Hola!, hay no saben lo emocionada que estoy con este fic, fue una inspiración de una gran autora de ff…pero bueno aquí les presento este fic de regalo de amor y amistad, lo continuare y no prometo 100% que sea los caps igual de largo como este.

Pero bueno…estoy segura que les gustara y dejen comentarios.

Casi muero con la creada de la última escena…ya verán porque.

Espero no se confundan con las narraciones, el texto seguira la norma de narracion o recuento por mi, aunque solo para el pensamiento de Ahome...en este capitulo, por ser el primero y a falta de un poquito de explicaion delporque esta ella alli, esta este tipo de escritura genrica en la cual tiene mas en cuenta la participacion de los otros referentes a ellos.

No se me pierdan, de ahora ne adelante estoy casi segura que solo sera basado en Ahome.

espero no se me confundan más y disfruten de la lectura.

Besos y a leer!

¿CASADOS?

Capitulo 1

narracion generica...

¿Qué hacia Ahome en el altar? Y peor aun… ¿con Seshomaru?

Todos se preguntaban eso, ella misma lo hacía, Ahome Higurashi, la que defendía los derechos de los humanos y él, uno de los exponenentes mas nombrados entre el mundo de los demonios y humanos… ¿ellos dos se estaban…casando?

Nadie se lo creía, ni la misma novia; Ahome aun deseaba en devolverse gritando, tirando la toalla, pero al final la idea se esfumaba, sabía que esa no era ella y precisamente eso era lo que la mantenía ahí; su amor a la humanidad y la espera a que todo acabara, a que se firmara el pacto de paz y convivencia entre demonios y humanos.

Con eso, su labor estaría mínimamente realizada.

Este había sido una "las clausulas del Trato", hasta que se firmara el pacto. Ambas partes podían acceder al divorcio, en esta pauta los demonios rebatieron un poco, pero finalmente habían aceptado esa condición, aunque según ellos, cuando te casas con un demonio es para siempre o en su defecto; hasta que te marque otro demonio.

Aunque ellos habían propuesto una contraparte…solo que no se había nombrado, al menos, no para Ahome.

Parecía imposible, pero eso habían decidido finalmente humanos y demonios, ambas partes lo aceptaron y así se había decidido.

"Un humano se tendrá que casar con un demonio y así la convivencia será más aceptable, con una unión verdadera entre las diferentes razas."

"… ¿aceptable?...patrañas, simplemente era cuestión de tolerancia" pensaba Ahome, pero finalmente aceptaste la propuestas de estos… ¿Por qué tu?...tampoco sabias sus intenciones, pero ahí estabas.

No sabía porque había sido Sesshomaru y no otro, tal vez nunca lo sepas, tal vez si, aunque el motivo más razonable es que él es un demonio muy importante ¿debería de ser él, el que diera el paso?

¿Sesshomaru? ¿ el que odia a los humanos? Su tolerancia hacia ellos, era tan nula que podría acabar con ellos si así quisiese, ¿Por qué no lo hacía?...tampoco se hallaba esa respuesta, pero todo el mundo se preguntaba aquella decisión referente a ser el conyugue.

…..

….

…

narracion en segunda persona solo para Ahome.

—Te…te acepto a ti…Sesshomaru…como esposo—fingiste lo máximo que podías, las últimas palabras sonaron con cierto tinte de falsedad que tal vez nadie capto.

Todo salía a la perfección.

—Te acepto a ti…Ahome Higurashi como esposa—dijo él sin ninguna connotación de duda o vacilación.

Hubo un asentimiento a parte del sacerdote y luego te volteaste a verlo, él hizo lo mismo contigo y ahí, notaste como sus ojos eran tan hermosos.

Él se acerco a ti lentamente, aparto un mechón que caía en tu frente y luego, sin pensarlo dos veces te beso, unió sus labios contra los tuyos en conmemoración a su unión, tú te sobresaltaste al sentirlo tan repentinamente contra tus labios, fríos y suaves, con movimientos controlados y seguros, casi una verdad absoluta en cada movimiento, cerraste lo ojos y entrelazo sus dedos contra los tuyos, dejando que los aplausos se aclamaran por el templo. Aunque tú ya no escuchabas nada, él te besaba como nadie nunca lo hizo.

Te revolvió el estomago, se te erizo cada centímetro de piel, tus ojos se humedecieron y casi te pierdes en el momento, pero te alejaste y sacaste una sonrisa falsa…esto era una mentira, no te la podías creer. Él te miraba serio e imperturbable, no parecía dudoso, pero él siempre fue un gran actor…al menos eso imaginabas de él.

La ceremonia"humana" llegaba a su fin con la firma de los documentos nupciales y ahora terminada se alejaba el sacerdote, casi con mirada de reprobación.

La fase dos era un poco más dolorosa para ti…se había acordado un matrimonio como se realizaba entre las dos "especies".

La boda, era fiel a la cultura humana aunque de modo antiguo; portabas un bello kimono blanco, con pequeñas decoraciones color carmesí en el escote y mangas. Sencillo pero hermoso. Tenias recogido el cabello elegantemente, aunque se te escapaban algunos cabellos rebeldes logrado captar en ti un aire adolescente.

Él seguía las costumbres demoniacas y lucia un kimono negro, con una capa que le cubría los hombros color rojo, semejante al terciopelo, su cabello estaba suelto y este se extendía por la roja capa y caía libremente sobre su pecho.

Ahora era la parte de la unión al modo de los demonios. Así esta se podría valer entre la comunidad demoniaca.

El cura ya se había ido y en reposición de este se acerco un demonio con túnica negra, encapuchado, aunque se veía sus ojos color purpura, el cabello estaba recogido en una cola que caía al costado izquierdo de su hombro. Un rostro atemorizante y a la vez sabio. Entre sus manos llevaba algo envuelto entre una tela de terciopelo roja, la fue revelando lentamente, mientras cerraba los ojos y sus labios se movían rápidamente para finalmente mostrar una daga finamente esculpida, trozos de brillantes se podían observar en la empuñadura color rojo y amarillo, este la alzo frente a los testigos, todos se inclinaron ante esta.

Luego de varios segundos la bajo, cerró los ojos y recito una palabras en otro idioma…luego, dijo ante nosotros:

—Por la unión entre estos dos seres que se aman…—"¿Aman? …como se podría catalogar a una mentira como amor." Pensaste mientras este continuaba su recital. —La daga de la unión eterna y la paz entre los seres diferentes.

Miraste a Sesshomaru y este te observaba a ti, no había nada en su rostro, la belleza de este seguía inalterable. Desviaste la mirada ante el cura y este te ofreció la daga, tú la recibiste con un poco de vacilación, pero la agarraste firme, te inclinaste ante él y luego te posicionaste frente a Sesshomaru, te acercaste y tímidamente apoyaste tu mano en su pecho, alejando la tela y revelando su pecho. Él no dejo de observarte, sentiste su mirada en cada movimiento que ejercías, casi podías notarte a ti misma temblando al acercarte a él, afianzaste el agarre y con la hoja de la daga rozaste su pecho, ejerciste un poco mas de fuerza en esta y finalmente lograste ver el hilo rojizo que se deslizaba por el pecho de él, te acercaste y tus labios se unieron a la herida en un acto tan intimo que te sentiste incomoda al hacerlo.

Succionaste y del pecho de Sesshomaru se escucho un sonido ronco, el pozo su mano en tu hombro y apretó levemente, pasaste la lengua nuevamente sobre la herida y te alejaste.

Luego después de que sintieras que el ardor en tus mejillas había menguado te decidiste a levantar la mirada hacia él y notaste sus ojos mas dorados, casi por leves instantes notaste una mirada satisfecha, pero fue tan efímera que la podrías catalogar como parte de tu imaginación.

Él acerco un dedo a la comisura de tus labios, limpiando los restos de su sangre luego, hizo lo mismo con tu ropa; quitándola lentamente, de un modo más seguro del que tú lo habías hecho y revelo tu hombro derecho, se acerco sin vacilar y sin dejarte prepararte mentalmente clavo sus dientes en tu hombro, volvió a ronronear y alejo su rostro de allí…fue rápido a comparación de ti.

Se miraron nuevamente, su rostro estaba manchado con tu sangre y eso te hizo sentir de alguna extraña y mórbida situación, poderosa.

Pero fue efímero, porque luego volvió a ti la mentira de todo esto.

Cerraste los ojos y nuevamente se escucharon las aclamaciones de los testigos.

Ya era oficial.

….. narracion general

Tal vez sería extraño el pensar como se propaga la información del que ahora estabas casada con aquel demonio, pero si, esta era tan rápida que en cuestión de horas ya habían publicaciones en las que se afirmaba la boda entre las diferentes especies.

También había críticas sobre aquella unión y la anti tolerancia de cada persona al nombrar esto como antinatural.

Yo lo llamaría conveniente para ellos.

La paz era algo que se estaba buscando para dar un mejor futuro a las demás generaciones. Libres de prejuicios y odio hacia las diferencias.

Tal vez no se acabaran con una simple boda…pero esperaba que al menos esto fuera el perfecto renuente para agilizar el proceso de la legalización de convivencia entre las diferentes especies.

….

….narracion para Ahome

La ceremonia duro poco, en su mayoría habían funcionarios del congreso y tu familia junto a la de él, que de por si era poca.

Tal vez solo se encontraba a su padre y hermano.

Por tu parte se encontraba tu madre, el abuelo, y Zota…estaban contentos y tu madre, ella te miraba con aquellos ojos de orgullo.

Estaba contenta por ti, aunque tú no lo estuvieses.

Él estuvo siempre a tu lado, sosteniendo tu mano posesivamente…según los miembros mi aroma había cambiado lo cual denotaba la dominación de su aroma sobre el tuyo.

Te choco, ya que al salir a la calle tendrías a Sesshomaru plasmado en cada centímetro de tu piel.

Tu amada libertad se iba delimitando.

….

Y ahí estabas frente a la habitación de su mansión y la que ahora seria compartida por ti, casi con miedo y pánico diste un paso hasta esta.

Tu corazón latía rápidamente, no querías decir nada, no deseabas que hubiera palabras.

Tenías que pasar la noche con él, cerraste los ojos y entraste, él no había dicho nada, tal vez unas palabras cordiales y agradecimientos a las personas que se acercaban a felicitarnos por nuestra unión.

Diste un paso y abriste la puerta, luego las cerraste al haber ingresado y notaste como todo se encontraba tranquilo. La habitación estaba en silencio, notaste la luz de la luna ingresar por la gran ventana que había en contra de la pared en la que estaba la gran cama. Suspiraste y luego notaste movimiento…y lo viste.

Su mirada aun seguía tan solida como desde un principio, la luz plateada hacían relucir el dorado de sus ojos y el brillo de su cabello era más intenso, aun tenia puesto el traje de ceremonia, al igual que tu.

Él se levanto y comenzó a acercarse hacia ti, sus pasos seguían siendo firmes

Repentinamente un suave dolor te araño el hombro, te llevaste la mano allí, donde sus dientes te habían perforado.

Finalmente estaba frente tuyo

Pozo sus manos a ambos lados de tu rostro y se acerco lentamente… a centímetros de tus labios dijo:

—Ahome… —Dijo con una delicadeza tu nombre que te reconforto tu hombro y mando un cálido estremecimiento a tu espalda, cerraste los ojos al escucharlo, casi parecía hipnotizador cada entonación de su voz, su aliento fresco contra tus labios…—no te hare daño.

Finalmente no sabias si creerle, casi la parsimonia de su voz te invitaba a confiar, acercaste tu mano hacia la de él que estaba en tus mejillas, la rozaste tímidamente. Luego abriste los ojos y notaste como él te miraba…esperaba algo.

¿Tu permiso?

La razón iba esfumándose mientras te perdías en la intensidad de su mirada, la calidez de la entrega, de sus palabras…la verdad que podías imaginar en tu mente.

Y luego, cuando tu razón se escurrió, asentiste tímidamente y él se unió contigo en un beso que te logro hervir la sangre. Sus manos gentiles te agarraron con fuerza, acercándote más a él, casi en un intento de fundirte. Toco, jalo, desprendió un punto en especial y tu espesa cabellera callo como cascada por tus hombros, mientras él te guiaba hábilmente hacia la inmensa cama.

Tú te dejabas llevar, dejabas que él te tocara, te explorara…te invadiera mientras tu piel ardía y la noche parecía tan cálida.

Te levanto sin ningún esfuerzo y te deposito en la cama, abriste los ojos y notaste que su rostro ya no era tan indiferente, ahora había un rastro de plenitud, notaste el brillo de cada una de las estrellas reveladas en sus ojos.

Tu corazón se detuvo cuando comenzó a deshacerse de su vestimenta, notaste la leve marca que había quedado del corte que le habías hecho, te maravillaste con la perfección de su pecho, el brillo que desprendía su piel, él finalmente se encontraba desnudo y se acerco a ti, te acaricio el rostro y fue desprendiéndote de tu vestido, fue tranquilo, sin afán, con la gentileza poco reflejada en tus recuerdos.

Con la armonía del susurro del aire.

Respiraste nuevamente cuando te sentiste sin aire…cuando tu cuerpo se encontraba más expuesto a él…cuando por primera vez un hombre te miraba y tocaba.

Respiraste nuevamente cuando el aire se fue consumiendo y notaste que él iba a ser tu primer hombre, que a él le entregarías tu primera vez.

Se camuflo en tu cuello, lamio la herida de tu hombro constantes veces, algunas veces se dejaba llevar y te acariciaba hasta el cuello, te sentías tibia, el nudo se a galopo en tu vientre y la humedad te invadió, un leve ronroneo se escucho de su pecho y sentiste como el ritmo de su respiración había aumentado. —Ahome—Alejo su rostro de tu hombro y te miro…te detallo, te sentiste nuevamente vulnerable, pero no fuiste capaz de desviar la vista.

Su mano abandono tu cuello y comenzó a descender por tu cuerpo expuesto, en ese instante te invadió la vergüenza, desviaste el rostro…—Mírame—te ordeno y tímidamente volviste a verlo, mientras sentías como pronto se estaba ubicando en tu entrepierna, con solo sentir su roce, separaste y lo dejaste invadirte completamente.

Un respingo se escurrió por tu cuerpo y él dejo escapar un gruñido gutural.

Y se mueve, su movimiento se vuelve más ágil y te derrites, se te nubla el pensamiento, aumenta la velocidad y abres la boca; no sale nada, pero luego gimes se funden en los sonidos, la noche, las respiraciones, la sensación de satisfacción te sacudes y vuelves a respirar.

Su cuerpo arde, intentas respirar…lo haces y comienzas a hiperventilar, suspiras, gimes y te dejas cautivar por el sonido de su pecho, de su propia satisfacción, de la plenitud de cada acto.

Respiras y al mismo tiempo dejas de hacerlo, quieres que se detenga el tiempo, que no acabe la sensación.

Te besa y tu cuerpo se arquea, tiembla y se estremece contra su piel.

Después lo vuelves a ver, sus ojos están encima de ti, y su cuerpo está encima de ti, abre los ojos sabiendo lo que sigue… él sonríe satisfecho, de alguna manera se siente ¿orgullosos? ¿De qué?

Se acerca a tu oído y su lengua te acaricia, te relajas por segundos y sientes como algo ardiente te toca tu sexo, te tensas…—Yo…nunca lo he hecho. —susurraste, casi con miedo.

—Lo sé— ¿lo sabe?

— ¿dolerá?

—Por un momento…—respiro contra tu cuello y volvió a mirarte—…tranquila, seré gentil.

Volvió a tu oreja —No te hare daño…confía en mí.

"Confía en mi" se repitió en tu mente cerraste tus ojos y en respuesta tus caderas se relajaron y sentiste la presión contra ti.

Respiraste hondo y un cabello se deslizo hasta tu mejilla, abriste los ojos y él aun te miraba, luego comenzó a invadirte, te tensaste, acaricio tu rostro y gruño, cerro sus ojos y notaste como en leves instantes perdió el control de su expresión.

—Tan estrecha…—gruño y continuo, tu mano se encontraba en su pecho, instintivamente lo alejabas, protegiéndote, pero no era suficiente para frenar su llenado, te mordiste la lengua para no gritar. Gruño y luego abrió los ojos… —tranquila—susurro mientras apoyaba mano contra tu mejilla…sentiste como el dolor aumentaba, destruyendo a su paso conforme se adentraba, él acerco sus labios y te beso…parecía eterno el dolor, punzante… y luego te alejaste y te permitiste gemir, luego no se movía, se quedo quieto mientras tu cuerpo se acostumbraba a su tamaño, él te besaba el pecho, se encaprichaba con tus pezones jugando gentilmente con su lengua, ocasionalmente te mordía, pero era leve, delicado…perfecto.

Luego todo fue menguando, tu cuerpo se comenzó a relajar conforme iba desapareciendo el dolor, aunque aun lo sintieras completamente.

Y se volvió a mover, pero ya no dolía, no tanto como antes, comenzó a aumentar la velocidad, volviéndose irregular su respiración junto a la suya. Su mano se escabullo y se ubico en tu pierna, la alzo y entro más. Gemiste y unas extrañas cosquillas te invadieron el vientre, acariciandote conforme él se movía.

Sus manos te apretaban, tú te aferrabas a él queriendo no alejarlo de ti. Gemías contra su oído y él parecía extasiado, perdido entre los sonidos y las sensaciones.

—Sesshomaru—gemiste contra su oído, lo nombraste por primera vez y te miro, acudió a tu llamado, casi preguntando que querías…—Más.— susurraste, lo miraste con un leve rastro de pudor y notaste su sonrisa, una sonrisa que te mando una embestida más fuerte, una sonrisa que te aferro más enérgicamente y te domino completa, sentiste como te lambia en donde te había mordido, lo abrazaste, sentiste sus dientes arañarte y luego…no imaginaste la perfección de las emociones fluir, gruño, ronroneo tan fuerte que casi te aturde, clavo sus dientes y se envolvieron en el baile del clímax.

Se alejo de tu cuello y se aferro de tu boca, arrebatándote el aire, mientras tu cuerpo se estremecía con su orgasmo y el tuyo propio. Lo sentías ahí, adentro, moviéndose, moviéndote.

Todo, todo era perfecto.

Luego las respiraciones fueron culminando, su respiración fue tomando el control, mientras acariciaba tus labios, solo fue cuando sus labios te abandonaron que notaste que estaban sentados, tu arriba de él.

Lo miraste, sentías tu corazón latir rápidamente contra su pecho, sentiste el calor que emanaba su piel, su respiración te acariciaba el rostro y te fue bajando hasta quedar totalmente recostada en las suaves sabanas.

Se miraron por largo rato, él aun estaba dentro de ti…tampoco querías que se alejara en ese instante.

Te acarician el rostro tiernamente.

—Descansa—y tus ojos se cerraron con solo terminar esa palabra.

Sentiste sus manos cubrirte aun mas y luego la razón te abandono y la inconsciencia te abrumo con el oscuro manto.

TANTAN?...A QUE NO FUE ESPECTACULARMENTE GENIAL! ME ENCANTO, EL CAP MAS LARGO QUE HAGO EN MCHO TIEMPO…Y ESTOY MUY FELIZ.

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BESOS Y DEN CLICK ACONTINUACION…