ETTO, ESTABA TOTALLY INSPIRADA, ASI QUE ME DECIDI A HACER ESTE FIC, APARTE DEL QUE YA TENGO PUBLICADO DE SESSHOME, LO SIENTO PERO ES QUE AMO ESA PAREJA

Y ESPERO SU APOYO EN ESTA TAMBIEN.

INUYASHA OBVIO Y PARA MI DESGRACIA NO ES MIO u.u NI NINGUNO DE LOS PERSONAJES QUE EN ESTA HISTORIA APARECEN, SON DE LA MAGNIFICA Y LA MEJOR RUMIKO TAKAHASHI. SOLO LOS PEDI PRESTADOS PARA SACARME LAS IDEAS QUE TENGO EN LA MENTE.

BUENO ESPERO SUS COMENTARIOS, SI LES GUSTA O SI NO TAMBIEN, SOLO POR FAVOR NO SEAN TAN CRUELES, NOS LEEMOS LUEGO... ADIOS.

SABEN QUE CONTESTO REVIEWS

CAPITULOS CORTOS.

O DEPENDIENDO DE LA INSPIRACION.

ATENCION: INTENTO DE LEMON!!!!!!!!!!!!!



- Negativo, negativo por favor. Kami te juro si esta basura da negativo donare mi colección de bolsos Prada a la caridad, ¡Por favor!- Imploraba Kagome Higurashi hincada en el piso del baño de su oficina sobre el retrete se podía ver una pequeña caja rosada de cartón donde se leía "100% EFECTIVA, SOLO CINCO MINUTOS," y la marca del afamado producto. Si esto le estuviera pasando en diez años quizá brincaría de la emoción, pero no ahora, solo tenia 22, faltaban escasos meses para terminar su carrera y para colmo acababan de soltarle las riendas de la empresa familiar, tenia un montón de cosas por hacer antes de pensar en cosas como esas.

Pero tenia que haber conocido a ese sujeto, pero es que jamás había visto en su vida a alguien tan sexy. Sus ojos, su largo cabello, ¡Su porte! Con eso basto para enloquecerla. Maldita sean las empresas Taisho, maldita sean las hormonas y ¡MALDITO SEA SESSHUMARU TAISHO!

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- Kagome, los de la empresas Taisho te esperan en la sala de juntas.- Anuncio su secretaria personal y amiga Sango, una hermosa mujer de pelo y ojos marrones, piel blanca como la nieve e inocente mirada.

- Gracias Sango, dile al abogado que los papeles del contrato están listos y me parecen aceptables.- Dijo levantándose de su asiento.- Después llevas los expedientes a la sala de juntas y me esperas para el almuerzo.

- Hai, jefa.- Ambas chicas salieron de la elegante oficina.- Espera a que veas a Sesshoumaru Taisho. A estado los últimos 10 años en Inglaterra, esta hermoso.

- De seguro es igual a Inuyasha.- Dijo asqueada, su relación con el menor de los Taisho no había quedado en los mejores términos, ninguna relación termina bien si encuentras al chico en tu cama con una "Amiga de la infancia"- No puedo hacerlos esperar mas.- La pelinegra entonces se dirigió a la sala de juntas, cuando abrió la puerta las miradas de los tres hombres Taisho se dirigieron hacia ella; olímpicamente la chica evadió la del menor.- Buenos días.- Saludo.

- Buenos días Higurashi-san.- Le dijo el mayor estrechando su mano.- Como prometí a su abuelo mis hijos y yo estamos aquí para cerrar el trato. Una lastima que el viejo Higurashi haya tenido que dejar el trabajo.

- Lo mismo opino, esta empresa no será lo mismo sin el.

- Quiero presentarle a mi hijo Sesshoumaru, no había estado en el país pero de ahora en adelante es el vice-presidente de las empresas.- Kagome dirigió su mirada al chico. De pelo plateado blanquecino y cedoso, al igual que su hermano y padre, alto… Muy alto para ella y traía tacones… Sango no exagero para nada, el chico era totalmente hermoso, su piel tan blanca como la nieve y los ojos gatunos, ambarinos… La derritieron por completo ¡Y el cuerpo! Se notaba aleguas que debajo de ese costoso traje Armani se guarda un cuerpo digno de dios griego.

Sesshoumaru inspecciono también a la chica, si se había enamorado de ella por fotografía al verla en persona había caído rendido a sus encantos, el profundo azul de sus ojos lo hechizo y su cuerpo lo mato de inmediato sintió unas inmensas ganas de enredar sus dedos entre el cabello azabache y tocar la nívea piel que lo incitaba a arrancarle el traje sastre que tenia la osadía de cubrir su cuerpo.

- M-Mucho gusto Higurashi-san, es todo un placer de mi parte conocerla.- Dijo saliendo del estupor, Sesshoumaru tomo la mano de Kagome y la beso, mas sonrojada que nunca en su vida Kagome sintió el leve toque de los labios de Sesshoumaru sobre su mano.

- E-El gusto es totalmente mio Taisho-san.- Contesto.

- Sesshoumaru, por favor solo Sesshoumaru.- Le dijo viéndola directamente a los ojos.

- B-Bueno m-mi abogado traerá los papeles de inmediato y terminaremos el contrato, tomen asiento por favor.- Dijo invitándolos a la mesa, Sango llego y sirvió café para los cuatro notando de inmediato el juego de miradas entre el mayor y su amiga y una extraña mirada de Inuyasha hacia su ex. Estaba furioso, lo había ignorado por completo y esa sonrisita idiota ante su hermano le molesto, nisiquiera lo había saludado.

El abogado de las empresas Higurashi llego pasados unos quince minutos. Tanto Kagome como Inutaisho firmaron el documento.

- Bueno, ya que somos oficialmente socios, Higurashi-san opino que cerremos el trato con una, esta noche en nuestra casa ¿Le parece?

- Por mi encantada Taisho-san.- Respondió Kagome acompañarlos a la salida del edificio.- Hasta en la noche.

- Fue un placer Higurashi-san.- Dijo Sesshoumaru besando su mano de nuevo.


- ¡Kyaaaaaa!………….. Te beso la mano ¡Y tu que hiciste! Dios mio si te casas con el te envidiare por el resto de mi vida.

- Sango solo fue eso…- Dijo buscando en su enorme guardarropa algo que usar para la cena.

- ¡Kami, no solo fue eso! Yo vi como te miraba, esta loco por ti, por cierto Inuyasha también te miraba, pero como… En celo. A ti y al hermano.

- A ese imbécil, lo ignore todo el tiempo. Valentino o Gucci.- Dijo mostrando dos vestidos color vino. Uno largo y el otro corto.

- Mmm… ¿Cuál crees que cazara a Sesshy?... Gucci.- Dijo señalando el corto, Kagome solo rodó los ojos.

- No quiero conquistar a nadie.

- Que lastima.

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Señor, la señorita Higurashi llego.

- Arigato Misuki.- Le dijo con una boba sonrisa, salio de prisa y la vio desde el segundo piso, se veía mejor que en la mañana, el vestido que llevaba le favorecía mucho y el pelo recogido dejaba a la vista su perfecto cuello… ¿Qué en ella no era perfecto?- Buenas noches Higurashi-san.

- Se-Sesshoumaru, buenas noches.

- Te ves muy linda.- La cena fue tranquila, le presentaron a su madre y estuvieron muy a gusto. Para ya las once se encontraban bebiendo un poco de café en la sala, entre conversaciones y bromas.

- Kagome, es raro que una chica tan linda como tu maneje una empresa tan grande.

- Jaja gracias, bueno, mi padre murió y mi abuelo esta cansado mi madre no tiene ningún conocimiento sobre como llevar la empresa, yo terminare la escuela en julio así que yo era la única que podía hacerlo mi hermano aun es muy pequeño.- Kagome rebizo la hora en su reloj.- Que hora, es momento de que me vaya.

- Es una lastima espero que se vuelva a repetir.- Dijo Izayoi la madre de Inuyasha y Sesshoumaru.

- Por supuesto.- Dijo levantándose.

- Es muy tarde, yo te acompaño.- Se ofreció Sesshoumaru.

- No, no es necesario. Traigo mi auto.

- Pero es muy noche, te sigo en el mío.- Dijo encaminándose a la salida, sin poder objetarse Kagome lo siguió, cada quien tomo su auto y se encaminaron al departamento de Kagome

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- Gracias por acompañarme.- Le dijo a Kagome.

- No tienes que agradecer…- Le sonrió Sesshoumaru. Su sonrisa la hipnotizo, Sesshoumaru no sabia que hacer, estaba allí frente a ella y si no se atrevía no ganaría nada. Lentamente acerco sus labios a los de la pelinegra que acepto gustosa el beso dejándose llevar.

- ¿Q-Quieres pasar?- Le pregunto sonrojada.

- No es obvio.- Y claro que lo era, ambos tenían ganas y bastantes. La chica abrió la puerta rápidamente y Sesshoumaru volvió a apoderarse de sus labios entrando al oscuro departamento alumbrado únicamente por la luz de la luna. Kagome intento con el tacto encontrar el switch de la luz siendo interrumpida por Taisho.- No la necesitamos.- Dijo tomando su mano y haciéndola retroceder mientras que ella lo guiaba hasta el sofá mas cercano.

Kagome le quito la corbata y el saco mientras le besaba el cuello, desde en la mañana tenia deseos de hacerlo y poder observar el cuerpo del mayor, bajo lamiendo y dando pequeños mordiscos hasta donde el escote del hermoso vestido se lo permitió.- Esto molesta.- Se quejo Kagome tratando de desabrochar la camisa sin éxito, Sesshoumaru rió y le ayudo a deshacerse de la molesta prenda. Murió… Kagome murió al ver esos sexys y excitantes pectorales, no pudo evitar recostarlo sobre el sofá y besar todo su tronco. Sesshoumaru ansioso le bajo los tirantes del vestido y mordió la clavícula provocando que Kagome diera un gritito de dolor.

- Perdón.- Dijo desabrochando el vestido y quitándoselo por completo para continuar con el sostén dejando al descubierto los perfectos senos de la azabache. Con su mano derecha acaricio un y con la boca comenzó a mordisquear el otro. Kagome se estremecía del placer al sentí la boca de Sesshoumaru succionando su pezón mientras que al estar hincada sobre la pelvis del mayor sentía como su miembro semi-despierto rozaba con su trasero, Kagome comenzó a moverse masajeando la extremidad con sus glúteos sacándole pequeños gemidos a Sesshoumaru que dejo su tarea para quitarse el pantalón que empezaba a apretarle acompañado con el bóxer dejando su miembro erecto descubierto, la azabache bajo hasta el pene de Sesshoumaru y con la lengua comenzó a lamer de la punta a los testículos, Sesshy excitado acariciaba los cabellos de Kagome gimiendo de placer no tardo mucho en correrse por las mordidas de la chica. Con ansias el empresario le bajo las bragas a la chica y lentamente introdujo su miembro en la vagina de Kagome mientras la sentaba sobre el.- Ahhhhhh.- Grito en mezcla de dolor y placer por la intromisión, tenia un año completo que no tenia sexo con nadie y estaba disfrutándolo mas que nunca, ni con Inuyasha había sido así.- Ahhh muev-Muevete. P-Por favor.- Sesshoumaru comenzó a envestir lenta y suavemente el cuerpo de Kagome.

- Ahhh, eres… Eres exquisita K-Kagome.- Le dijo besándola en los labios. Kagome seguía gimiendo con mas intensidad al sentir como la punta de miembro de Sesshomaru golpeaba su cérvix, Sesshoumaru aumentaba la fuerza de las envestidas.

- Sesshy.- Kagome se abrazo a èl aun mas fuerte al sentir como se acercaba al orgasmo. Sesshoumaru sintió más aguda la presión que se ejercía sobre su pene, llegaron juntos al clímax liberando sus esencias casi al mismo tiempo. Tratando de regularizar su respiración salio del interior de la chica y se hecho en el sillón, Kagome se recostó encima de èl y este la abrazo.- Te amo Kagome.- Le susurro.

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Tenia dos meses de no ver a Sesshoumaru, según se entero tuvo que viajar de emergencia a Nueva York, pero ella le dio su numero y nunca recibió llamada alguna, estaba enfadada, realmente había sido amor a primera vista y se sentía engañada, usada… Y mas si las sospechas que tenia eran ciertas, llevaba un par de días pensando en ello, no usaron condón y ella tenia saltados ya lo que deberían haber sido dos periodos, claro siempre tuvo problemas con ello, pero las nauseas, problemas de… Gases… Retortijones y mareos eran otra cosa, pero lo peor es que… ¡Su amada ropa dejaba de quedarle! No se veía más gorda… Bueno solo un poco de la parte baja del abdomen pero no era para que su par de pantalones Dior recién comprados no le quedaban en un periodo de ¡DOS SEMANAS! Y por mas que se mataba en el gimnasio no podia deshacerse de ellos. Y entonces helá allí frente al espejo de cuerpo completo pellizcándose el vientre buscando los tres kilos subidos en dos meses.

- Kagome.- Hablo Sango atreves de la puerta.

- Pasa.- Le respondió poniéndose de vuelta la camisa.

- Te traje tres por si las dudas.- Sango dejo caer en el escritorio las cajitas de distintas marcas. Kagome tomo la rosada y se metió al baño…

------- Positivo.- Susurro asustada, las tres pruebas… positivas.


GRACIAS POR LEER NOS VEMOS n.n