Mi querida Jessy! También es una alegría para mi el encontrarte aquí también en fanfiction. Pues como veras acabo de inventar estenuevo fic, y aunque no lo creas, si! Solamente son dos capítulos, pues de hecho aquí traigo el final y ultimo de este fic... Gracias por esos ánimos que me das, en realidad lo aprecio bastante.

Geme!!!! Sip! Pues si soy yo geme preciosa! Pues la verdad es que ando de vagaciones (como tu dices) y estoy en la casa de campo de unos primos, lejos de ciudad y todo eso, aunque no hay Internet (solamente por medio de una cosa llamada MODEM jajajaja no creas si se que es un MODEM pero no sabía que aún se utilizaba) así que solamente me conecto por las noches porque a esta hora es la única hora en que la velocidad es un poco aceptable, intenté conectarme después de mediodía pero pasé casi media hora solamente leyendo mi correo y me encontré con la agradable sorpresa de sus dos comentarios.

Estoy segura que este ultimo capitulo pues si les quitará la respiración. No es nada parecido a lo que yo escribo y espero no ofenderlas...

Les recuerdo que las palabras son fuertes y ojala que con esto no vaya a ofender a nadie.. .

Espero sus reviews, ellos son el mejor aliciente para esta humilde escritora.. saludos!

Disclaimer: Los personajes de Inuyasha solamente pertenecen a Rumiko Takahashi, yo los he tomado solo como perversión y diversión... n//n.

::::::PASIÓN INCONTROLABLE::::::

Por Kame

Capitulo 2: Lujuria y Satisfacción

Ella quería besarlo y no dudó ni un momento en hacerlo, se abalanzó sobre él besándolo torpemente intentando meter su lengua adentro de su boca, él sonrió, la inexperiencia era mas que obvia! La separó delicadamente y la tomó de la mano hasta que logró que se sentara en la cama.

-Nunca has estado con ningún hombre verdad?

-Si quieres preguntar si tengo novio, pues mi respuesta es no... a todos mis compañeros los veo simplemente como eso, compañeros, amigos, pero ninguno me atrae...

-Sabes? Eres extraña Kagome, eres mas atrevida que cualquiera de todas tus amigas, ellas ni siquiera me dan una mirada, en cambio tu..

-Me meto hasta tu cuarto y te espío mientras te vistes...- Aceptó con suma vergüenza, pero para que engañarse? Eso era exactamente lo que había hecho.

-Me gustas... nunca antes me había gustado una chica de tu edad, pero estás segura de querer hacer esto?

-Nunca antes había estado tan segura de algo...

Ella se quitó las botas y gateó intentando parecer 'sexy' por la cama hasta llegar a su cabecera, él sonrió, ella quería parecer una experta en el arte de la seducción pero no lo era, aunque aquello podría tener una pronto solución. Subió en su cama llegando hasta su cintura, sus manos empezaron a tocarle por encima de la ropa mientras llegaban a su espalda quitando hábilmente el broche de su brassier, ella quedó sorprendida por aquella acción, ¿era tan rápido? Subió su blusa sin ni siquiera desabotonarla llegando hasta sus senos y los empezaba a lamer con cuidado de no dañarla, ella cerró los ojos y arqueó su espalda, ¿en realidad aquello estaba por suceder?

Su celular empezó a vibrar en la bolsa trasera de su falda, en aquellos últimos minutos ni se acordaba que una cosa semejante existía, él se levantó de la cama mientras ella tomaba su celular sin embargo las intenciones de responderle a Inuyasha, quien era el que le hablaba, eran escasas . Sesshoumaru sabía perfectamente lo que pasaba, tenía que tomar sus precauciones, por lo que cerró con llave su puerta y nuevamente se acercó a la cama dejando entrever que debajo de su ropa interior una bestia inmensa reclamaba por salir, ella tragó con dificultad, aquel bulto que había visto antes no se comparaba en nada con lo que estaba viendo.

-No respondes?

-No hay nada que me interese allá abajo, todo lo que deseo está aquí, en esta habitación contigo...

-Oye Kagome, en realidad estas segura de esto?

-No tienes porque dudar Sesshoumaru, ya estoy suficientemente grandecita para saber que es lo que deseo.

-Ten presente que yo no me quiero atar con una novia, o con una relación, especialmente una en la que mi hermano pueda estar involucrado reclamándome cualquier acto que tenga contigo.

-No te preocupes... si deseo perder mi virginidad no hay nadie mejor que tu, se que me tratarás con cariño...

Ella se colocó de rodillas enfrente de él, aún así la medida quedaba perfecta, ella casi se encontraba enfrente de aquel miembro que con deseo e ilusión deseaba tocar. Lo haló del boxer atrayéndolo hacia ella, el aún se encontraba de pie con un rodilla puesta en la cama.

Intento bajar su ropa interior, pero en esos instantes él se percataba en la desigualdad en que se encontraban, la tomó de las manos y la besó suavemente con lujuria y pasión, ella intentaba introducir tontamente su lengua nuevamente.

-Ten paciencia, hazlo con suavidad...

Le explicaba como el perfecto seductor que era indicándole cual era el movimiento circular que tenía que hacer, poco a poco la fue acostando mientras desabotonaba su blusa y terminaba de quitar su brassier, para luego continuar con su minifalda. ¡Ahora si estaban en iguales condiciones!

-Talvez.. no sea.. como las mujeres con las que ya te has acostado...

-Eres perfecta....

La interrumpió, ella sonrió. Nuevamente buscaba sus senos para lamerlos son suavidad, su mano acariciaba por completo sus pechos mientras su lengua jugueteaba con sus duros pezones. Ella colocó sus manos en su espalda sintiendo la dureza de ella y lo bien formado de sus músculos. Por debajo de su ropa interior introdujo dos de sus dedos buscando aquel virginal campo, encontrándolo humedecido por la excitación que él le provocaba.

El bajó con sensualidad su boxer para dejarla ver aquel miembro erecto, fuerte y viril, dudaba en como tenía que tocarlo y él lo notó. Tomó su mano derecha y la dirigió hasta su pene mientras ella lo agarraba por completo.

-Se siente... tan bien...

Reconoció jadeante la chica mientras él le ayudaba a bajar y subir la mano lentamente, pero ella estaba completamente excitada y la velocidad que quería sentir era otra mucho mas rápida que la que estaba experimentando, empezó a mover su mano con mas rapidez pero con un poco de brusquedad.

-Tranquila... tienes.. que hacerlo... suave.. despacio..- Le explicaba también jadeante

-Puedo... la...merlo?- Preguntó con malicia

-Hazlo... con la punta.. de tu lengua... nada mas...- Ella seguía sus instrucciones, sabía raro, sabía extraño, pero no sabía mal, lamía la punta mientras continuaba con su trabajo de manos –Ahora... introdúcelo.. poco a poco... en tu boca...

Ella obedecía a la perfección, su movimiento era lento, metía y sacaba aquel miembro duro de su boca mientras no dejaba su movimiento también lento con sus manos...

-Eres.. buena... en esto....

Reconocía, ¿realmente era la primera vez que lo hacía? No lo sabría! Y de hecho pues tampoco le importaba, lo único que podía sentir era aquella delicia con que lamía su erecto miembro, lo hacía tan bien que sentía que su orgasmo estaba tan cerca, ¡pero como podía ser eso posible! Aquella niña era una primeriza, no podía hacerlo eyacular solamente con una mamada! La separó suavemente mientras ella buscaba mas con su boca.

-Tranquila...ahora.. es tu turno...

Le espetó mientras la acostaba suavemente con sus besos para luego bajar hasta su intimidad. Con gentileza fue retirando su ropa interior mientras no dejaba de apreciar su virginal campo. Ella sintió morir por la revisión tan exhaustiva que le estaba haciendo con su mirada, sin embargo aquella vergüenza se desvaneció rápidamente en cuanto sintió como la punta de su lengua golpeó su clítoris, arqueó su cuerpo casi llegándose a sentar de un solo golpe ¿Qué había sido aquello? Era una sensación tibia, pero que le llenaba de calor todo su interior, aquel movimiento fue yendo mas rápido y en forma circular, ella gemía e instintivamente se tocaba una y otra vez sus propios senos.

El calor de su cuerpo sentía que la carcomía desde las mismísimas entrañas, no sabía que era lo que pasaba, sin embargo el peliplata sabia a la perfección que si seguía en aquel ritmo haría que aquella chiquilla obtuviera su primer orgasmo en su boca. Detuvo un poco el movimiento mientras su dedo mayor jugaba con su cavidad.

-No.. no.. te detengas.. por favor...

Suplicó jadeante, ese era el momento justo que necesitaba, la distracción y la excitación al máximo nivel de la chica suplicante por mas, introdujo su dedo con suavidad, sintiendo una pequeña calidez en el mismo, ella gimió pero esta vez era de dolor pero un dolor placentero. Nuevamente siguió jugando con su clítoris para distraerla un poco de aquel dolor que sentiría cuando introdujera el segundo dedo en su pequeña cavidad.

Su juego había dado resultado, ella suplicaba, imploraba por mas, rogaba porque no se detuviera y porque aquella sensación no la abandonara. Se encontraba lista. Sacó sus dedos de aquella cálida y acogedora cavidad y abrió sus piernas y con cuidado dirigió su miembro excitado y completamente erecto hasta, lo que era entonces, su virginal vagina. Ella sintió un agudo dolor que le provocó derramar un par de lágrimas.

-Me detengo?

-No.. sigue...

-No te preocupes, el dolor pasará...

Ella confiaba plenamente en aquel chico que la había hecho gozar durante esos últimos 30 minutos con un placer incontrolable. Lo terminó de introducir por completo, aquella estrechez con la que iba pasando también le causaba cierto dolor a él, pero lamentablemente para ella, eso mismo hacía que creciera y se endureciera mas, acostarse con chiquilla virgen? Eso era lo mas delicioso que había logrado hasta ese momento.

Movió su miembro una y otra vez, después de varios minutos el dolor había desaparecido y el vaivén que estaba generando hasta el momento ero lo mas placentero que la chica había sentido en toda su vida.

Una y otra vez sacaba e introducía su pene recubierto de la cálida sangre que servia como testigo que era mujer por primera vez. Ella sintió como una corriente iba pasando por todo su cuerpo y que se podía sentir desde su intimidad hasta llegar a su cabeza.

-Se....sshoumaru....

Gimió mientras iba siendo alcanzada por el orgasmo al mismo tiempo que él, que lograba soltar su eyaculación adentro de su cavidad. Los dos cayeron exhaustos, rendidos por tanta entrega prohibida pero pasional y excitante al mismo tiempo.

-Cómo.. te sientes?

-Como si volara...

Aseguró con una sonrisa en su rostro viendo hacia el techo como si hubiese encontrado la entrada al cielo. Se acercó a él apoyando su rostro en sus perfectos pectorales y jugando con sus dedos en su estómago.

-Te duele... mucho...?

Preguntó de forma cortés un poco preocupado, ella sonrió maliciosamente.

-Creo que solo lo suficiente...

Respondió mientras empezaba a bajar su mano tomando nuevamente su miembro empapado por la combinación de sus jugos.

-hmp... quieres mas.. eh?

-Solo siento curiosidad... dicen que cuando la mujer se encuentra arriba del hombre se puede sentir un orgasmo casi incontrolable.

Le explicaba sus intenciones mientras intentaba recordar como eran las lecciones que le acababa de dar. Movimiento lento. De arriba hacia abajo. Movimiento lento. Casi haciendo un circulo con su mano, no apretando demasiado, solamente lo suficiente para que la sangre se volviera a acumular nuevamente y se mostrara aquella erección que tanto la había excitado.

-Ahhh... eres.. buena aprendiz... princesa....

Aquellas palabras la habían excitado mas, 'princesa' sin querer había expresado una parte de sus sentimientos, que importaba que su pene aun tuviera rastros de su propia sangre, ¡total! ¡Era su propia sangre! Llevó su lengua hasta la cabeza la cual empezó a moverla de manera circular provocando una erección inclusive mayor de la que había visto anteriormente.

-Ahora.. levántate...

Ordenó el mismo tomaba su miembro y lo dirigía con cuidado a su cavidad. La tomó de la cintura ayudándola con el vaivén, arriba y abajo, primero suavemente luego con un poco mas de velocidad. Instintivamente apoyó sus rodillas en la cama para darse mas velocidad y fuerza, eso era justamente de lo que le habían hablado. Tener el control era excitante ella decidía la velocidad y la frecuencia del sube y baja introduciéndose y sacándose con fuerza su miembro perfectamente duro, no pudo resistir mucho tiempo en aquella posición.

-Ahhhh

Era el grito de placer que emitían por segunda vez.

-Eres... maravillosa...

Susurró a su oído mientras daba pequeños besos en su espalda.

-Tu eres... el maravilloso Sesshoumaru..

-El día de mañana te llevaré donde un amigo... de ahora en adelante... nuestro control... de prevención será muy estricto princesa...

Sonrió. El solo escucharlo mencionar aquella linda palabra la hacía enloquecer. Quería nuevamente una vez mas hacer el amor de manera descontrolada y salvaje, pero el cansancio los iba invadiendo a tal punto de caer rendidos en los brazos Morfeo.

Sus encuentros sexuales cada vez se hacían mas frecuentes. Ella se escapaba a la salida del colegio objetando cualquier excusa para irse a encontrar en el apartamento de soltero del chico. Al terminar sus estudios y luego de un tiempo descubrían su relación ante todos, casi 1 año y medio después de la primera vez, pero él desde la primera vez que la había tenido en sus brazos sabia que sería la futura madre de sus hijos y su esposa hasta que la muerte los separara. Al terminar su carrera a sus 22 años él le proponía matrimonio lo cual ella aceptaba de manera muy gustosa.