¡Hola todos! Capi nuevo en tan poco tiempo…siii. He de aprovechar el tiempo libre y la inspiración.

A la historia le va quedando muy poquito y todo será desvelado….

En este capi hay muchas emociones y ¡lemon!.

Espero que lo disfrutéis. Un saludo y muuuuchos besos a todos.

Capitulo 15

Goku:

-¡¿Qué?!...Goku…¿esto es una broma?- Decía Chichi al otro lado del teléfono notablemente alterada.

-No Chichi…lamentablemente no lo es. Yo…lo siento pero no puedes seguir trabajando a mi lado. –Decía realmente apenado, notando como era mucho más difícil de lo que había pensado.

-No entiendo a que viene esto…¿Podemos vernos y hablar?...Sé que falte varios días al trabajo, pero ya te explique ayer cual fue el motivo ….y no pareció importarte mucho…pero de todas maneras…¿qué clase de locura es esta?. No te entiendo. Nos vemos y hablamos ¿ok?- Decía Chichi confundida, tratando lógicamente de buscar una explicación.

-No Chichi, no comprendes….¡no podemos vernos más!-Dije alzando la voz fruto de la desesperación para que Chichi entendiera.-Lo siento mucho. Mañana puedes venir a recoger tu despido. -Dije abatido.

-Goku…. estoy alucinando…pero ¿por qué?, ¿qué ha pasado?...sé que algo ha ocurrido, estoy segura. Tienes que decírmelo.- Dijo Chichi con mezcla de suplica y desesperación. -Si no quieres que vuelva a trabajar en tu gimnasio, ok…adelante. Pero no me saques de tu vida, no me digas que no quieres verme mas por qué no te creo…Te conozco de hace poco tiempo, pero es como si te conociera de toda la vida….sé cómo eres, como sientes y por eso mismo sé, que lo que paso ayer en mi cocina fue de verdad-Decía Chichi con un hilo de voz cada vez más débil, percibiendo como esta se quebraba.

-Mañana además de tu despido, podrás recoger un cheque con la indemnización.- Fue lo único que se me ocurrió decir, sintiendo como el corazón se me iba arrugando por momentos.

-¿Qué?...¡No quiero tu asqueroso dinero!- Dijo Chichi gritando, colgando la llamada a continuación.

Me quede un segundo con el terminal de teléfono que había en la cocina pegado a la oreja, mientras escuchaba los tonos de llamada finalizada.

Me sentía mal, realmente mal. No me había parado a pensar en lo que sentía por Chichi, pero aquella punzada fuerte en el pecho y aquel dolor en el estomago, me decían que ella era más importante para mí de lo que pensaba.

No vería mas a Chichi, ni la tendría cerca, ni la podría besar…nunca más…pero si no hacia aquel gran sacrificio, mi tío podría empeorar y llagar a morir.

En ese momento, mi primo Vegeta entro por la puerta como un huracán, derribando todo a su paso.

-¡Tú!…¡asqueroso hijo de puta!…-Dijo colérico directo hacia mí. - ¡¿Por qué mi padre esta así?!, ¡¿Qué le dijiste?!. Escucha, sea lo que sea que te haya dicho esa zorra..¡Miente!-Dijo Vegeta fuera de sí, tirando una silla de la cocina al suelo.-Fuiste tú solito el que lo hiciste…nosotros no tuvimos nada que ver…¡Fuiste tú!.- Volvía a decir Vegeta tirando una jarra de agua contra el suelo.

-Vegeta…¿de qué me estás hablando?- Dije confuso y sorprendido al verle así.

-¡¿Qué de que estoy hablando?!, lo sabes muy bien estúpido…¡no te hagas el imbécil!. La chica al fin lo ha recordado y te ha contado una versión falsa para engañarte y decírselo todo a mi padre…¡poniéndome en su contra! …quieres quedarte con toda la herencia ¿verdad?...¡tú y esa puta queréis quedaros con todo!- Dijo vegeta al fin encarándome.

-Pero…te repito que no tengo ni idea de lo que me hablas…¿Qué te pasa?- Dije atónito. -Tu padre se enfado mucho porque según él, Chichi le humillo. Y quería….quiere, que deje de verla. Yo me negué, no hice nada más.-Dije molesto y mirando a Vegeta desconcertado.

Vegeta respiraba agitadamente y me miraba fijamente a los ojos, con la mandíbula apretada.

-Aún esta inconsciente….y espero por tu bien que cuando mi padre despierte, lo que me has dicho sea cierto. No te metas en mi camino Kakarotto…quedas advertido. – Dijo señalándome de manera desafiante, dando media vuelta para desaparecer.

Chichi:

Al día siguiente de mi conversación telefónica con Goku, fui al gimnasio como de costumbre pero no a trabajar, si no esta vez a recoger mí despido.

Algo raro estaba pasando, mi intuición me lo decía.

Subí por las escaleras que llevaban hasta el despacho de Goku y gire el pomo de la puerta, pero está estaba cerrada con llave.

-¿Pero qué?..Goku…¿Goku estás ahí?- Dije casi aporreado la puerta y girando el pomo sin éxito.

Seguí llamando a Goku, pero nada. Nadie contestaba y el despacho definitivamente estaba cerrado.

-Vale, vale….esto ya está siendo de mal gusto-Dije suspirado y apretando los dientes por el enfado.

Enojada baje de nuevo hasta la planta principal, cuando sentí ganas de ir al baño.

-Me tomo las molestias de venir aquí y Goku ni me da la cara-. Mascullaba refunfuñando, cuando entraba en los vestuarios en donde estaban los baños de los alumnos.

Una vez salí del lavado, pase de nuevo por los vestuarios y vi que sin darme cuenta, me había metido en la zona de caballeros.

-Dios mío, estaba tan inmersa en mis pensamientos que no me he fijado en donde me he metido.- Pensé abochornada acelerando el paso, cuando vi que alguien estaba en una de las duchas.

Sin hacerlo para nada a posta, vi por la esquina del ojo el trasero del hombre que se estaba duchando y por un momento creí reconocer. Sacudí la cabeza ante aquel disparate y seguí el paso.

- Perdón- Dije avergonzaba, mientras salía del vestuario a toda prisa.

-¿Chihi?- Dijo aquel hombre saliendo de la ducha desnudo y mojado.

-¿Goku?…¡ayy dios mío tapate!- Dije ruborizada y cubriendo mis ojos con las manos, como si no lo hubiera visto antes desnudo.

-Ehh si lo siento jejee, me emocione- Dijo Goku sonriendo, mientras descolgaba una toalla y se la anudaba a la cintura. -Habías venido a por tu despido ¿verdad?.-Dijo acercándose hasta llegar a mi altura.

-Si-. Dije escueta sin mirarle, evitando así que cruzásemos la mirada.

- No creí que vendrías tan pronto, así que me di una ducha después de entrenar. – Dijo levantando el brazo para echarse un spray desodorante. –No es algo que urja, tenias todo el día para venir- Dijo finalmente con esa sonrisa bobalicona que lo hacía tan encantador.

-A mi no tienes que decirme cuando ir a un sitio, o lo que urge o no urge. Yo hare lo que me dé la gana…tu ya no eres mi jefe…¿no es así?.- Dije finalmente mirándole, de manera furiosa.

-Si tienes razón, yo solo quería que no te tomases molestias para esto….Lo siento Chichi, pero esto tiene que ser así. -Dijo Goku cambiado su expresión despreocupada a una triste.

-Pues no entiendo nada ¿sabes?, no entiendo como de la noche a la mañana, hacemos el amor y luego me dices que bye bye…No creía que fueras de esos…-Dije sintiendo como sin tenerlo previsto por el orgullo, mis ojos se llenaban de lagrimas. –He sido tan tonta… claro, como un niño rico como tú, viniendo de la familia que viene, iba a estar con alguien tan poca cosa como yo.-Dije entrando en llanto.

-Chichi…no, para por favor para, no puedo verte así. No soporto que llores, me duele el pecho cuando lo haces-. Dijo Goku abrazándome contra su desnudo y aun húmedo pecho. – Tú no eres poca cosa…eres la chica mas especial que conozco. Eres lista, fuerte y cariñosa…eres genial. Además cocinas de maravilla- .Dijo, cuando yo al escuchar aquello, me separe de sus brazos enfadada y lo empuje. –Eyy, eyy que lo último lo dije en broma…aun que es cierto también-. Dijo Goku sonriendo nervioso, mientras me abrazaba de nuevo.

-Entonces…¿Por qué quieres que salga de tu vida?-Dije levantando la cabeza para mirarle a los ojos.

-Ufff- Resoplo Goku agobiado.- A mi tío…a mi tío le dio un infarto por mi culpa. Cuando entre con él en su despacho después de nuestra aparición en la cena, me exigió que dejara de verte y yo me negué. Entonces discutimos de manera acalorara y él se empezó a sentir mal, hasta que le dio el ataque. Me dejo muy claro que quería que no trabajases más aquí y que salieras de mi vida. – Dijo Goku mirándome con cara de preocupación.

-Goku…eso es horrible. Lo siento…lo siento mucho- Dije comenzando a llorar de nuevo, pero esta vez sintiéndome culpable y miserable.

- Chichi, por favor, no hagas eso no lo soporto- Dijo Goku abrazándome más fuerte que antes contra su pecho. –Bulma me dijo que la salud de mi tío es delicada y que si tiene más sobresaltos podría morir.- Dijo Goku suspirando al final.

-Entonces supongo…¿Qué esto es una despedida?- Dije sintiendo como mi corazón se partía en mil pedazos, mientras Goku asentía con la cabeza. –Espero que tu tío se mejore pronto.- Dije separándome de su pecho, mientras entraba en un profundo llanto. –También quería darte las gracias…no entenderás el porqué, pero gracias a ti he podido enterrar una cosa que me hizo mucho daño en el pasado. Además ha sido una verdadera suerte el haberte conocido…Solo me queda decir…adiós- Dije extendiendo mi mano, cuando un muy triste y devastado Goku, agarro mi mano para despedirse. –Espero que tengas mucha suerte en tu vida.- Dije aun con lagrimas en los ojos dando media vuelta para irme de allí, cuando de repente….

-Chichi espera.- Dijo Goku agarrándome del brazo para girarme y lanzarse a mis labios para darme un profundo beso.

Aquel beso como todos sus besos, estaba lleno de pasión y fuerza. Una fuerza animal que me dejaba sin aliento.

Yo correspondí a aquel beso con la misma pasión, mientras daba un salto y me embrollaba alrededor de su cintura para que el me sostuviera por el trasero.

Goku iba caminando hacia atrás conmigo encima, mientras nos besábamos cada vez con más intensidad, hasta meternos dentro de una de las duchas.

Nos separamos un instante jadeando y respirando ahogadamente, cuando desate lentamente la toalla de su cintura, hasta tirarla al suelo. Goku estaba completamente desnudo y yo me empecé a desnudar para "solidarizarme" con él, mientras nos besábamos nuevamente.

Ninguno de los dos podía evitar lo que iba a ocurrir de nuevo, aquella fuerza de atracción era tan potente que nada podía pararla, sin ni siquiera reparar en que estábamos en los vestuarios del gimnasio y que cualquiera podría entrar de un momento a otro.

Una vez desnudos, podía notar en toda su plenitud la suave y calidad piel de Goku. Yo acariciaba despacio y recreándome, sus tonificados brazos, pecho y abdomen. Por otra parte, Goku no paraba de besarme. Ahora lo hacía de manera más dulce, con pequeños besos bajando de mi boca a la barbilla hasta bajar por el cuello y recorrerlo entero. Siguiendo aquel camino de besos por mi piel, se topo con mi pecho y se separo un poco de mi, para mirarlo con perspectiva.

Pude notar como su respiración se iba haciendo más pesada y puse una mano en su pecho para notar los acelerados latidos de su corazón, encendiéndome cada vez más. Goku inclino su cabeza y siguió con sus besos pero esta vez, sacando ligeramente la lengua de forma tímida. Ahora saboreaba la piel de mis pechos, lamiendo mis pezones haciéndome pasar de los suspiros a los cada vez más altos gemidos.

Mientras lamia uno de mis pechos, con una mano daba ligeros masajes al otro, retorciendo suavemente el pezón. Me quería morir de placer, cerrando los ojos y mordiendo mi labio inferior. Pero de repente, deje de sentir la mano de Goku que estaba masajeando mi pecho, para sentirla en mi entrepierna.

Sin parar de lamer mi pecho, Goku iba jugando con un dedo dentro de mí. Empecé a gemir escandalosamente, cuando Goku me dio un húmedo beso para ensordecer mis gemidos y que muriesen en su boca.

-Ahhhh…para Goku, ahhh …pa…para…- Suspiraba y gemía llegando casi al clímax, cuando abrí el grifo de la ducha y Goku se separo de mi.

Bajo los chorros de agua templada, lo mire embobada y loca de lujuria, agarrando su muy duro miembro.

-Por favor…hazme el amor.- Le dije suplicando, mientras ahora el gemía tras los rítmicos masajes que le daba a su punto de placer.

Entonces, Goku me beso apasionadamente casi asfixiándome con su lengua, cuando me agarro nuevamente por el trasero para subirme encima de él y embestirme contra la pared de la ducha.

-¡Ahhhh!- Grite muy alto cuando lo note dentro de mí.

No sabría decir quién gemía más alto de los dos, pero sin duda se nos estaba escuchando a un kilometro de distancia.

Levante la cabeza con los ojos cerrados por el éxtasis y al abrirlos ligeramente, vi una barra de metal en el techo de la ducha. Entonces una idea paso por mi mente y me agarré fuertemente con las manos para aguantar y hacer más fácil, la postura en la que me encontraba, mientras sentía las cada vez más rápidas y fuertes embestidas de Goku.

Parecía que aquella estrecha ducha en donde estábamos haciendo el amor, se iba a romper a causa de lo apasionado de nuestro encuentro en cualquier momento. Las paredes crujirán y se movían, temiendo francamente por su estabilidad.

Y cuando ya no podía sentir más placer…

-AAAHHHHHHH…- Una oleada de electricidad sacudió todo mi cuerpo, haciendo que gritara escandalosamente, viendo como Goku me imitaba a continuación.

Me solté de aquella barra de metal y caí rendida sobre Goku.

Goku:

Sonreía tontamente mientras miraba a Chichi vestirse. Esteba feliz de haber practicado el sexo otra vez con ella, pero al mismo tiempo sentía una profunda tristeza al pensar que había sido la última vez y que era una despedida.

-Debo irme- Dijo Chichi mientras se secaba el cabello con una toalla. – Si te parece bien mándame por correo certificado el despido y yo te lo devolveré firmado…quiero irme rápido de aquí. Sé que nos han escuchado y me muero de la vergüenza. – Dijo con la cara completamente roja.

-Tienes razón.- Dije también avergonzado recordando lo que había pasado y lo que quizás casi todo el gimnasio había escuchado. –Note preocupes, yo te mando el despido con un mensajero. -Dije intentando forzar una sonrisa, para camuflar mi tristeza.

-Gracias…He de irme rápido tengo que comprarle a Biscuit su comida-Dijo Chichi dejándome perplejo.

-¿Biscuit?...¿es tu novio?- Dije arqueando una ceja algo molesto.

-¿Qué?...jajajaja ¡no! jajajaj, Biscuit es mi perro – .Dijo Chichi riendo.-Verás no te lo he contado…bueno no he tenido tiempo la verdad…. Mi perro desapareció hace dos años y ¡ayer lo encontré!. Lo encontré en tu mansión, cuando te esperaba en el jardín. –Dijo sonriéndome cuando caí en la cuenta de algo.

-Espera una cosa…tu perrito…¿es un perro salchicha de color marón muy simpático?- Pregunté extrañado.

-¡Sii es un teckel, color chocolate!-. Dijo Chichi entusiasmada.

-¡A sí que "Marroncito" es tuyo!-.Exclame sorprendido. –Un día apareció de repente en mi jardín asustado y hambriento. Yo lo estuve cuidando y alimentando durante dos años .Pero… ¿Cómo que marroncito es tuyo?.- Seguía sin entender.

-Créeme que yo estoy más sorprendida que tú….El destino a veces nos pone en el camino cosas que no tienen explicación…juega con nosotros a su antojo, como si fuéramos títeres o piezas de un tablero, haciéndonos jugar a su juego – Dijo Chichi con lagrimas en los ojos amenazando con salir. –Me tengo que ir…nunca te olvidare Goku…cuídate mucho.- Dijo rompiendo a llorar.

Era superior a mí verla llorar. Sentía que me faltaba el aire y una fuerte punzada atravesaba mi corazón cuando la veía sufrir.

-Chichi…te voy a echar mucho de menos…muchísimo.- Dije destrozado viéndola marchar.

To be continued …

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