Espero y les guste mucho esta historia, es nueva y la hice con mucho esfuerzo, se que les va a gustar.
Antes que nada, quiero decirles que todos los personajes le pertenecen a la fantástica escritora: Stephenie Meyer.
La historia estará llena de risas y muchas aventuras entre los Cullen, su familia y amigos. Todos involucrados en la puritita diversión.
Cuídense mucho y espero ver sus REVIEWS
No queda más que… A leer XD.
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-…Operación SP…-
By:
Yess Twilight Cullen
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Capitulo Uno
"Nuevo Proyecto, Nuevas peleas"
…- Bella POV-…
Mi vida era un completo embrollo. Junto con los Cullen, no todo era color Rosa. Los problemas estaban a flor de piel, y eso en realidad era un enorme embrollo.
- ¡Espero ansiosa el final del día! – Los chillidos y brinquitos de Alice me hicieron mirarla con horror.
- ¿Podrías calmarte? Tu parloteo nos perturba a todos – Mire a Edward, quien fulminaba a Alice por el retrovisor y ella le contradecía con una mirada malvada.
- ¡Iremos hoy de compras Bella! – Cerré mis ojos al oír mi nombre y me maldije internamente por decima vez seguir siendo su conejillo de indias.
- Fuimos ayer Aly ¿No es suficiente para ti? – Le pregunte observando cómo me negaba con su cabeza, la palabra COMPRAS para ella, era un tema indiscutible.
- No permitiré que secuestres a mi Bella de nuevo – Le sonreí a Edward agradeciéndole su ayuda y le di un suave apretón, a nuestro agarre de manos.
- Alice, será mejor pararle a tus tan "Aficionadas compras" – Trato de aportar su granito de arena Jasper en esta situación.
- Jazzy querido ¡Compras es mi segundo nombre! – Agrego ella con inocencia, mientras que por sus finos labios, surcaba una sonrisita.
- Y molestia es el tercero – El susurro proveniente de Edward me produjo una pequeña risita que ante la enojada mueca de Alice, logre disimular por una leve tos salvándome asi, de otro reproche suyo.
- Carlisle te quitara las veinte tarjetas de crédito si te ve llegar con mas bolsas en las manos a la casa – Abrí los ojos como plato – La última vez te trajiste a todo el centro comercial…
- ¡Veinte tarjetas de crédito! – Grite sorprendida interrumpiendo a Jasper, lamentablemente esto debía ser una confusión.
- ¿Son pocas verdad? Eso mismo pensé yo Bells – Realmente Alice deliraba por las compras. Pensar que veinte tarjetas de crédito era poco, es un delito.
- Debes de estar bromeando – Le dije a Edward incrédula, quien al instante me negó con su cabeza tratando de calmarme.
- ¡Perderás todo tu dinero! – Le grito feliz Emmett a Jasper quien rodo los ojos.
- ¿Apostaron de nuevo? – Pregunte a sabiendas de la respuesta. Ellos nunca cambiarían, deberás que malgastar su dinero asi…
- Jasper cree que Alice puede durar dos semanas sin comprar cualquier cosa, luego Emmett lo reto y asi están como siempre – Ante la explicación de mi novio, comenzamos todos a caminar a la entrada de la escuela.
- Carlisle les dijo que parasen sus apuestas – Les advirtió Alice – Si pierden dinero por ellas, los castigara.
- ¡Bah! – El gesto despreocupado de Emmett, la hizo enojar severamente. Y ahí viene su cierre triunfal.
- Si quieres perder todos tus videojuegos, no me digas que no te lo advertí – Ella se encogió de hombros, sosteniendo una verdadera sonrisa de ser nuevamente ganadora.
- ¡NO MUNDO CRUEL! – Mi estilo de supervivencia contra vampiros me hizo dar un leve brinquito en mi lugar al escuchar el estruendoso grito de Emmett. Asustada me pegue aun mas a Edward - ¡¿QUE HICE PARA MERECER ESO?!
- Idiota, deja de gritar como cavernícola – Lo regaño Rosalie.
- Podrías dejar de decir palabras sin sentido por favor – Rogo Edward – Esto lamentablemente se está volviendo una tradición.
- Esta familia se está saliendo de los límites – Susurro Jasper – Muchas emociones para mí y apenas comienza el día – Negó con la cabeza derrotado.
-Sera mejor marcharnos bebe, aprovecharemos bien el tiempo al estilo Cullen – Logre escuchar el audible susurro de Rosalie, que hiso ponerme completamente roja. Cuando enserio lograban aprovechar el tiempo a su estilo, era cosa que nadie quería saber.
- Carlisle no quiere ver más incidentes gracias a sus travesuras sexuales – Me removí en mi lugar, mirando fijamente como Edward los fulminaba con su mirada.
- ¿Y eso que te importa SE-ÑOR SIN SE-XO? – La furiosa mirada de Rosalie, quien se me había acercado, me carcomía por dentro. Mi mente quedo completamente en blanco y por poco hubiera sufrido un paro cardiaco, de no ser por Edward que se interpuso entre ella y yo.
Edward 0. Rosalie 1.
Comenzó la puntuación.
- No queremos otra batalla mas ¿Verdad amor? – Las palabras controladoras de Emmett hacia Rosalie era de nada.
- Te arrepentirás de haberme llamado asi GUE-RA – Golpe bajo. ¡Punto para Edward!
Edward 1. Rosalie 1.
- ¡Sera mejor que atiendas las prioridades sexuales de Bella y no la de nosotros! – Su grito atrajo varias miradas hacia nosotros, junto con parloteos y el nuevo rumor del mes, que sería mi siguiente tortura hasta graduarme.
- Oh por dios - Enterré mi rostro en el pecho de mi novio.
Edward 1. Rosalie 2.
- Párale a tu BMW… – Siseo Edward mandándole una mirada envenenada.
- ¡Ha! BMW ¿Le entendieron? – Emmett estallo en carcajadas - ¡BMW! ¡Edward se lo dijo sabiendo que ella manejaba uno de esos! ¡Estuvo buena! ¿Le entendieron? – Perplejos nos lo quedamos mirando.
- Ese era el punto grandulón – Susurro Jasper, chocando la palma de su mano, en su frente.
- Paciencia dios... ¿Es mucho lo que pido? – La escena melodramática de Alice había dado inicio.
- Sera mejor dejar las experiencias sexuales de todos por un lado – Asentí estando de acuerdo con Jasper. Pero como terminando el descanso de esta pelea, Rosalie volvió a su ataque.
- ¿Te molesta saber que no atiendes del todo a Bella? –Me dedico una mirada triunfante – Puedes protegerla pero no darle lo que ella mas quiere.
- No te metas donde no te llaman – Escuche gruñir por lo bajo a Edward, lo que me llevo a apretar mas fuerte nuestro agarre en las manos. Varias veces había abierto mi boca para formular mi pase de entrada en la lucha, pero hasta ahora no conseguía nada que decir.
- Yo puedo decir lo que quiera, tu no me mandas Eddie – Mire mi reloj. Lo que menos quería, era que Carlisle tomara medidas drásticas para calmar a esta familia.
- Las clases van a comenzar, paren por favor – Todos me observaron detenidamente al ver que por primera vez decía algo al respecto. Los mire suplicante, había observado como los alumnos se amontonaban alrededor de nosotros, para investigar qué era lo que sucedía con típica loca familia Cullen.
- Claro cielo – Sonreí al ver que el Edward que conocía volvía a ser el de siempre, cariñoso me paso su mano por mi cintura y dimos paso a nuestro camino a clases.
- O puedes atender tu bipolaridad Edward, ese si es un caso perdido – Me arme de valor para aguantar después de mi no tan agradable comentario, su mirada enfurecida. Decidida a contestarle, encare a Rosalie. Pero el gritito de Alice, me impidió hacerlo.
- ¡Vamos de compras! – Edward la miro con una ceja alzada, Emmett soltó su estruendosa carcajada, Rosalie negó suavemente con su cabeza, Jasper nos pidió disculpas con la mirada y yo solamente me dedique a no perder la poca paciencia que me quedaba por ahora.
- Realmente está loca – No di comentarios al respecto, pero me puse del lado de Edward, Alice era un caso perdido en estas situaciones.
- Esta familia está muy mal – Dijo Jasper, mandándonos una ola de paz y pura tranquilidad.
- ¡Eres un sentimentalista! – Le grito Emmett casi arrancándose sus cabellos de encima. El que Jasper controlara sus sentimientos y más cuando se preparaban el y Rosalie para su sesión de "Actividades sexuales productivas" lo odiaba.
- ¡No es mi culpa! – Se defendió – ¡Qué me dices por hacer cuando toda mi familia se ataca los unos a los otros! – Y en menos de dos segundos, el pasillo donde nos encontrábamos quedo completamente en silencio. A mi derecha las personas dieron paso a una persona.
- ¡La función se acabo! – La enojada presencia del director se hizo presente, ahuyentando a los demás alumnos que chispeaban de alegría al vernos pelear - ¿Qué está pasando aquí jóvenes? – Nos pregunto frunciendo el seño.
- Nada director, nos dirigíamos a nuestras clases – El asintió no muy convencido a la breve explicación de Edward. Nos analizó con la mirada y aparento tener toda la calma del mundo.
- Debo de hacer algo al respecto, la escuela se está saliendo de control – Susurro para sí mismo - ¡Jóvenes dejen de golpearse! ¡Tú, deja de golpearlo o lo dejaras sin hijos! – Grito dirigiéndose hacia otros dos estudiantes que se agarraban a golpes, mientras rodaban por todo el largo pasillo.
-Nos vemos en la hora del almuerzo – Todos asentimos estando de acuerdo. Había sido una larga batalla a estas horas de la mañana y ahora me encontraba exhausta, sabiendo el día ni siquiera había comenzado.
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- ¿Cuánto falta Edward? – Llevaba formulando aquella inservible pregunta los últimos quince minutos. Lamentablemente la suerte no estaba de mi lado y ahora presenciaba una larga explicación de los átomos de quien sabe que.
- Tranquila Bella, no falta mucho – Me respondió para luego situar su vista en la ventana de nuevo sumido en sus pensamientos. Decidí imitarlo.
No lo soportaba, sabía que Alice escondía algo es su macabra cabeza y eso sin lugar a dudas me asustaba. En el almuerzo se encontraba feliz de la vida y sumida en sus pensamientos - sin contar las visiones y su mente bloqueada hacia Edward - dando solo como respuesta: "¡Como amo al director!" o "Este será un día fantástico"
Decidí dejar desesperadamente pasar las manecillas del reloj y me concentre en todos los problemas que me invadían en estos momentos. Como por ejemplo: Los problemas en casa de los Cullen no habían mejorado, y mucho menos en la escuela, esta había sido la temporada de peleas, conflictos, golpes, problemas familiares y mucho más, afectándonos a todos.
Las últimas semanas hubo más de diez heridos y recuerdo la enfermería abarrotada de estudiantes golpeados, sin contar la pelea de Mike con el profesor de Biología, a lo cual había estado en primera fila.
- ¿Cuándo falta Edward? – Lo vi suspirar a mi lado.
- ¿No lo dejaras pasar verdad? – Me conocía tan bien, para saber que no lo dejaría.
- Al parecer no – Me encogí de hombros, respondiendo a su sonrisa, sentí sus labios en mi coronilla.
- En 5… 4… 3… 2… 1… - El timbre sonó.
- ¿Me dirás que Alice compartió su don contigo? – Bromee sacando otra perfecta sonrisa en su rostro, mientras sostenía nuestros bolsos en su mano izquierda y con la otra me acercaba a él para encaminarnos fuera del aula.
- Compartiría mi don contigo si pudiera amor – Recargue mi cabeza en su pecho aspirando su dulce aroma, parándome de puntitas le bese la nariz.
Eran estos momentos lo que siempre quería grabar en mi mente, y guardarlos con candado, para abrirlos cuando se me antojase, disfrutando de la fortuna que la vida me había dado al tenerlo a mi lado.
- Me alegra oír eso… - No pude terminar de articular mi siguiente palabra, lo sentí tensarse a mi lado y ambos paramos de caminar - ¿Qué pasa? – Pregunte realmente confundida.
- Alice nos tiene una sorpresita – Gemí instantáneamente.
- Me es difícil contradecirte en esto, pero sabía que esto ocurriría – Los dos asentimos.
- Tranquila, no dejare que sobrepase los limites – Vi la nueva ruta a la que nos dirigíamos, la cual no era hacia la salida.
– ¿Tengo que preguntar el camino?
- Escucha y veras – Había abierto la boca para reclamar a su confusa definición, pero el altavoz de la escuela me detuvo en el intento.
- Bueno probando… 1… 2… 3 ¿Me escuchan? ¿Hola?¿Este inservible aparato sirve? – Identifique la voz del director Johnson probando el micrófono, sacando burlas y risas de todos los alumnos que lo escuchaban.
- ¡Director esta al aire! – Ese era el desesperado Sr. Banner.
- ¿Esto sirve entonces? ¿Me escuchan? – De nuevo el director.
- ¡Los están escuchando director! – La nueva desesperada voz del Sr. Mason sonó por el altavoz -¡Hable ahor…. Auch! – Luego se escucharon cristales caer al suelo haciéndose añicos.
- Y aquí vamos – Susurro Edward.
- Alumnos – Se aclaro la garganta – Luego de escuchar como el Sr. Mason sufría de una caída severamente fuerte, me es invaluable decirles un anuncio de última hora. Como director de esta institución – Edward rodo los ojos – Quiero situar a los alumnos de últimos grados, que me honren con su presencia en el auditorio ahora – Escuche vario abucheos - ¡Sin quejas! Les tengo que informar rápidamente de este proyecto en que nos hemos sometido y necesito su asistencia inmediatamente. Los veo en diez minutos.
Al momento en que corto la línea, todos los alumnos de últimos grados, desanimados, se comenzaron a dirigir al auditorio. Incluyéndonos.
- ¿Pregunto la razón? – Cuestione mirándolo a los ojos.
- No querrás saberlo – Acercándose a mi oído me dijo – Alice realmente se ha salido de control al ocultarnos semejante brutalidad.
- Oh – Fue la única palabra que pude articular ante sus palabras. ¿Realmente esto era tan grave?
-¡Sera mejor caminar para agarrar buenos asientos! – Me trate de esconder colocándome detrás de Edward para que su figura tapase la mia, sabiendo por sus grititos, quien se dirigía hacia nosotros.
- Te ha visto – Suspire ante el aviso de Edward.
- Gracias pero ¿Qué perdía al intentarlo? – Cuestione.
- Que cosa no perdías al intentarlo – Se burlo de mi, besando mi frente tiernamente.
- ¡Isabella Marie Swan… Futura Cullen! – Grito a los cuatro vientos - ¡Como osas esconderte de mua… Alice alias Cuñis! – Me recrimino, fingiendo lagrimas de cocodrilo. Y aquí vamos....
- Fue culpa mia – Mire hacia Edward quien me guiño un ojo – No queremos que Be…
- Como sea, quiero entrar de una vez – Interrumpió Rosalie.
- ¿Celosa? Si te enojas te arrugas – Alice dejo escapar una risita, ante el comentario de Edward.
Edward 2. Rosalie 2.
- Bueno, bueno, menos charla y más acción – Fuimos empujados por Emmett hasta la entrada del auditorio, que en su mayoría se encontraba abarrotado de todos los nerviosos estudiantes de últimos grados.
- ¿De qué se trata esto? – Pregunto Rosalie con una mueca en su rostro.
- Se los contaran, si nos sentamos – Seguimos a Alice hacia los asientos de primera fila, mientras observábamos a todos los maestros y director, colocándose en sus respectivos asientos.
- Jóvenes… Jóvenes… ¡Jóvenes presten atención! – El grito del Sr. Banner nos hizo callar a todos – Ahora que si me escuchan, necesitamos aclarar un proyecto que está a punto de comenzar.
Voltie para mirar a mí alrededor, observando como todos los alumnos prestaban toda su atención a lo que a continuación el profesor iba a declarar. Esto prometía ser muy entretenido.
- La escuela está sometida a una época de todos los problemas, ocasionando peleas, golpes y bastante desorden en las clases – Nos miro desaprobatoriamente – Y estamos sometidos a dos semanas de "Operación SP"
- ¡Y qué diablos es eso! – Grito un chico a nuestras espaldas.
- Operación Solución a Problemas – Aclaro – No queremos ver uno más de sus escándalos y todos aquí estamos de acuerdo con eso. Asi que desde ahora deberán actuar como se debe.
- ¿Cómo se supone que deberé actuar yo? – Pregunto Mike a Jessica, quienes se encontraban a nuestro lado.
- Deberás comportarte como hombre, no animal – Me tape la boca ahogando una risita que luchaba por escapar. Mirando como Mike nos miraba confundido sin saber lo que decían de él, Emmett sonreía ente su triunfo.
- Daremos ejemplos a como se deberán comportar las siguientes dos semanas ¿Hay algunos voluntarios? – Pregunto fulminándonos con los ojos – No se peleen jóvenes… Por lo que veo, tendrán que ser elegidos a la fuerza ¿Eso quieren? Eso tendrán.
Me quede de piedra en mi lugar, con mi súper suerte que siempre me seguía, tenía el presentimiento que dentro de un minuto seria yo quien me encontraría parada enfrente de todos junto con el Sr. Banner y los demás profesores.
- No te dejare sola en ningún momento – El susurro de Edward me helo la sangre, sintiendo como su mano derecha se posaba en mis hombros y cubría mi rostro lo mas que podía en su pecho, supe que yo sería la desafortunada elegida.
- Señorita Swan ¿Por qué se esconde? – Cerré mis ojos a más no poder y me prepare para lo que ahora vendría – Creo que usted será la afortunada en pasar.
¡Al demonio lo afortunada que sea!
- Profesor Banner, pasare junto con Bella, no se encuentra bien del todo – Me calme al saber que Edward estaría siempre a mi lado, era afortunada en tenerlo y eso me reconfortaba un poco.
- Como usted decida Sr. Cullen, pero si usted pasa, toda su familia lo hará – Todo mundo nos observaba atentos y curiosos al oír las palabras de Sr. Mason.
- Dijeron mi nombre, seré yo la que… - Me interrumpió.
- Te dije que nunca te dejaría sola y esta no es la excepción – Estuve a punto de que las lagrimas salieran de mis ojos inundando todo el auditorio en segundos. El escuchar de Edward esas palabras, era una de las tantas cosas a su favor por la que lo amaba.
Mire a Alice quien se había parado junto con Jasper y me dedicaban una sonrisa en apoyo. Emmett se lo llevaría todo a juego, asi que esto era diversión al máximo para él y Rosalie… Ella solamente se encontraba seria en su lugar.
- ¿Van a pasar todos? – Nos pregunto el director y asentimos.
- Respira Bella – Me gire para mirar a Edward y sonreí al sentir sus labios en mi mejilla -Saldremos vivos de esta – Me aseguro.
- Gracias – Susurre apenada.
- Creemos haber visto las frecuentes peleas de la familia Cullen y por eso creo que será un buen ejemplo para todos ustedes – Traque saliva en seco al observar la malévola sonrisa del Sr. Banner. Esto no estaría bien – Quiero que todos ustedes me digan sus problemas jóvenes.
- ¿Problemas? – Pregunto Emmett – Nosotros no tenemos uno como esos ¿Nos podrá dar alguna referencia? – Las risas se desataron en el lugar.
- No me venga con juegos Sr. Cullen… Uno de sus problemas, son sus jueguitos sexuales con su novia –Dirigí mí vista a Emmett y Rosalie, quienes se miraba el uno al otro llevándose a la tumba su más intimo secreto, el cual ahora, estaba siendo publicado.
- Escucha la respuesta de nuestro grandulón – Me comento Edward disfrutando la situación.
- ¡Eso no es un problema! – Grito Emmett - ¡Que usted ya no tenga vida sexual, no significa que moleste a los demás con eso! – En ese momento no lo aguante más y me largue a reír, lo que ocasiono que todo el auditorio lo hiciera por segunda ocasión. Las elocuencias que Emmett contestaba en apuros, hacia que solo fuese una pequeña charla de nada.
- ¡¿Qué?! – Mire al profesor que ahora se abanicaba con sus manos y se encontraba completamente rojo de vergüenza.
- Bien hecho Emmy – Lo felicito Rosalie.
- ¡Ustedes dos no podrán seguir con sus locos jueguitos por las dos siguientes semanas que vienen! – Reclamo el Sr. Mason.
- ¡Usted no puede hacer eso! ¡Que se cree! ¡Llamare a las autoridades y…!
-Señorita Hale, tendrá que hacer caso a nuestras ordenes, si no quiere que llamemos a su tutor – La furiosa mirada de Rosalie nos hizo saber que ya tramaba la muerte del profesor Mason y Emmett, quien le rogaba al director en el suelo, le iba a ayudar.
- Pobre Sr. Mason – Le susurre a Edward, quien asintió.
- Sera mejor escuchar los problemas de los demás – Hablo nervioso el director Johnson, al momento que se secaba la cara con una pañoleta – La escuchamos señorita Cullen – Se dirigió hacia a Alice.
- Yo soy inmune a los problemas director – La voz dulce de Alice sonó por todo el lugar – No es mi culpa ser perfecta…
- Su problema director, son las compras.
- ¡Eso no es cierto Edward Cullen! – Chillo - ¡El comprar no está prohibido para una persona como yo!
- Comprar, no vivir en el centro comercial Alice – Mi novio se encogió de hombros.
- ¡No seas un mentiroso! ¡Yo no vivo en el centro comercial! Solo de martes a domingo – Nos sonrió tímidamente
- Usted no lo podrá hacer por dos semanas jovencita – Jasper la tuvo que sostener antes de que ella se le tirase encima al director, teniendo como objetivo torturarlo, que digo, desaparecerlo de la faz de la tierra.
- ¡No lo haré! ¡Mis tarjetas de crédito nacieron para ser usadas por mí! ¡Por mi! – Sonreí al presenciar la escena cómica que Alice y Jasper protagonizaban. El la sostenía por la cintura mientras que ella paleteaba y lanzaba puñetazos al aire pareciendo una niña de cinco años.
-Mandaremos a cancelar todas sus tarjetas de crédito por todo este tiempo y se mantendrá alejada del centro comercial a más de diez metros – Me imagine a Alice llevando a cabo tal orden, cosa que me era imposible creer.
- ¡No lo hare, como que me llamo Alice Cullen! ¡¿Qué se cree usted?! ¿El rey del mambo? ¡Déjeme decirle que está muy equivocado! – Bufo cruzándose de brazos.
- ¿Y usted Señorita Swan? – Mi sonrisa de borro de mi rostro y creí haberme puesto más pálida de lo común al escuchar mi apellido - Sus problemas.
Mierda.
- Pues mis problemas son… Yo… Este – Juguetee con mis sudorosas manos.
- Sus problemas son que se tropieza con cualquier parte plana en la que camina – Deje de respirar al escuchar la acida voz de Rosalie contestar por mí. La mire, estaba furiosa y ahora no me iba a dejar.
- ¡Como te atreves! – Le reproche – El que me tropiece con cualquier cosa, no te incumbe, asi que mejor metete en tus problemas güera – Mi respiración era agitada, pero la logre calmar. El lugar era completo silencio y ahí caí en la cuenta que era el centro de todas las miradas y murmullos ahora. Aparentemente me había dejado llevar por mis instintos, y ahora le tocaba a Edward consolarme.
- Ejem – Dirigí mi vista al director – Luego de su revelación, quiero decir que su novio Edward tendrá que liderar para que usted no se caiga las últimas dos semanas.
- Como si no lo hiciese siempre – Susurro Emmett.
- Y aparte Señorita Swan, quiero que se comprometa a mantener una buena amistad con la Señorita Hale – Abrí los ojos como plato y si no fuera por el agarre de Edward, me hubiera caído de toda la maldita impresión que me dejo el Sr. Banner.
- ¡¿Qué?! – Gritamos ambas a todo pulmón.
- ¡Que cuerdas vocales mujer! – Omití el estúpido comentario de Mike.
- Como lo escucharon señoritas, al final de las dos semanas me traerán un resumen de todas las actividades que hicieron juntas – Negué con la cabeza tan rápido, que pensé que me saldría volando en cualquier momento.
- ¡Yo no conviviré con ella! ¡Le mandare a mi abogado y… y… y lo meterá a la cárcel! – Por primera y última vez en toda mi vida, estaba de acuerdo con Rosalie.
- ¡No lo hare! ¡Podre caminar lo más despacio para no caerme… pero esto! – Reprochaba una y otra vez. ¡Santo cielos! Es que el director se había vuelto completamente loco, si supiera que está hablando nada más y nada menos que con unos vampiros. ¡Ja!
- Bella, Bella contrólate y hazlo solo por mi – Me calme sabiendo que terminaría por hacerlo solo por Edward me lo pedía.
- ¿Me darás mi recompensa? – Pregunte sonriendo.
- Claro preciosa.
- Sr. Cullen, llego la hora de su turno – La mayoría de las chicas suspiraron al saber que revelaría sus mas íntimos problemas.
- Mi bipolaridad – Encogiéndose de hombros, lo acepto.
- ¡Edward Cullen sufre de bipolaridad! ¡Qué sexi! – Aparentemente su club de fans tomaba fotos a diestra y siniestras, los hombres vitoreaban al saber que él no era perfecto después de todo.
-¡Bipolaridad! ¡Este hombre no satisface del todo a su novia! – Abrí mi boca solo del asombro.
Edward 2. Rosalie 3.
- Rosalie mejor metete en tus problemas – Jale a Edward del brazo, para que no comenzara una nueva batalla entre él y su hermana.
- Creo que esto se está saliendo de control – Vi al director, pasarse de nuevo su pañoleta por toda su cara - Sabrá Sr. Cullen que deberá hacerse cargo de ello ¿Verdad?
- Si director.
- ¿Y qué hay usted Sr. Hale? – Suspire sabiendo que lo peor había pasado y les desee todas mis suertes a Jasper que parecía una estatua viviente en su lugar.
- ¡El se mete en los sentimientos de los demás! – Grito Emmett en su contra, señalándolo con el dedo.
- ¡Eso no es verdad Emmett! ¡Y deja ya de sentirte frustrado de una vez! – Despegue mi rostro del pecho de mi novio, para mirar a la mayoría de los alumnos comer palomitas como si de una película se tratase, y Jasper con Emmett, atacándose mutuamente.
- ¡Ves cono sientes lo que yo siento! ¡El tener tu don de vam…! – Alice se le tiro encima a Emmett, colgándose por su espalda y tapándole la boca a tiempo, antes de cometiera otra de sus estupideces.
- ¡Emmett Cullen! – Lo regaño Rosalie - ¡Eres un completo idiota!
- Lo lamento amor, pero es que este sufrido me saca de mis casillas – Se excuso.
- ¡Cálmense jóvenes! – El Sr. Mason, con sus dos brazos al aire, trato de apaciguar la situación - Dos mio santo ¿Qué pasa con ustedes?
- Somos únicos directorcito – Alice suspiro tiernamente, dando su mejor sonrisa.
- Ya vemos sus problemas Sr. Hale. Usted tendrá que dejar de meterse en los sentimientos de los demás – Dijo el Sr. Banner.
- No creo que Jasper sea capaz de eso director – Dije, tratando de sonar calmada.
- ¿Por qué? – Me pregunto el profesor confundido.
- Es algo que no puedo dejar de hacer – Mire a Jasper, que sostenía fuertemente la mano de Alice y suspiraba una y otra vez.
- Lo tendrá que hacer por el bien de todos los aquí presentes – Jasper termino rendido y asintió - ¡Los demás actuaran a lo contrario a como lo han hecho las semanas pasadas!
- ¿Ósea que me portare cono un hombre no animal? – Pregunto Mike sobándose la barbilla en modo pensativo.
- Y Rosalie se comportara como la güera que se tiño el cabello de rubio ¿Verdad?
Edward 3. Rosalie 3.
Luego del comentario de Edward a una furiosa Rosalie, quien fue agarrada por Emmett, quien le seguía reprochando a Jasper y este último sujetaba bien fuerte la mano de Alice, y ella me pedía ir de compras, mientras yo abrazada a Edward y fingía no estar escuchándola.
Comenzamos a caminar hacia la salida.
Al menos esto había sido un fuerte y duro empate entre Edward y Rosalie.
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Espero que el primer capitulo les haya gustado mucho, la verdad creo que estaré actualizando seguido, eso espero, mientras mis exámenes no me acaben mi poco tiempo que tengo.
Cuídense mucho
¡DEJEN SUS REVIEWS!
Atte. Yess Twilight Cullen
XOXO.!*