Serie de drabbles (que quizas deriven algunos a one-shots un poco más largos), en su mayoría narrados en primera persona desde uno de los dos personajes. Inglaterra/España con incursiones y alusiones a otras parejas

Desperté, sorprendentemente, antes que él. Me incorporé y maldije por lo bajo al sentir un pinchazo recorrerme, miré furioso a la razón de todos mis males y, muy a mi pesar, me enfoqué en aquellos labios que me habían torturado de placer la noche anterior. Alargué ambos brazos y rodee su cuello, matarlo seria fácil solo tenia que apretar y aguantar hasta que el último suspiro de su vida se extinguiera muriendo en su garganta. La cosa se complicaría si despertara pero una vez en ello sabia que aun tenía fuerzas suficiente para llegar hasta el final.

Entonces… ¿Por qué no hacerlo? No, no lo hice, subí las manos para arropar su rostro y deposité un suave beso en sus labios, aun dormido.

No podía matarlo así, era indigno para ambos, si debía morir, lo haría salpicado con su propia sangre, rodeado de sus hombres, alzando su bandera, con honor y seria recordado por sucumbir en mis manos.

Quizás algún día seria capaz, o quizás llegaran tiempos mejores donde los rencores del pasado fueran meros datos estudiados por las futuras generaciones. Quien sabe si llegaríamos a sentarnos en una misma mesa y discutiríamos por la economía.

Quien sabe…quizás…algún día podamos amarnos.