Bueno aquí esta el capitulo final despues de tanto tiempo, tal como prometí: todo lo que inicio, lo termino sin importar el tiempo que pase para hacerlo.

Espero que este capitulo lo disfruten de la misma manera como yo lo disfrute mientras lo escribia. Se que mis epilogos son muy parecidos entre sí, pero de verdad me encantan los finales rosas. Tal vez en algun futuro haga algun fic tragico, pero hoy no sera el día en que lo haga.

Epilogo

BELLA POV

-A partir de las pruebas y testimonios presentados en la corte, el jurado encuentra a James Masen culpable de todos los cargos-

Cada vez que recuerdo esas palabras, una sensación de liberación me invade por completo a pesar del tiempo que ha pasado. Aún recuerdo lo largo que fue ese proceso, nos tomo meses para que finalmente se diera ese veredicto y Edward y yo no podíamos estar más contentos con el resultado, le dieron 60 años de prisión porque además de lo que intentó hacernos a nosotros, Emmett se percato de unas irregularidades que había con el manejo del dinero en la empresa cuando James aún estaba a cargo.

Resultó que ese era uno de los principales motivos por los que James necesitaba que Edward se casara con Victoria, ya que había hecho un acuerdo con la empresa de su familia para que lo ayudaran a cubrir sus irregularidades y a cambio James comprometería a Victoria con el heredero de la empresa Masen para que ambas empresas mantuvieran una unión de por vida.

Durante las investigaciones también se reveló que en algún punto James se involucró sentimentalmente con Victoria y juntos acordaron que cuando ella se casara con Edward, entre ambos lo manipularían para que James mantuviese el control tanto del dinero como de la empresa.

Aún recuerdo con exactitud la última vez que vi a James en la corte, ya que aunque su mirada era dura y amenazante, por primera vez en mi vida no me causo temor de ningún tipo. Sabía que nunca más me podría dañar. Ni a mí ni a mi familia.

Por otra parte, a Victoria solamente le dieron 10 años en prisión por su participación en el asunto y aunque yo tenía cierto temor por el hecho de que fuera a salir dentro de pocos años, hace 3 meses nos enteramos que murió en un enfrentamiento que hubo en la cárcel entre reos y policías. Realmente me parecía muy triste saber que su vida hubiera acabado así.

-¿Mami?- sentí un pequeño jalón en mi vestido que me sacó de mis pensamientos.

-¿Qué paso mi amor?-me agache para estar al nivel de mi hijo.

-No encuento a papá- mi pequeño realmente se veía angustiado por eso, ya que tenía el ceño fruncido de la misma forma como lo hacía Edward haciendo que resaltara la cicatriz que tenía sobre su ceja.

-No está porque fue por tu pastel, pero ya no ha de tardar- acaricié su cabello y le di un beso en la frente. Se quedo pensativo por un momento antes de agregar:

-¿Y mis abuelitos?- se veía bastante emocionado por eso.

-Vienen al rato para celebrar tu cumpleaños- me puse de pie para seguir poniendo los adornos.

-¿Te ayudo?- me preguntó mi niño cuando vio que estaba ocupada.

-¿Pones esto en la mesa de la sala corazón?-le di una bolsa de servilletas y asintió.-Si quieres ve un ratito la televisión en lo que llega tu papi- sin tener que decir más, se fue corriendo a la sala. Seguí preparando las cosas para la fiesta cuando de repente tocaron a la puerta.

-Alice, Jasper, llegaron temprano- comenté cuando abrí y note que traían varias bolsas en las manos.

-Claro que llegamos temprano- estableció Alice-¿Qué clase de padrinos seriamos si no te ayudamos a preparar la fiesta?- dejo la bolsa sobre la mesa del comedor y comenzó a sacar las cosas que traía.

-¿Y Edward?- preguntó Jasper al notar su ausencia.

-Fue por Charlie al aeropuerto y a recoger el pastel de Anthony-

-¿Sus papás ya están aquí?-

-Sí, pero se están hospedando con la familia de Esme-

-¿Cuántas personas esperamos con exactitud?- preguntó Alice mientras contaba los platos de Cars que tenía.

-Sin contarnos a nosotros, 15 –

-Menos mal que tu departamento es amplio- comentó mientras observaba los alrededores, probablemente planeando como podría mejorar el ambiente.

No paso mucho tiempo antes de que Edward llegara con Charlie y nos ayudaran con los últimos detalles de la fiesta. Parecía que teníamos el tiempo realmente calculado porque en cuanto terminamos de arreglar el lugar, tocaron a la puerta indicando que nuestro primer invitado había llegado:

-¿Listo para tu fiesta de cumpleaños campeón?- le dijo Edward a Anthony mientras se dirigía hacia la puerta.

-¡Yo abro pa!- corrió para ganarle a mi esposo y en cuanto mi hijo abrió, entraron Carlisle y Esme, seguidos de Emmett y Rosalie.

-¡Tío Emmett¡-gritó cuando lo vio y corrió a sus brazos.

-Hola enano ¿Cómo estás?- lo cargo e hizo una mueca como si estuviera muy pesado.-Veo que ya no estás tan enano, ya pesas mucho- escuché la risa de Anthony antes de que le dijera:

-Ya soy grande tío-

-Ya lo veo, ¿Cuántos cumples hoy?-

-Así- le dijo mientras le mostraba cuatro deditos.

-Ya estás bien grandote, muchas felicidades Tony- le dijo Rose dándole un beso en la mejilla y se acercó a saludarme.

-Hola Bella- me abrazó lo más que pudo con su vientre.

-Hola Rose ¿Qué tal tu embarazo?- pude ver el brillo en sus ojos ante la mención del tema.

-Fantástico, fuera de los calambres y los antojos, todo va muy bien. Ya solo faltan cuatro meses para tener a nuestra pequeña aquí- sonreí al comprender la manera como se sentía, ya que yo también estuve muy ansiosa mientras esperaba a mi hijo.- ¿Y ustedes cuando encargaran al hermanito Bella? No piensan dejar a Anthony de hijo único ¿o sí?-

-En realidad Rose, yo….- comencé a decir, pero una voz irritante no me dejo continuar.

-¡Edward!- vi a la "prima" de mi esposo abrazarlo con mucho entusiasmo.

-Tanya..-de inmediato pude notar la incomodidad en sus ojos.

-Que gusto me da verte, casi nunca nos visitas y eso que estamos en la misma ciudad-

- Es que él es un hombre ocupado ¿verdad Edward?- intervinó Carmen-Todo un doctor, casado y con hijo -

-Doctor aún no tía, pero ya dentro de poco- dijo mi esposo con una sonrisa lográndose finalmente zafar del abrazo de Tanya y se acercó a mí para abrazarme por la cintura. En cuanto Tanya se percató de esto, me mando una mirada envenenada. Al parecer nunca iba a madurar por lo que intente no darle importancia.

Después de eso, toda la atención se enfoco en mi pequeño Anthony, todo mundo lo lleno de abrazos y regalos, inclusive Tanya, aunque tengo que admitir que me dio risa el hecho de que mi bebé se limpiara la mejilla cuando le dio un beso. Posteriormente llegaron Jacob y Billy, y hasta el final llegaron Ben y Ángela, con sus gemelos Alex y Benjamín, quienes los habíamos conocido en el kínder de mi hijo.

Y así la fiesta dio inicio.

-Pide un deseo campeón- le dijo Edward a nuestro hijo antes de que apagara su vela y pude ver a Anthony cerrar sus ojitos con fuerza antes de soplar con mucha fuerza.

Mientras todos aplaudíamos una vez que apagó la vela, noté que mi esposo y Anthony se decían cosas al oído como cómplices planeando alguna travesura.

-Aún me parece increíble el parecido que tiene mi nieto con Edward- comentó Charlie mientras yo comenzaba a partir la gelatina-No dejaron ni una pizca de Swan en él-

-Pero tiene el carácter Swan, te lo aseguro- le contesté mientras le daba un plato y en eso Charlie pareció recordar algo.

-Bella, ¿ustedes se enteraron de lo que paso en la prisión de mujeres?, donde estaba recluida Victoria-

-Sí papá, sí nos enteramos, el abogado nos hablo para avisarnos lo que había sucedido-

-Si te soy sincero, es que aunque murió joven y de forma trágica, me alegra que ya no vaya a ser un peligro en sus vidas- no pude estar más de acuerdo con él.

-¡Abuelo ven! Ve lo que me degalo Jake- corrió Anthony hasta Charlie y lo jalón del brazo para que lo siguiera.

-Ahorita te veo Bells- me dijo antes de seguir a su nieto. Definitivamente nunca le podría decir que no a él.

La fiesta continuó su curso con mucho existo y creo que se termino bastante tarde para ser una infantil. Cuando todos se fueron, Edward me ayudo a recoger la basura mientras yo arropaba a Anthony, me costó mucho trabajo tranquilizarlo ya que parecía que la pila no se le iba a acabar nunca. Incluso leí su cuento favorito dos veces antes de que apenas comenzara a bostezar.

-Ahora a dormir cumpleañero, mañana tenemos un día pesado- me levante de la cama y le di un beso en la frente, justo antes de apagar la luz me dijo:

-¿Mami?-

-¿Sí?-

-¿Crees que mi deseo se haga dealidad?-

-¿Qué fue lo que deseaste corazón?-

-Papá dice que no lo puedo decir- así que de eso estaban hablando.

-Pues entonces yo creo que si lo deseas con mucha fuerza, se hará realidad- pareció satisfecho con mi respuesta ya que sonrió y se acomodo en sus sabanas antes de decir:

- Buenas noches mami-

-Buenas noches Anthony- finalmente apague la luz y cuando iba a salir del cuarto, me di cuenta que Edward estaba recargado en el marco de la puerta mientras nos observaba con atención.

-Que día- comente una vez que cerré la puerta de la habitación

-Lo sé, dímelo a mí- me abrazo y me dio un beso en la frente.- Aunque definitivamente valió la pena-

-Definitivamente- suspiré en su pecho.- Aún no puedo creer que nuestro pequeño ya tenga cuatro años, el tiempo ha pasado tan rápido-

-Lo sé y han sido 4 años maravillosos- dijo antes de comenzar a darme pequeños besos en la oreja.

-¿Maravillosos? ¿Incluyendo los momentos cuando Anthony o yo estamos de mal humor?- le dije en tono de broma.

-Incluyendo eso - comenzó a bajar sus besos hasta mi cuello y sentí que poco a poco iba perdiendo la atención.

-Edward, no…- no me dejo continuar ya que ataco mis labios. Poco a poco el beso fue subiendo de intensidad y Edward me recargo en la pared, pude sentir sus manos acariciar mis muslos levantando el vestido blanco que traía puesto y sin poder resistirlo más, me impulse un poco para enredar mis piernas en su cintura sin dejar de besarnos. Me cargó hasta nuestra habitación y cuando me deposito en la cama, volvió a besar mi cuello antes de susurrar en mi oído:

-Bella ¿Qué te parece si hacemos un bebé hoy?- inmediatamente lo aleje un poco de mí para verlo a los ojos.

-¿Qué?- me sentía realmente sorprendida por su propuesta.

-Amor, se que habíamos decidido esperarnos hasta que yo terminara la carrera y cuando nos regresáramos a Forks, pero en verdad me encantaría tener otro hijo contigo, sobre todo si hay posibilidades de tener una pequeña versión tuya corriendo por el departamento- me miró con intensidad.

-¿Estás seguro de querer eso?- le pregunte mientras acariciaba su mejilla.

-Completamente seguro- me dijo con total seguridad y cariño.- Pero si tú no quieres...-

No lo deje terminar porque me separe de él y abrí el cajón del mueble que estaba lado de la cama para sacar una pequeña carta que había hecho apenas ayer y se la entregué. En el frente había escrito el nombre de mi esposo.

-Esta vez te la daré en persona- le sonreí y aunque Edward me veía extrañado, abrió el sobre y leyó su contenido. De repente levanto su rostro con una gran sonrisa y dijo:

-¿De verdad?-

-Sí, pensaba dártela en tu cumpleaños pero….-me interrumpió dándome un beso y no pude evitar sonreír en sus labios.

-El mejor regalo de cumpleaños por adelantado- eso me hizo reír y agregué:

-Al parecer ya no tendremos que hacer ningún bebé hoy, porque lo hicimos con anticipación-

-Pero ¿Cuándo?- realmente lucia perdido porque después del inesperado embarazo de Anthony, habíamos tomado muchas precauciones para que no volviera a ocurrir.

-¿Ya olvidaste aquel momento que tuvimos en la boda de Alice y Jasper? Cuando nos dejamos llevar por la pasión y no usamos nada- a pesar de llevar tanto tiempo juntos, jamás habíamos hecho nada así y fue fantástico. De inmediato noté una leve tonalidad roja en las ojeras de mi esposo mientras parecía recordar aquel momento

-Así que un bebé, ¿eh?-

-Vamos a tener otro bebé- le reafirme sabiendo que este embarazo iba a ser muy diferente al primero, ya que lo disfrutaríamos juntos desde un principio.

De repente, una pequeña voz rompió nuestra burbuja:

-¡¿Bebé?!- vimos a Anthony parado en la puerta de nuestro cuarto. ¿Cuánto tiempo llevaba ahí?.

-Sí campeón, vas a tener un hermanito o hermanita- le contesto mi esposo sin lucir sorprendido por su presencia ahí. ¿Acaso no le preocupaba que nos hubiera visto mientras nos besábamos así?

-¡Sí!- corrió nuestro pequeño hasta nosotros y lo subimos en la cama. Platicamos un poquito con él lo que iba a pasar a partir de ahora y realmente lucia emocionado, una vez que terminamos de hablar nos dijo:

-Los deseos de la vela si se hacen dealidad-

-¿Así que eso es lo que querías? ¿Un hermanito?- solamente asintió muy entusiasmado

-De tal palo tal astilla- no pude evitar decir y Edward soltó una leve risa.

-¿Pa?-

-Mande campeón-

-¿Puedo dormir aquí?- Edward me miró sabiendo que nuestros planes para la noche se habían ido a la basura. Pero se apresuró a sonreirle a nuestro hijo y le dijo:

-Claro que sí campeón- inmediatamente Anthony se bajo de la cama y corrió a su habitación, probablemente para ir por su manta favorita.

-Ni modo, soy gajes de ser padre- le comente y me dio un suave beso mientras acariciaba mi aún plano vientre.

-Lo sé, te amo tanto mi amor-

-Yo también te amo Edward, como no tienes una idea- haría lo que fuera por él, era el hombre de mi vida en las buenas y en las malas, no tenía duda de eso.

Nos separamos lo más rápido que pudimos antes de que llegara Anthony y cuando finalmente todos nos acostamos en la cama y yo estaba a punto de apagar la luz, escuche a mi hijo decir:

-¿Mamá? ¿Papá?- los dos lo volteamos a ver y en eso preguntó:

-¿De dónde vienen los bebés?-

Oh no…

FIN

MUCHISIMAS GRACIAS POR SU APOYO CON EL FIC! CADA UNO DE SUS COMENTARIOS FUE UNA PASTILLA QUE ME IMPULSO PARA MANTENERME HASTA EL FINAL!

Nos vemos en la proxima,

Nicole W.C.