Notas del autor: Hola a todos, lamento la larga espera, tuve demasiados problemas para continuar la historia y al fin lo he hecho, nuevamente me disculpo por hacerlos esperar tanto, prometo que esto no volvera a suceder con el proximo capitulo y ademas para quienes tambien esten siguiendo "Grandes Dilemas" pronto actualizare, lo prometo. En fin, ahora con el fic, que lo disfruten...
Detalles: El fic solo esta centrado en la 1° Parte de la 1° Temporada.
Capitulo 2: Lo que no pude evitar
Regrese a casa e intente evitar a mi padre, pero el llego por la espalda y coloco su mano en mi hombro.
- Hijo, estas empapado, estaba preocupado por ti… - mi padre vio fijamente mi rostro y sus ojos se abrieron demasiado al notar el moretón en mi mejilla derecha -¿Qué te sucedió? – pregunto atónito
- No fue nada papa, el balón me golpeo en el rostro, eso es todo, solo que demore mas de lo esperado porque tuve que ir la enfermería – me impresiono el realismo y serenidad con la que había manejado la situación, realmente me convencía a mi mismo para creer que eso era lo que había sucedido.
- Debes tener mas cuidado Kurt, ese tipo de golpes son peligrosos… ¿No llevabas casco? –
- No… - me puse algo nervioso, mi padre siempre notaba los detalles de la situación –sucedió durante el calentamiento, unos chicos practicaban sus lanzamientos mientras otros estábamos calentando… -
- Ya veo, para la próxima utiliza el casco incluso si estas haciendo tu calentamiento, no quiero que esto se vuelva a repetir –
- Si papá –
- Y coloca una bolsa de hielo sobre tu mejilla, servirá para reducir la hinchazón –
Mi padre se alejo y yo me dirigí hasta la cocina, realmente me dolía demasiado, esperaba que el hielo fuera de ayuda.
Tome una bolsa de hielo del congelador y sin mucha energía camine hasta mi habitación, cerré la puerta porque aunque fuese el sótano la música era audible y mi padre estaba viendo un partido muy importante, no quería interrumpirle con mi "aburrida" música.
Mi Ipod, comenzó a reproducir aquella lista de canciones que siempre escucho cuando tengo el corazón roto, como ahora, canciones deprimentes de amores nunca correspondidos, por alguna razón me hacían sentir miserable, pero bien, todo aquel dolor, furia o remordimiento desaparecía de repente con cada estrofa de la canción como si borrara mi mente, eso sucedía y eso esperaba que sucediera… pero ni siquiera la música funciono
Cada vez que retiraba el hielo de mi mejilla dolía mas y mas, ellos me habían hecho esto, no solo destrozaron mi corazón, también me golpearon e insultaron, ambos, el simple hecho de recordar hacia que las lagrimas brotaran de nuevo, no lo soportaría, no seré capaz de enfrentarme a ellos; solo quisiera regresar el tiempo y evitar lo que paso.
Con cada pensamiento en mi mente, mis parpados fueron cayendo poco a poco… hasta quedar completa cerrados. Mañana será otro día, otro doloroso día…
Mis ojos se abrieron lentamente, ya había amanecido y los rayos del sol atravesaban mi ventana, sabia lo que ocurriría: me ducharía, vestiría, desayunaría y por ultimo al colegio… desearía poder evitarlo.
Me levante de la cama e hice cada una de las cosas en las que había pensado, por ultimo me despedí de mi padre y conduje hasta el colegio en mi bebe. Durante el recorrido solo pensaba en como todos me preguntarían que me había pasado y debo mentir sobre ello, de lo contrario Finn y Puck me odiaran mas, nada podía ser peor que esto.
Al llegar baje de mi bebe, tome mis cosas y camine como si nada hubiese pasado, el moretón aun era visible, pero no tanto como el día pasado, es sorprendente lo que el hielo, crema y maquillaje pueden hacer en u rostro.
Por suerte no tuve que soportar las intensas miradas de todos sobre mi ya que a nadie parecía importarle, eso era bueno, aunque no me gusta ser ignorado, este día prefería que fuese así.
Me dirigí hasta mi casillero y me asegure nuevamente de que el maquillaje no se desvaneciera, pero un escalofrió me recorrió por todo el cuerpo al ver como Mercedes se aproximaba a mi.
- ¿Por qué no respondiste mi llamada? – me pregunto ella con una expresión furiosa en su rostro
- Lo siento, ayer estuve fuera de casa – quería finalizar con la conversación de una vez
- Te llame a tu celular –
- Lo olvide en casa – la observe nuevamente y parecía aun mas furiosa por mi actitud, pero no podía contarle sobre lo pasado o pensaría que soy un tonto
- ¿Qué sucede Kurt? – Mercedes era sin duda alguna muy perceptiva
- Lo siento Mercedes, hoy no tengo mucho animo – si le decía eso seguramente la convencería de ello
- Quizás ir de compras te levante el animo –
- No es necesario, estaré bien… -
En ese instante la campana sonó, Mercedes se despidió y se alejo, solo suplicaba para no encontrarme con ninguno de los 2, aun no estaba listo para enfrentarlos
Camine hacia mi próxima clase, quería pasar un día tranquilo y si eso significaba desaparecer incluso en las practicas de futbol lo haría.
Admito que las clases no ayudaron en nada, el profesor de Ciencias Sociales se quedo dormido en medio de la clase y los demás chicos comenzaron a lanzar pelotas de papel, fue desagradable y solo hicieron que me enfadara mas.
Ya he tenido suficiente de los brabucones, por suerte no he visto a Puck o Finn y aun peor que eso es que no puedo faltar a la practica de hoy, eso solo daría mas señales a Mercedes de que algo esta sucediendo y se que si menciono los 2 fuertes golpes que recibí ayer ella terminara lanzándolos al contenedor, lo que menos deseo es que alguien solucione los problemas por mi, yo puedo encargarme de ellos solo, pero necesito tiempo para pensar porque el comportamiento de Puck realmente me impresiono y creo que mi mayor error fue el haberme dejado llevar por mis emociones, pero estaba tan dolido que lo único que buscaba era consuelo, desafortunadamente se que no lo encontrare en Puck o Finn.
La hora del almuerzo llego, estaba preocupado por ello, todos se encontrarían en la cafetería, incluyendo a esos dos, decidí no presentarme al lugar, por primera vez en mi vida me sentí aterrado, era como saber que un par de psicópatas estuviesen esperándome para asesinarme, era horrible lidiar con este sentimiento, pero fue aun peor cuando me encontré con una de las 2 personas que menos deseaba, Puck.
Yo caminaba por los pasillos, me dirigía hacia el auditorio, dudaba que alguien pudiese estar ahí, pero me equivoque.
Al llegar me sentí aliviado al verlo completamente vacio o eso fue lo que pensé, hasta que me acerque al piano, pensé que cantar ayudaría a desahogarme un poco, así que comencé a tocar y después de ello a cantar.
(Breathe me - Sia)
Help, I have done it again
I have been here many times before
Hurt myself again today
And, the worst part is there's no-one else to blame
Be my friend
Hold me, wrap me up
Unfold me
I am small
I'm needy
Warm me up
And breathe me...
- ¿Kurt? – esa voz hizo que me detuviera y congelara en un instante. ¿Cómo puede ser posible? Lo peor de todo es que escucho esa canción, no podía dejar de maldecir el momento en el que pensé en cantarla, fue algo tonto.
Decidí no responder, solo quería salir corriendo del lugar, estaba avergonzado y aterrado, aun no podía enfrentarlo, no después de cantar los primeros versos de aquella reveladora canción.
Justo en el momento que baje del escenario el salió por detrás de este, ahora realmente me era imposible escapar.
- Kurt… - volvió a decir mi nombre, fue casi inaudible, era como una clase de susurro
- Lo siento, debo irme – intente escapar, realmente lo hice, pero el salió rápidamente y salto del escenario, yo me aleje lo mas rápido que pude, pero el tomo mi brazo y en ese instante supe que lo mejor era dejar que todo sucediera, aunque me dolía debía enfrentarlo tarde o temprano
- Solo quiero hablar contigo, por favor… - no deseaba llorar en ese instante, el maquillaje se desvanecería y solo le dejaría ver lo que su puño provoco en mis rostro
- No debo hablar de nada contigo, solo quiero que sueltes mi brazo y me dejes ir – mi voz se quebró ligeramente, quería soltarme a mi mismo, pero no podía, era demasiado débil para ello.
- Por favor Kurt, se que fui un estúpido, solo quiero disculparme… yo… -
- ¿Disculparte? ¿De que? ¿De las veces que me arrojaste al contenedor? ¿De recibir tus estúpidos insultos todos los días? ¿De empujarme contra los casilleros? Dime Puck, de que piensas disculparte – nunca imagine que seria capaz de decir aquello, un nudo comenzaba a formarse en mi garganta, quería decir todo lo que pensaba antes de ser silenciado por el dolor
- Yo… no se que fue lo que sucedió conmigo ayer, pero yo no quería hacerte daño, nunca seria capaz de hacer eso, yo estaba confundido por lo de Finn y… -
- ¿No serias capaz de hacerme daño? Lamento informarte de esto Puck, pero lo haz hecho, demasiadas veces y no pienso perdonarte, no ahora… en realidad, creo que jamás seré capaz de perdonarte Puck – al parecer mis palabras realmente fueron comprendidas por el ya que me soltó al instante. Quería escuchar su respuesta, pero en ese momento no fui dueño de mi propio cuerpo porque mis piernas comenzaron a moverse y cuando me percate de ello me encontraba caminando rápidamente por los pasillos.
Ahora creo que yo fui quien se comporto como un estúpido, debí haberlo enfrentado, debí haber terminado con esta pesadilla, debí haberle dicho que…
- Lo siento – estaba totalmente perdido que olvide que caminaba por los pasillos, había chocado contra alguien y al parecer mi suerte era pésima ya que al mirar detenidamente note que aquel cabello castaño era familiar. Nuevamente mi cuerpo se congelo cuando Finn poso sus ojos en mi, ahora estaba seguro que terminaría siendo golpeado de nuevo.
- Kurt … - el dijo mi nombre suavemente, pero no lo hizo con rencor, odio y asco como el día anterior, sino de una forma suave y dulce que solo logro aterrarme aun mas
- Fue mi culpa – trate de esquivarlo, pero me fue inútil, el hizo lo mismo que Puck, tomo mi brazo y lo único que deseaba en ese momento era tener un pañuelo porque no pude evitar llorar, me dolía demasiado el escuchar su voz.
- Kurt, no voy a soltarte – el parecía molesto, pero solo ante mis intentos de huir.
- Por favor Finn, debo irme – no le observe fijamente porque no quería que viese mis lagrimas
- No te iras hasta que hablemos –
Perdí la noción del tiempo cuando el me llevo hasta el salón de química, nadie entraría ahí ya que lo estaban remodelando, era imposible no preocuparse porque una lámpara te cayera encima, pero eso no asusto a Finn.
Cuando estuvimos dentro, él cerro la puerta y la aseguro para que no me fuese posible salir, ahora realmente estaba asustado, tal vez el me golpearía o haría algo peor. Mis mente solo podía pensar en las miles de formas que existían para torturar a las persona, pero quizás desconocía de ellas porque lo que sucedió después no parecía ser un golpe.
Sentí como los brazos de Finn me rodearon, era una sensación cálida, nunca había estado tan cerca de el y ahora mi mente se quedo completamente en blanco, olvide sus insultos, olvide que me había goleado, incluso olvide a Puck.
No sabia cuando tiempo había pasado, pero no rechacé su abrazo, al contrario, quería pasar el resto del día así, aunque sabia que era imposible, solo me estaba dejando llevar.
Pasaron tan solo unos minutos mas y él me soltó, me sentí decepcionado, pero ahora podía ver sus ojos, ahora veía una profunda tristeza en el interior de ellos.
- Lo que sucedió ayer fue un error – su voz era suave y serena, parecía no tener mala intenciones – yo estaba confundido, no quise hacerte daño, nunca seria capaz de dañarte – admito que odie esa declaración, era la misma que Puck había hecho y no estaba seguro de su autenticidad – quiero disculparme contigo, lo que hice estuvo mal y se que quizás ahora tus sentimientos cambiaron pero… - me sorprendí ante aquellas palabras ¿realmente era Finn el que había dicho eso? Quizás lo saco de un libro o vio una película exageradamente cursi, pero por alguna razón sentía como si eso fuese real y lo que estaba a punto de decir me hacia sentir nervioso - …yo creo que siento lo mismo por ti, desde aquella vez en la que me ayudaste con los padres de Quinn y todo eso, no pude dejar de pensar en ti, pensé que era normal, pero… ahora estoy seguro… estoy seguro de haberme enamorado de ti Kurt… -
Mi corazón estuvo a punto de detenerse, no puedo creer que esto sea real había esperado tanto para escucharlo decir aquello y ahora me siento feliz y… ¿decepcionado? Quizás por el golpe, por los insultos y ¿Por Puck?, estaba demasiado confundido conmigo mismo y mi confusión solo creció cuando sentí los labios de Finn contra los míos, no podía pensar con claridad.
Respondí al beso, pero me aterrorice cuando un pensamiento pasó por mi cabeza, cuando olvide por completo que se trataba de Finn y no de Puck. En ese instante comprendí, justo cuando los labios de Finn se separaron de los míos, justo cuando me observo fijamente, pude ver el amor y cariño en sus ojos, lo mismo que vi en los ojos de Puck. Fue cuando comprendí que estaba enamorado de Puck y no de Finn.
Después de descubrir aquello me odie profundamente cuando deje que Finn me besara de nuevo, odie el sentir sus manos bajo mi camisa y no detenerlas, pero lo que mas odie fue la expresión de dolor en los ojos de Puck cuando el observo todo lo que sucedió. Lo que aun no comprendía era el porque no fui detrás de el en lugar de dejar que todo esto sucediera, en lugar de dejar que las manos de Finn continuaran tocándome y que sus labios siguieran presionando mi cuello, ahora no sentía nada, solo dolor, solo volvía a sentir dolor. ¿Por qué estoy dejando que esto suceda?
Fin del Segundo Capitulo
Notas del autor: Bien, espero les haya agradado y como dije anteriormente actualizare lo mas pronto posible, ya estoy trabajando en el capitlo 3.
En fin, les deseo un lindo dia y una bella tarde, hasta la proxima...