EL mundo de Twilight y sus personajes no pertenecen, solo la trama es mía.

Resumen: Edward y Bella nunca llegaron a ser novios, sin embargo Bella si se enamoró de él. Tras el accidente en su cumpleaños número 18 los Cullen se fueron, dejandola sola, 14 años despues los Cullen se reencuentran con una Bella cambiada miembro de la guardia Vulturi. Con una posible guerra como amenaza los Cullen y Bella tratarán de hacer las paces, pero primero Bella deberá sobreponerse al hecho de que Edward tiene una hija, más no todo es lo que parece, los Cullen guardan un par de secretos y pronto Bella descubrirá que los Vulturi tambien.

Nota: ... no se que decir, no tengo excusa, lo que he hecho es imperdonable. No he actualizado porque no he tenido mas que "inspiracion" ganas, lo se lo se. lo siento, de verdad. Prometo no dejar esta historia colgada, es una de las cosas que mas odio del mundo de Fanfiction. Ahora mismo la historia está en "proceso" de edicion. Por eso el cambio en los capitulos. Trataré de no tardarme, pero eso si, la historia la acabo.


Prefacio:

No puedo creer lo que está pasando, ni lo que estoy a punto de hacer.

Siendo humana jamás hubiese imaginado que sería convertida y llegaría a formar parte del clan más poderoso de vampiros, los Vulturi. Y heme aquí 14 años después a punto de cometer una de las estupideces más grandes del mundo por el hombre que amo. A pesar de que habían pasado años sin verlo y que lo último que él me había dicho era que jamás podría amarme, rompiéndome así el corazón, a pesar de que él había continuado con su vida, dejándome tan fácilmente atrás, a pesar de que los Vulturi se habían convertido en mis salvadores, mi familia (incluso aunque ellos no fuesen los más amorosos, eran honestos y les importaba de verdad) y a pesar de que sabía que estaba cometiendo un gran error y que nada me aseguraba que las cosas terminarían bien, tenía que hacerlo.

¿Estás segura, traicionarás a los Vulturi sabiendo las consecuencias que acarrean tu decisión? No tengo otra opción le respondo a la voz que empezó a aparecer en mi cabeza desde que mis dones empezaran a fallar, desde que todo empezara a derrumbarse. Siempre hay otra opción Isabella mi conciencia me confirmaba lo que yo ya sabía, aquella estricta voz, tan triste y burlona a la vez me lo decía, que debía hacer lo correcto, sin importar lo que yo deseara pero si hago lo correcto jamás podré perdonármelo, él no me lo perdonaría a veces hay que hacer lo correcto incluso aunque nuestras decisiones nos duelan, aquel que te ama te amará siempre a pesar de todo, tienes que arriesgarte si me arriesgo puedo perder más de lo que ganaría el amor no debe ser condicional Isabella. Y con eso no dijo nada más, yo ya había tomado mi decisión.

"Lo siento" Susurre destrozada. Ya no había vuelta atrás.