"La jungla"

Hola! Bueno este es mi nuevo fic, espero que les guste…

Los personajes aquí presentes no me pertenecen, son propiedad de Craig Barlett, excepto los que yo inventé para poder contar la historia.

…"-Helga??? Qué haces tu aquí??- Preguntó un niño de unos diez años, rubio, de ojos verdes y con cabeza en forma de balón. Tenía la camisa de siempre, sucia, algo rota y con quemaduras, no llevaba el suéter verde de toda la vida, por el calor agobiante de aquella jungla.

-A-Arnold! Mmmm es decir, qué hay de nuevo cabeza de balón???- Preguntó una niña de unos diez años también, rubia y toda mojada de modo que el pelo le caía libre por la espalda. Levaba una musculosa rosada que estaba maltratada por el recorrido hasta ahora atravesado. Pero eso si, su moño característico lo llevaba atado a su brazo derecho como insignia de quién era ella.

-Helga qué haces tu aquí??? Esto es muy peligroso no debes estar metida en estos lugares!!!!- Le exclamó el niño mirándola con seguridad para que ella desistiera de seguirlo, y se volviera al campamento junto con el resto.

-Y-Yo… iba de pasada…-Contestó riendo nerviosamente -Y además estamos en un país libre Arnoldo, no veo por qué tenga que darte explicaciones!!!- Exclamó volteándose dándole la espalda al rubio, mientras muy nerviosa observaba la caída de agua sobre aquella cascada.

-Helga…- la llamo intentando hacer hincapié para que ella confesara- Dime la verdad… las extrañas notas que Gerald y yo hemos encontrado… fuiste tu???- Preguntó sabiendo perfectamente la respuesta.

-Q-Qué???- Preguntó exaltada- De qué estás hablando Arnoldo???- Preguntó volteando a verlo, intentando lucir lo más "normal" posible.

- Helga…C-Cómo conseguiste toda esa información???- Le preguntó muy sorprendido.

-Ash! No se de qué diantres estás hablando Arnold!- Afirmó cruzándose de brazos con su tono característico mientras desviaba la mirada.

El rubio se acercó y sin pensarlo la tomó de los hombros y prácticamente le exigió- Mírame Helga! Dime mirándome a los ojos que no fuiste tu la que dejó todas esas notas! Que no estás aquí porque te interesa ayudarme!- Le ordenó sin dejar de mirarla insistente, mientras ella mantenía la cabeza baja, mirando el piso.

-N-no sé de qué hablas…- murmuró en un hilo de voz.

-Si lo sabes Helga! Es mentira que no te importa ayudarme! Es mentira que no me consideras tu amigo y finalmente es mentira que me odias tanto como dices!!!- Le dijo insistente sin soltarla, mientras la miraba con profundidad buscando los ojos de ella.

-Claro que te odio cabeza de balón!...E-estás loco zopenco? Yo no hice todo eso que dices!- Le contestó con fuerza, pero sin atreverse a mirarlo. Sabía muy bien que si lo hacía, los ojos la iban a delatar y ya no habría vuelta atrás.

-Di la verdad Helga! Vamos esta es tu oportunidad de ser sincera…- Le pidió viendo las expresiones de ella y sintiendo como la niña temblaba en ese agarre.

-A-Arnold yo…- Murmuró tartamudeando.

-Dilo Helga! Di lo que en verdad querías decir… Estoy aquí escuchándote…- La animó nuevamente, sin aflojar con el insistente contacto visual que demandaba.

-Bien, bien!-Exclamó soltándose del agarre- La verdadera razón por la que estoy aquí…- Dijo animándose de una vez a mirarlo a los ojos, con los labios temblorosos.- Es porque…- Volvió a bajar la mirada mientras jugaba con sus manos, como dudando si decirlo no. Pasaron unos instantes, hasta que tragó saliva y levantando el rostro por fin lo soltó- Te amo Arnold!- Le exclamó eufórica mientras lo observaba- Si, así es te amo! Yo Helga. tu peor pesadilla, la niña que te tortura sin razón aparente, la niña que piensa en ti las veinticuatro malditas horas del día…- Confesaba mientras daba vuelta en círculos, de los nervios- Y-yo vine hasta aquí para darte el mejor regalo posible! Por que sé que encontrar a tus padres es lo que más quieres… Y qué no haría yo por ti Arnold???...-Dijo dándole la espalda nuevamente- Feliz cumpleaños cabeza de balón…- Completó mientras solo se escuchaba el sonido de esa calurosa selva.

Arnold la miraba como pensando y algo impactado por lo que ella había dicho. Jamás pudo haberse imaginado que ella se sintiera así, era muy loco y fuerte, casi arrasador! Así que algo dudoso, la tomó del brazo y la volteó para si, mientras ella lo miraba impactada sin saber qué esperar.

-Gracias Helga…- Le dijo con una mirada llena de agradecimiento, y lentamente dejándose llevar, se acercó a ella con decisión y le depositó un tierno y cálido beso en los labios. Dulce y tranquilo, como el momento lo ameritaba. Un momento que parecía eterno…

-Hey Arnold!- Se pudo escuchar una voz provenir de lo lejos y ambos se soltaron casi automáticamente. Se miraron y luego buscaron de dónde provenía el llamado. Cuando notaron a un niño un poco más alto que ellos, también de unos diez años, moreno, con una linterna en la mano, quien los observaba con los ojos como platos.

-Gerald…-Contestó el rubio algo inquieto.

-…-No obtuvo respuesta, el moreno estaba con la boca abierta.

-Habla ya cabeza de cepillo!!!- Le exigió la niña perdiendo la paciencia.

-Mmmm…- Dijo aclarándose la garganta-Arnie… creo que encontré el camino…- Contestó observando a la rubia- H-Helga??? Eres tu??? Qué haces aquí???- Preguntó sin salir de su asombro.

-Ash! Claro que soy yo zopenco! Quién más???- Respondió la rubia cruzándose de brazos.

-No hay tiempo para explicaciones Gerald! Vamos, debemos apresurarnos!!!...- Exclamó el rubio avanzando, siendo seguido por ella, y luego por su amigo "Tienes mucho que explicarme viejo"- Pensó el moreno mientras los seguía"…

Ya eran las tres de la mañana. Una muchacha rubia de ojos azules inmensos, despertó de su sueño… Ese que tenía constantemente hacía ya algún tiempo… Miró su radio-reloj, dentro de un par de horas debía levantarse para ir a la escuela… Se colocó la almohada en la cabeza y con un resoplido de fastidio volvió a dormir nuevamente…

…" Les agradezco todo lo que han hecho por mi, amigos… Pero he decidido quedarme aquí en San Lorenzo con mis padres… Creo que es lo mejor!!!- Les agradecía Arnold toda la ayuda recibida por cada uno de ellos.

-Viejo…n-no hablarás enserio???- Le preguntó un muchacho moreno, muy preocupado.

-Me temo que si Gerald…-Contestó observando la mirada decaída de su mejor amigo.

-P-pero Arnold quien va a aconsejarnos cuando no estés tu???- Lo interrogó una niña de cabello oscuro y corto.

-Estoy de acuerdo con Rhonda…quién nos dirá cuando estemos actuando mal???- Preguntó un niño delgado y alto, con una gran nariz.

-Stinky y Rhonda tiene razón Arnold! Quién nos guiará para que hagamos lo correcto???- Preguntó Sid.

-Te echaremos de menos Arnold…-musitó Nadinne mientras una niña colorada lo observaba tristemente.

-A-Arnold…-Suspiró Lila comenzando a llorar.

-Escuchen amigos… que me quede aquí no significa que nos separaremos…-Les dijo en son de ánimo.

-No será lo mismo Arnold!-Lo contradijo Phoebe colocando una mano dulcemente sobre el hombro de Gerald.

-Quién va a detenernos cuando cometamos estupideces???- Preguntó Harold, desanimado al igual que el resto.

-Viejo! Vuelve con nosotros!- Le pidió su amigo con voz suplicante.

-Gerald trata de comprender… necesito esto! Hace años que no veo a mis padres y ahora que los tengo quiero pasar con ellos la mayor parte del tiempo posible y se que eso solo lo conseguiré quedándome aquí!!!- Les comentó con ojos ilusionados-Yo también los extrañaré…Pero nos mantendremos comunicados, siempre van a contar conmigo para lo que necesiten!!!- Les aseguró acercándose a ellos y todos se despidieron en un gran abrazo de grupo.

Mientras que detrás de una roca y escondida, una niña rubia observaba toda la escena que se estaba llevando a cabo. Sin poder contenerse, comenzó a llorar inconsolable. Pero con decisión, se apartó del lugar corriendo y yéndose a donde nadie pudiera verla…

Arnold caminaba por aquella cascada… sintiendo como el caer del agua no ayudaba mucho para poder aclarar sus ideas… se quedaría en aquella jungla junto con sus padres pero y… sus amigos?? Sus abuelos???. Realmente los extrañaría mucho… y sobre todo nada sería lo mismo sin… Detuvo sus pensamientos al escuchar un ruido constante provenir entre los arbustos. Se puso de pie y sigilosamente se acercó.

-Q-qué sucede Helga???- Preguntó al ver a aquella niña sentada con la cabeza apoyada sobre sus piernas, sollozando ya sin aliento. Ella se puso alerte enseguida e intentó secarse las lágrimas lo más rápido que pudo.

-Qué haces aquí cabeza de balón???- Preguntó con la voz rasposa.

-Helga…- Susurró acercándose a ella- Qué sucede??- Preguntó preocupado agachándose para quedar a su altura.

-Qué te importa cabeza de balón!- Le respondió totalmente histérica gritando- Te odio Arnoldo! Me repugna tu existencia! Te odio! Te od…-Le iba a continuar gritando, a pesar de que lo miraba con los ojos desesperados, pero se detuvo al sentir cómo el la abrazaba con premura.

-Yo también te voy a extrañar…- Le dijo al oído casi en un suspiro- Te quiero mucho Helga… con todo mi corazón…- Helga ya no contuvo el llanto y comenzó a llorar de nuevo sollozando sobre su hombro sin apartarlo. Estuvieron así por un buen rato… Arnold abrazándola y conteniéndola en su dolor que también era el suyo; y Helga llorando sin consuelo sobre su hombro sin animarse a empujarlo.

-Nos escribiremos Helga… ya lo verás…- Le afirmó meciéndose lentamente junto con ella de modo de calmarla un poco- Nunca me olvidaré de ti…siempre estarás conmigo!!!!- Le susurró como prometiéndoselo.

- Ni yo a ti Arnold… - Le contestó como pudo, presa del llanto todavía, abrazándolo también. Arnold sintió una angustia muy grande al sentir esta respuesta de cariño. Continuaron abrazados otro rato, mientras el niño le acariciaba el pelo sintiendo como ella de a poco se tranquilizaba. Se serenó… y con decisión lo apartó y se puso de pie.

-A-Adiós Arnold…-Murmuró llorando de nuevo y huyó del lugar.

Arnold tardó unos instantes en reaccionar, luego la siguió:

-Helga!!!!- la llamó con ansia, pero se detuvo al notar como ella apresuradamente se subía al autobús que llevaría a todo el curso, del quinto año de la escuela primaria 118 al aeropuerto para volver a casa.

-Adiós Helga…"…

-Hey campeón vete despertando… Dentro de quince minutos aterrizaremos…- Lo llamó su padre.

-Qué hora es???- Preguntó abriendo los ojos y recordando el sueño que lo acechaba desde aquel día.

- Las cuatro y media de la madrugada hijo!- Contestó su madre- Dentro de poco llegaremos…- Le dijo acariciando su cabello con devoción.

-Me muero por ver a mis padres querida! Los he extrañado tanto!- Le confesó su marido.

-Yo también cielo!- Le dijo su esposa tomando su mano, mientras que su hijo observaba con ansia las luces del pueblo de Hillwood que ya se empezaban a notar en lo oscuro de la noche.

Continuará…

Hola!!!! Y bien??? Qué les pareció??? Bueno esta nueva historia es un combo en realidad y va a ser algo larga. Porque en ella se refleja todo lo que pasó en el viaje a San Lorenzo, y lo que sucede cuando Arnold regresa a Hillwood. Nos vemos y suerte! Porfi dejen reviews!!!