"Aprendiendo a volar"
Tiempo más tarde, Sharpay se encontraba en su casa, más bien su habitación.
Se encontraba pensando, intentando llorar sin conseguirlo.
Estaba concentrada en sus pensamientos que casi no oyó cuando golpeaban tímidamente la puerta.
La puerta se abrió y se asomó Ryan, quién evitó hacer algún ruido para distraer a su hermana.
Una lágrima rodó por la mejilla de ella y él entró sin dudar.
-Shar, ¿Debo preguntar por qué lloras esta vez? - se sentó a su lado y la miró con preocupación.
Ella no quitó la vista de la ventana que tenía observando desde hace rato sin mirar específicamente hacia ningún lado.
-No – se secó aquella lágrima y lo miró – Es por Troy.
Ryan frunció el ceño y evitó mirarla, también evitó decirle lo que pensaba.
Sharpay le palmeó el hombro con una leve sonrisa.
-No, no sigo llorando por lo de siempre, Ry.
Ryan la miró sorprendido y se quedó en silencio.
-Es que…me di cuenta de que ya…no lo amo como creí – se encogió de hombros – de algún modo u otro tenía que suceder.
Ryan la abrazó.
-No sabes lo feliz que pone oírte decir eso, hermana – sin que ella lo notara se ruborizó, estaba feliz, demasiado tal vez, eso temía.
El abrazó duró unos largos segundos, cuando se apartaron, Sharpay miró a su hermano confundida.
-Ry, estás llorando…
Él se secó con rapidez las lágrimas y dijo:
-Lloro de felicidad, Shar. Estoy feliz por ti…te deseo inmensa felicidad – hizo una pausa y se levantó – No sabes cuán doloroso fue para mi verte así durante todos estos años…
Diciendo esto último se fue, dejando a su hermana con sus pensamientos.
Ryan se encerró en su habitación y no salió ni siquiera para cenar.
Sharpay se encontró a sí misma cenando sola. Sus padres llegarían tarde, otra vez.
No comió demasiado y se vio obligada a guardar las sobras.
Sería una noche larga y el día que siguiente sería aún peor pero, por lo menos, estaba aprendiendo a volar por si misma, estaba sintiéndose mejor sin él, sin su guardián, sin su pasado.
El día siguiente amaneció con lluvia y Ryan no estaba en casa.
Sharpay llegó sola a la secundaria, obligada a llevar su descapotable con techo (algo que no le agradaba).
La campana había sonado, lo que significaba que iba en retraso.
Se apuró a salir del coche y correr hacia la entrada.
El piso estaba resbaloso y al correr perdió el equilibrio y cayó.
Su atuendo estaba completamente arruinado. Y lo peor fue que alguien la había visto y ese alguien era Troy Bolton, quién corrió a socorrerla.
-Sharpay, ¿Te encuentras bien? – preguntó extendiendo su brazo para que ella tomase su mano.
-Por supuesto – respondió ella ignorando su mano y levantándose por cuenta propia.
-¿Segura? Fue un golpe tremendo – comentó con una leve sonrisa en los labios.
-No es tu problema, mis asuntos no son lo tuyo, Bolton – se alejó.
Troy le tomó el brazo a tiempo y la jaló hacia él.
-Solo trato de ser amable.
- Bien, Gracias por intentarlo, no necesitó tu amabilidad o lástima, Troy – intentó librarse, pero no lo consiguió.
Se hizo un silencio. Sus rostros estaban a tan solo unos centímetros, Troy la miraba, buscaba sus ojos, ella se los negaba mirando hacia el suelo.
- Me estoy mojando, Troy. Hace frío y hay que entrar a clases – de repente lo miró desafiante - Gabriella te espera.
-Lo sé, deberíamos entrar – la liberó – Vamos.
La respiración de ella se había intensificado al pensar en que Troy si hubiese querido pudo haberla besado en aquel instante en el que sus rostros se habían quedado a tan poca distancia.
Entraron a clase juntos, lo que llamó la atención de todos, especialmente la de Gabriella.
- Bueno, Les espera detención a ustedes, jovencitos – dijo la señora Darbus cruzada de brazos y pensativa, a ella también le llamaba la atención.
Sharpay echó una mirada fulminante hacia Troy y fue a sentarse en su banca.
Troy sonrió tímidamente a Gabriella y se ubicó en su lugar.
:O SIGLOS QUE NO ESCRIBÍA! pero bueno, espero que sigan ahí leyendo :) yo voy a tratar de postear tan pronto como me sea posible :) gracias a todos por los reviews :) bye!