Notas de la autora: Bien, listo. Espero me haya quedado bien, ya corregida (según yo). Gracias por sus preciados reviews. Y aunque corregida y todo... eso no quita el hecho de que este capítulo siga siendo.
Cp. Dedicado: Marinav92
Disclaimer: Las chicas súper poderosas Z! no me pertenecen. Solo ocupo a los personajes para crear mis locas ideas, sin fines lucrativos.
Advertencias: OoC Nah no me digas ¬¬ xD… Palabras inapropiadas. One shot.
๋• 10 cosas femeninas que Kaoru debe saber… ๋•
๋• By_PerFecTHeLL ๋•
10.- Que entiendes por "Soy una chica con orgullo y cólicos cada mes"
"Si me vas a querer quiéreme como soy, porque ningún hijo de la chingada me va poder cambiar"
Kaoru se encontraba sentada en el parque, debajo de un árbol; el aire frio hacía rodar unas cuantas hojas. El viento traía un pequeño roció, que impactaba en la hermosa cara de la chica. Ahora, sin maquillaje alguno. Llevaba sus vestimentas anteriores, sus pies agradecían el volver a usar ese par de tenis gastados. Su playera holgada se movía al sentir la brisa pasar, al igual que su holgado short, su gorra aplacaba ese cabello alborotado. Sí, se había puesto la misma ropa de siempre; cosa que agradecía debido a que sus supuestos admiradores ya no la habían seguido. Es más ni la habían reconocido al salir de su casa. Había guardado esas vestimentas, que no eran de su «categoría». Se sentía más bien con esas vestimentas, aunque con lo que descubrió hace pocos días se sentía diferente. Ese estúpido era un maldito superficial.
La chica apretó sus puños, ¿Cómo era posible que ese estúpido la haya logrado cambiar?
Él solo había hecho comentarios hirientes, y ella como estúpida se los había creído. Incluso había cambiado por él. Recargó su cabeza en sus rodillas, quería llorar… pero de coraje. Sintió una pequeña gota cristalina caer en su mano, otra más y otra más. Eso ya no era su llanto… había empezado a llover. Se levantó con pesar y se fue corriendo a ocultarse en algún lado, mientras la lluvia pasaba.
—Mierda…— pensó la chica, al no observar ningún lugar donde ocultarse. Subió hasta la pequeña casita que había en el parque, donde se subían y se dejaban caer por el túnel que tenía añadido la pequeña casita. Kaoru suspiró al ver que el agua no podía entrar. Empezó a pensar, pensar y pensar… acerca de eso. Soltó un par de lágrimas ahorita que podía, ya que, debía desahogarse antes de… hablar con él. La lluvia cesó al igual que sus lágrimas. Se limpió su rostro, aunque aun seguía empapado debido a la lluvia. Se deslizó por el túnel y salió al exterior. Fresco. Era como se sentía en ese momento. Sus ropas húmedas, se pegaban a su cuerpo; la chica comenzó a caminar a su casa, debido a que el cielo anunciaba que la lluvia aun continuaría.
—Estúpido, infeliz, inepto, idiota…— mascullaba Kaoru, en voz baja. La gente la veía pasar y murmuraban cosas acerca del lenguaje de la chica. Kaoru se estaba enojando más, una señora gorda, algo riquilla al parecer. Se le quedo viendo a la chica Matsubara, muy enojada.
— ¡Vaya!, que señorita tan vulgar eres… deberían enseñarte a que no es correcto utilizar ese tipo de vocabulario.
Kaoru se detiene y voltea a ver a la señora obesa. Hace una mueca de aburrimiento y frunce el ceño.
—Y a usted deberían enseñarle a… ¡No abrir su puta boca! ¡Nadie le esta pidiendo su opinión señora! ¡Así que permanezca con su mendiga boca cerrada! — le grita Kaoru alterada, la señora gorda se asusta y retrocede. La gente se le queda viendo, Kaoru los voltea a ver y ellos nerviosos vuelven a sus labores. Kaoru fulmina con la mirada a la señora «cerda». Que corre despavorida, gritando como loca. La chica hace una mueca de fastidio y retoma su andar. Mete sus manos en los bolsillos de su short. Camina con la vista hacia el suelo, siente su estómago gruñir un poco. Se detiene en una pequeña tienda, saca de sus bolsillos unas cuantas monedas y decide comprar un par de chucherías. Sale de la tienda con: una bolsa de papas, un refresco de cola y unos cuantos chocolates «kisses». Sigue con su camino, mientras abre la bolsa y mete la mano, provocando que se ensucie de queso. La gente se le queda viendo extrañada—de nuevo— por la forma de comer de ella. Kaoru no le toma importancia y sigue devorando las papas con cierta hambruna. Se sienta en uno de los asientos de la parada de autobuses, abre su soda y le da un gran trago, eructando… sin importarle que la gente la escuchara. Kaoru los voltea a ver, arquea una ceja y hace una mueca de disgusto.
— ¿Qué mierdas me ven? — masculla enojada, la gente se asusta y se voltea a otro lado. Que niña más indecente. Lo mejor era no meterse con ella, ya que si les hablo groseramente, probablemente les soltaría un golpe y mejor abstenerse a eso. Kaoru resopla y ve el autobús llegar, la gente se para rápidamente, obstruyéndole el paso. Kaoru bufa molesta, se sube al autobús y no ve ningún asiento. Se baja molesta, prefería caminar.
Kaoru iba caminando por la acera pateando una lata con las manos en los bolsillos de su short. Cuando esta es detenida por un pie, Kaoru frunce el ceño y observa al dueño de ese pie. Se enoja al ver de quien se trataba. Tenía precisamente que encontrarlo a él y muy bien acompañado.
— ¿Miren a quien tenemos aquí?, a la señorita machorra. ¿Dónde quedo tu vestimenta de ramera? — le hace burla una chica de cabello negro y busto bastante carente.
Kaoru arquea una ceja y ve a Butch, él al parecer no se reía; parecía demasiado serio. Las chicas siguen haciendo comentarios crueles, Kaoru las mira aburrida y bosteza.
— ¿Ya acabaron de hablar ratas inmundas? — pregunta Kaoru, las dos chicas fruncen el ceño.
— ¿Cómo te atreves, maldita?
—Aquí la única rata que veo eres tú. — le dijo la pelirroja enojada. Kaoru suspira y se da la vuelta dispuesta a irse, cuando las dos chicas comienzan a reír. Ella se da la vuelta y le acomoda un muy buen golpe a cada una en su ya no tan perfecta nariz. Las chicas comienzan a llorar descontroladas, al ver sangre en sus manos; se levantan y se van corriendo. Butch observa a Kaoru, ella observa a él. Él arquea una ceja y ella frunce el ceño.
— ¿Qué pasa, verdecita? Ahora… ¿Qué te hice? — pregunta Butch, no cambiando su expresión. Kaoru empieza a respirar agitadamente, por fin le diría todo lo que se había guardado hace varios días.
— ¡Eres un estúpido, desconsiderado, insensato, inmaduro, idiota, imbécil, basura, machista, superficial! — grita Kaoru realmente molesta. Butch no se inmuta, no expresa nada, solo la observa.
—Eres un canalla, engendro de Mojo, te odio…— dice Kaoru bajando la mirada, siente un pequeño alivio en su pecho, pero una leve necesidad por llorar se hace presente; Butch solo murmura un «ya acabaste». Kaoru se enfurece y en vez de golpearlo con el puño, solo le suelta una muy fuerte bofetada. Butch por inercia voltea su rostro un poco enrojecido y vuelve a mirar a Kaoru, la cual le suelta otra y otra y otra… él no la detiene. Kaoru se enoja.
— ¿Qué demonios te pasa? ¡Defiéndete! — grita Kaoru a Butch, este suspira—. ¿Acaso ahora te burlas de mí?, vamos dilo…
—Yo no me estoy burlando de ti, es más no entiendo porque lo haces.
Kaoru se enfada y observa a Butch, que ya estaba con el rostro demasiado enrojecido.
—Olvídalo, no entiendes nada. — Kaoru se resigna, era verdad él le gustaba, pero era demasiado tonto como para comprender a una mujer.
— ¿Qué no entiendo? ¿Qué te dejaste manipular por mí y mis comentarios sarcásticos, sin mencionar que dejaste que esas perras te llenaran la cabeza de ideas estúpidas? — pregunta Butch al observar como Kaoru, estaba más que dispuesta a irse.
— ¿Qué? — pregunta Kaoru, dándose la vuelta para observarlo. Butch sonríe y se acerca poco a poco, para que ella no retroceda o lo golpee.
—Lo que oyes… pensé que nadie podría cambiarte, pero ya vi que sí. Y no me enorgullezco de ser esa persona…
— ¿Q-qué quieres decir? — pregunta Kaoru, no podía ser verdad; acaso él ya se había dado cuenta de sus sentimientos, acaso era tan… predecible.
—Ay, no puedo creer que vaya a decir esto, pero… perdóname de acuerdo, no debí decir todas esas cosas. Eres… eres… perfecta. — Confiesa Butch algo nervioso, no era su estilo decirle eso a las personas y menos a una chica
— ¿Perdón…?— Kaoru se sorprende e intenta no reírse, no es porque fuera mala; pero… todo estaba resultando al revés.
—Lo que oíste, no pienso repetirlo. — comenta Butch, algo avergonzado, volteando hacia otro lado.
—Pensé que… te gustaba la otra Kaoru.
—Pues pensaste mal. La otra… es muy bonita y sabe comportarse, pero es aburrido ver a una chica así.
—Mhm… entonces, me estas diciendo que… ¿te gusto? — pregunta Kaoru algo divertida por la situación. Butch se sonroja un poco y pone sus manos detrás de su cabeza, tratando de lucir desinteresado al decir un «sí». Kaoru se acerca y lo besa agresivamente. Butch se sorprende y se deja llevar, poniendo con propiedad sus manos en la cadera de esta. La necesidad de tomar aire se hace presente y se separan, Kaoru junta su frente con la del pelinegro.
—Si me vas a querer quiéreme como soy, porque ningún hijo de la chingada me va poder cambiar— le advierte Kaoru a Butch, mirándolo con un poco de reproche en su cara, y tenía razón al hacerlo. Quiero decir: él la humillo, la cambio e incluso sin que ella se diera cuenta fue él quien le "robo" su primer beso. Butch formó una sonrisa torcida en su rostro y murmuro: «Décima regla, aprendida». Kaoru se extraño por las palabras mencionadas por él, pero antes de que preguntara él ya la estaba besando de nuevo.
Reviews?
Corrigiendo historia, nada nuevo. ^^