Era un dia normal como cualquier otro, me encontraba en casa preparando algo de comer… vivo en un vecindario de Vancouver-Canada, tengo 17 años y mi nombre es bella swan, mi cabello es de color marron oscuro, mis ojos casi del mismo color pero un poco mas tirando a negro, mido como 1, 60 o 1,65 y mi piel es blanca... Vivo con mi padre, charlie y mi mama rene, ellos eran unos padres increíbles pero a pesar de todo yo vivia en mi mundo siempre, soy una chia silenciosa no me gusta ser el centro de atención…
sin embargo el dia de manaña si seria un poco menos aburrido de lo normal, veamoslo de esta forma, una familia nueva llegaba al vecindario. En el lugar de la antigua casa, que un par de años atrás habian demolido, se encontraba ahora una hermosisima y moderna casa. Obviamente las viejas que siempre se la pasaban chismoseando por las calles, nos habian anunciado que esta casa era propiedad de una familia adinerada.
Manaña llegaria esta esperada visita… ¡por fin! Un dia diferente, en el que algo, no poco inusual, ocurriria.
Al dia siguiente, domingo, me desperte como a las 11… las clases iniciarian dentro de una semana. Me di una ducha relajante y luego me vesti con unos jeans tubito, una camisa de color blanco y los converse negros que tanto adoraba… baje y alli se encontraba mi mama preparando el desayuno, mi padre estaba en la sala de la televisión.
"buenos dias querida" dijo mi madre en forma de saludo.
"hola ma"
"te diste cueta de que el camion de la mudanza de los nuevos vecinos ya llego?"
¡oh por dios! Si soy estupidaa. Lo habia olvidado por completo…
"no mama, lo olvide" dije sin darle mucha importancia.
Desayune y luego sali a tomar un poco de aire fresco. Al salir me sente en el patio de enfrente de mi casa. Estaban descargando el camion de mudanzas… de pronto por la calle se escucharon chirriar los neumatios de un auto, pero no cualquier auto, por la esquina aparecio un mustang (el auto de mis sueños), era completamente negro. El mustang estaciono en el garage de la casa de en frente. Y del auto bajo el chico mas pefecto que jamas habia visto. Su cabello, un poco despeinado por el viento, era de color bronce, su cara era simplemente espectacular, su cuerpo no muy musculoso pero no era un flacucho, era esplendido, llevaba puesta una chaqueta, como las que usa mi papa para ir al trabajo y por dentro un sweater gris y unos jeans desgastados. Pero al final, sus ojos se toparon con los mios y eso fue lo que me encanto mas e hipnotizo por completo. Eran de un color verde esmeralda. Se me quedo mirando unos minutos, lo que a mi me parecieron horas, y luego me guiño un ojo y puso una sonrisa demasiado seductora, se volteo y se fue. Luego de quedarme un rato embobada mirando la puerta por la que habia entrado aquel maravilloso hombre, me pare y me dirigí de vuelta a mi casa. Al entrar olí el delicioso aroma de la pizza, eran las dos de la tarde. ¿Cuánto tiempo me había quedado afuera?
Almorzamos juntos.
"¿cariño?" me llamo mi madre.
"umm" respondi yo.
"esta noche invitamos a los nuevos vecinos a cenar"
Me congele en el instante. ¿el dios que vi hoy seria parte de esa familia?
Fingí indiferencia al responder.
"ok…"
Luego del almuerzo me fui a mi habitación. Alli me tire en mi cama y me quede meditando… ¿él vendrá? Supire pesadamente. No lo se. Ademas que importa si viene o no, es solo un estupido chico igual que todos los demas.
Los vecinos se presentarian a las 7 y eran las 630… me di una rapida ducha, otra vez, porque me habia quedado dormida hoy en la tarde y tenia los musculos muy tensos. La ducha me relajó… me puse unos jens tubitos oscuros, casi negros, unas sandalias negras roxy de playa y una camisa de mangas cortas con un mickey Mouse dibujado en el pecho… se habran dado cuenta de que el negro me gusta mucho, no es que sea una rara gotica ni nada de eso, es solo que el negro es un color que combina con todo asi que es como neutral…a los pocos minutos de haber bajado se escucho el timbre. Mi madre fue a abrir la puerta. Por la puerta de ésta aparecio la familia de en frente. Empezaron a presentarse, el padre se llamaba carlisle, su cabello era dorado, un cuerpo bien formado y era alto, su esposa se llamaba esme, su cabello era de color bronce como el del chico, tenia un cuerpo que cualquier super modelo desearia tener, la sonrisa que se extendia por su rostro estaba llena de amor y felicidad, luego se presento una niñita peueña llamada alice, dijo que tenia 3 años, su cabello era igual que el de su madre pero los ojos eran los de su padre de un color miel. Y por ultimo, se presento el dios, se llamaba edward cullen, por supuesto el estaba espectacular como en la mañana, pero esta vez con diferente vestimenta, tenia un sweater pegado a su escultural pecho era de color negro, y una camisa blanca abajo y tenia los mismos jeans que en la mañana, su piel era color blanca como la mia y creo haber escuchado que tenia 17 años, me di cuenta de que sus hipnotizantes ojos verdes eran iguales a los de su madre. Los padres se fueron a la cocina a seguir hablando mientras mi madre preparaba la comida y yo me quede con alice y edward. Estos dos se me quedaron mirando.
"mmm… bueno mi nombre es bella, tengo 17" dije con indiferencia.
Edward levanto una de sus cejas, demasiado sexy, pensé.
"y… ¿que quieren hacer?" pregunte.
Alice dijo que queria ver tv. Se la prendi y le di el contol. Era una niña adorable. Luego mire edward para darme cuenta de que me miraba de forma demasiado insistente.
"bueno… hay muchas muchas cosas que se me ocurren para hacer en este momento y soy edward por cierto…" dijo. Su voz era suave pero muy masculina, cada una de las palabras que salian de su hermosa boca te acariciaban lentamente.
Mis mejillas se tiñeron de rojo al instante.
Con que era uno de esos que juran que todo el mundo gira alrededor suyo eh?
Decidi que yo no seria una mas de sus conquistas.
Copie la sonrisa seductora que él tenia. Me acerque lentamente y le susurre al oido.
"en serio?... pues espero que esto ayude…" me acerque y le mordi suavemente el cuello, olia delicioso, ese perfume me dejo hipnotizada por completo.
Jajjajjja! El se quedo atonito y yo me fui caminando a la cocina.
Mama me dijo que a estaba lista la cena, que llamara a edward y a alice.
Camine de vuelta a la sala. Alice se encontraba todavía viendo tv y su hermano no se encontraba en la habitación.
"¿alice? ¿Dónde esta edward?"le pregunte a la niña.
De repente senti dos fuerte brazos aprisionarme entre el sofá y un cuerpo que se encontraba detrás mio.
"me encantan las difíciles…" me susurro al oido pegándose a mi "nunca una chica me habia dado problemas, este sera un nuevo reto para mi…y lo que hiciste antes me lo vas a pagar…" termino en un susurro, su aliento recorrio mi piel.
Me estremeci ante aquello. Por supuesto él se dio cuenta. Se escucho su musical y estupida risa, se alejo de mí y se dirigió a la cocina. Le dije a alice que era hora de comer, me tomo de la mano y nos fuimos al comedor. Al llegar a la mesa quedaban dos puestos vacios, uno al lado de mi padre y la señora cullen, y otro al lado de edward y mi madre. Por supuesto yo me dirigía a tomar el asiento que estaba entre la señora y papa, pero alice me gano y se sento al lado de su madre.
Edward me dedico una sonrisa triunfante y palmo el asiento vacio a u lado derecho. Resignada y dedicandole una mirada de muerte me sente alli.
Empezamos a comer sin ningun inconveniente. Mama nos trajo helado de postre. Estaba comiendo mi helado de chocolate, mi favorito, cuando senti una mano posarse en mi rodilla y subir y bajar lentamente. Me quede congelada al instante. Mire a edward y el me dedicaba una mirada insinuante y una sonrisa seductora que decia te dije que me la hibas a pagar. Mis mejillas se tiñeron de rojo. Le pegue una patada al pie del chico. Este puso una mueca de dolor pero no se detuvo, esta vez hacia círculos en mis pernas con las yemas de sus dedos. Obviamente me encantaba el tacto pero ni loca hiba a decirlo. Me tuve que aguantar esto durante el resto de la cena. Hasta que los papas de edward dijeron que ya era tarde y que tenían que irse. Un suspiro de alivio salio de mis labios. edward no tuvo mas remedio que retirar su mano y yo le di un buen pellizco bajo la mesa. Se pararon despidiendose y se fueron. Eran una familia muy agradable exceptuando al chico por supuesto. Subi a mi habitación y me puse mi pijama que eran unos shorts muy cortos, parecian casi ropa interior, y una camiseta rasgada, y me tire en mi cama.
Holaaa chicas! Lamento mi ausencia durante tanto tiempo, las clases este año estuvieron duras…
Bueno se que no he terminado mi otra historia pero es que no puede evitar escribir esta. Se los juro que me gusta muchisimoo esta historia y espero que a ustedes tambien les guste!
Voy a tratar de actualiazar lo mas rapido psible. Saben que si tienen alguna critica sugerencia o simplemente quieren comentar la historia denle al boton de review y dejenme algunitoo plis!!
Espero que les guste, los amooo!!
Caro3!