Hola a todos! He vuelto!!

Si, si, lo se, mis vacaciones fueron muy largas, pero bueno, he tenido que preparar una boda y he escrito otros fics, así que creo que se me perdona, no?

Bueno aquí les dejo con mi nueva historia que trata sobre Trunks y Pan.

Como siempre les recuerdo que yo veía la serie en Catalán, así que pueden encontrar cambios en algunas cosas. Pero creo que todo se entiende.

Que la disfruten!!

Anhelos de un guerrero

Con los ojos cerrados ella concentro toda su energía. Le encantaba aquella sensación, sentir todo su poder corriendo por su cuerpo, dominándolo.

Lo llevaba en la sangre, recorriendo su cuerpo, una necesidad que no podía controlar. La lucha era una forma de vida para ella. Le gustaba entrenarse, mientras revivía una y otra vez en su cabeza los días pasados con su abuelo Goku y con Trunks.

Habían pasado dos años desde entonces, ella había cambiado mucho, había crecido, pero aun así sentía que aquellos días habían sido los mejores de su vida. Pese a su triste final.

Había llorado durante mucho tiempo a su abuelo, pero los días siguieron pasando sin él y al final el dolor fue poco a poco desapareciendo de su corazón. Ahora él solo era un bonito recuerdo que llevaría siempre consigo.

Lo extraño era, que después de la muerte de su abuelo y el distanciamiento con Trunks, sus ansias por la lucha no habían echo más que aumentar. Tenía la necesidad de entrenarse diariamente, sentir su parte guerrera viva dentro de su pecho. Aunque siempre lo hacia sola.

La paz reinaba en la tierra y sus padres estaba siempre trabajando y casi parecían haber olvidado lo que fueron en antaño. Goten tampoco entrenaba demasiado y solo se dedicaba a salir con sus amigos. Bra había empezado al universidad y siempre estaba demasiado ocupada. Y Trunks... él siempre parecía ocupado en la Corp.Capsule. En realidad ella misma empezaría la Universidad en unos días. Aunque no por decisión propia, sino porque su padre había insistido muchísimo en ello.

Algunos días se concentraba en sentir sus energías y cuando las detectaba imaginaba que estarían haciendo en aquellos momentos. Pero al final siempre acababa por centrarse en una. Trunks. Él si se entrenaba, solía hacerlo de noche. Ha veces estaba tumbada en su cama, ya medio dormida cuando repentinamente sentía su ki elevarse.

Eso la hacia sonreír y no podía evitar imaginárselo. Su musculado cuerpo, su poder..., todo él. Pero por muchas veces que lo había pensado, nunca había salido a su encuentro.

Le gustaba mucho aquella idea. Entrenarse con el poderoso Trunks. Pero sobretodo... le encantaba la idea de volver a verle... después de un largo año. Saber, si aquel sentimiento que aun palpitaba en su corazón era solo un fugaz recuerdo de lo que sintió por él en el pasado o si en realidad aun seguía enamorada de el fuerte guerrero.

Pero nunca se atrevía y la vida de los guerreros z en tiempos de paz... era a veces aburrida.

Con aquellos pensamientos la energía que había brillado a su alrededor se disipo y dejo caer su cuerpo sobre la hierba dando seguidamente un largo suspiro.

Aquella noche, cuando entro en el comedor para cenar, vio que sus padres ya estaban sentados a la mesa.

- Hola.- Dijo sonriente.

- Pan. Has entrenado hoy también?- Le pregunto su padre.

- Así es. Por?

- Me pareció sentirte, eso es todo.

- Tu y yo deberíamos entrenar más.- Dijo Videl con animo.- Hace mucho tiempo que no lo hacemos, casi temo haberme olvidado de volar.

- Eso no se olvida.- Le dijo Gohan con una sonrisa en los labios.

- Yo no soy un guerrero del espacio con súper poderes. Acaso no recuerdas lo mucho que me costo aprender?

- Si, si lo recuerdo.- Dijo él frotándose la cabeza haciéndose el ingenuo.

- Fue papa quien te enseño a volar?- Le pregunto Pan emocionada.

- Así es. Me enseño a mi y a Goten al mismo tiempo, aunque Goten aprendió mucho más rápido que yo.

- No sabía concentrarse.- Dijo él divertido.- Pero lo hiciste muy bien.

- En realidad no quería enseñarme.- Dijo Videl mirando a su marido de reojo.- Pero yo era muy decidida. Quería ser como él, aunque por entonces poco me imaginaba yo de lo que era capaz tu padre.

- Eso paso antes de lo de Buu?

- Así es.- Dijo ella.

- Vaya! Que interesante tuvo que ser vuestra vida.- Dijo recostándose sobre la silla.- Yo me aburro tanto...

- Le enfrentamiento con Buu no fue algo divertido.- Le dijo Videl..- Nos gusta vivir en paz.

Pan suspiro ante eso.

- A mi también, es solo que me gustaría entrenar con alguien. Estoy segura de que si alguien me enseñara mejoraría mucho. Que me dices papa? Podrías ayudarme.

- No creo tener demasiado tiempo para ayudarte. Además no se me da nada bien enseñar. A la vista esta Goten.

- También es verdad. – Dijo ella lago desanimada.

- Los únicos que siguen entrenándose son Vegeta y Trunks. – Comento su padre poco después.- A Vegeta no te lo recomiendo. Además, seguro que se negaría y Trunks siempre esta tan ocupado como nosotros. Así que me temo que tendrás que hacerlo sola.

- Que fastidio.

- Mira el lado positivo, mi padre y Vegeta siempre se entrenaron por su cuenta. Nunca tuvieron a nadie que les enseñara. Aun eres joven.

- Si.- Dijo algo soñadora al recordar a su abuelo

- Esta bien que quieras entrenarte, pero no abandones tus estudios, de acuerdo?- Le dijo su madre.

- Claro que no.

Aquella noche algo le impidió dormir. En realidad llevaba varias noches en las que no podía dormir demasiado bien. Era extraño, porque se sentía nerviosa, aunque no tenía motivos para estarlo.

Era como si interiormente algo la agitar, pero no sabía lo que era. Que podía preocuparla en momentos tan tranquilos y pacíficos como aquellos?

Con un suspiro Pan recordó mentalmente la conversación que había tenido con su padre aquella noche.

"Mi padre y Vegeta siempre se entrenaron por su cuenta. Nunca tuvieron a nadie que les enseñara. Aun eres joven."

Desde luego las palabras de su padre la habían dado algo de esperanza a sus entrenamientos, pero estaba segura de que podría mejorar mucho con alguien que la enseñara.

Al fin y al cabo su padre llego a transformarse en súper guerrero con la ayuda de su padre, quien le enseño en la sala del tiempo. Incluso a Trunks le había ido enseñando su padre a entrenarse, aunque él y Goten lo consiguieron solos y al parecer ambos eran muy jóvenes. Porque ella con sus dieciocho años no había podido?

Acaso su sangre guerrera no era la suficiente?

Y si le pidiera a Vegeta que la entrenara? No, no, su padre había tenido razón, él no era el más oportuno y seguramente se negaría rotundamente. Y Trunks?

Seguramente él no se negaría, era demasiado bueno para negárselo, pero de igual forma era demasiado bueno como para entrenarla seriamente. Además... no quería ser una molestia para él y ocupar el poco tiempo que tuviera libre.

Dando un largo suspiro se movió incomoda en la cama, hasta que inesperadamente una sonrisa se dibujo en sus labios.

Trunks! Su energía pareció atravesar la distancia que les separaba.

Se levanto de la cama y abrió la ventana para mirar el oscuro cielo.

Como deseaba ir! Como deseaba verle!

Y porque no? No deseaba molestarle pero... solo una noche... solo una vez... el era su amigo! Era mucho más que un amigo! Estaba segura de que no se negaría y lo necesitaba tanto que...

No lo pensó más, se cambio de ropa y sin más salió por la ventana para alzar el vuelo.

...

Trunks concentraba toda su energía para poder empezar a entrenarse. Le encantaba ir a aquel lugar lejano de la cuidad y entrenarse duramente. Era extraño decirlo, pero aquello le relajaba. Algunas veces, aquello era lo único que le ayudaba a salir de la monotonía de la vida en la compañía de Corporación Cápsula Le recordaba quien era en realidad y lo hacia sentirse mejor.

Pero aunque a veces agradecía aquella soledad, otras se sentía realmente solo.

Pero no tenía otra opción. Entrenar con su padre resultaba casi siempre... demasiado complicado. Goten casi nunca lo hacia y si lo hacia no se lo tomaba demasiado en serio. Y Bra, ella estaba más interesada en la ropa que en el entrenamiento. Aunque a veces sentía su ki alzarse más de lo debido.

Pero no le importaba y tampoco podía culparles por no sentir la necesidad de superarse continuamente. Ahora la tierra vivía momentos de paz y ya nadie necesitaba a los guerreros del espacio.

Su cuerpo se relajo tras una expansión de energía que convirtió sus cabellos en dorados y casi por casualidad sintió su ki.

Pan. Reconocía claramente su energía y sabía que estaba justamente tras su espalda. Hacía al menos un año que no la había visto, pese a que en el pasado viajaron por el espacio en busca de las Bolas de Dragón.

Añoraría tanto ella aquella época como él? Era posible.

La sentía entrenarse cada día y eso siempre le hacia sonreír melancólicamente.

- No es algo tarde para andar por ahí sola?- Le pregunto con una sonrisa en los labios sin girarse a mirarla.

Pan sonrió ante aquello y se cruzo de brazos.

- Ya no soy una niña. Tengo dieciocho años.

Trunks se giro para mirarla sin abandonar la sonrisa en los labios, solo que al verla, esta se borro repentinamente.

Si bien era cierto que le había dicho aquello para molestarla, no espero nunca que ella hubiese cambiado tanto en tan poco tiempo. Al menos había crecido un palmo, siendo solo un poco más bajita que él. Su cuerpo... Dios, su cuerpo ya no era el de una niña, sino todo lo contrario, pues pese a estar tan delgada como siempre, este se había llenado de redondeces. Sus caderas... sus pechos...

Sus cabellos negros estaban atados en una coleta alta y como siempre, vestía ropa deportiva, solo que esta parecía sentarle mucho mejor que de costumbre. En realidad no sabía porque estaba tan sorprendido, ya que Bra también había crecido mucho durante aquel ultimo año, pero claro, a ella le había visto cada día.

En definitiva. Pan estaba mucho más que guapa, aunque siempre lo había sido.

Pan vio la sorpresa en sus ojos, pero no le hizo demasiado caso ya que ella misma reviso cada pequeño cambio que él también había dado. No eran mucho, pero los suficientes para que Trunks hubiese dejado de tener aspecto de muchacho y se hubiese convertido en un hombre. Un hombre realmente apuesto. Aunque debido a su transformación no pudo admirar aquellos cabellos liloso que tanto le agradaban

- Espero no molestarte.- Le dijo ella lago nerviosa ante su silencio.- Te sentí... y bueno ya sabes...Hacia mucho que no nos veíamos.

Trunks sonrió nuevamente obligándose a ignorar su sorpresa.

- Tu nunca eres una molestia Pan y me alegro mucho de verte. Has cambiado mucho.

- Tu también.

Tras aquellas palabras ambos se quedaron en silencio, un silencio que rápidamente se hizo algo incomodo.

- Te apetece entrenar?- Le pregunto Trunks entonces.

La sonrisa que se perfilo en los labios de Pan fue una clara respuesta y sin más se puso en posición de ataque.

Segundos después Trunks esquivaba los rápidos y fuertes golpes de Pan, tan enérgicos que casi pudo sentir sus mismas ganas de entrenar junto a alguien en ella y se pregunto si ese habría sido el motivo de su visita.

Durante largo rato ambos lucharon y aunque Trunks midió sus fuerzas considerablemente, realmente disfruto de no sentirse solo por una noche.

No fue esta muchas horas después que ambos se sentaron en el suelo para descansar.

- Has mejorado mucho.- Dijo Trunks mirando a la cansada Pan.

- No lo suficiente..- Dijo ella tumbándose sobre la hierba, intentando parecer despreocupada, cuando en realidad estaba realmente nerviosa. – Aun no he conseguido transformarme y empiezo a dudar que pueda hacerlo.

Trunks sonrió.

- Solo necesitas algo de entrenamiento.

- Entreno cada día, pero no se como hacerlo.

- Tal vez necesites algo de ayuda. Eso es todo.

- Y tu, como lo conseguiste?- Le pregunto ella incorporándose nuevamente.

- Bueno, a decir verdad creo que fue algo accidental cuando entrenaba con Goten. Aunque a veces no resulta fácil aprenderlo. Tengo entendido que mi padre necesito mucho entrenamiento... incluso tu padre necesito la ayuda de Goku.

- Si... es solo que yo no tengo a nadie que me entrene. Mi padre siempre esta muy ocupado. – Le dijo desanimada.- Pero no importa. Seguiré intentándolo.

- Sigues siendo la misma chica de siempre.- Le dijo sonriente.

Pan sonrió ante aquello.

- Si es importante para ti yo puedo intentar ayudarte. – Prosiguió Trunks.

Pan lo miro sorprendida.

- De verdad? – Le pregunto emocionada.- No querría ser una molestia para ti.

- Una molestia? En realidad creo que me vendría muy bien tener un contrincante. Entrenarse solo es algo aburrido y hoy me he divertido mucho.

- Entonces te estaré muy agradecida.

- Bien.- Dijo poniéndose en pie.- Entonces nos vemos mañana?

- Si.- Dijo ella imitándolo.

- Hasta mañana entonces.

- Hasta mañana.

Trunks volvió a sonreírle y sin más se alzo en el aire para desaparecer en segundos.

Nuevamente sola, Pan dio un largo suspiro y sonrió feliz.

Estar nuevamente a su lado había sido abrumador. Su corazón no había dejado de palpitarle con fuerza bajo el pecho. Y entrenar con él... le había encantado.

Por unos momentos había dejado de sentir aquella agitación que parecía acompañarla desde tiempo atrás.

Se había sentido completa por primera vez en mucho tiempo.

...

El día siguiente paso realmente lento y parecía que la noche no llegaría nunca.

Fue después de la cena, cuando se ponía las botas dispuesta a marcharse cuando su padre se asomo a la puerta de su habitación.

- Ayer me pareció sentir tu energía.

- Fui a ver a Trunks. – Dijo poniéndose en pie. – Él va a entrenarme.- Le dijo sonriente.

Gohan sonrió al escuchar aquello. Desde que su hija era una niña había visto en ella las ganas de luchar que siempre había visto en su padre. O incluso las suyas propias tiempo atrás. Era muy consciente de que ella lo necesitaba tanto como lo había necesitado Goku y eso a veces lo asustaba.

Era consciente de que su hija era muy fuerte, tanto físicamente como psicológicamente. Sabía que estaba preparada para aquello. En realidad le sorprendía que aun no hubiese conseguido transformarse, pero aquello no cambiaba el echo de que fuera su hija, su niña. Le asustaba que tuviera una vida como la de su padre. Temía perderla.

Pero bien sabía él que retenerla no serviría para nada y no deseaba que su hija se viera en la misma situación que él cuando era pequeño y tener que escaparse de casa para poder hacer lo que deseaba.

- Pan...- Dijo algo inseguro.

- No te preocupes.- Se adelanto ella.- Trunks solo va a entrenarme.

- De todas formas ten cuidado.

- De acuerdo.

Con aquellas palabras Pan se acerco a su padre y lo beso en la mejilla.

- Adiós.

- Adiós papa.

...

Pan cerro los ojos y concentro toda su energía.

- Convertirse en súper guerrero no solo se consigue con tener una buena forma física. La concentración es importante y sobretodo controlar la fuerza. Aunque necesitas controlar esas tres cosas para conseguirlo.

Pan escuchaba la voz de Trunks mientras seguía concentrando energía.

- Con la practica consigues transformarte a tu antojo, pero las primera vez necesitas provocar tu ira. Una vez hayas conseguido concentrar todas tus fuerzas has de pensar en algo que te haga enfadar. Una mezcla de dolor y rabia.

Pan espero concentrar toda su energía para buscar un pensamiento que la perturbara.

Dolor y rabia. Conocía bien esas palabras y sabía como provocarlas. Solo debía pensar en su abuelo. Goku. Si, su recuerdo le provocaba dolor y a veces también ira, rabia. Rabia porque murió por hacer el bien, por ayudarles a todos ellos. Murió, la abandono en aquel lugar en el que a veces se sentía tan sola y tan incomprendida, solo por hacer el bien. A veces deseaba que él no hubiese sido tan bueno, tan perfecto y se hubiese quedado con ella para siempre.

Trunks miraba a Pan concentrado. Podía sentir un aumento en su poder, podía sentir su ira intentando dominarla, pero estaba seguro de que no lo lograría, al menos aquella noche. Aunque lo hacia bastante bien.

En realidad Pan siempre había sido una buena luchadora. Tal vez porque siempre se lo había tomado muy en serio o tal vez porque le gustaba tanto como a él mismo.

Pero sus años de luchas parecían haber llegado a su fin. Una parte de él deseaba que la paz continuara, que su familia y sus amigos siguieran estando a salvo, pero otra... otra deseaba luchar, deseaba encontrar un adversario poderoso. Deseaba pelear y ganar. Sentir nuevamente el dolor de sus heridas en su cuerpol y la maravillosa sensación de poder que un guerrero siempre sentía frente a la promesa de una buena batalla.

Pero que pasaba cuando no tenían contra quien luchar? Que le quedaba a un guerrero en tiempos de paz?

Acabar como él? Llevando el negocio familiar mientras anhelaba encontrar algo más? Algo que completara aquella parte que iba muriendo poco a poco en su interior. Algo que la reviviera, que hiciera hervir su sangre guerrera nuevamente.

Tal vez era por aquel motivo por el que había accedido a entrenar a Pan. La noche anterior había visto en ella la misma necesidad en el reflejo de sus oscuros ojos y tal vez lograra encontrar en ella a un buen adversario.

Agotada, la energía de Pan se desvaneció completamente para segundos después caer de rodillas al suelo.

Con una respiración acelerada y con algo de enfado por no haberlo conseguido miro a Trunks que le dedico una sonrisa.

- Lo has hecho bien.- Le dijo él.

- No lo he conseguido.

- Nadie lo consigue la primera vez.

Pan apoyo las palmas de las manos sobre el suelo y seguidamente las apretó con fuerza.

Realmente estaba muy enfadada. Demasiado para parar.

- Luchemos.-Le dijo a Trunks.

- Estas agotada.

- No. Estoy enfadada.- Dijo poniéndose en pie.- Lo necesito.

Trunks sonrió ante aquello. Luchar. Ahora había llegado el momento de divertirse.

- Bien, prepárate.- Le dijo poniéndose en posición de ataque.

- Transfórmate.

- Aun no estas preparada para eso.

- No lo estaré nunca si no lo hago.

- Hoy estas demasiado agotada, Pan, no es necesario que te esfuerces tanto.

- Puedo hacerlo.

- Te aseguro que en este momento no necesito transformarme para ganarte. Así que prepárate.

Pan se intento poner en posición, pero Trunks la golpeo antes de tener tiempo, despidiéndola varios metros atrás.

- Deberías estar más atenta.- Le dijo Trunks.- Estas bien?

Pan sonrió desde el suelo y alzo la cabeza para mirar a Trunks.

Por lo general Trunks siempre media en desmesura su fuerza cuando luchaba con ella. Aquella era la primera vez que la había golpeado a sabiendas de que no podría responder al golpe a tiempo y estaba encantada. Si realmente quería llegar a transformarse, necesitaba que Trunks fuera duro con ella.

- Perfectamente.- Le dijo poniéndose en pie.- Sigamos!

Tras aquellas palabras Pan se lanzo sobre Trunks y Trunks sobre ella. Se encontraron a la mitad de camino y ambos empezaron a golpearse duramente, pero siempre con una divertida sonrisa en los labios.

Una hora después ambos yacían sobre la hierba, con las respiraciones aceleradas, con las ropas algo sucias y rasgadas y con alguna herida que otra. Pero por una extraña razón ambos se sentían realmente felices. En parte saciados de una sed de sangre que siempre corría por sus venas.

Trunks giro levemente la cabeza para mirar a Pan que estaba tumbada a su lado. Uno de sus labios tenía un leve corte, pero aquello no le impedía sonreír satisfecha, a la vez que sus ojos se posaban sobre el oscuro cielo estrellado.

Le resultaba increíble todo lo que ella había cambiado y que a su vez fuese la misma muchacha de siempre. Una fiel amiga con la que, desde que viajaron por el espacio, tenia una conexión especial que no lograba explicar.

Era como si viera en ella sus mismas necesidades y ambos se comprendieran a la perfección.

Pero estaba empezando a descubrir algo más. Ella era fuerte, más de lo que a simple vista parecía y entrenarse con ella era sumamente... placentero. Sentía placer? Si, lo hacia. Luchar contra ella le provocaba una sensación adictiva que no había sentido nunca antes con nadie. Porque? Que significaba aquello?

- Podría quedarme aquí toda la noche.- Dijo Pan interrumpiendo sus pensamientos.- Toda la vida.

Trunks sonrió pues él mismo se sentía de aquella manera.

- Me temo que no podemos.

- Mañana empiezo las clases en la Universidad del Norte. Me hubiese gustado poder ir al menos con Bra a la Universidad del Sur.

- La Universidad del Norte es una buena universidad.- Le dijo él.

- Si, lo se. Pero allí no conozco a nadie y odio fingir ser quien no soy.

- Te hace sentir atrapado.- Completo Trunks.

- Si.- Dijo ella mirándole sorprendida porque alguien la comprendiera tan bien.

- Trabajo en la Corporación Cápsula. Allí solo soy el hijo de jefa. Un humano que finge ser normal y corriente.

Pan sonrió al comprender que Trunks se sentía igual que ella.

- A veces siento que vivo la vida de otra persona. Por eso entreno todas las noches. Me hace olvidar esa sensación. – Prosiguió Trunks.- A veces desearía ser como mi padre. Él no ha olvidado quien es. Solo vive para luchar y nunca se esfuerza por fingir ser quien no es.

- Si, es cierto.- Dijo Pan que volvió a mirar las estrellas.- Tal vez sea porque él no es medio humano como nosotros.

- Tal vez.- Trunks suspiro y se puso en pie de un solo salto.- Es tarde Pan.

- Si tienes razón.- Dijo ella poniéndose en pie y sacudiendo su ropa. – Mama va a matarme cuando vea como he dejado la ropa.

- Lo siento.- Dijo el frotándose la cabeza avergonzado.- Tal vez me pase un poco.

- Tu no estas mucho mejor.- Dijo ella divertida.

Trunks se miro la ropa y vio que realmente era cierto.

- Es cierto. Hoy has luchado bien.

- Tengo un buen profesor.- Dijo ella satisfecha. – Nos vemos mañana.- Le dijo a la vez que alzaba un poco el vuelo.

- Hasta mañana.

CONTINUARA...

Bueno, hasta aquí llegue de momento. Espero que sean un poco pacientes y dejen empezar un poco la historia. Os prometo que será muy bonita y tendrá contendió Lemon, como todas las que escribo.

Imagino que se habrán fijado que no voy a seguir ese carácter depresivo que se le da siempre a Pan en los fics. En mi opinión no creo que la nieta de Goku sea así, no se.

Prometo actualizar lo más rápido posible, como siempre.

Ahora si, les invito a dejarme sus reviews. Me encantan!! Así que no sean perezosos y déjenme unas palabras con su opinión sobre la historia, ya sea buena o mala, de igual forma será bien recibida.

Nos leemos pronto.

JJ.Amy.