6. Cine…
-Vamos papi, llegaremos tarde…- exclamaba un pequeño Wilbur de 6 años, tironeando de la mano a su padre…
-Wilbur espera…
-¡No! ¡Ya!
-¿No quieres palomitas?- el pequeño niño miró indeciso entre la sala del cine y la dulcería. Sería el estreno de la nueva película de "Captain Time Travel" y él no podía perdese ni un segundo…
Pero tampoco puedes ver una película sin palomitas, ¿cierto?
-Ve a buscar asiento con tu madre, yo iré por las palomitas…- exclamó el inventor rubio, cargando a su pequeño y dejandolo en brazos de su esposa.
Wilbur estaba a punto de reclamar…
No quería estar ni un segundo lejos de su padre…
Pero cuando se dio cuenta, su madre ya lo llevaba en brazos hasta la sala donde verían la película…
El pequeño sentía unas terribles ganas de soltarse berreando, exigiendo que lo dejarán estar de vuelta con su padre…
Pero ya no era un nene, ¿cierto?
Sí, contrario a lo que Tallulah dijera, él ya no era un bebé, así que no podía hacer una escenita como esa…
Por mucho que la deseara.
Con el rostro emberrinchado, Wilbur se cruzo de brazos, dejando que su madre lo llevara hasta la sala…
Lo que, por supuesto, nadie había tomado en cuenta, era lo popular que la película era…
La fila en la dulcerìa era eterna y la forma en que se habìa llenado la sala no le pedìa nada…
Cornelius se encamino hasta su familia, malabareando las palomitas, los refrescos y los dulces para evitar tirar nada…
De inmediato, Tallulah y Lazlo corrieron para pelearse por las palomitas…
Franny se acercò a ayudar a su esposo con las cosas…
¿Y Wilbur? Bueno, el niño estaba sentado en su butaca, con la misma expresión emberrinchada de antes…
Apenas se digno a mirar a su padre cuando estè llego…
Estaba molesto…
Muy, muy, muy molesto…
-Cielos…-exclamó Cornelius, rascandose la nuca…-Parece que tendrè que buscar otro lugar…- sòlo entonces Wilbur se digno a mirarlo… ¡¿Qué?! ¡¿Primero lo hacia quedarse con su madre por más de cinco minutos y ahora pensaba dejarlo toda la película?!
-¡No!- exigió emberrinchado el pequeño Robinson…
-Pero bebé…-trató de calmarlo su madre.-Tu padre tiene que buscar asiento…
-¡No!- volvió a rugir el pequeño, sin importarle que algunas personas de la sala lo veían con molestia…
*10 minutos después…*
Wilbur pensaba, mientras comía palomitas de la mano de su padre, que si podía ver todas las películas sentadito en sus piernas, benditas fueran las salas abarrotadas y las dulcerías llenas…
Su inocencia no le permitía ver el hecho de que su padre pensará lo mismo como algo malo…