¡Hola a todos! Estoy por aquí trayéndoles mi primer fic SasuxSaku, espero que disfruten de esta romántica historia que se me ocurrió, ya está siendo publicada en otras páginas bajo en mismo seudónimo. No tengo mucho que decirles sólo que espero sus comentarios
Este es el resume original, aunque el límite de caracteres de no me permite usarlo:
Te perdí… no sé porque pero ese sentimiento pudo más… te amé, no lo puedo negar, mas no te pude ver, no lo quise reconocer, y hoy… hoy no me queda más que este vacío en mi interior, esta inmensa soledad, esta amargura de saberte lejos, el desasosiego de no tenerte, la incertidumbre de no saber qué brazos te cobijan, de pensar que son otros labios los que te besan, otro cuerpo el que duerme a tu lado…. Me dediqué a perderte…. ¿Cómo reparar mi error? No hice más que causarte dolor, que romper tu corazón sin saber que en su interior me encontraba yo, y hoy arrepentido te busco bajo esta luna, la misma que tiempo atrás fue testigo de aquel momento, la que esta noche se niega a verme suspirar porque no estás…
Advertencias: Por ahora ninguna, no creo que haya demasiado OOC, intento mantener los personajes en su carácter, si piensan lo contrario por favor díganmelo, creo que sería muy normal que la personalidad de Sasuke se me saliera de las manos pues es un personaje difícil y no es nada sencillo trabajarlo en una historia de romance
Aclaraciones: No sé si esto es necesario pero no permito que tomen mis historias, sólo yo las publico
Disclaimer: Naruto así como sus personajes son propiedad de Masashi Kishimoto, yo los uso por mero entretenimiento
I: Reencuentro
La luna con su blanco matiz alumbraba con afán la noche serena y muda, su cabello carmesí se mecía al compás de la brisa primaveral. Su mirada jade se centraba en un punto desconocido, mientras su sombra esbelta tendida en el suelo era su única compañía en la umbría, se mantenía así, callada sin decir nada atajando lagrimas que de vez en cuando se asomaban a sus ojos y resbalaban por sus mejillas rosadas
-No has cambiado nada -dijo casi con la voz quebrada mientras tras ella alguien se posaba-
-Tú también sigues igual -Le respondió una voz masculina, es un joven de cabello azabache y mirada oscura
-Te equivocas, he cambiado, no soy la niña que dejaste abandonada en aquella banca
-Eres esa misma baka que ahora me da la espalda
Se volvió suavemente para verlo a los ojos, nada parecía haber cambiado en aquel muchacho de rebeldes cabellos que hace años le robaba el sueño
-¿Quién te avisó de mi llegada?
-No hace falta que alguien lo haga, tu presencia no es fácil de ignorar
Emitió una sonrisa vacía al momento en que él se sentaba a su lado, tan sólo sentir su presencia le erizaba la piel, su corazón de pronto se aceleraba y su voz se acababa, en cambio él disfrutaba verla temblando de nervios al sentir el más mínimo roce de su piel
-¿No preguntarás que me hizo regresar?
-Tus razones tendrás
-¿No las quieres averiguar?
-Guárdalas para quien las quiera escuchar… -le dijo intentando sonar lo más dura posible
Sin embargo él sonrió de medio lado, mirando reposar junto a él a su ex compañera de grupo
-Aunque te intentes ocultar tras ese velo de mujer todavía puedo ver a esa niña de años atrás
-Esa niña murió…
-¿Y con ella sus sentimientos?
-Aprendí a luchar con las cosas que no puedes cambiar, con aquello que no vuelve más, no es que haya sido fácil olvidar pero los días ayudan y las heridas cierran… es mejor así, vivir dejando de lado las cosas que hacen daño…
-Y yo te he hecho daño…
-Pasé tantas noches de angustia llorando tu partida, pero ya no me queda llanto que darte ni noches en vela para recordarte, te convertiste sólo en un recuerdo para mí, un lejano sueño que desapareció en una remota infancia
-¿Entonces para quien son esas lagrimas? -le dijo secando su llanto fugitivo- siguen siendo sólo para mí… - musitó recorriendo con sus dedos su mejilla-
-Tan engreído como siempre… uchiha
-Y tú tan tonta ¿De qué te sirve hablar si no puedes sostener esas palabras?
Su mirada cristalina se ocultó entre sus piernas al tiempo en que sentía sus níveos dedos rozar con privilegios su piel, pronto pudo sentirlo respirar en su cuello
-El mismo aroma a cerezos…
Su respiración se sublevaba, el pulso la traicionaba, y en un arrebato se hundió en su pecho entre sollozos, como lo amaba, era inevitable, imposible querer escapar de esa sensación que le quemaba los sentidos, al estar allí cobijada entre sus brazos como lo había soñado en incontables noches de amargura…
-¿Qué quieres de mi? –preguntó resignada-
-Esta noche la luna nueva me trajo hasta ti…. Y no pude luchar con las ganas de tocarte, el deseo de tenerte así, junto a mí me persigue desde aquella lejana noche en la que te dejé en el portal de konoha
-¿Dónde quedó tu vanidad? Ya no eres el mismo muchacho de pocas palabras
-¿De qué me sirve la vanidad si no tengo a nadie con quien presumirla?
El canto de los grillos era lo único que se oía por un eterno minuto en el que se quedaron en silencio observándose mutuamente, ella se alejó con una sonrisa amarga
-Cuatro años… -musitó oyendo ecos de las voces juveniles del lejano equipo 7-
-¿Tanto pasó??
-Esos chiquillos no existen más, todo cambió cuando huiste de konoha arrastrado por la sed de venganza, la misma que hoy te trae de vuelta…
-Konoha… de niño siempre pensando que malgastaba mis días atrapado en esa villa
Ella permaneció en afonía pensando en esos perdidos días, no se atrevía a mirar al muchacho que tenía al lado, temía no poder soportar tragar esas palabras que quedaban en su garganta, ese persistente te amo que sin querer huía de sus labios
-¿No preguntarás qué fue de mi el tiempo que no estuve aquí?
-Ya no es importante para mí…
-¿No quieres saber si tan solo pensé en ti?
-Soy tu molestia ¿Por qué lo ibas a hacer?
-Mis días lejos de aquí fueron sólo desdicha y si alguna vez pensé en alguien fue en ti
Le confesó mientras ella lo miraba con sorpresa, sus ojos turbios de pronto se cerraban resignados, no pudo evitarlo, lo tomó de la mano, mientras él la presionaba con fuerza
-Mi venganza fue una farsa, maté a mi hermano por una maldita mentira, eso fue mi vida, lo maté siendo sólo su alma la que por mi velaba
La pelirosa no entendía mas en él sinceridad oía, mientras la tristeza se disfrazaba en su mirada tras el sharingan
-¿Hasta cuándo y te vas a herir? ¿No crees que fue suficiente en estos años?
-Esto nunca va a acabar…
-Si tan sólo te dejaras ayudar tal vez pueda cambiar. Pero eres demasiado terco, uchiha
-¡Tú no sabes nada!
-¡Sabría si me contaras! Sasuke-kun
-Vaya, se oye bien cuando me llamas así
Ella se sonrojó sutilmente, por primera vez lo veía sonreír de ese modo y su sonrisa le era simplemente irresistible, oír su voz, sentir su piel, mirar su perfecta anatomía, era casi un sueño tenerlo tan cerca cuando lo creía tan distante
-Sasuke-kun –musitó débilmente-
-El alba se aproxima
-Supongo que debes marcharte
-No yo… tú… escapaste de konoha, si te descubren…
-Eso no es un problema
-¿Por qué no alertaste a nadie al descubrirme cerca?
-Tal vez fue el egoísmo de querer tenerte sólo para mí… -Rio de sí mismo al oírse- supongo que este es el tipo de conversación que no puedo sostener sin contradecirme –dijo para sí
De pronto unos sutiles rayos de sol iluminaron el bosque, los primeros cantos de los pájaros quebraron la afonía, mientras Sakura se levantaba secando algunas lagrimas
Él la imitó, pero al instante cayó sujetando su pecho, mientras la sangre manchaba su aori
-¡Sasuke-kun! Estás… herido… -Le dijo al ver la sangre-
-Estoy bien –le susurro intentando reponerse-
-Pues no opino lo mismo
Le abrió suavemente el aori dejando al descubierto una enorme herida
-Sasuke, esto sangra demasiado ¿Cómo paso?
-Es de mi última batalla -le dijo cerrando el manchado aori intentando sonar despreocupado-
-Tu flujo de chakra es débil, necesitas tratamiento
-No es necesario…
-Siempre fingiendo ser fuerte –sacó su equipo ninja- tal vez arda un poco –advirtió-
-Hmp –su expresión era de dolor pero en el silencio lo disimuló
-Necesitas más que un desinfectante, tenemos que parar la hemorragia
-Ya te dije que…
Entonces comenzaron a oír unas voces, eran unos ninjas que se acercaban
-Alguien viene
-Un escuadrón ANBU salía en misión hoy, si te descubren ellos… no, ven conmigo
-¿A dónde me llevas?
Lo guió de la mano unos cuantos metros, Se detuvieron frente a un gigantesco cerezo el cual se encontraba en flor, Sakura miró hacia la cima y luego a Sasuke
-¿Podrás subir? –le pregunto preocupada-
Con una mirada arrogante el comenzó a trepar aunque el dolor se reflejaba en su rostro, pronto llegaron hasta cerca de la cima donde había una casa de madera
-¿Esto?
Ella entró mientras él la seguía
-Es mi escondite secreto, el capitán Yamato la hizo para mí, sólo él sabe de su existencia. Es aquí donde vengo cuando quiero huir del resto del mundo, estarás a salvo en este lugar
-¿Qué estás diciendo?
-No pensarás irte con tamaña herida ¿o sí?
-Pues qué esperabas
-Eres un irresponsable, acuéstate ahora mismo
-Estás loca
-Uchiha, sanaré esa herida… ahora no tengo los elementos adecuados pero traeré todo mi equipo pronto y podré curarla rápidamente
-¿Por qué lo haces?
-No preguntes cosas que no puedo contestar
-Aún me amas
-Cállate, y por favor quédate quieto
-En cuanto la herida cierre mataré a todos en konoha, ese es mi plan
Ella suspiró haciendo oídos sordos a sus palabras
-¿Qué? ¿Piensas que no lo voy a hacer?
-Lo que pienses o no, no es asunto mío
-Al parecer no oíste lo que dije
-Uchiha, durante los últimos años nuestra misión fue traerte de vuelta a konoha sano y salvo
-Por favor –dijo burlonamente-
-Ahora soy un ninja medico… estos años me sirvieron para madurar, ya no soy el estorbo de años atrás… te lo voy a demostrar
-Haz lo que quieras –le dijo confundido pues no creían que estuvieran hablando de lo mismo mas Sakura se entendía a la perfección, lo esperaba de hace tiempo, aquel encuentro que sabía era inevitable, su llegada al lugar de nacimiento y de tantos años de angustia, su odio lo traería de regreso y ella estaría allí, ahora no como la boba enamorada sino como un nija en combate, una kunoichi que ansiaba poder demostrarle la persona que se había vuelto y para eso el debía estar sano y salvo, o quizás lo único que intentaba con ese pensamiento era disfrazar el deseo incontrolable de tenerlo cerca, de cuidarlo, de saber que se encontraba bien…
-No me cuestiones, demo…. Te ayudaré… Voy a regresar –le dijo terminándolo de vendar- sólo no te vayas de este lugar
La vio desaparecer entre una nube, bajo la mirada tocando su herida, por una extraña razón el aroma a cerezos se quedó, y sabía no provenía de ese árbol era ese aroma que sólo ella emanaba, dio un suspiro y se resignó…ahora recostándose sobre un suave cojín de terciopelo miro por primera vez a su alrededor, se trataba de una pequeña cabaña que apenas tenía una cama con sabanas rosadas, una alfombra del mismo tono, un diván y una diminuta mesa, sus ojos de apoco se fueron entrecerrando vencidos por el cansancio, no le importo demasiado, decidió descansar y se entregó a los brazos Morfeo repasando uno por uno los rasgos de aquella muchacha que minutos antes se marcho dejándolo con una duda rondando su cabeza…