7.-Moon
"La luna se asomaba entre las nubes que cubrían el cielo. Las estrellas brillaban en la oscuridad de la noche. Había parado de llover y me encontraba totalmente mojado. A pesar del viento que movía las hojas de los arboles, no sentía el frio. Llevaba varias horas caminando sin rumbo fijo. No podía dejar de pensar en la muerte de mis padres, en el terror que sentí al ver como sus cuerpos se consumían por las llamas. Desde ese momento, mi corazón se lleno de odio. Solo quería vengarme de Hao. Hacerlo pagar por lo que me había hecho. Trate de ser mas fuerte, hice todo lo posible por lograr mi venganza. No podía pensar en otra cosa. Los deseos de venganza se adueñaban de mi mente. Me condene a vivir en la oscuridad. En la profunda soledad. Solo podía pensar en mi venganza. No me importaba nada más…
Despuésconocí a Yoh y me di cuenta de que la venganza no lo era todo. Sin embargo, todo el rencor que estaba guardado en mi corazón no me dejaba vivir en paz. Mi vida se había convertido en una pesadilla de la cual no podía despertar. No tenia ningún sentido seguir con vida. No tenía a nadie que estuviera a mi lado. Me encontraba completamente solo… Cuando pensé que mi única opción era la muerte, conocí a Selene y me sentí menos solo. Por fin había encontrado a alguien que estuviera conmigo, que me comprendiera… Pero ella era la culpable de la muerte de mis padres. Toda la oscuridad que estaba encerrada en mi corazón, salió y los deseos de venganza invadieron mi alma. Solo anhelaba vengarme de ella, matarla y lograr mi venganza. Pero no pude…no podía matarla. Me di cuenta que ella había sufrido lo mismo que yo. De lo que es capaz de hacer una persona para vengarse. Todo el tiempo pensé en mi venganza, sin darme cuenta de lo malo que había hecho para lograrla. De todo el rencor que guardaba en mi alma y que me torturaba día tras día…
Ahora debo vencer al Rey de los Vampiros, hacerlo pagar por todo lo que ha hecho y evitar que siga haciendo daño…
-¿Crees que puedes derrotar al Rey de los Vampiros?- dijo una voz
-¿Quién eres?- pregunte mirando a mi alrededor - ¿Qué quieres?
-¿Crees que todo están fácil?- respondió la voz- ¿Qué vencerás al Rey de los Vampiros con los medallones y todo terminara?
-Cállate- grite- Déjame en paz
-¿Cómo sabes que Selene no te traicionara? ¿Cómo sabes que no es una trampa?
-Cállate- conteste- Yo confió en ella…no me traicionaría jamás…
-Recuerda que ella es la culpable de la muerte de tus padres…
-Déjame en paz…
-¿Acaso no quieres vengarte de ella? ¿Acaso no la odias por lo que te hizo?
-No… -respondí-No la odio
-Mientes…se muy bien que en el fondo la odias…no puedes engañarme…
-No es cierto…
-No puedes engañarme…tu corazón esta lleno de odio y rencor…
-No es verdad. Mientes…
-¿Estas seguro? ¿Acaso no quieres vengarte del Rey de los Vampiros?
-No. La venganza nunca es buena…
-¿De verdad crees eso? Tu alma esta llena de deseos de venganza…solo has vivido para vengarte de los que te lastimaron…
-Ya no quiero vengarme de nadie… solo quiero ser feliz…
-¡Que ingenuo! ¿Crees que derrotaras al Rey de lo Vampiros, que todo se acabara y serás feliz?
-Déjame en paz- dije tapándome los oídos- cállate…
-No puedes callarme…
-¿Quién eres?- pregunte- ¿Por qué te escondes?...
En ese instante apareció una persona frente a mí. Llevaba una enorme capa negra y su rostro estaba oculto tras una capucha del mismo color. Se aproximo hacia mí y se quito la capucha.
-No puedes callarme…- dijo- Porque yo soy tú…
-No es posible- murmure viendo a la persona que tenia frente a mi, un escalofrió recorrió mi columna vertebral, era igual a mi, era como mirarse en un espejo –Yo no soy como tu- Respondí
-Claro que lo eres- contesto- Yo soy tu y tu eres yo. No puedes cambiarlo…
-No es cierto…-grite
-No puedes evitarlo…Siempre estaremos unidos, no puedes deshacerte de mi…Soy la oscuridad que vive en tu corazón…
-Déjame en paz. No eres parte de mí…
-¡Que tonto! Tu alma esta llena de odio…no puedes deshacerte de el…ni de mi… ¿Crees que serás feliz?... ¿Qué toda la oscuridad de tu corazón se ira?
-Cállate- dije cayendo de rodillas al suelo, tapando me los oídos- Déjame en paz…
-No puedes callarme- respondió dando vueltas alrededor de mi- No puedes librarte de mi…"
Me desperté temblando de miedo, un sudor frio bañaba mi frente. Prendí la luz y note que Selene estaba frente a mí, mirándome atentamente.
-¿Otra pesadilla?- pregunto
-No te preocupes- respondí secándome el sudor de mi frente- No es nada… ya estoy acostumbrado…
-No creo que eso sea bueno…-contesto preocupada.
-¿Qué hora es?- pregunte, tratando de cambiar el tema.
-Son las tres de la mañana
-Es mejor que vuelva a dormir-dije
-Lyserg…-murmuro Selene- Necesito que me acompañes a un lugar…
-¿Qué lugar?-pregunte
-Debemos encontrar una cosa mas para derrotar al Rey de lo Vampiros- respondió- Esta en una iglesia…
Me levante y salimos de la casa cubiertos por unas capas. Después de mucho caminar, llegamos a una iglesia abandonada.
-Espera- dijo Selene deteniéndome- Esta vigilada por vampiros…
Rápidamente evitamos a los guardias que estaban vigilando la puerta principal y entramos por una más pequeña que estaba aun lado de la iglesia. Comenzamos a caminar por el pasillo principal que conducía a un altar, hasta que Selene se detuvo y me señalo algo. Eran unos hermosos vitrales. En uno de ellos se veía a la luna que se alzaba en lo alto del firmamento; y en el otro se veía al sol que cubría todo con sus rayos. En medio de ellos había un vitral representando una luna color carmesí, que regia sobre todos los seres de la oscuridad. Selene se aproximo lentamente al vitral y se quito la capucha. Por varios minutos estuvo inmóvil, observando el vitral, como si estuviera embrujada por el. Luego me hizo una seña para que me acercara. Al llegar, note que había un pequeño compartimiento debajo de vitral. Selene se arrodillo y yo hice lo mismo. El compartimiento tenia un sol y una luna en relieve en el centro de el, rodeado de varios símbolos. Selene se quito su medallón y lo puso sobre la luna que estaba en relieve. Ambos embonaban perfectamente. Me quite mi medallón e hice lo mismo. En ese instante, el compartimiento se abrió y vimos una pequeña caja con unos símbolos grabados en la tapa. Selene la abrió, contenía un pequeño péndulo. Tomamos la caja y cerramos el compartimento. Selene me tomo del brazo y me llevo frente a una enorme puerta. No tenía perilla, sol tenía un sol y una luna en relieve en el centro de ella, como el compartimiento que habíamos visto.
-Este es un lugar sagrado para los vampiros- comenzó a explicar Selene –Cuando ocurra el eclipse de luna, se alineara con el vitral que esta en medio. Los rayos de la luna atravesaran el vitral y se reflejaran en el espejo que esta en lo alto de esta puerta- dijo señalando el espejo- Solo entonces, con nuestros medallones, podremos abrir la puerta. Detrás de la puerta se encuentra un pequeño templo. En medio del templo, hay un enorme dibujo de una luna y un sol, justo en el centro del dibujo hay un pequeño agujero. Tenemos que poner esta péndulo- continuo señalando el péndulo de la caja- y decir las palabras que están escritas en la caja. Es un conjuro.
-¿Sabes lo que significa?- pregunte
-Si- respondió- Debes aprender muy bien el hechizo. Dice así:
Habitantes de la noche eterna,
hijos de la luna escarlata,
condenados a vivir en la profunda soledad,
seres sin descanso, divididos entre la vida y la muerte.
Luz y sombras, bondad y maldad
Sol y Luna, que rigen nuestros destinos,
permitan que ellos vean la luz de la día,
y que puedan despertar des esta pesadilla.
Castiguen a aquellos, sedientos de sangre,
que noche tras noche asesinan sin cesar.
Que no puedan escapar de su pena,
y que ardan en las llamas eternas.
-Ya veo- conteste pensativo- ¿tenemos que decirlo cuando este el eclipse?
-Si. Si lo dices después del eclipse no funcionara. Es mejor que nos vayamos…
-De acuerdo- dije
Salimos de ahí y nos dirigimos a casa.
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Por fin llego la noche del eclipse. Selene y yo nos preparamos para ir a la iglesia. Nos pusimos nuestras capas y salimos una hora antes de que comenzara el eclipse. Luego de mucho caminar, llegamos a la iglesia. Antes de entrar, Selene me detuvo
-¿Estas seguro de querer hacer esto?- pregunto
-Si- respondí- Es mi responsabilidad hacerlo. No pienso dejarte sola…
-Esta bien- contesto con una sonrisa- Toma- dijo entregándome el péndulo- Quiero que tu lo hagas…
-Pero…
-No te preocupes- respondió guardando la caja del péndulo en una de las bolsas de la chaqueta- Si el Rey de los Vampiros quiere detenernos, yo lo distraeré y tú harás lo demás antes de que termine el eclipse.
-De acuerdo- dije
Con mucho cuidado, para evitar que los guardias nos vieran, nos dirigimos hacia una de las entradas de la iglesia. Entramos y caminamos hacia la puerta que debíamos abrir. Al llegar, apareció el Rey de los Vampiros frente a nosotros y varios vampiros nos rodearon.
-¿Crees que pueden derrotarme tan fácilmente?- dijo- No tienen forma de escapar…
-Claro que si- respondió Selene- Aun tenemos los medallones
-No me retes- contesto el Rey de los Vampiros- Recuerda que eres un vampiro y debes obedecerme. Entrégame los medallones…
-No. No pienso permitir que te apoderes de los medallones
-Si no quieren dármelos por las buenas, tendrán que hacerlo por las malas. – dijo el Rey de los Vampiros. En ese momento lo vampiros que nos rodeaban comenzaron a atacarnos. De repente se escucho un ruido y la puerta principal de la iglesia se abrió. Entraron dos personas. Eran Marco y Jeanne.
-Pensamos que necesitarías ayuda- dijo Marco.
Ambos comenzaron a pelear con los vampiros que nos rodeaban. El eclipse estaba a punto de empezar. Selene y yo corrimos hacia la puerta, usamos nuestros medallones para abrirla. Cuando el eclipse comenzó, los rayos de la luna se reflejaron en el espejo y la puerta se abrió. Entramos y me dirigí al centro de la habitación.
-Entrégame el péndulo- dijo el Rey de los Vampiros, voltee y vi que tenia su brazo alrededor del cuello de Selene y con la otra mano sostenía una estaca cerca del corazón de Selene- Si no quieres que muera para siempre, entrégame el péndulo.
-¡No lo hagas! –grito Selene
-Cállate- respondió el Rey de los Vampiros acercando mas la estaca a su pecho- Tu decides la vida de Selene o el péndulo- continuo con una sonrisa.
No sabia que hacer. No quería perderla.
-Hazlo- dijo Selene- El eclipse esta a punto de terminar…
Selene se zafo y comenzó a pelear con el Rey de los Vampiros. Tome el péndulo, lo coloque en el agujero y comencé a decir el hechizo. En ese momento, el Rey de los Vampiros empezó a arder en llamas, hasta que se convirtió en cenizas. A los demás vampiros les ocurrió lo mismo. Voltee hacia donde estaba Selene y vi que estaba tirada en el piso con la estaca clavada en su pecho. Corrí hacia ella y la tome entre mis brazos.
-Lo hiciste…- dijo con una sonrisa, antes de perder el conocimiento
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Me gustas cuando callas porque estas como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
La noche era despejada, las estrellas brillaban en la inmensidad de las sombras y la luna dejaba caer sus rayos entre las tumbas del cementerio. Me encontraba frente ala tumba de mis padres. Su muerte me dolió muchísimo. Mi corazón se lleno de odio. Solo quería vengarme. Estaba contaminado de una enorme oscuridad. Gracias a todo lo que he pasado me di cuenta, del daño que me hacia al querer vengarme de los que me habían lastimado. De que mi alma se estaba envenenando con deseos de venganza. Puede superar mis temores. Puede darme cuenta de que podía ser feliz a pesar de todo…
-Es hora de irnos- voltee y vi a Selene que me sonreía. Pensé que había muerto. Pero gracias a la caja del péndulo, estaba viva. Había detenido la estaca y había evitado que muriera.
-Tienes razón –conteste- Tenemos muchas cosas que hacer…
La tome de la mano y nos alejamos de ahí. Ahora debemos proteger los medallones de todos aquellos que deseen apoderarse de ellos. Y junto a Selene nadie podrá detenernos. Salimos del cementerio, caminado lentamente, disfrutando de la noche, observando la luna que nos iluminaba. Ya no me atormentarían mis pesadillas y Selene podría vivir sin ser un vampiro. Por fin, ambos seriamos felices.
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Hola!
Espero que les haya gustado este capítulo. Es un placer poder haber terminado con esta historia. n_n
Quisiera agradecer a Lune, Lisbeth Nikolajerida y Andrea and Naturberd por haber leído este fic y dejar sus reviews. Y por haber esperado a que pudiera publicar el final. Mil gracias! =D Si ustedes no había podido terminarlo.
También quisiera agradecer a todos aquellos que se tomaron la molestia de leer este fic. Muchas gracias
Bye