Los personajes presentes no me pertenecen.


Facebook


Había decidido abrir una de esas páginas por la gran insistencia de sus hijos. No era un fanático del ciberespacio y menos disfrutaba estar mucho tiempo frente a una computadora, como a su hijo Albus, (culpa de su miope visión...) Pero tales eran las palabras de sus tres niños ya no tan niños, que un fin de semana le pidió ayuda a su pequeña, para crearse un perfil en esa cosa que llamaban Feisbuk.

- Se escribe Facebook, papá – Rió Lily, cuando vio como escribía aquella palabra en el buscador principal. – ¡Es increíble que te hayas hecho uno! Ahora sí tengo un padre que va acorde a la tecnología – habló la muchacha, toda avispada, mientras le ayudaba a entrar a su perfil.

- No entiendo muy bien cómo es esto, princesa – Harry miró cómo su hija ocupaba una silla a su lado, pacientemente, lista para explicarle el manejo de aquella página llamada Feisbuk.

- Es muy simple. Primero, seleccionemos una foto para tu perfil – Lily abrió la carpeta de imágenes y seleccionó una muy bonito foto, en la cual estaban los cinco Potter en la piscina, tomada desde la cámara digital muggle que el abuelo Arthur le regaló en navidad. - ¿Ves? Ahora, cuando alguien entre a tu perfil, verá esta foto de nosotros justo aquí – Señaló el cuadrito donde aparecía la imagen.

- Bien. ¿Y ahora? ¿Ya lo puedo usar?

- Espera. Debes poner algo de ti, tus gustos, tus intereses… - Lily se esmeró mucho contestando aquellas cosas de su padre, sin necesidad de preguntarle. - ¿Interés? Amistad, ¿cierto? Está la opción de "mujeres", pero mamá…

- ¡Ni se te ocurra!

- Ya casi. Ahora sólo necesitas enviar la solicitud a tus amigos, ¡y así todos podrán saber de todos!.

¡Ah! A eso era lo que se refería Ginevra al decir "el chismografo virtual". Todos sabían de todos. Ya, ya.

- ¡Listo! Les mandé la solicitud a James, a Albus, a la tía Hermione, al abuelo…

- ¿Arthur tiene uno? - era difícil imaginarlo a su edad, frente a una computadora. Pero, siendo fanático de todo artefacto e ingenio muggle, por supuesto que debía tener un feisbuk.

- A Teddy, al prof. Neville, a Hagrid… - De acuerdo, ¿quién al parecer no tenía Feisbuk? ¡Gracias a Dios tenía unos hijos modernizados! - Ahora sólo tienes que esperar a que acepten y ya. Iré por mi laptop y te confirmaré enseguida. – Lily salió de la habitación, dando brinquitos tal cual una bailarina. Estaba muy animada y contenta.

Harry miró el monitor de la computadora, ese Feisbuk tenía muchos juegos. Rápidamente, entró a uno donde salían un montón de animalitos junto a una granja, a la cual le tenía que comprar cierta cantidad de frutas y verduras para obtener puntos… era un juego bobo… un juego bobo en el cual se le fue toda la tarde... y parte de la noche.

- Amor, ¿puedes dejar esa máquina? Desde ayer andas pegado a esa cosa que…

- Necesito hacer compras para mi granja... – Ginny bufó. Imaginaba que Harry estaría vicioso con esa página hasta… sólo Dios lo sabía... Sirvió una taza de café bien cargado y se lo colocó a un lado en la mesa.

- Hoy iré con Hermione a hacer unas compras para nuestro viaje de vacaciones. ¿Necesitas algo? – Harry sólo hizo un vago gesto de negación con la cabeza, sin despegar sus ojos de la luminosa pantalla. – Bien. Espero al llegar, no encontrarte con un dolor de cabeza por estar forzando la vista frente a esa computadora, ¿de acuerdo?

- Ajá. Te amo. Vuelve pronto. – No apartó su visión de la estúpida granja, parecía un poseso. Ginevra blanqueó los ojos y salió de la cocina, sin agregar nada más.

Estaba solo, pues Lily había dormido la noche anterior en casa de una amiga y aún no había regresado. James había salido desde muy temprano al Gimnasio, y Albus había quedado con Hugo y con Rose de ayudarlos con no sabía qué cosa sobre unas escobas voladoras.

Solito en casa, pero tenía feisbuk, así que la cosa no era tan aburrida.

Había muchos juegos en esa página, no sólo el de la granjita con los animalitos. Dio click sobre uno donde aparecían unas pelotitas, que debía hacer estallar con una pistola que se movía según a donde fuera su mouse. Le gustó, era divertido.

Llevando ya 10.120.350 puntos, recibió una notificación de alguien que había comentado algo en lo que Lily dijo, era su muro; fue hasta allá después de asegurarse de guardar su partida (después de llegar a 10.120.350 puntos, no podía arriesgarse). Un comentario de Neville se veía en su perfil.

Neville Longbottom: Ya era hora, compadre. Faltabas tú.

Y arribita un anuncio que decía "A Neville Longbottom le gusta esto"

Otra notificación…

Lea Tanner: ¡Hola, Harry! Muchísimo tiempo sin saber de ti. ¿Cómo estás?

¡Lea Tanner! Apenas y la recordaba. Con esa sensación pica-pica que causaba la curiosidad, ojeó por un ratito su perfil. Vio fotos, leyó comentarios… en menos de cinco minutos pudo enterarse de la mitad de la vida de su antiquísima compañera de Hogwarts. Casada, con un hijo que al parecer se había decidido por una carrera muggle en la universidad de Londres.

Nueva Notificación.

George Weasley: ¡Cuñado! Ahora podremos comunicarnos por aquí. ¿No te parece genial?

Una notificación más.

Fleur Delacourd: Bonjour, Aggy.

Siete notificaciones más…

¡Esa cosa era increíble! En tan sólo una hora (como mucho) se enteró de casi toda la vida de un considerado grupo de gente que hacía años no veía. Los muggles y su ingenio. No necesitaban de las somníferas clases de Trelawney para adivinar qué ocurría con las personas a su alrededor.

Parvati Patil se estaba divorciando porque, al parecer, su marido la estaba engañando con una de sus secretarias. Dios, ¿cómo publicar eso?

Dean Thomas había sido despedido de su trabajo pero fue contratado por una compañía mejor, por lo que ahora ganaba muchísimo más (para los interesados, Dean Thomas diseñaba bocetos para vallas y anuncios publicitarios en el mundo mágico). Al parecer, había tenido problemas con su esposa, mas la foto de ella y él besándose como si no hubiese un mañana le dieron a suponer que no fue algo tan grave.

Cho ya estaba retirada del modelaje, por supuesto, el tiempo pasó y no la perdonó. Aunque Harry la consideró muy guapa en las fotos de su perfil. Ya no podría modelar en pasarelas, pero seguía conservándose bien al menos en fotografías.

Susan Bones era maestra de Kínder y estaba casada con un tal William que era medi-mago en San Mungo.

Vio fotos de su ahijado Teddy con Victoire; fotos de Hagrid con muchas de sus criaturas extrañas (varias personas comentaban esas imágenes, exclamando lo realistas que se veían aquellos "montajes") muggles, claro está; ¿Por qué Hagrid aceptaba a un montón de personas muggles que seguramente no conocía? Observó fotos de una fiesta a la cual asistió Luna con una rarísima vestimenta. Fotos de Ron, en un partido al cual no lo invitó.

- Desgraciado - Murmuró, frunciendo el ceño. Seguramente Ron pensó que no se enteraría. ¡JÁ! pues ahora tenía feisbuk, se enteraría de todo. ¡De todo! - ¡Que fea está! – Pensó al llegar, sin saber cómo, al perfil de Romilda Vane.

Esa página era una cuestión bastante seria. Por lo que veía, todos gozaban de publicar algo más que simples comentarios sobre su día. ¡Más de la mitad de la vida de las personas estaba ahí! Obvio, "el chismografo virtual", tal como lo llamaba su mujer. Mejor sobrenombre no podía tener, incluso era mejor que Feisbuk. Porque sí, les veía la cara a todos, pero no había libros por ningún lado.

Queriendo volver a su juego de bolitas y disparos, dio click en donde decía Inicio, topando sus ojos ya cansados con una fotografía de su princesa.

"Lily Potter ha sido etiquetada en un álbum de fotos"

¡Qué hermosa era su pequeña! Bueno, ya no tan pequeña. Era una preciosa joven de quince años la cual él atesoraba y protegía como la valiosísima joya que representaba para su vida. Recordaba los momentos en los que su niña apenas y estaba aprendiendo a gatear, el momento en el que dijo papá, cuando realizó su primer hechizo, cuando fue a su primer año en Hogwarts... ahora quince años... ¿En qué momento pasó el tiempo?

"Nombre del Álbum: Con mi pelirroja"

- Con mi… ¿Qué?

Fotos de Lily. Fotos de Lily junto a Scorpius Malfoy. Fotos de Lily abrazando a Scorpius Malfoy. Fotos de Lily BESÁNDOSE con Scorpius Malfoy. Fotos de Lily sobre la espalda de Scorpius Malfoy. Fotos de Lily acostada y riendo sobre Scorpius Malfoy. Y más fotos de Lily con Scorpius Malfoy… fotos de todo tipo… de TODO tipo.

- Ése… - Poco a poco su rostro se fue tornando rojo. Su pequeña… con un Malfoy.

Scorpius Malfoy: Te amo, princesa. - ¿Cómo se atrevía a llamarla princesa? Sólo él, Harry Potter, su padre, tenía ése derecho.

"A Lily Potter, Rose Weasley, Victoire Weasley y a 1597 personas más les gusta esto"

Lily Potter: Yo también, amor.

"A Scorpius Malfoy, Zachary Norton, Britanny Mens y a 2435 personas más les gusta esto"

Bien, quizá estaba leyendo mal. Sus ojos ya cansados, miopes y viejos le estaban haciendo una mala jugada; además, sus lentes estaban sucios. Sí, era eso.

Respiró hondo y se quitó las gafas, limpiándolas enseguida con una de las servilletas que estaban en la mesa, junto a la taza de café que Ginny había servido esa mañana.

- No puede ser. Mi Lily no…

"Lily Potter tiene una relación con Scorpius Malfoy" ¡Desde hacía un mes! ¿Y el vino a enterarse esa tarde? ¿Y por estúpido feisbuk? Mierda...

"A Lily Potter, Scorpius Malfoy, Rose Weasley, Lorcan Scamander y a 1245 personas más les gusta esto"

- ¡Maldición!

- ¡Ya llegué, amor! – Ginevra entró a la cocina, con muchísimas bolsas en ambas manos. - ¿No te has levantado de ahí en todo el día? Es…

- Esto… Ginny… ¡Mira! – Horrorizado, movió el portátil de tal forma que Ginny pudo ver las fotografías que mostraban la pantalla. - ¡Nuestra Lily con…!

- Harry…

- Con Malfoy, Ginny. ¡Con Scorpius Malfoy! ¡Y tienen un mes! Y mira… ése está… tiene las manos en… ¡Mi princesa! – El melodrama que estaba armando quizá era exagerado. ¡Pero se trataba de su princesa! Su pequeña e inocente niña. No podía ser que anduviera con Scorpius Malfoy y no se lo dijera… era…

- Amor, tranquilízate y así…

- ¿Tú sabías de esto?

- Pues... me registré en feisbuk hace tres meses.

- ¡Ginny! - Mierda, todos lo sabían, todos tenían feisbuk… ¡Todos! Y no se lo habían dicho… se sintió traicionado. Qué mierda era ese feisbuk.

- ¡Ya llegué! – Una contenta y risueña pelirroja de quince años entró danzando por la puerta de la cocina, con una enorme sonrisa dibujada sobre sus labios. ¡Oh, la juventud! - ¿Qué ocurre? – Preguntó, extrañada al ver a su padre tan rojo como la salsa de tomate.

- Lily… - Lily notó el problema al ver como su madre, con una extraña mueca, señalaba la pantalla del ordenador. – Lily Luna Potter… tú… él… – el dedo de Harry apuntaba a la foto, en la cual ella compartía un beso con su novio. Joder. – Él…

- Papi… - Quizá la carita de corderito a punto de ser degollado aún funcionaba… quizá.

La lección era bastante obvia: Nunca, jamás, en ningún momento, se le debe abrir a un padre una cuenta en un sitio donde TODO se puede saber. Lástima que ya era tarde para ella, y para Scorpius también.

Harry Potter: Mataré a Scorpius Malfoy.

"A Draco Malfoy le gusta esto"


N/A: Era una estupidez que debía escribir porque sí.

Si leyeron, ¡gracias!

Se les quiere a todos.

Yani!