Cosas Inesperadas

By Oo Nelliel oO

Desatando una tormenta

(Len´s POV)

— ¡QUE TU QUE! —Vocifero ahora Meiko asustando a Kaito y sacándolo de su asombro, después el me miro de manera desaprobatoria, a lo cual yo gruñí y jale mi cabello.

El silencio gobernó por completo, suspire soltando mi cabello para luego sentir las manos de Meiko sobre mis hombros —¡TE HISE UNA PREGUNTA!— grito, no sabía si desesperada o molesta, quizás una combinación de ambos.

—Meiko, calma—susurro Kaito intentando hacer que ella me soltara, pero para este punto, morir en manos de Meiko no parecía tan mala idea... de cualquier modo.

—Repite lo que dijiste—me exigió soltándome y llevando su manos a su frente tratando de tranquilizarse

—Me gusta Rin—solté como si hablara del clima, no había porque ocultarlo mas, ya lo había gritad a los 4 vientos que mas daba decirlo una vez más.

El silencio gobernó de nueva cuenta, Meiko se dejo caer de lleno en el sofá mientras cubría su rostro con su brazo, y Kaito bajo la mirada lejos de mí, notaba que estaba más tranquilo, pero a su vez molesto, supongo que no era la manera en la que él pensaba que diría las cosas.

La fresca brisa de la tarde llego hasta nuestras fosas nasales, descubriendo un delicado aroma a humedad, seguido por una ola repentina ligera oscuridad, un trueno retumbo en el cuarto y el sonido del agua caer no se hizo esperar, eran las 5:30 pm, y el pronóstico para la noche era húmedo.

—No entiendo—Dije mientras miraba a Kaito tomando asiento frente, ambos nos encontrábamos en el restaurante de uno de mis hoteles en la zona central de Tokio— ¿Por qué te enfado lo que dije? —Gruñí— ¡Tú lo sabías! —Apunte mientras Kaito con llamaba a un mesero restando importancia a mis palabras.

—Tengo que admitir que aun estando enterado no pude ocultar mi sorpresa—Respondió con tranquilidad jugueteando con una plumilla—Meiko no quiere verte en un tiempo—Agrego para guardar silenció unos segundos, en lo que el mesero tomaba su orden.

Sin despegar la mirada de él y aquel sujeto deje escapar un sonoro suspiro—No la culpo—Dije desanimado

— ¿Qué sucederá con Dell? —Pregunto de pronto notoriamente preocupado mientras se removía incomodo en su asiento.

Cerré los ojos y volví a suspirar—Dell y yo terminamos—Musite acercándome un poco más al frente para evitar que los demás presentes nos escucharan—Me pido matrimonio—Continúe, causando que Kaito abriera su boca y cerrara una y otra vez por la sorpresa.

Su cara se desencajo por completo, como si le hubieran echado asido enzima, Alce una de mis cejas y dibuje una sonrisa amarga en mi rostro—Respondí que no, pero aún no estaba consciente de mis sentimientos por Rin al cien por ciento, algo en mi me impedía aceptarlo…y no me arrepiento—Finalice asiéndome hacia atrás de nueva cuenta.

Kaito inhalo una gran bocanada de aire como muestra de satisfacción ante mis palabras, el mesero se acercó a nosotros y dejo un whisky. Tomo un ligero trago y de manera rasposa dijo—No malentiendas a Meiko, nosotros los conocemos desde niños, tal vez ella como yo se dio cuenta…solo que no le quiso tomar atención. Ella apoyo a Rin cuando decidió salirse de su casa, se hizo cargo económicamente hablando de algunas cosas…la ha apoyado en siento de locas ideas…y tu Len…no serás la acepción—Declaro con serenidad—Solo dale tiempo—Agrego—Nosotros no te daremos la espalda…—Culmino Mientras veía como tomaba un largo trago de si whisky, retire mi mirada de él, y me maldije por lo imbécil que fui al dejarla a la merced de aquel tipo a Rin, pero sobre todo, me maldije, por todo el tiempo desperdiciado.

Mire de nueva cuenta a Kaito, el miraba en silencio el hielo deteriórese en su vaso, como esperando alguna palabra de mi parte, yo, simple mente dirige mi mano hasta el bolsillo de mi saco blanco.

—Tengo que hacer unas llamadas—

(Rin´s POV)

— ¡Tienes que ser una broma! —Replico molesto Mikuo al ver las grandes maletas en la sala de su casa.

—Tengo todo lo necesario para el viaje—Comento Miku sonriendo mientras colocaba una maleta mas chica entre las grandes, posterior mente me miro y se acercó a mi—Tenemos que hablar—Pidió confidente tomando mi mano y me encaminaba junto con ella escaleras arriba.

Suspire, definitivamente ella no pasaría por alto el interrogatorio— ¿Entonces? —Pregunto mirándome emocionada.

—Las clases privadas estuvieron bien—Respondí distante mientras miraba su cuarto, era la primera vez que entraba, era en mi humilde opinión, muy infantil, paredes rosas, cortinas rosas con adornos de princesas todo lo de su cama era rosa….

Detuve mi mirada en otra maleta en su cama a medio terminar, hace una semana de mi primera clase con Luki, quedamos que serían cada domingo por la tarde, pero la junta de maestros de distintos sectores se atravesó en los planes causando un puente de un mes y medio, muchos decían que todos esto terminara en huelga y que los más probable era que nos quedáramos estancados por un rato…

La noticia fue tan grande que llego a los oídos de Len, el cual sin titubear apareció una tarde en el trabajo cuando el padre de los gemelos Hatsune se encontraba, le pido permiso para llevarlos a un viaje a Kunigami, cuando Miku escucho esto no paro de gritar y rogar para que su padre dejara que el viaje se llevara a cabo, para facilitar la decisión Miku agrego que podíamos quedarnos en casa de su abuela, al principio pensé que Len se negaría incluso pensé que nos alojaríamos en uno de sus hoteles, pero grande fue mi sorpresa cuando acepto la oferta de Mikuo, cuando quise preguntarle me respondió—No tengo hoteles en Kunigami—

— ¿Solo eso?—Pregunto aburrida— ¡Quiero detalles Kagamine! —Gruño tomándome de los hombros.

La mire frunciendo el ceño, sonaba como mi madre, intentando saber si era el chico correcto para mí—Miku, ¿qué demonios quieres que te diga? —Pregunte zafándome de su agarre mientras me dejaba caer en su cama—Todo fue agradable y divertido es decir, no todo el tiempo la pasamos con un libro en las manos, fue algo convencional, fue divertido, lo conocí un poco mas…

— ¿Crees que si le interesas de esa manera? ¿Quedaron en tener más clases? ¿Te gusta? —Pregunto abalanzándose así a mí de golpe.

— ¡MIKU! — Grite— No puedo decirte que me gusta— Comente irritada para después culminar susurrante— No puedo evitar compararlo con el…—Miku me miro asombrada. Ella se quitó de encima y se recostó a un lado mío en la cama—Por más que intente…no puedo su sonrisa ni es tan hermosa como la de él.

—Len—Culmino ella por mí, le dirigí una mirada rápida, ella se encontraba mirando el techo blanco de su cuarto—El no se puede comparar—Continuo con el tono monótono—No se pueden…

Parpadee confundida y mire el techo hasta que ella se paró de repente y tomo una pijama con pequeños puerros por todas partes y la doblo para posterior mente meterla en la maleta.

—Tengo que terminar rápido con esto o Mikuo se molestara—Dijo rápidamente para después soltar una nerviosa sonrisa—El es un buen chico, atractivo e inteligente—Agrego—Pero te entiendo no es como ellos—Finalizo en un susurro mientras terminaba de empacar.

— ¿Cómo ellos? —Inquirí confundida mientras me levantaba de su cama, ella se retorció nerviosa y soltó una risa aún más nerviosa.

Dejo caer la maleta y de nueva cuenta tomo mis hombros— ¡Lucha por el Rin! —Pidió mientras mi rostro se trasformaba en un poema.

— ¿Es una broma verdad? —Pregunte incrédula mientras me dejaba caer de nueva cuenta en su cama.

—Kunigami es un pueblo curios Rin—Comento con un tono misterioso—Hay historias, que las personas forasteras consideran pecaminosas y otros hermosas…

—Yo no diría historias pecaminosas—Dijo de repente Mikuo desde la entrada del cuarto de Miku—Si tienes una oportunidad no dudes en aprovecharla—Continuo mientras tomaba la maleta de Miku y miraba mi estado de confusión—Has de cuenta que esta charla nunca sucedió y toma nuestro consejo como si a ti sete hubiera ocurrido—Culmino con una gran sonrisa y un giño Mikuo mientras Miku mostro una risueña sonrisa en su sonrojado rostro.

—Len está afuera, junto con Meito y Megumi—Informo como si nada—Sera mejor que bajen—Con aquellas palabras salió del cuarto junto con Miku. Dejándome a mí suspirando y pensando…

(Len´s POV)

El día que decidimos salir del estado para ir a Okinawa, jamás pensé ver a Mikuo Hatsune cargando tantas maletas…

— ¡Wooo! Son muchas maletas—Dije sorprendido mientras Gumi ayudaba a Mikuo a subir todo al auto.

—Saben...es un mes no es un año—Bromeo Meito mirando a Mikuo el cual retorció la mirada molesto y dijo.

—Explícaselo a Miku—Susurro mientras tomaba otra maleta.

Todos comenzaron a reír, Mikuo solo bufo molesto mientras seguía subiendo las maletas a mi auto.

Una vez que terminaron, nos detuvimos a ver a Gumi y Meito— ¿De verdad no quieren venir?—Pregunte una vez más, los dos mientras negaban con la cabeza de nuevo.

—Tenemos que terminar un proyecto-Respondió Gumi con desgano—Me hubiera encantado pero cierta persona se ha tardado en entregar el proyecto pasado y como castigo nos dieron otro—Agrego irónica mirando a Meito el cual no le dio importancia.

—Tengan cuidado, nos estaremos viendo dentro de cuatro semanas si el auto de Len no los asesina-Bromeo el castaño causando las risas en general—Lo digo en serio...—Agrego dejándonos callados con su pesimismo. Me subí al auto, mientras Rin, Miku y Mikuo entraban igual-Tendremos que esperar un poco en el aeropuerto, tenemos mucho tiempo de sobra.

En camino hacia el aeropuerto, Mikuo no dejaba de discutir con Miku sobre la excesiva cantidad de equipaje que le había obligado a traer, Rin solo reía ante sus comentarios mientras yo me concentraba en no ser golpeado por el cabello de Miku, que se movía con fuerza mientras negaba ante las exigencias de su hermano.

Y así fue, una vez que llegamos al aeropuerto bajaron el equipaje mientras nosotros nos habríamos paso entre todas las personas. El tiempo pasó rápido y cuando nos dimos cuenta ya estábamos en la fila del vuelo.

—Es la primera vez que subo a un avión—Rin musito mientras me miraba e hizo una extraña mueca mientras avanzábamos.

—Todo saldrá bien-Dije de manera consoladora mientras entrabamos al avión. Los gemelos Hatsune se encontraban al frente de nosotros ambos platicaban amenamente mientras continuaban avanzando.

—Tiempo sin ver a la abuela-Comento Miku emocionada —Rin te encantara su casa ¡Es tan linda!—Exclamaba emocionada dando pequeños pasos en la fila con nosotras tras de ella.

Cuando por fin terminamos de subir al avión, nos dimos una tremenda sorpresa al ver que Rin y Miku compartían asiento mientras Mikuo y yo compartiríamos lugar al lado derecho de ellas tres filas más atrás...

—Estoy seguro que deseabas estar al lado de tu hermana—Aventuro Mikuo divertido al ver mi boleto de asiento...

—Los repartí mal—Dije para mi mismo mientras serraba el puño con el pedazo de papel.

El trayecto comenzó tranquilo, algunas personas miraban por la ventana otras platicaban o de plano dormían en su lugar. Tenía pensado unirme a estas últimas pero Mikuo tenía otros planes para pasar el rato.

—Miku me conto todo de la tarde en que Rin salió con el profesor—Comento acomodándose en su lugar mirando las pequeñas aberturas sobre su cabeza que le otorgaban el fresco de aire acondicionado.

Yo tan solo lo mire de reojo tranquilo, no es una noticia para alarmarse después de todo.

—Conocemos a Rin desde hace ya dos años, no es mucho—Relato tranquilo mirando ahora la ventanilla-Cuando entro al salón todos guardamos silencio, se veía tan diferente a nosotros...se veía tan fina y delicada que pensamos...más que nada los varones, que era un ángel-continuo distraídamente-Rin Kagamine...cuando se presentó, a ni uno de nosotros se nos ocurrió pensar si quiera que ella era la hija de Sonosuke Kagamine, es decir...¡Como demonios su hija iba a estar en un colegio del gobierno!, era estúpido pensar tal cosa. Ella era del montón, como todos...

Mantuvo su mirada en el techo, yo lo mire por primera vez y suspire lo más silencioso que pude…para después aventurarme…

—¿Estas enfadado con ella por haberles mentido?—Pregunte tratando de aparentar indiferencia, al final me delate con la mirada. No quiero que ellos se molesten con Rin. No quiero que se alejen de ella...no quiero que ella sufra, el peli-verde me miro de manera efímera y volvió a subir la mirada al techo.

—Cuando te conocimos...Dios ¡HA!. Nos llevamos una gran sorpresa—Dijo entre risas tratando de no ser tan ruidoso —Sabíamos que Rin tenía un hermano gemelo pero no teníamos idea que el hermano condujera un Bugatti Veyron a sus tan solo 17 años...—Continuo rápidamente restando importancia a mi pregunta—Pero eso no se compara con el de que seas dueño de cuatro hoteles en Tokio y... ¿Solo tienes 17?

—18—Interumpi ganando la atención de Mikuo—18 años Rin y yo los cumplimos hace ya unos meses...

—Lo olvide por completo—Admitió avergonzado—Tengo que admitir que las fechas de cumpleaños no es lo mío, le debo un regalo...

Sonreí de lado—Yo igual...Mikuo, ¿estás enfadado con Rin?—Pregunte de nuevo aprovechando el cambio de tema.

—No—Respondió sin reparo—Simplemente estoy asombrado y molesto con migo mismo por no darme cuenta, es decir, Kaito Shion era la respuesta, no todo los días entra a el hijo de un empresario mundial a tu negocio y pide un helado holandés—Mascullo divertido y pegándome su sonrisa. Sin embargo el ambiente cambio y una extraña tención creció—Mis ojos estaban puestos en otro asunto, uno que hasta el momento no me deja dormir—Agrego con monotonía dedicándole una mirada a su hermana—Len...no se aun porque lo hiciste, pero...cuando golpeaste ah Akaito, ¿Que sentiste?

Su pregunta me tomo por sorpresa, en ese momento por acto reflejo mire a la misma dirección de Mikuo, solo que yo miraba a mi princesa.

—Sentí como toda mi amargura e ira salía de mí en forma de puño, dejando una paz indescriptible —Respondí con una sonrisa dibujada en el rostro.

Un simple "ahhh" salió de su boca, lo mire curioso, quizás no comprendía absolutamente nada de mi explicación, pero sus ojos solo mostraban monotonía, igual que su sonrisa…

—Tal vez sea hora de que deje ir la mía—susurro para sí, dando por terminado una charla confusa y carente de sentido...por lo menos para mí.

...

...

...

—Llegamos al aeropuerto de Okinawa—Escuche de pronto a lo lejos, era una voz cálida cargada de gentileza, dentro de un muro de oscuridad...

Un golpe nada cariñoso me hiso que saliera de mi letrado, tratando de enfocar a mi atacante, me encontré con el peli-verde, guardando su teléfono en su bolsillo trasero. Respire profundo y con pereza me levante de mi asiento, estire el brazo para tomar mi pequeño maletín guardado en el cubículo sobre nosotros para después emprender junto con el peli-verde la salida del avión.

—Las chicas salieron primero—Comente sin intención de escuchar respuesta, sin embargo el peli-verde tan solo asintió en silencio. Caminamos un poco más hasta la zona de descarga, hay pudimos visualizar a las dos ya con las maletas faltantes, al vernos nos dedicaron una sonrisa, la cual por mi parte le correspondí a mi princesa.

Cuando llegamos hasta el punto donde estaban ellas, no nos quedó de otra ah Mikuo y a mí que cargar las pesadas maletas de su hermana mientras ellas cargaban las más pequeñas, el camino hasta la salida del lugar fue en silencio, no teníamos mucho que decir, Rin y yo estábamos en un lugar completamente desconocido, y al parecer a los gemelos no les apetecía comenzar con una charla por el momento.

—¿Donde conseguimos un taxi?—Dijo de repente Miku ganando la atención de todos, que en infracto miramos la fila de taxis que subían hasta cuatro personas que nunca en sus vidas se habían visto, pero compartían casi los mismo rumbos, algo si era claro...nadie iba a querer compartir taxi con cuatro jóvenes con más de 10 maletas en manos...

—Podemos rentar un auto—Sugerí a penas mis ojos cayeron en cuenta de un GRAN y nada discreto letrero de "renta de autos" el cual al vernos en esta clase de situación, era lo más lógico y sano que podíamos hacer.

Una vez con las llaves en mano, y las maletas de Miku dentro del porta equipaje, todos nos subimos al vehículo blanco de cuatro plazas. Iba a escoger un flamante BMW negro con cristales oscuros, pero Rin fue más rápida que yo y pidió una pequeño Nissan blanco con problemas de aire acondicionado y un enorme parche en la puerta del conductor. Rin subió quedando al lado mío cargando en su regazo mi pequeño maletín negro. — ¿Traes trabajo a unas "vacaciones" Len?—Pregunto mirando con ganas de abrir el maletín y saber qué es lo que traía dentro de él, tan solo lance una efímera sonrisa y conteste—Tan solo son los últimos contratos con la empresa constructora de Hokkaido planeo abrir algunos hoteles por esas zonas.

Los hermanos Hatsune me miraban sorprendidos— ¿Len de verdad tienes 18?—Pregunto de nuevo Mikuo abriendo la ventana trasera de su lugar, acto que todos copiamos al sentir que el clima del auto no iba a refrescar hoy...ni mañana.

—Cuando uno estudia en el extranjero tiene muchas ventajas y desventajas, además agrega a que pertenezco a una gran familia cuyo negocio es lo farmacéutico, una de las ramas más pesadas del mundo, aun cuando no tengo total libertad de los recursos de mi familia...por…Ciertos asuntos, tengo una parte respaldada por el testamento del abuelo y claro un reglamento claro de la familia—Dije sin dejar de mirar al frente ganando una mirada rápida de Rin, observe por el retrovisor y me di cuenta que ambos peli-verdes esperaban que continuara un poco mas—No tiene mucho que me lo dijeron, pertenecer a una familia de renombre tienes sus ventajas, al ser los Kagamine una familia vieja conservan tradiciones que hoy en día la gente ve absurdas, una de ellas es que cada heredero de la primera rama tiene automáticamente cierta cuenta cantidad de dinero a su nombre al nacer, eso podemos decir que es la parte ventajosa, la desventaja, es el valor económico que te da ese dinero, el cual posterior utilizan para comprometerte con alguna persona de igual o más valor que pueda convenirle a la rama familiar...todo se basa en el interés económico y el poder que alguna de las ambas partes pueda ganar...

El silencio se hiso de repente, Mikuo miraban como si el piso de auto fuera lo más interesante del mundo, Mikuo observaba por la ventada con aire pensativo, y Rin...ella solo enfocaba su mirada al frente, sabía que por su mente, la cuenta regresiva para obtener el poder cada vez llegaba más a su final. Tanto ella como yo, somos simple ceros en una larga cuenta bancaria.

—Eso explica cómo es que has construido tus hoteles—Dijo de repente Miku, pasando sus manos en los asientos delanteros para posterior mente colocar su rostro en medio de nosotros—Y si le agregamos el dinero que ganas por la aversión...

—Me convierte en un joven empresario rico—Culmine por ella con una gran sonrisa mirando de reojo a Rin que dejo escapar un suspiro diciendo, no le des cuerda...

Ella estiro su blanca mano hasta el radio del auto, al parecer el camino sería muy largo y el tema de conversación no era del todo ameno. Paro en una estación de música juvenil donde una de las canciones más populares del momento era sacada al aire. El sonido del piano como introducción me hiso reconocer de inmediato...

—Kabosoi higa kokoro no hashinitomoru

Itsunomanikamoehirogarunetsu jou—

—OH deja esa canción—Exclamo Miku desde la parte trasera del auto—Adoro como canta Teto y Ted—Comento entusiasmada cantando en susurros la letra, Rin y yo intercambiamos miradas divertidas, si tan solo ella supiera que los conocemos en persona e incluso hemos llegado ah compartir vacaciones con ellos, en los tiempo de colegio.

—Itsunomanikamoehirogarunetsu jou—Comenzó ah susurrar Rin con la intención de no llamar la atencion—Watashinochoufukisokunitobim awari, anatanotenirinpunwotsuketa...

—Karamiauyubihodoite—

—Karamiauyubihodoite—

Cantamos los dos al mismo tiempo, cosa que hiso que Rin me observada divertida de reojo.

—Kuchibirukarashitaeto—Continúe dibujado una pícara sonrisa causando que Rin miraran de frente de golpe con sus mejillas ligeramente rosa.

—Yurusarenaikotonarabanaosara moeagaruno—

—Yurusarenaikotonarabanaosara moeagaruno—

Ambos tomamos un ligera bocanada de aire y.

—Dakiyosetehoshiitashikameteh oshii

Machigainadonaindatoomowaset e

Kiss wo shite nurikaetehoshii

Miwakunotokiniyoishireoboret eitaino—

El piano sonaba de fondo y la canción continuaba, ambos nos dedicamos una mirada y una sonrisa, ambos con mejillas sonrojadas íbamos a continuar cantando, sin embargo...

Unas risas forzadas por ser ocultadas nos sacaron de nuestro mundo, los Hatsune nos miraban desde atrás, ambos estaba prácticamente abrazados, o más bien Mikuo abrazada Miraba divertido y algo incómodo por la forma en que su hermana le apretaba por la emoción.

—¡Somos patéticos lo sabemos!—Gruño Rin roja por completo mientras cruzaba los brazos

—¡Claro que no!—Gritaron los dos—Es solo que es asombroso, cantan tan bien, es decir se acoplan a la perfección cualquiera diría que son cantantes profesionales—Explico Mikuo compartiendo una mirada y sonrisa con Miku la cual asintió a cada palabra de su hermano.

—Yo creo que si le pedimos ah Teto una oportunidad en su disquera la arriamos mas rica de lo que ya es—Comente burlónacelerando un poco mas.

—¡CONOCEN A KASANE TETO!—Vocifero Miku causando que perdiera por segundos el control del auto causando un frenoninvoluntario, Rin me miro molesta, lo que me dio a entender que aun cuando los gemelos tenían una idea de quien era en realidad, no sabían a las personas que estaba acostumbrada a frecuentar.

—Y ah muchas otras personas—Agreguesonriendo pidiendo disculpas de esta manera a mi princesa para posterior mente regresar a la marcha.

El trayecto hasta el momento después de un posible accidente era tranquilo, dejamos atrás la cuidad para darle paso a grandes campos verdes, Rin continuaba buscando música en la radio y los gemelos estaban entretenidos con alguna charla en especial.

Unos cuantos quilómetros mas y algunas casas se alcanzaban a ver, todas ellas se veían sin duda muy nobles, pero eso solo les daba un atractivo y calidezinexplicable. Sin embargo, al ver que la mayoría era de una planta me asían imaginar que solo tenían dos cuartos y un baño, cosa que me comenzó ah alarmar.

El aire olía a humedad, cosa que me hiso comprender que llovía mucho en esta zona, el olor del mar creaba un aroma hipnótico y agradable, pequeños casas tenían a sus lados huertas o granjas o en dado caso árboles frutales, pero para mi sorpresa, el camino de pavimento desaparecía dejando en su lugar gravilla y grandes agujeros que amansaban con dejarnos estancados.

—¡La casa de la abuela esta al fondo!—Dijo entusiasmada Miku. Una gran sonrisa se formó en los labios de Rin, eso me dio a entender lo feliz que se sentía al ver lo emocionada que se encontraba su amiga, detuve el auto en la última casa y valla que sentí alivio al verla.

Por fuera era mas que obvio que la casa era a lo mucho de tres cuartos y con tantita suerte dos baños, era de dos pisos, con un pequeñobalcón en la parte del frente, sus paredes blancas y sus decorativos de dos franjas rojas en la parte baja de la casa eran discretas pero frescas, rodeada de una pequeña baña de madera pintadas también de blanco separaba el terreno de la arena blanca de la playa tras de ella. en el pórtico yacía una mujer mayor sentada en lo que parece ser uno de esos columpios de dos plazas color verde, la mejer tenía el pelo recogido completamente blanco, sus ojos verde agua sobre salían de unas pequeñasaberturas de sus parpados caídos, los cuales eran ocultados por unas gafas grandes, su ropa era una sencilla falda blanca crema con una blusa amarilla de manga de tres cuartos, ellas nos observaba aun sentada con una pequeña sonrisa en su rosto iluminado de felicidad.

—¡ABUELA!—Gritaron al unísono los gemelos, los cuales ni habían cerrado las puertas cuando salían disparados hasta el pórtico Rin y yo observamos divertidos mientras nos colocábamos en la parte del frente del auto.

—Espero no seamos una molestia—Dijo de repente tomando mi mano y dándome un ligero apretón.

—No lo creo, la hemos reunido con sus nietos, no creo que se moleste de tenernos todo un mes metidos en su casa—Respondísarcástico ganando una sonora carcajada de parte de ella la cual habíacomenzado a caminar con rumbo a la casa.

Una vez que estuvimos lo suficiente mente cerca, pudimos escuchar los típicos comentarios de una abuelita, que grande están, ¿se han alimentado bien?, ¿por qué se ven muy pálidos?, ¿acaso sus padres no se preocupan?, los gemelos como podíanrespondíanante las contantes preguntas de su abuela, hasta que Rin y yo llegamos al pórtico.

—Abuela te presentamos a Rin y Len Kgamanie—Nos presentó Miku ayudando a su abuela a caminar hasta nosotros, la señora nos dedicó una mirada seria la cual causo que ambos nos pusiéramos nerviosos, sin embargo su gesto cambio por uno cálido al ver nuestra reacción.

—Miku me ha contado mucho sobre ustedes dos—Comento con calma y pausadamente—Les agradezco que corrieran con los gastos del viaje, sé que no es nada barato hoy en día viajar hasta este punto perdido de Japón—Agrego inclinando su cuerpo un poco en forma de reverencia.

—No se preocupe señora, Miku tenía muchas ganas de venir a verla, así que aprovechamos el puente para salir y conocer un lugar nuevo fuera de la rutina—Tomo la palabra Rin de manera serena dando ahora ella una reverencia la cual imite sin mas.

—Yo pido la cama frente al clima—Se escuchó de repente Mikuo decir corriendo adentro de la casa.

—¡CLARO QUE NO ESA SIEMPRE ASIDO MI CAMA!—Grito molesta Miku saliendo corriendo tras de su hermano.

Los tres solo alcanzamos a reír ante lo sucedido—Estos niños, no importa el tiempo que pase siempre segura siendo los pequeños diablillos de la abuela—Comento la anciana tomando rumbo a la casa—Vamos chicos les preparare algo de merienda.

Rin y yo nos miramos de reojo, las cosas hasta el momento corrían con tranquilidad...bueno, si no contamos la pelea de la cama.

(Rin`s POV)

Como odio este sentimiento de ira cuando Len esta implicado con otra mujer, como demonios iba a pasar de alto como aquella estúpida mesara de cuarta se le insinuaba ¡ante mis narices!.

—Si necesitas algo más no dudes en llamarme—Continúo coquetamente mientras mordía la punta del lapicero, según ella, sexy mente—

—Gracias pero estamos bien—Gruño mirándola de manera asesina, pero la tima me ignoro olímpicamente.

—Incluso puede llamarme—Agrego escribiendo algo en una de sus notas adhesivas para después dársela a Len, el cual la tomo y le dedico una sonrisa—Si necesitas algo de compañía—Finalizo tomando rumbo a la barra moviendo las caderas de manera exagerada.

Lo mire confundida al momento que el doblo aquel pedazo de papel y lo metió a su cartera, ok eso fue todo. Me levante de golpe tomando la limonada que la zorra me había llevado antes, camine hasta donde ella se encontraba y.

—Oye—Dije tras de ella, causando que diera la media vuelta, con dedicándome una mirada de "Soy mas hermosas y sexy que tu" Le deje ir la limonada en la cara—¡Ups! es solo que te veía muy acalorada y solo quería refrescarte—Agregue burlona colocando el baso en la barra mientras ella me miraba con la boca abierta y el líquido agrio y freo caer por su patética cara.

Solo pude escuchar un ¡RIN! a mis espaldas mientras salía de aquella palapa de regreso a la casa de la abuela de Miku.

Len y yo decidimos dar una vuelta solos al ver que los gemelos Hatsune se la pasarían un buen rato peleando quien se quedaba con la cama frente al maldito clima, su abuela nos dijo que esa palapa era muy buena en lo que respecta a comida y atención, pero no creo poderle darle la razón sobre la atención prestada y menos con esa zorra como mesera.

Entre sin avisar siquiera y tome rumbo escalera arriba tomando la perilla de la cual sería mi habitación el próximos mes que estuviéramos en Okinawa.

Me detuve a observar el lugar, era el equivalente de la sala de mi primer departamento, extremadamente pequeña. Tenía dos camas individuales, una a cada lado del cuarto con paredes color crema una lámpara en el techo que nos iluminaria en las noches y una ventana en medio de las dos camas que nos permitía admirar la hermosas vista del mar, nuestras maletas estaban a un lado de la puerta junto donde una pequeña mesa se encontraba con un jarrón de cristal sin flores. Ese lugar era tan pero tan modesto que comenzaba a extrañar mi departamento.

—Creo que compartiremos cuarto—Apunto Len caminando hasta la ventana donde se recargo para apreciar la vista.

Me quede callada por un rato, a mi mente regresaban las imágenes del último beso que nos dimos, en el pasado me escabullía para entrar en el cuarto de Len y dormir juntos, pero ahora, no me parecía una buena idea, incluso me resultaba incomoda.

—Creo que iré a ver si Miku ya dejo de pelear con su hermano—Comente saliendo del letrado—Quiero platicar un rato con ella.

Len solo asintió y yo salí rápido del cuarto, no quería estar a solas con él, ya tendría mucho tiempo en la noche y requería preparación mental.

El cuarto de Miku estaba frente al nuestro y a un lado estaba el de su abuela, toque la puerta de Miku y ella abrió rápido, mire al fondo y no vi rastros de Mikuo.

— ¿Y tu hermano?—Pregunte sin dejar de buscarlo con la mirada

—No se—Respondió preocupada

— ¿Que paso?—Pregunte de nuevo estabas algo preocupada mientras me abría paso en su cuarto y cerraba la puerta tras de mí.

—Cuando salimos corriendo el salto sobre la cama y yo salte sobre de el—Comenzó a contar tomando asiento en la cama frente al clima—Creo que lo lastime porque mientras le gritaba que se quitara me senté en su estómago y su rostro cambiaba de colores—Culmino dejando escapar un suspiro tirándose de espaldas de golpe.

Yo solo negué con la cabeza en silencio, pobre Mikuo de seguro le saco el aire—Rin tomare un baño—Dijo de repente levantándose y sacando algunas prendas de sus maletas, yo solo asentí en silencio y me levante para salir y bajar a ver a Mikuo.

La casa era muy linda aun cuando era muy humilde, dos pisos tres cuartos y un baño, su sala era grande con los sillones más cálidos y viejos que he visto por primera vez, busque con la mirada la Tv pero en su lugar encontré un ENORME pero ENORME radio antiguo, era algo completamente sacado de otro mundo, una vez Miku me dijo que en casas de sus abuelos solo tenían un radio para pasar el rato...y no le creí en ese momento...

—Sin duda hasta no ver no creer—Me dije a mi misma mientras observaba el objeto.

Todo estaba en silencio en la planta baja, por lo que me di a la tarea de buscar a Mikuo en la cocina de su abuela, sin embargo también estaba vacía. Sin embargo una gran nota en el refrigerador con la letra de Mikuo decía-La abuela y yo salimos hacer unas comprar, regresamos rápido Atte. Mikuo

Ok, eso me dejaba en una casa ajena con mi hermano en el cuarto y Miku en el baño. Genial, sin ánimos camine de regreso al cuarto, no tenía nada que hacer, estaba en un lugar completa mente desconocido para mi donde el resto de tecnología más grande era un radio más antiguo que mi abuela Kora.

Entre esperando encontrarme a Len aun en la ventana, pero grande fue mi sorpresa al no verlo ni adentro del cuarto. Me lace a una de las camas esperando a que algo interesante pasara, pero me maldije haberlo decido.

Len entraba por la puerta del cuarto sin camisa, mis ojos no dejaban de admirar aquellas gotas de sudor que se deslizaban por su cuello, hasta su pecho descubierto. Mi capacidad mental para enfocar y crear ideas eran del cero por ciento no fue gracias a que hablo que regrese a la vida.

—Tengo mucho calor, quería tomar un baño pero Miku esta ocupándolo ahora—Aclaro entrando con la camisa en mano, abrió la ventana a más no poder dejando pasar la fresca brisa salada al interior del cuarto.

—Mikuo salió con su abuela de comprar, supongo que cuando regresen aremos algo juntos—Respondí con aparente calma cuando en realidad luchaba por mantener la mirada en el maldito piso.

—Len termine, puedes entrar ahora—Se escuchó la melodiosa voz de Mikuo tras de la puerta rompiendo el incómodo silencio en el que sucumbimos, Len no dijo nada mas, simple mente salió del cuarto dejándome tirada y acalorada en la cama.

No sé si mi pobre corazón pueda resistir de nuevo un atentado de este tipo.

(Len`s POV)

Me di una ducha rápida y me puse un pescador y una camisa sisada para aquel infernar calor, tome mi liga y amare mi cabello lo más alto posible para evitar acalorarme mas, salí de nueva cuenta y me encontré con la puerta del cuarto que compartiría con Rin abierta, mire adentro de este y ella no se encontraba.

Escuchaba alunas voces desconocidas en la planta baja y decidí investigar, sin embargo al llegar a la sala, lo único que había era los escasos muebles y el radio encendido, sin embargo un bulto en el sofá capto mi atención, me acerque hasta él y pude distinguir la figura de mi princesa acurrucada con las manos tapando su rostro.

— ¿Princesa que pasa?—Pregunte atropelladamente ancándome frente colocando mis manos en sus rodillas.

—L...Le...Len—Hipó mientras intentaba ocultar mas su cara con la palma de sus manos.

Me levante de golpe y me deje caer a un lado de ella, la atraje asía mi sintiendo el calor de su cuerpo causando reacción en el mío, una reacción de vacío eh impotencia al no saber el porqué de su llanto— ¿Que sucedió Rin?—Pregunte de manera suave intentando quitar sus manos de su rostro.

—Mi...Mi...—Decía entre Hipidos causando que mis pocos nervios se destrozaran.

—Tu ¿qué?—Susurre tratando de mantener la calma.

—¡MI SERIE LEN NO PODRE VER MI SERIE HOY ES FINAL DE TEMPORADA LO HABIA OLVIDADO POR COMPLETO!—Grito quitando las manos de su rostro de golpe mientras serraba ahora sus ojos dejando caer unas gruesas lágrimas, después de unos segundos de silencio, sus ojos se enfocaron en los míos—No es justo...

—Tú...serie—balbuceo confundido para después dejar escapar un fuerte bufido de alivio—Rin qué demonios pasa contigo casi me matas de un susto—Dije mientras ella aun tenía una mirada con lágrimas y mejillas rojas me saco la lengua y una sonrisa se dibujó en sus labios, causando que una más amplia se dibujara en el mío. Como amaba verla sonreír. Las pequeñas manos de Rin se encontraban descansando en mi pecho que aun subía y bajaba por el susto, aun me sostenía la mirada, sin embargo fui yo el primero en romper el contacto, ahora me enfocaba en sus labios ligeramente entreabiertos.

Mi mente jugo sucio con migo haciéndome recordar cada roce, mordida y succión que aquellos rosados labios me han dejado, la necesidad de sentir sus labios contra los míos se sentía crecer cada vez más, necesitaba sus manos jugueteando en mi cabello, pero sobre todo, necesitaba aquel oscuro sentimiento fuera compartido...

El cuarto se puso caliente de repente, el poco aire que entraba por las ventanas del frente era igual de caliente, de mi frente podía sentir como resbalaban las gotas de sudor, mientras mi miraba atrapaba unas pequeñas y traviesas gotas de sudor de Rin hasta perderse en sus labios….

—¡YA ESTAMOS EN CASA!—Grito Mikuo abriéndose paso por la puerta del frente con algunas bolsas en manos y su abuela de tras de él, Rin y yo parpadeamos y rápidamente nos acomodamos en el sofá, ambos intentamos disimular que estábamos escuchando el radio...

Mikuo nos miraba desde la puerta aun con las bolsas en mano no muy convencido de nuestra acción—Les juro que si tocaron mi DS los matare de la manera más lenta y dolorosa—Soltó el peli-verde enfadado mientras dejaba caer las bolsas en el suelo.

—Tu DS está bien, Miku juega con el—Hablo Rin de repente levantándose para después dirigirse a echarle una mano a Mikuo.

De repente enfoque mis ojos en la abuela de los Hatsune que entraba con una joven castaña detrás suyo—Disculpen la Intromisión—Hablo de manera baja mientras hacia una pequeña reverencia, Rin giro para poder apreciar mejor a la chica y su mirada de curiosidad viajo hasta mi.

—Ella es Ritsuki Takano, Ritsuki-chan ellos son Rin y Len Kagamine—Nos presento Mikuo mientras abrazaba las bolsas. Me levante lenta mente hasta llegar a ellos donde Takano-san me dedico una reverencia que no dude en responder.

—Un placer Takano-san—Ella tan solo sonrió y un delicado "el placer es mío" salió de sus labios.

(Rin`s POV)

La tarde ese día paso entre gritos, risas y uno que otro insulto por parte de Miku, su abuela no tardo de medio segundo en dejarle ir un puerro por la cabeza, cosa que nos impresiono a Len y a mí, ambos intercambiamos una mirada de confusión mientras una enfadada Miku subía las escaleras, mientras tanto Mikuo se disculpaba con Takano una y otra vez, ¿no se suponía que este era un viaje de diversión?.

—Así que… ¿ustedes son compañeros de escuela de mis nietos eh?, dígame como les va—Pregunto tomando asiento en el columpio del pórtico.

Len y yo decidimos salir para dejar a Mikuo más tranquilo con Takano, por alguna razón ambos sentíamos que nuestra presencia estaba de mas en el comedor de la abuela Hatsune. Salimos sin que nadie nos viera, o por lo menos esos creímos, tome haciendo en uno de los escalones de madera mientras Len tan solo se recargaba en los barandales. No fue hasta que hablo que nos percatamos de la señora Hitsumi.

—Muy bien—Respondió Len, yo tan solo lo mire con molestia, el no iba con nosotros en la escuela—En realidad, van muy bien—Reparo mientras tomaba lugar a un lado se la abuela. Yo tan solo lo sigue con la mirada.

—O ya veo, en especial para ti Rin-chan—Agrego dedicándome una enorme y coqueta sonrisa, Len me miro confundido y yo solo abrí los ojos por completo, ¿acaso Miku le dijo a su abuela?

—Mimi-chan me conto en una de sus cartas que su amiga rubia estaba saliendo con su profesor de Ingles—Musito mientras miraba alrededor como si alguien nos pudiera escuchar, yo solo trague grueso.

— ¿Mimi-chan? —Dijo un confundido Len

—Así es como le digo a Miku desde que nació, a Mikuo lo llamo Miki-chi—Respondió restando importancia.

—Yo no diría que salimos—Aclare con nerviosismo, hablar de algo así con ella era aun mas incomodo que hablarlo con su nieta—Son clases particulares…—Una coqueta risa me interrumpió yo tan solo mire a Len buscando apoyo pero el miraba el piso.

—Lo mismo decíamos yo y mi querido Hayate—Comento avergonzada mientras lleva sus manos hasta sus sonrojadas mejillas—Hayate era mi profesor de música en aquellos tiempos, un día quedamos en algunas clases particulares para mejorar mi estilo en el shamisen, una cosa llevo a la otra y ¡AH! Mi Hayate como lo extraño aaaaah recuerdo nuestra primera clase….—Comenzó a relatar sin que uno de los dos le pusiera mucha atención en realidad, aun cuando mi mirada estaba sobre su frágil cuerpo mi mente estaba en la tarde en la biblioteca—Tienes que estar preparada—Dijo ganando mi atención, de pronto su mirada de soñadora y sus mejillas rojas avían cambiado a un semblante duro—Una relación entre profesor y alumno no está permitido, pero si su amor es real y puro nadie escúchame bien, nadie, podrá interponerse Rin-chan….

Deje escapar un suspiro y una delicada sonrisa se dibujo en mí, como decirle a la abuela de Mikuo, que el amor real y carente de pureza, no es precisamente para mi profesor…

(Len`s POV)

Intentado distraerme de la conversación fije mi mirada el piso del pórtico, primero la discusión sin sentido de los gemelos ahora una charla incomodo con la abuela, ¿no se supone que estamos aquí para disfrutar?, tan solo quería olvidar a ese imbécil cobarde.

—Ne Rin-chan, ¿es guapo? —Pregunto una picara abuela ganando mi atención, fue incomodo y divertido a la vez pero sobre todo incomodo escuchar a una señora de, am… ¿decirlo sin que suene mal?...

—Es una joven atractivo—Respondió Rin causando que yo solo apretara los puños con fuerza—Pero no es mi tipo—Agrego con una ligera sonrisa mirando la playa a nuestro lado.

¡Claro que no era su tipo!, en realidad, solo hay uno quien sería su tipo perfecto…

—Ya es tarde chicos y no se ustedes pero esta anciana se va a dormir—Comento tomando rumbo directo a la casa—Miki-chi te acompaña a Ritsuki-chan hasta tu casa cuando terminen—Logramos escuchar mientras su silueta se perdía rumbo al segundo piso.

Rin aun miraba la playa al fondo mientras el horizonte se pintaba de colores naranja y rojos—Tomare un baño—Dijo de repente.

—Es algo temprano para ir a dormir—respondí con aburrimiento—Pero creo que la gente de este lugar piensa lo contrario—Mire las pequeñas casa a lo lejos muy pocas eran las casas que aun se encontraban encendidas.

—Si quieres divertirte puedes ir a la ciudad, incluso puede llevar a esa mesera, solo te recuerdo que podrías perderte—Declaro una enfadada Rin mientras entraba y subía las escaleras con rapidez.

Suspire—Kaito tenía razón—Masculle para mi mismo mientras ocultaba mi rostro con mis manos— Kunigami no es el mejor lugar para unas vacaciones…

Levante el rostro y le di una rápida mirada a la playa, si quería divertirme, tenía que someterme a que los gemelos nos llevaran a la diversión.

Sin muchas ganas de seguir en el pórtico solo, entre en la casa, las risas provenientes del comedor resonaban por toda la sala. Por lo menos uno de nosotros se estaba divirtiendo—Quiero darme un baño—Dijo una acalorada Rin mientras me abría paso al cuarto que compartiríamos.

Mire alrededor del cuarto, al parecer Rin ya se estaba instalando, toda su ropa rodaba por el lugar, incluso en la que sería mi cama—Ve toma un baño yo intentare no morir de aburrimiento—Dije mientras me dejaba caer en la cama.

Pose mis ojos en mi hermana, ella buscaba un par de prendas entre todas las que ya había sacado—Que opinas, ¿podría comprar una tv para el cuarto en lo que estamos aquí? —Ella dejo de buscar de golpe y me miro con diciendo ¿es enserio? —Solo bromeaba—Masculle—Es solo que si las tardes van hacer así de aburridas quiero tener algo con que pasar el rato

—Bueno, fue tu idea en primer lugar este viaje, además, no seas tan egoísta, Mikuo y Miku están disfrutando esto…a su manera—Respondió evitando mi mirada en todo momento hasta salir serrando la puerta tras de sí, al mismo tiempo que escuché como la puerta del baño se cerraba y como el agua comenzaba a correr. Fijé mi vista el techo intentando despejarme un poco y no morir de aburrimiento.

Comenzaba a caer en un sueño impuesto cuando una melodía me despertó. Me levante de golpe y busque con la mirada aquel aparato, bajo lo que era la ropa interior de Rin destellaba una luz azul. Me levanté, y tome una de las bragas blanca de mi hermana, sin saber el porqué, la admire hasta que la melodía seso. Causando que la ambientara al otro lado del cuarto, quito las demás prendas y tome el pequeño aparato, el celular de Rin.

—Un mensaje nuevo… —Leí en un murmullo, le dirige una mirada de desconfianza a la puerta del cuarto, en ocasiones Rin tomaba duchas muy rápidas y no estaba en mis planes ser descubierto por ella husmeando en su celular.

-Hola cariño, espero que estés pasándolo bien en tus vacaciones, es una lástima que no pudiéramos seguir nuestras clases, espero impaciente tu regreso. Luki

Tome el pequeño aparato y lo deje ir contra la pared en frente veo, mientras un gruñido se escapo de mis labios

— ¡¿Cariño?! ¡¿ESE HIJO PUTA LA LLAMO CARIÑO?! —Grite sin contenerme mirando el pequeño aparato con la pantalla rota y el líquido esparcido dentro de esta— ¡Lo matare! —Masculle rechinando los dientes con fuerza.

— ¿Len?, ¿qué sucede? —La voz de Mikuo me asustó, lo mire al ras del hombro y descubrí que no estaba solo, Miku y Takano-san lo acompañaban.

— ¿Len que paso? —Dijo de pronto Rin saliendo del baño con una toalla enredada en su cuerpo, abriéndose paso entre los presente— ¿Len? —La mirada de mi princesa se clavo en el pequeño aparato tirado en el piso, de manera lenta se acercó para recogerlo y admirar su condición

Su rostro era una mezcla de sorpresa y enfado. Me miró pidiendo una explicación, yo tan solo esquive su mirada, sin embargo mi boca tenía otros planes.

—Te prohíbo que vuelvas a ver lo —Dije casi imperceptible

— ¿Por qué? —Inquirió, enfadada— ¡¿Por qué no puedes dejarme tomar mis decisiones?! —

—Porque no es un buen tipo, Rin, ¡sé lo que te digo solo mira lo que paso con Akaito! —Respondí causando un silencio mortal en el cuarto, los gemelos y la castaña tan solo nos miraban preocupados. En cambio nosotros dos, solo nos quedamos atacándonos con la mirada.

— ¿Tenias que entras el al tema verdad? —Pregunto con la voz entre cortada

Suspiré, y deje escapar un bufido de fastidio, sabiendo que me arrepentiría de esto, no sabía que mas decir.

—Desde un principio no eh querido verte con nadie, Rin —aseguré—Porque, cada vez que te veo con algún idiota, solo me entra ganas de matarlos…me muero de celos.

— ¡OK! Chicas nosotros no tenemos nada que ver aquí, lo mejor será que desaparezcamos, Ritsuki te llevare a tu casa—Dijo un sorprendido Mikuo mientras arrastraba a su hermana para posterior mente cerrar la puerta tras de nosotros con delicadeza, dejándonos a los dos, sumidos en un silencio.

Trague grueso, tal y como paso en mi departamento, deje que mis sentimientos me dominara, ahora todo dependía, de ella.

Mi princesa


¡Bueno!

La verdad no se que decir xD publico esto a media noche del dia 25/10/2012

una fecha importante ya que una noche como esta se publico el primer capitulo de este fic.

Les agradesco a tod s los que aun con mis laaaaargo proceso de actualización esperan con arma en mano un nuevo capitulo.

Agradesco por darme la oportunidad de entrar a sus mentes con una de las parejas que mas fuerza a tenido en estos últimos meses

Me alegra ver que esta parte de se ah echo de varios autores, cuando yo llegue eran tan solo 3 pag de los gemelos ahora son sin duda muchas mas llenas de autores muy buenos buscando su oportunidad en este lugar.

Les agradesco a todas las persoans que me apoyaron cuando me vi amensada a eliminar este fic por supuesto plagio, y bueno con esto queda mas que claro que continuare, hasta darle fin a esta historia.

El titulo de este cap tiene un porque

Aquí es cuando las coas se desatan

aquí comienzo a crear el camino a el final

Pero también comienzo a darle paso a una nueva historia

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Los invito a pasar y leer el nuevo fic de Isa no Tenshi -Un amor familiar-

Una historia esta escrita tiempo/espacio con COSAS INESPERADAS

esperamos sea de su agrado

Bueno ahora en FB XD búsqueme como Oo Nell oO Bere Cadenas ya que aquí no se puede colocar pag ¬3¬, cree este porque no lograba distinguir entre el lector y una persona que solo manda invitación xD

Una vez mas gracias a todos por continuar leyendo esto desde el 2009 XD

Y recuerden, NO AL PLAGIO, si quieres utilizar el trabajo para crear ya sea un fic con otros personajes, o bien un manga, pide autorización estoy segura que el autor considerara la idea :D

xoXO