso, pero que estaba comprometido y ella solo fue un entretenimiento. Porque ella era hija de un monje convertido en demonio y una hembra demonio, lo cual no te da mucho estatus entre los demás demonios, pero que la convirtió a ella en algo sorprendente, una mezcla absurda y magnifica de energía pura y demoniaca y en perfecta armonía.

-Ella tenía que ser impresionante, ¿Qué pasó con él bebe?, ¿Era como ella?

-Tenía esas mismas cualidades, y ella, por su herencia humana…

El silencio se apodero de la habitación por unos instantes, Izanami parecía perdida en los recuerdos. –Ella podía alimentarlo, como se alimentan los bebes humanos, así tomaba la energía que necesitaba, ella también se alimentó de su madre demonio de esa forma, por la influencia humana del monje cuando era un bebe. Todo eso Mizuki, por la energía espiritual, una energía pura, que rompe las barreras entre nuestras razas y nos vuelve más fuertes a nosotros los demonios. Yo quiero eso, el poderoso clan de los perros necesita eso para ser más poderosos.-Sus ojos ámbares brillaban como el oro, por los pensamientos ambiciosos que tenía en mente.

-Ama…ama usted, usted quiere usar a la chica humana, ¿No es así?, para el señor Sesshomaru.

-Creí que sería más obvio, pero sí, quiero usarla, ella es perfecta, solo tenemos que pulirla y tratar que Sesshomaru la tome una vez ella se convierta, que tengan descendencia, que sean varios y una vez listos, tomar lo que nos pertenece.- Al terminar una sonrisa inquietante jugaba en sus labios.

-Sabe que la apoyare de la forma que sea necesaria Ama Izanami, cumpliré todas sus órdenes.

-No lo dudo mi querida Mizuki, por eso te conté todo.

-¿Qué quiere que haga?

-Conozco el camino para transformar un humano, pero no es fácil, es doloroso para el humano, y este puede morir si no tiene un alma fuerte y se necesitan muchas cosas, las cuales tienes que conseguir en destinos alejados y tal vez peligrosos, pero eso no será un problema para ti. Mientras tanto yo la preparare, su poder espiritual tiene que estar desarrollado, o nada que planeo tendrá sentido.


Un rato antes de la cena Izanami entro a la habitación de Kagome, la encontró junto a la ventana, mirando a través de ella con expresión de aburrimiento. Al escuchar la puerta, esta última giro su cabeza, mirándola, a la vez que le dedicaba una sonrisa. –Señora…

-Hoy nos acompañaras a la cena en el salón principal, no eres una invitada especial para mi hijo ni estas imposibilitada de caminar, como para que la servidumbre te atienda en tu habitación.-Izanami le entrego un pequeño paquete.- Tienes que estar lista tan pronto se ponga el sol, Mizuki vendrá por ti.-Sin darle tiempo a decir nada más, salió de la habitación dejando sola a Kagome.

¿Cenar en el salón principal?, ella está loca, si Sesshomaru me ve ahí… pero él no ha vuelto, o eso creo… No tengo opción, tendré que ir, ella no tiene la apariencia de alguien que acepta un no por respuesta.

Con cuidado desenvolvió el paquete que le fue entregado, al abrirlo encontró una delicada tela de color verde, parecía seda o terciopelo. Lo desdoblo y coloco sobre la cama, admirándolo impresionada. Era un hermoso Kimono de seda verde, con pétalos de Sakura rosa en las largas y amplias mangas, el obi era de color azul como el cielo y al final de la falda había más pétalos de Sakura.

En el paquete había más cosas, como un prendedor para el cabello y una especie de concha, en la cual había un líquido espeso rojo, parecía labial. Observo todo un rato más, embobada y asombrada antes de empezar a desnudarse y colocárselo, envolvía su cuerpo como si ese fuera el lugar al cual pertenecía.

No podía hacer gran cosa dada su situación, pero intento peinarse su largo cabello azabache con los dedos y lo recogió en un sencillo moño que dejaba un par de cabellos sueltos enmarcando su rostro. Aplico sobre sus labios algo del contenido de esa pequeña concha, dándoles un ligero tono rojizo.

Apenas termino de arreglarse, el sol se ocultó y tocaron a su puerta.

Al abrirla, se encontró con Mizuki, esta vez vestía diferente, llevaba también un kimono en tonos naranjas y marrón con un obi azul. La saludo con cortesía y la siguió a través de los pasillos, hasta llegar a unas puertas el doble de altas que ella, estas eran totalmente de piedra y estaban abiertas en ese momento. Las atravesaron a la par y de inmediato se maravilló de la vista. Ventanas desde el techo hasta el piso rodeaban la estancia, dejando entrever el cielo nocturno plagado de estrellas brillantes y una luna brillante y totalmente llena. Multitud de antorchas alumbraban en las paredes y velas en las esquinas que serían tan altas como Mizuki completaban la iluminación del lugar. Al centro una larga mesa tradicional, con mullidos cojines para sentarse, rebosantes platos con comida de todo tipo terminaban la magnificencia del lugar, aunque en su mayoría era preparaciones de carne de todo tipo y en el centro de la mesa, un decorado con flores de Sakura, como las que podía ver desde su ventana.

Izanami ya se encontraba allí, sudando perfección y belleza con todo descaro. Su cabello color plata caía totalmente suelto por su espalda, terminaba con curiosos risos en las puntas que llegaban casi a sus tobillos. Su kimono blanco caía suelto por sus hombros, revelando un discreto pero insinuante escote, su obi era de color negro con detalles en rosa y blanco.

-Comenzaremos la cena cuando Sesshomaru llegue, no debe tardar… Kagome, te sentaras allí.- le dijo Izanami indicándole un lugar en frente del de ella y justo al lado del que suponía ocuparía Sesshomaru; justo en la cabecera de la mesa.-Supuse que no sabrías donde sentarte.

-¿Qué?, pero, ¿Eso no es justo al lado de Sesshomaru?, no creo que a él le agrade eso.

-Por supuesto que no me agrada…- Kagome se quedó inmóvil cuando escucho esa fría voz, parecía recién salida del mismísimo polo norte. Sesshomaru había hecho su aparición y no sonaba feliz, bueno, el nunca sonaba feliz.- ¿Qué hace esta inmunda humana aquí? Y usando uno de tus kimonos… madre.

-Ella está aquí y usa uno de mis kimonos porque yo así lo decidí querido hijo mío, no hay nada más que decir, toma asiento, estábamos esperándote, no es muy cortés de tu parte hacernos esperar.

Kagome se sentía la manzana de la discordia, o peor, el juguete de la madre de Sesshomaru, si a este último le temía, ella le aterraba, parecía creer que ella era un juguetito, exponiéndola así delante de su hijo. Izanami hacia el avioncito, Sesshomaru abría la boca y ella era la comida en el juego.

Pero a pesar de sus desvaríos, nada paso. La tensión en la habitación se podía cortar con un cuchillo y la temperatura parecía haber bajado unos cuantos grados, pero Sesshomaru solo atino a sentarse en el lugar que le correspondía, al parecer respetaba las decisiones de su madre sin chistar y aparte pretendía ignorarla, y eso estaba muy bien para ella, aun mas, le ayudaría, sería tan silenciosa como una sombra, no quería enojar a Sesshomaru y dudaba que Izanami la salvara si él intentaba algo.

Izanami pareció satisfecha y todos tomaron asiento.

-Kagome, pedí que prepararan comida apta para humanos, no creo que te guste la carne de demonio.- El comentario parecía una broma, pero reírse seria como romper esa promesa interna de ser lo más invisible a ojos de Sesshomaru.

La cena transcurrió en su mayoría en silencio, con comentarios ocasionales de Izanami y Mizuki, de la boca de Kagome no salió una sola silaba en todo el rato, tampoco había mirado a Sesshomaru, este estaba justo a su lado pero no se atrevía a posar sus ojos sobre él, este tampoco había pronunciado palabra.

Al terminar y después de que la servidumbre se llevara todos los platos, Izanami tomo la palabra.- Realizaremos la acción de gracias, tomémonos todos de las manos.- Kagome alzo la vista alarmada, ¿TOMARSE LAS MANOS? ¿Quién? ¿Ella y Sesshomaru?, debía ser una broma.-Oh claro, lo siento Kagome, no debes saberlo. Hoy es un día especial para los demonios de las clases más altas, lo que los humanos conocen como el equinoccio de primavera es un momento de agradecer para nosotros los demonios, por la grandeza de nuestra especie, pedir por su preservación y es oportunidad para reunir a los clanes. Sesshomaru y yo somos los últimos de él clan de los Inu, y aun así somos los más poderosos de los cuatro grandes clanes, nosotros tenemos que agradecer aún más, a ese ente que los humanos llaman Kami, para nosotros es Rushifa, el dios de los demonios.- Kagome asintió asombrada, nunca había escuchado de costumbres religiosas entre demonios en libros de mitología, pero era comprensible, al parecer solo los de clases más altas lo hacían y como estaban extintos en su época, la tradición se había perdido.- Pero basta de palabrería, debemos honrar este día, Sesshomaru, toma la mano de Kagome.


Holaa

Como pueden ver me inspire y decidí traerles el capítulo antes, espero les haya gustado, vamos a ver qué pasa en el próximo.

No estoy muy segura de la religión de los demonios, así que decidí inventarlo (Rushifa es Lucifer en Japonés o eso es lo dijo el traductor de Google).

Ahora saben los planes de Izanami, ¿pero podrá llevarlos a cabo?, ya lo veremos.

Que piensan de ese demonio que está dándose nombre por ahí, ¿Quién será?

Ojala en el próximo pueda darles una mini escena Sesshome, ya va siendo hora, asi sea pequeña.

Quiero agradecer, ya que deje la historia abandonada un tiempo (casi dos años), a todos los que me dejaron reviews desde el inicio del fic, por creer en él.

.Hiruma, chovitap, MaJoSaMe, .tom reddley, misue.d, Carito-Chan0, ISYLU, rosedrama, Seishime Haruno, Alinita28, Kagome Koga, aomelamasbonita, Cubi, HermsP, Alinita28, Mizu-shan, Sakura kunoichi no power, Sasunaka doki, Roxii C, marzelinefilth, .73, Kagome de Taisho, horus100, DarkinocensDLT, arch0908, TenoriTaiga, Sophie San, Chikanime, ESilvana89, Yumel22, Quetzaly-Taisho, natalianime, Jesica Ryuzaki Hyuga Higurashi.

Muchas gracias.

Nos vemos en el próximo.

Saludos

CS