Disclaimer: Naruto lamentablemente no me pertenece, sino, a Kishimoto Masashi quien continúa dibujando.

Advertencias: Esto es un AU –Universo Alterno-, y Principios de OOC –Justificado–.

Culpa

Por: Gaa

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No era un secreto

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Por fin luego de dos años de rehabilitación y sin ni un amigo del cual valerse esos años, Sakura Haruno salía de la Clínica en la cual estaba internada los últimos años. Su rostro estaba más delgado que antes y sus orbes jade no habían perdido el brillo de aquellos años joviales, su cuerpo estaba más menudo debido a la dieta libre de grasas y había salido caminando sin ningún tipo de secuela física que impediría desarrollar su vida con normalidad.

Éste último tiempo había estado investigando un poco de dónde se podría haber metido su novio y ─como no─ lo había encontrado en pleno centro de Tokyo. La joven mujer a sus veintidós años caminaba renovada y con unas nuevas esperanzas de vida mientras visitaba su antiguo departamento en el cual sabía que estaban sus cosas, hoy sería un día prometedor.

Tokyo era una ciudad muy movida, no existía el descanso inminente y siempre parecía recobrar más fuerzas con el tiempo. Mirando en dirección a la calle un joven rubio de orbes azules admiraba el paisaje del edificio de su novio, quien como todos los días desde que iniciaron su relación lo había pasado a buscar para ir con él a la universidad, estaba inquieto pero no por ello menos feliz, observó el ahora departamento perfectamente aliñado con una sutil muestra de elegancia mientras que su novio se vestía a sus espaldas. Naruto estaba ensimismado en sus pensamientos ─

─Naruto, vámonos ─de los labios de aquella tentadora boca no salió nada más.

─Oye… ¿No crees que sea un día extraño? ─El muchacho lo miró un tanto contrariado acercándose abruptamente a él y colocando una de sus manos en la frente del rubio.

─No estás enfermo.

─¡No seas idiota, Sasuke!

─Venga, vámonos antes que me arrepienta de tener a un idiota como tú en mi departamento.

─¡Arrepentido debería estar yo el día que comencé con toda ésta relación!

─No comiences estúpido, mira que hoy no ando con ánimos.

─¡Tu nunca andas con ánimos, idiota!

Y así habían comenzado su día la joven pareja.

Naruto iba en cuarto año de Ciencias públicas, mientras que Sasuke llevaba cinco años de Ingeniería Civil. Cada uno tenía su vida casi por separado cuando se conocieron, o más bien hasta que Naruto divisó a Sasuke. Su facultad era la misma pero sus amigos no.

Sasuke se caracterizaba por ir siempre con aquella faceta frívola e ida, mientras que Naruto era un expresivo personaje, y por ser expresivo terminó conociendo a su actual novio.

─No ─había repetido nuevamente Shikamaru, quien miró a su rubio amigo hacer aquellas mañas con su rostro.

─Venga Shikamaru, es sólo presentármelo, yo me encargo del resto, ¡De veras!

─No Naruto, no te presentaré a Sasuke ─Naruto y Shikamaru se encontraban en la Biblioteca en donde se podía divisar unas hebras de cabellos azulinas y negras por allí, Naruto había distinguido aquella mueca triste que nadie parecía notar en la faceta de aquel idílico personaje, pero él no era cualquiera, él sí se había dado cuenta.

─¡Si no lo haces tú lo hago yo!

Y el patético 'Shhh' llegó a sus oídos anunciando que la encargada de la Biblioteca de la Universidad se encontraba cerca ─

─Has lo que quieras, no me metas a mi en esto ─definitivamente Shikamaru era todo menos brioso.

Naruto caminó indeciso hasta llegar a la mesa en donde se encontraba aquel llamativo personaje que era divisado por la mayoría de las chicas de la Universidad ─

─Hola ─nunca había tartamudeado, pero al parecer la inquisidora mirada del mayor parecía no pasar desapercibida para nadie.

─No soy Gay, no quiero intentar saberlo, no quiero una cita, no busco amigos, no quiero tu compasión ni pena, ¡Ah! y largo ─¡Ése chico era un borde!, las mejillas sonrosadas de Naruto y sus puños apretados no aguantaron mucho ante el enojo del menor.

─¡Eres un borde, engreído, niñito de papá y estúpido!, ¡Yo sólo quería conocerte idiota!...

Decir que de ese momento fueron inseparables les pareció absurdo.

Sasuke conducía su coche mientras que Naruto tomaba su café, con prontitud divisaron la Universidad de Tokyo en la cual ambos asistían. Buscaron el estacionamiento de Sasuke como todos los días y se bajaron dejando ver el fabuloso día Lunes de verano ─

─¡Hoy será un bonito día! ─Insisitó Naruto mientras tomaba su bolso y caminaba al costado de Sasuke. Naruto buscó la mano de su novio por entre sus bolsillos y al hallarla la entrelazó con la de él, Sasuke no era dado a las demostraciones amorosas en público, pero aquello era lo que más le gustaba a Naruto.

─¿Qué es lo que te toca ahora? ─murmuró el Uchiha tras un tiempo.

─Relaciones Exteriores con Asuma, ¿Y a ti? ─cuestionó de vuelta.

─ Diseño en Acero con Kakashi ─aseveró tras doblar por la cafetería y detenerse unos momentos.

No es que Sasuke fuera un top-model, pero si llamaba la atención tanto femenina como masculina, tenía sus razones: Sasuke era un chico bastante apetecible a la vista de cualquiera, aunque sus logros se los quitaba por ser tan arrogante ─

─Un Capuccino.

Naruto no podía parar de mirar a Sasuke, era algo que llevaba haciéndo desde que lo vio por primera vez, mantenía aquel rostro imperturbable como la primera vez pero había podido devolver aquel brillo en sus ojos que sus amigos de años daban por perdido.

El día fue agotador, una ardua mañana para los estudiantes. Naruto pasó por Sasuke quien era el que salía más tarde el día de hoy, camino feliz por los pasillos en busca de su novio, y tras verlo despedirse de sus compañeros de clase quienes le preguntaba cosas de la materia recién abordada Naruto se lanzó a su brazo buscando los labios de aquel chico quien los recibió sin tapujos ─

─Venga, vámonos. ¿Quieres quedarte a dormir hoy a mi casa? ─La pregunta venía de más.

─¡Claro Sasuke! ─Naruto hoy no se quería separar de su novio.

El camino de vuelta se hizo extremadamente corto por las energías del rubio quien le iba hablando todo lo que hizo hoy sin omitirse nada, Sasuke por otra parte conducía entre divertido e impasible al escuchar las idioteces que decía su rubio novio en clases y las veces que lo echaron del salón de clases por ser demasiado ruidoso ─

─Ya llegamos inútil ─ambos eran un par de enamorados, pero aquello era un secreto para Sasuke quien cargo con sus cosas como Naruto las suyas, caminaron mientras Naruto seguía transmitiendo sus parodias y rememoraba otras haciéndo vaya de aquellas en las cuales estaban involucrados su circulo de amigos. Ascendieron al piso y tras abrir la puerta Naruto se fue corriendo al refrigerador de su novio para atiborrarse de comida y luego hacer la cena al chico que estaba sentado en el comedor haciéndo su tarea para tener la noche libre con él.

─Sasuke, ¿Qué quieres comer? ─No sabía para qué preguntaba si ya tenía conocimiento de la respuesta.

─Cualquier cosa menos Ramen Naruto ─E allí la razón de su auto-compasión.

─¡Bien!, manos a la obra.

Tras lo que parecieron unos minutos al chico de cabellos negros, Naruto ya tenía lista la cena a base de Onigiris y arroz con curry mientras que el moreno sencillamente se dedicaba a admirar la cena ─

─¿No le echaste nada raro? ─cuestionó indeciso el moreno.

─¿Por qué?

─Se ve muy apetecible ─su novio a veces podía ser un amor. Tras lo que pareció una tranquila cena, Sasuke se dedicó a observar a Naruto comer atentamente, mientras que no dejaba escapar nada, de cierto modo parecía nervioso.

─¿Qué sucede Sasuke? ─La voz de Naruto rompió el silencio que había en la estancia, mientras que Sasuke seguía abstraído hasta que vio aquellos ojos color cielo mirarlo con preocupación.

─Necesito decirte algo ─la voz cruda de Sasuke llegó a los oídos de Naruto el cual asintió de manera preocupada.

─¿Qué sería?

─Quiero que te vengas a vivir conmigo.

Era el mejor día de Naruto.

Observó el imponente edificio que se erigía ante ella, estaba ansiosa y por qué no decirlo: Excitada. Hace más de dos años que no lo veía desde aquel fatídico accidente, no creía que las cosas hubieran cambiado tanto, a paso decidido presiono el botón del ascensor y tras llegar al último piso que era donde se hospedaba el amor de su vida tocó el timbre y espero un poco ─más bien─ espero mucho más de lo habitual, y tras tocar por segunda vez el timbre escuchó pasos a través de la puerta y la abrió un animoso chico ─

─Disculpa, ¿Aquí vive Sasuke? ─preguntó de manera cortés mientras sonreía llena de ilusiones ─

─Sí, espera un segundo. ¡Sasuke es para ti! ─El rubio se retiro, sentía que no debía estar allí, más se quedó esperando unos pasos más atrás, cerca del comedor, y pronto los pasos de Sasuke resonaron desde el fondo.

Estaba ansiosa, por qué negarlo.

Lo vio allí tan imponente y seguro como lo había conocido a sus doce años, y decir que había perdido su gracia sería un burdo chiste. Pero todo se congeló cuando Sasuke la vio de pie, ella le sonrió como lo hacía cuando eran críos, llena de ilusión y esperanzas puesta en aquella varonil figura que se alzaba frente a ella ─

─Sasuke…

─Sakura… ─Nada más escapó de los labios del mayor, sus orbes había vuelto a perder aquel brillo que Naruto había conseguido, mientras que el rubio estaba alarmado, Sasuke se veía descompuesto pero lo que más lo alteró fue la acción que prosiguió a esa: Sasuke estaba siendo besado por aquella chica de cabellos rosas, extraños rosas que Sasuke parecía reconocer y no querer separarse de ellos, y como si el cuerpo de Sasuke fuera acto reflejo recibió cualquier ofrenda que le fuese ofrecida por aquella joven mujer, un beso amargo que Naruto sintió.

Bien, mi nueva producción: Culpa. Espero que les haya llamado la atención y no se angustien. Todo a su debido tiempo, ¿Merece Reviews?

─Gaa─