Había llegado la noche y la sirenita se encontraba angustiada por haber perdido para siempre a su amado príncipe, miraba el camarote una y otra vez, dándole vueltas al asunto y no llegaba a nada bueno. Incluso con ese punzante dolor en las piernas, subió a cubierta mirando al mar. Recordó las palabras de la hechicera y, acongojada, se dispuso a sacrificar su vida y a desaparecer en el mar.

-¡Sirenita! ¡Sirenita!

Abrió los ojos sorprendida, asomándose por la borda. Su hermanas, eran sus hermanas quienes la llamaban. Aun dentro de ese sufrimiento, se sentía tan feliz al verlas. Pero había algo muy distinto en ellas. Sus hermosas y largas cabelleras ya no estaban.

-Sirenita, hermana, toma este puñal. ¡Es mágico! – Clamaba la más baja y de cabellera rubia – Se lo hemos cambiado a la hechicera a cambio de nuestro cabello.

-Debes usarlo. Ve a la alcoba del príncipe y asesínalo con el puñal antes de que llegue el amanecer – Agregó la más madura, alzando el puñal hacia la sirenita – Cuando lo hagas, volverás a ser una sirena y olvidarás todas tus penas.

Por instantes todo fue tan rápido en su mente. Había tomado el puñal con ambas manos, abrazándolo contra su cuerpo mientras se aventuraba hacia la habitación del príncipe. Y, ahí estaba, durmiendo con quien ahora era su esposa. Su corazón se contrajo en su pecho. Se acercó a su tan amado príncipe y le dio un beso furtivo, volviendo rápidamente a la borda del barco.

Solo faltaban escasos minutos para el amanecer. Dirigió la mirada hacia al mar, llena de nostalgia, y por última vez, miró todo lo que dejaba atrás, en especial su amado mar. Arrojó con fuerza el puñal al mar, dio un largo suspiro y se lanzó al océano; dispuesta a desaparecer y volverse espuma.

Cuando el sol salía por el horizonte, sus amarillos rayos tocaron el azulino mar. La sirenita, se volteo para ver su último amanecer y desaparecer con un bello recuerdo. Pero de improviso, una fuerza muy diferente le tomo y la llevo a lo más alto del cielo. Las nubes eran rosas y el mar rugía con la primera brisa del día. Miró sorprendida en todas direcciones buscando una respuesta a su llegada a aquel lugar. Tras unas nubes escuchó un murmullo acompañado de campanilleos.

-¡Sirenita! ¡Ven con nosotras! – Unas pequeñas mujercitas, muy lindas y alegres comenzaban a volar a su alrededor –

-¿Quiénes sois? – Se llevó su diestra a la boca con rapidez, soltando un risilla al descubrir que había recuperado su voz – ¿Dónde estoy?

-Estas con nosotras en el cielo. Somos las hadas del viento – Hablaban al unísono deteniéndose frente a la sirenita con los rostros estampados de sonrisas – Al contrario de los hombres no poseemos alma, pero es nuestro deber ayudar a quienes han mostrado buena voluntad con ellos.

La sirenita, desde cielo, miró al barco en el cual se transportaba su amado príncipe. Sin poder detenerlo, notó como sus ojos se llenaban de lágrimas y su corazón se volvía a llenar de nostalgia. Las hadas, a su lado, le susurraban con dulzura.

-Mira las flores en la tierra, ellas esperan recibir nuestras lágrimas, bañándolas como rocío. ¡Ven con nosotras! – Exclamó una, paseándose de un lado a otro – Volaremos hacia los países cálidos, donde el aire mata a los hombres, para llevar ahí un aire fresco. Por donde pasemos llevaremos socorro y consuelo, y cuando hayamos hecho el bien durante trescientos años, recibiremos un alma inmortal y podremos participar de la eterna felicidad del hombre.

-Tú has hecho con tu corazón lo mismos esfuerzos que nosotras – Comentó una segunda, posando su pequeña mano en la mejilla de la sirenita – Has sufrido y salido victoriosa de tus pruebas y tu alma se ha elevado hasta el mundo de los espíritus del aire, desde aquí en adelante, solo dependerá de tus buenas acciones el recibir un alma inmortal.

-Vallamos juntas por los cielos, ¿Si? – Una tercera se había puesto frente a la sirenita, sonriendo con inocencia, esperando la respuesta de la chica.

La sirenita se alzó y lloró, lloró como nunca había llorado en su vida.

"Aun cuando me convierta en espuma de mar

Te amo.

Después de disolverme en el océano y el cielo,

Te cuidare"

En el buque, el príncipe y su esposa, miraban con melancolía la espuma en el mar. La sirenita, aceptando la propuesta de las hadas, se volvió una de ellas. Al verlos en el navío, se acercó, siendo invisible. Le dedico una hermosa sonrisa a la chica y abrazó a su amado príncipe para luego subir al cielo envuelta en una nube rosa, con el corazón lleno de regocijo.

El príncipe, al sentir el cálido abrazo no solo se sorprendió. Un par de lágrimas brotaron de sus ojos mientras alzaba la mirada al cielo.

FIN

Soy una sutil descarada. Después de años, se me ha ocurrido traer el final. ¿Razón? Sigo sin encontrar muchos fics de ellos dos :c

Bueno, pues que les cuento. Hace mucho tiempo que no escribo, desde los capítulos anteriores mi vida ha dado tantas vueltas. He entrado a la universidad de noche mientras trabajo de día y créanme, el tiempo casi no alcanza.

Para aquellos que lo lean, espero no se sientan ofendidos con mi pobre redacción. Y aunque muchas pidieron un cambio en el final, no fui capaz, en honor al cuento que me gusta, pero… esperando que el tiempo me alcance, les traeré algo así como un bonus, con el final alternativo que quieran :D

Bueno~ Paso a agradecer por reviews

enma-naruhina: jajajajaja xD pues en algo te encuentro razón, tratos buenos no hacia pero bueno~ Gracias por leer.

: Lo termine (¿) Tarde, pero terminé. Así entre nos, amo la pareja que hace Gakupo y Luka xD ni sé como terminé escribiendo esto, aunque me gusto hacerlo. Gracias por leer!

RisaTouya: Yo no soy muy de leer fics, últimamente ando como oxidada pero me gustaría leer el que hiciste. Gracias por leer :B!

AxureeRheeid: jajajajajajajaja xD pues el final me gusta mucho, míralo desde otro punto quizás, aunque claro, aquí Miku se las lleva toda solo por aparecer, una lastima :c! Bueno, Gracias por leer!

blanca luna: Omg eres toda chiquita! Qué lindo que te pasaras a leer! Espero el final también te agrade, aunque sea ese xD Gracias por leer!

kira kurosaki: Es bueno saber que llama la atención en algo. Gracias por leer!

Karen-Rose-de-Zero: La redacción es una de las cosas que más me espanta al momento de escribir, me pierdo entre nubes y cosas así. Qué bueno que no esté dando lastima aquí. Gracias por leer!

Anon: jajajajajajajajaj xDDD Es difícil no odiarla, lo siento. Pero si seguía (¿) acá esta el fin. Gracias por pasarte a leer!

Ileynnena: Primero, gracias xD Gracias a este ultimo post comencé a retorcerme y tenia siempre en cuenta el fic. Era como, Dios, tanto tiempo y alguien lo leyó. Seguí un par de meses y fue como, ya ya debo terminar. Acá esta el final. También planeo hacer el final feliz, quizás tarde mucho menos de lo que tarde en actualizar esto. Gracias por leer.