HE VUELTO!!!

Explicaciones al final del capítulo.

Nada de esto me pertenece, todo es de Meyer.

Capítulo Cinco

La familia

La familia es el primer eslabón que uno tiene desde el momento en el que nace. Es tu cable a tierra, con quienes compartes todas tus aventuras y descubrimiento… Cuando era niña, no entendía muy bien, porqué la familia se reunía para los feriados… para mí era un día más de estar en familia… No fue hasta que deje a mi familia y comencé a forjar un futuro por mi propia cuenta, que me di cuenta, lo maravilloso que es poder volver a tu núcleo familiar, poder volver a donde sabes siempre estarán ahí para ti.

Muchas veces en estos arduos años de universidad, tuve que perderme actos importantes, en pos de tener un futuro, para poder mirar atrás y decir que todo lo sufrido y trabajado, valió la pena… Aún cuando eso signifique dejar de lado a tu familia. Eso no significa que los deje de amar… de hecho, se llegan a apreciar más los momentos en los que de hecho, puedes estar en familia.

Por eso cuando Jake me llamó para decirme que habría reunión de primos y que esperaba que fuera, acepte.

- Bella, apresúrate, Emmett está terminando de meter las maletas en el auto. ¿Dónde están las tuyas?- Alice entró y comenzó a tomar mis maletas. Me apresuré a ayudarle.

- Tranquila Alice. Vamos a llegar con tiempo de sobra.- Alice y Edward estaban invitados. Ellos eran tan primos de Jacob como yo lo era, y él los invitó. Alice llevaría a Jasper, Emmett a Rosalie y yo a Mark, mis familiares, especialmente mi padre, querían conocerlo.

- Cuando llegamos abajo, me acerqué a ayudar. Ya estaban todos allí. Menos Edward.

- ¿Dónde está Edward?- pregunté a Alice.

- Oh, pensé que lo sabías, dijo que no podría ir.

- ¿Enserio?, ¿te dijo por qué?

- No. Bueno, mencionó algo de un ensayo, sabes que no entiendo su lenguaje.- reí suavemente, y le avisé a mi hermano que iría a despedirme de Edward, él asintió.

- ¿Quieres que te acompañe?- me preguntó Mark. Me acerqué a él y le besé suavemente.

- No gracias, te prometo no demoraré.

La puerta de Edward estaba cerrada con llave, pero no me importó, yo tenía llave de su pieza, así como él tenía de la mía. Entré temerosa. No quería encontrarlo en alguna situación comprometedora. Pero no estaba a la vista. Se escuchaba de fondo el ruido de la ducha. Abrí la puerta del baño, me quedé en el dintel y le dije:

- Vine a despedirme, no me dijiste que te quedarías.- no miraba a la ducha, sino al lava manos. Escuché como se descorría levemente la cortina de baño.

- Lo siento Bella, te llamé anoche para avisarte pero tu celular sonaba ocupado, así que le avisé a Alice, para que te lo dijera.

- Está bien, no estoy enojada. ¿Por qué razón debes quedarte?

- Estamos en semana final de ensayos para el festival de primavera, tu sabes lo nervioso que me pongo si falto a los ensayos finales y bueno, sabes que de poder ir yo sería el primero en estar allá, además…- le interrumpí.

- No te preocupes Edward, de verdad, solo quería saber que decirle a Jacob, además quería despedirme. Pasa un lindo fin de semana largo.- dije sonriendo suavemente, aún sin mirarlo.

- Tú también Bella.- me di media vuelta para irme, pero me detuvo su voz- ¿no beso y abrazo de despedida?

- Edward- le reclamé suavemente.- me vas a mojar.

- Solo bromeaba Bella- lo miré por fin, y vi que solo salía su cabeza mojada de la cortina. Su cabello estaba deliciosamente pegado a su cara. Espanté los pensamientos de inmediato.- cuídate mucho.

- Tu también. Besos para todos.

El trayecto a casa de Charlie, fue tranquilo. No estaba realmente entusiasmada por ir a Forks, todos sabían de mi aversión con la lluvia, pero haría mi mayor esfuerzo, por que hacía casi dos años que no veía a mi padre, y realmente lo extrañaba.

Una vez allí. Me reencontré con todos mis primos. No los veía desde las vacaciones y los extrañaba muchísimo. Éramos casi hermanos entre todos. Pero había pasado mucho tiempo desde la última vez que nos juntáramos todos, que habían muchas cosas que poner al día.

Al llegar a casa, lo primero que hice, fue dirigirme a la cocina, donde sabía estaría Emily, la novia de Sam desde que podía recordarlo, ella era una excelente cocinera, y me encantaba poder ayudarla en ese aspecto, pues sabía que mi padre amaba la comida que yo preparaba.

- ¡Bella! ¿Cómo estás? Tanto tiempo ha pasado desde la última vez que nos hemos visto.- me dijo abrazándome suavemente.

- ¡Emily! ¿Cómo has estado?- le pregunte de vuelta, ella se limpió las manos con un trapo antes de sacarse los guantes con los que estaba cocinando y mostrarme su mano. Me impresioné de ver un hermoso anillo rodeando su dedo anular. Tomé su mano para verlo más de cerca.- ¿cuándo ocurrió?

- La semana pasada, era la celebración de los cinco años de noviazgo y estábamos en el jardín de la casa mirando las estrellas, derepente pasa una estrella fugaz y le digo, pide un deseo, él cierra los ojos y lo imito, al abrirlos, veo que Sam tiene algo entre sus manos. Me levanto para verlo bien y me pregunta… fue muy romántico.

- ¡Felicitaciones!- le dije extasiada, la verdad no me sorprendía demasiado, era bastante evidente que ellos dos iban a terminar viviendo para siempre juntos. Jake solía bromear diciendo que Emily parecía el universo de Sam, por como él lo miraba, y estaba segura que Emily también pensaba de la misma manera.

- ¿Le contaste ya? ¿no hay felicitaciones para mí?- Sam dijo apareciendo desde el jardín acarreando una pila de ramas para mantener la chimenea encendida.

- Felicitaciones.- le dije sonriéndole cálidamente y abrazándolo ligeramente. Luego recordé que venía con Mark, quien probablemente estaba completamente incómodo entre desconocidos.- ¡Mark! ¡Ven para que te presente!- Escuché sus pasos tras mi, y le sonreí.- Emily, este es Mark, mi novio.

- Mark, mucho gusto, es un placer tenerte aquí.- dijo suavemente.

- No, el placer es mío por haber sido invitado.- Dijo Mark besando suavemente la mejilla de Emily.

- Ven, quiero presentarme ante mi padre y mis otros primos.- el dije arrastrándolo hacia el living, donde estaba todo el mundo, me sorprendió ver a Ángela, pero luego miré a Jake y reí felizmente.- Mark, este es mi padre Charlie, papá mi novio- ellos estrecharon manos y mi padre me besó suavemente la frente.- Mark, ya conoces a Jake- ambos estrecharon las manos.

- Ella es mi novia Ángela- dijo Jacob felizmente, abrazándola por la cintura.

- ¡Más te vale que la trates bien!- le advertí mientras abrazaba fuertemente a Ángela. Luego me dirigí a mi primo pequeño, Seth, quién, por cierto, de pequeño ya no tenía nada, era ahora todo un adolescente de quince años.- Mark, él es Seth, el hermano pequeño de Sam- ambos estrecharon mano, mientras yo revolvía su cabello. Me miró irritadamente para luego sonreírme y abrazarme. Solía cuidar de él cuando era más pequeño y yo lo veía como mi propio hermano pequeño.- ¿Dónde está Leah?- le pregunté.

- No vendrá, está muy ocupada con su nueva vida de novia, se fue a la casa de su novio.- dijo Seth.

- Muy bien gente, los quiero a todos listos para la cena en cinco minutos, todos los que no estén aquí para esa hora, no recibirán alimento, no lo volveré a repetir- dijo Emily con voz enérgica, aún cuando estaba llena de dulzura, como todo ella.

La cena estuvo llena de recuerdos y anécdotas, me divertí como hacía tiempo no lo hacía, riéndome de todas las historias ridículas que Sam contaba de Jacob. Me encontraba sentada entre Alice y Mark. Alice conversaba con Emily y mi padre, mientras que Mark tenía una charla con Seth sobre fútbol, junto a Emmett. Las cosas iban bastante bien, Mark parecía estar muy cómodo y la familia se había adaptado a él, simplemente aceptándolo, tal como lo hicieron con Rosalie y Jasper, y Alice y Edward, años atrás. Amaba mi familia por eso, eran sin lugar a dudas, las personas más cariñosas que existen en el mundo.

La tarde se sucedió tranquila y apacible, fue bastante relajante poder disfrutar de la paz que proporciona la familia y las cosas cotidianas.

Por la tarde nos sentamos frente a la chimenea de los Black, con chocolate en mano para conversar y reírnos. Seth le propuso a los chicos que fueran a la playa por la tarde y las mujeres aprovecharon de broncearse bajo el sol de la tarde.

Esa noche, escuchamos las viejas leyendas de la tribu mientras tomaban chocolate caliente. La voz del papa de Jacob calmaba hasta las más terribles bestias, así que bajo la luz de las estrellas y los resplandores de la fogata, todos fuimos quedando adormecidos. Tanto así, que al terminar la historia, todos en un silencio somnoliento y cómodo fuimos a nuestros respectivos dormitorios.

La "pieza" que nos tocaba con Mark, era el living, de hecho, debíamos dormir en el sofá cama, pues no había otra cama disponible, ni otra pieza. L casa estaba sobre copada. Pero mi a Mark ni a mí nos molestaba un par de días en el sofá-cama.

- tu familia es muy agradable- dijo Mark, en un susurro silencioso. De fondo podíamos oír como todos dormían, a lo lejos se escuchaba el aullar de algún lobo.

- Por supuesto que sí. – dije, orgullosa de mi familia. - Son los mejores. Hacía mucho que no podía verlos, es maravilloso saber de ellos y como ha proseguido su vida… cada uno de ellos, forman un pedacito de mi corazón.

- Todos parecen querer mucho a los Cullens.

- Si, somos amigos desde que tengo memoria y por lo tanto mi familia los conoce desde toda la vida… ellos, sienten esta su familia mucho más que la familia de Carlisle, su padre adoptivo.

- No sabía que eran adoptados- lo miré extrañada

- Edward y Alice son muy distintos físicamente.

- No todos los hermanos se parecen.

- Todos tienen algún rasgo en común, Ed y Alice son lo más opuesto que existe.

- Si tu lo dices cielo-algo en el tono de Mark me sorprendió.

- ¿Ocurre algo?

- Es solo que… nose, no me agrada Edward demasiado.

- Jajaja, curioso, él dijo lo mismo de ti, pero al igual que a él, te ignoraré.

- ¿Por qué le desagrado?- me preguntó estirándose ligeramente para alcanzar a mirarme. Yo estaba apoyada en su pecho.

- ¿Por la misma razón que tú? No se, no me interesan sus berrinches de niños pequeños. Hora de dormir- le dije acomodándome sobre su pecho y suspirando contenta. Sentí como me besaba suavemente en la cabeza y suspiraba.

- Buenas noches Bella.

La noche avanzó y yo no podía conciliar el sueño, escuchaba de fondo las respiraciones acompasadas de quienes dormían y el suave murmullo de las conversaciones de trasnoche.

De alguna manera, con Mark nos vimos inmersos en una, al parecer ninguno de los dos podía conciliar el sueño. Debía admitir que las palabras que compartíamos a mitad de noche, eran unas de las razones por las que pensaba que tal vez él podía ser el definitivo. Acurrucada como estaba junto a él, recibiendo su calor corporal, más el calor de la chimenea, me estaba llevando a un estado de feliz sopor, ahí decidí que podía vivir así de por vida.

- Me gusta este sillón, deberíamos tener uno en la casa… ya sabes para las visitas.- le dije mientras acariciaba ausentemente su pecho.

Había decidido hace poco que me iría a vivir con él, como me propuso. Era momento de que empezara a ver mi futuro, y Mark me aseguraba eso. Además, después de nuestra gran pelea, las cosas estaban mejor que nunca.

- Sí, es cómodo, pero la cama, debe ser mucho más grande.-

- ¿Por qué? Cabemos perfectamente aquí, no hay necesidad de más.

- ¿No hay necesidad de más?- me preguntó incrédulo-¿y las noches en las que queramos… más movimiento?

- Tendrás que ponerte encima de mí.- dije con una sonrisa traviesa. Él enarcó una ceja

- Déjame pensar… ¿de esta manera?- me preguntó mientras se posicionaba encima de mí, cuidando de no aplastarme. Besé sus labios suavemente y le dije:

- Justo así.

La mañana siguiente fue caótica. Muchas personas y pocos baños, la mayoría de los habitantes mujeres… pueden hacerse la imagen.

Luego el desayuno fue bastante 'sírvase-usted-mismo-lo-que-encuentre'. Conversábamos con Emmett y Jasper sobre ir a la playa antes del almuerzo, cuando entró Mark, quien fue, por sorteo, el último en la lista del baño.

- Bella, ¿podemos hablar?-me levanté extrañada y lo seguí. Fuimos hasta el patio y se volteó a mirarme… en su cara se veía la tristeza -absoluta reflejada. Por impulso lo abracé. Sin saber cómo o de qué consolarlo.

- ¿Qué pasó?- le pregunté suavemente, mientras acariciaba sus cabellos.

- Mi abuela murió anoche en su casa en Florida, en Palm Bay. Fue en un accidente de auto

Abrí la boca para decirle algo, pero no sabía que podría quitarle la pena. Lo abracé fuertemente y la susurré en el oído palabras de cariño y apoyo que esperaba ayudaran a calmarlo. Después de diez minutos de llanto, se separó de mí y me miró con sus ojos totalmente rojos.

- Tengo que ir para allá. Compraré pasajes para el próximo avión y me iré.. yo

- Voy contigo- le dije con suavidad, apretando su mano.

- ¿… estás segura?

- Sí, no voy a dejarte solo.

Si creía que la mañana había sido caótica… imagina armar la maleta, comprar pasajes y correr al aeropuerto en menos de una hora.

Mientras cargaba las maletas en el auto de Jacob, quien se ofreció a llevarnos, Alice me tomó de la mano y se acercó a hablarme.

- El domingo, mañana, es el festival de primavera de la universidad y Edward tendrá su primer solo en piano.- me informó. Mi cara se deformó. ¡El festival de primavera! Edward habló de él sin parar por semanas. Nunca alcanzaría a llegar de Florida a tiempo, y ni siquiera sabía a qué hora era el entierro o si era mañana…Cerré los ojos con impotencia.

- Tienes razón- dije con un susurro bajo.- lo había olvidado completamente, pero no puedo dejar a Mark. Edward entenderá. Es su primer solo, pero no el último, además lo he visto practicar tanto que creo que se me la canción de memoria- Alice esbozó una sonrisa nerviosa y luego asintió.

- Haces lo correcto. Ve con tu novio.

Las palabras de Alice retumbaron en mi cabeza, durante todo el viaje a Florida. Era la primera vez que no asistía a algún concierto o evento que incluyera a Edward. Era su fan número 1 y su mejor amiga. Pero Mark es mi novio y ahora me tocaba cuidarlo y confortarlo. Porque él es mi novio… no Edward.

Por alguna razón, eso ya no me molestaba tanto como antes.

Apreté la mano de Mark y apoyé mi cabeza en su hombro mientras esperaba que llegáramos a destino.

Continuará

SIII!!!!

Con un nuevo capítulo y muchas ganas de seguir con esta historia!!!

Un besito a todos aquellos que me dejaron comentarios mientras estaba en la U, lo aprecie muchísimo y fue una de las razones por las que volví!

Ahora. Las actualizaciones serán semanales, porq tengo tiempo!

Un beso a todos!!!

Especialmente a sirenita que siempre me estuvo apoyando. KISSES!