Explicación: Bien, esta será una colección de 100 Drabble's KibaIno. Si querido lector, no estas mal de la vista ni debes ir al oculista: ¡100 Drabbles KibaIno! Es un reto propuesto por mi mejor amigo, tras una extraña platica donde terminó diciendo "…si pudiste aumentar las paginas de GaaMatsu… ¿Por qué no lo intentas con él KibaIno?" Y bien, aquí esta el resultado. La pareja es inusual, si, pero me gusta hasta la medula. Diré que la colección puede traer cualquier clase de advertencias que daré al inicio de la historia en cada caso.
Disclaimer: Kiba, Ino y todos los personajes de Naruto son propiedad de Masashi Kishimoto.
Dedicado: A los pocos y fieles fans de esta pareja.
Colección 100 Drabbles KibaIno
Título: · Genio ·
Drabble #: 2
Pareja(s): KibaIno
Advertencias: Ninguna.
· Genio ·
La miró con cuidado, mientras apretaba la boca y hacia chirriar sus dientes. Frunció aun más el ceño, al tiempo que la ira subía por su cuerpo, en forma de una caliente y espumeante ola. Tenía tantas ganas de gritar, correr, aullar o hacer desaparecer la molestia de alguna forma. Quizás más tarde golpearía a Naruto sin razón alguna…claro que a Hinata eso no le agradaría, pero era preferible golpear al Uzumaki que a la rubia frente a él.
La escuchó susurrar algo por lo bajo, mientras sus finos labios se abrían y cerraban a gran rapidez.
— ¿Qué dices? —reclamó saber, en tono agresivo.
Ella se cruzó de brazos y se recostó contra el mostrador a su lado.
—Idiota —repitió, en tono alto y claro para que fuese escuchada.
Y si, cuando creía que la ira no podría aumentar sus dimensiones dentro de su cuerpo ella aparece con aquel lindo comentario, logrando que su rostro enrojeciera de ira.
—Jah —se burló, mientras sonreía de medio lado—. Mira quien lo dice…rubia histérica.
Pudo ver a la mujer abrir los ojos, enfurecida. Bien, al menos ya estaban jugando parejo.
Ino mordió sus labios con fuerza, evitando gritarle. Que molesto podía ser el idiota de Kiba Inuzuka, además de ser un completo desvergonzado. Si a duras penas intercambiaban palabra, ¿con que cara la insultaba de ese modo?
Bien, bien. Ella tenía que calmarse y conservar los estribos, después de todo, él era un cliente ¿no?
—Dime…que…necesitas…—soltó, entre dientes, haciendo un esfuerzo sobre humado para no sacarlo de una buena patada en el trasero del local de su familia.
—Ya te dije…quiere un ramo de flores —repitió Kiba, en tono altivo.
— ¿Cómo sea?
—Como sea —dijo, encogiéndose de hombros.
La rubia desapareció unos segundos tras una puerta al final del local, y regresó con los brazos repletos de distintas flores. Las colocó sobre el local y empezó a arreglarlas.
—Si todo hubiese sido así desde el inicio —se lamentó el Inuzuka—. Pero no, la rubia histérica quería saber para quien eran las flores…
— ¡Cállate! —gritó, arrojándole un cuaderno donde anotaba las cuentas y pedidos del local.
Cuaderno que Kiba esquivo con suma facilidad.
La Yamanaka siguió con los suyo, esperando que al estar tras una pila de distintas rosas el Inuzuka no notara su sonrojo. No sabia bien porque, pero sentía una inmensa curiosidad por saber para quien era el ramo que hacia.
—Bien, aquí tienes —soltó, entregándole el arreglo quince minutos después.
Kiba simplemente asintió, pagó y salió del local con Akamaru pisándole los talones. Unos pasos más allá se permitió sonreír abiertamente.
¿Qué pasaría si Ino se enterara que solo había entrado a comprar rosas para hablar con ella un rato?
Jamás pensó que la rubia terminaría teniendo arranques de celos en medio de la compra.
La verdad, le encantaba hacer rabiar a Ino. La rubia se traía un humor de perros y a él le gustaba lidiarlo.
Nota: ¡Otro, otro! Espero que alguien los lea, de lo contrario, le estoy hablando a nadie (?)