Konohamaru había comenzado sus preparativos para su cita con Hanabi, algunas de las ideas que tenía, se las había dado Naruto, pero otras eran propias. Esta vez, iba a salir con Hanabi y esta vez, iba a hablar con Hanabi y lo haría bien.

Habían pasado solo 5 horas desde que saliera de su casa disfrazado de sirvienta, 5 horas sin verla y ya la extrañaba. Lo peor de todo, era que ella ni enterada estaba, pero él tenía un plan infalible y lo comprobó en poco tiempo.

Sonrió con picardía mientras saltaba de rama en rama, volvió su rostro hacia atrás, a unos pocos metros la hija menor de la familia Hyuga le pisaba los talones, pero a diferencia del primero, la hermosa muchacha llevaba una cara de pocos amigos, mientras que perseguía al chico

-¡Ya verás Konohamaru cuando te ponga las manos encima yo…!

Flash back de lo sucedido hace 10 min

Hanabi estaba en su cuarto cambiándose de ropa hacia demasiado calor, así que optó por dejar la ventana abierta, su habitación estaba en un segundo piso y con la ventana dirigida hacia uno de los jardines de la mansión, le gustaba esa vista, el jardín estaba rodeado de varios y viejos árboles frondosos, tantos y tan grandes que cubrían desde el jardín hasta la reja que dividía la mansión con el resto del pueblo. Se sentía segura, libre y llena de privacidad.

Pero lo que a Hanabi daba la seguridad de un refugio, para Konohamaru le había dado su forma de colarse en la mansión y arrojar dentro del cuarto una piedra con una nota que decía:

Te espero en centro del bosque en un rato mas, por favor tómalo en serio y ve solita que te quiero decir algo importante y personal

Atte:
Tú espía Konohamaru

PD: me encanta ese conjunto de ropa interior que te estas poniendo, definitivamente el azul te sienta

La chica se sonrojó con los primeros dos renglones, incluso lo considero un instante, pero al ver lo que decía de su ropa interior entendió que:

1.- El chico si la había espiado vistiéndose hacia unos minutos

2.- Acababa de arrojar una piedra en su cuarto entonces no podía estar lejos

-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Byakugan!!!!!!!!!!!!!!!!!!

La Hyuga encontró a su sonriente objetivo saludando desde un árbol cercano antes de echarse a la fuga con gran maestría

Fin del flash back

Así llegamos al momento actual

-De todas las cosas infantiles e inmaduras que has hecho en tu vida Konohamaru de esta es de la que mas te vas a arrepentir espía fisgón, ¡pervertidooooooooooooooooooo! - gritó la chica

-No creo, de hecho pienso que es de la que más me voy a felicitar Hanabi -contestó él haciendo un sello con sus manos: ¡Kage bushin no jutsu!

De pronto la chica llego al lugar donde Konohamaru la había citado, allí, sin entender muy bien como se vio rodeada de 6 Konohamarus que sonreían, escondiendo algo detrás de si

-¿Kage bushin? ¿Crees que con eso me vas a vencer?, ¿o piensas que entre clones te vas a esconder? ¡Ya verás que yo!- pero sin dejarla terminar de hablar los sonrientes chicos lanzaron el contenido de enormes canastos sobre de ella quien giro rápidamente lista para atacar. Sin embargo no hubo golpes, ni ataques, la chica se detuvo y entonces, solo entonces lo notó Konohamaru sonreía, lo mismo que sus clones que se desvanecieron enfrente de ella, del cielo caía una lluvia de pétalos rosas y rojos, era tan hermoso, Hanabi estaba confundida

-¿Qué estaba pasando? ¿Por qué llueven pétalos del cielo? ¿Cuál es el truco?

-… ¿Pétalos?- murmuró finalmente

-Hubiera sido una lluvia de flores para ti pero los rompiste casi todos

Dijo Konohamaru sin embargo, él aún tenía una única flor completa y acercándose a una desconcertada Hanabi alzó la flor y se la acomodo en sus cabellos

-Sé que soy un espía fisgón y pervertido como lo dijiste -dijo él, sin explicarle hasta que punto era eso verdad y con suerte no lo sabría nunca- pero también soy un chico que no puede dejar de pensar en ti.

-Konohamaru…tú…- él, la miraba a los ojos, no al escote y eso le había parecido encantador, todo en él se lo parecía. Después de todo, ¿Quién haría eso? una lluvia de pétalos, la flor en su pelo, la confesión de culpa cediéndole la razón completamente, el chico puso un dedo en sus labios

-Hanabi me gustas- dijo con valor según le pareció - y la verdad quiero que salgas conmigo, pero yo se que… bueno… a veces no te veo a los ojos, ¡no es que no sean preciosos!... es que toda tú eres muy bonita, me llama la atención todo de ti; ¡tu forma de ser!, ¡tu forma de actuar! ¡quiero saber qué piensas!... pero, no me pidas que de pronto no me quede embobado con tus… tus… curvas, ¿está bien? -dijo él rápidamente como si se avergonzara de decirlo -Sé eso no es muy caballeroso o correcto pero tu cuerpo me gusta también, soy un chico es normal, ¡tengo 12!, por amor de Dios no pidas que sea un adulto lleno de virtudes no lo soy, solo dame una oportunidad te juro que yo… yo…- el chico que hablaba muy rápido parecía no querer parar y sin duda no lo hubiera hecho de no ser, por un beso en el dedo que tenía sobre los labios de Hanabi, ella sonrió con picardía.

Suficiente aliciente como para que a Konohamaru olvidara de que estaba hablando, de hecho se le olvido como hablar del todo.

-De acuerdo saldré contigo… -dijo la preciosa Hyuga - ¡pero tendrás que prometerme dos cosas! La primera es: ¡jamás espiarme de nuevo mientras me cambio de ropa!- Konohamaru asintió presurosamente y tan enérgicamente como pudo con un sí de su cabeza que parecía rebotar en la nada- la segunda es que… bueno… la segunda que tendrás que mirarme a los ojos cuando hablemos- Konohamaru asintió nuevamente.

-¡Prométeme que saldrás conmigo! Y si no estamos hablando en ese momento no me mataras por ser distraído por tus… bueno tus otros atributos -dijo sonrojado- ya sabes a lo que me refiero, no quiero que me mates solo… solo… entiende que no es lo único que me gusta de ti pero me atrae y yo…yo….

Hanabi se acercó a él, con una dulce y coqueta mirada en sus ojos, sonreía tentadoramente, Konohamaru sentía un calorcito subiendo por sus mejillas, la suave respiración de la chica invadía su espacio personal. De pronto Konohamaru se sentía atrapado por una fuerza magnética poderosa y sin darse bien cuenta de cómo estaba calculando como evitar que su nariz y la de ella chocaran medio segundo antes de sentir la ternura de un par de labios rosas

Hanabi, cerró los ojos y se dejo llevar en su primer beso, algo tan dulce y romántico y que de un modo u otro se daba de una manera muy natural, (la chica puso sus manos que por algún motivo desconocido parecían temblar un poco), sobre los hombros de Konohamaru y este la apretó suavemente en un abrazo cálido.

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Hinata entre tanto a esa hora de la tarde había salido a comprar cosas del mandado ya que por algún motivo, ni Mina y ni Midory habían regresado.

Pero ni Naruto, ni Konohamaru se habían quedado el dinero del mandado así que cuando Hinata llego a la tienda se encontró con que el tendero estaba ya arreglando las cosas en una caja y un mandadero se acercaba con su bicicleta para llevarlas a la mansión Hyuga.

-Entonces las chicas me dijeron que pusiera todo para llevar a su casa que tenían algunos pendientes y no podían regresar en ese momento- explicó el tendero a Hinata en lo que parecía el fin de una plática de varios minutos

-¡Ya veo! entonces me regresaré a casa, con permiso- contestó Hinata pero en ese momento justo cuando salía, se topó de frente con Naruto, él había estado esperando la oportunidad, sabía ya lo que quería decirle pero no había encontrado la forma de sacarla de su casa o el cómo alejarla de sus compañeros de entrenamiento, así que espiaba la casa, con el único propósito de encontrar la oportunidad perfecta.

-Na…Naruto kun ….aaaa…eto..aa…hola – Hinata estaba toda sonrojada sus dedos jugaban uno con el otro con verdadero nerviosismo, su rodillas se juntaron en una pose tímida que evitaba que se desmayara de gusto con solo haber tropezado con él.

Por primera vez para el joven Uzumaki, todo eso tuvo un obvio significado y una sonrisa confiada apareció en su rostro.

Tomó a Hinata de la mano lo cual casi provoca que se desmayara, Naruto sabía que incluso podría perder el sentido si a eso agregaba algo mas, así que le hizo una seña con la cabeza y la jaló obligándole a seguirle, caminando con cada paso cada vez más rápido, hasta el punto en que ambos estaban corriendo, saltando de techo en techo, luego de rama en rama hasta llegar a una en particular, una rama muy gruesa y alta desde la que se podía ver una bellísima cascada y una puesta de sol, que dramáticamente comenzaba a tornar el azul del cielo en tonos rojizos y naranjas .

-Na…Naruto kun… aahhh… etto ¿porque vinimos aquí?- dijo finalmente Hinata tras un prolongado silencio.

-Quería que vieras el atardecer conmigo, ¿no quieres?- pregunto Naruto

-¡Haaai! y…y… es precioso la verdad – Hinata sin embargo solo podía ver la cara de Naruto, millones de preguntas surgían en su mente

-La verdad me tope con una chica hace algún rato- advirtió mintiendo con habilidad, y estuve hablando con ella, creo se llama Midory

Hinata se quería morir, realmente Midory había ido a contarle todo a Naruto , y ahora él venía seguramente a romper su corazón diciendo que él no estaba interesado en ella

-La verdad –dijo ya con tono más serio y esta vez sin mentir- algo que me quedo muy claro es que, soy un tarado cegatón que no puede ver una preciosísima chica, dulce y tierna, ni aunque se pare enfrente…yo… ¿Hinata te gusto? Dime la verdad

El rostro del rubio era serio y Hinata sentía que se desvanecería, pero algo en su interior le decía que si echaba a perder esta oportunidad, sus sueños con Naruto podrían esfumarse para siempre así que respiro profundo, su sonrojadisimo rostro mostraba sus ojitos cerrados mientras trataba de darse ánimos para contestar

-Naruto kun …- dijo con voz serena , más de lo que jamás había podido lograr frente a él, pero la respuesta que diría la había dicho tantas veces en sueños , que prácticamente se la sabía de memoria, esa confesión la había practicado en secreto tantas veces antes – yo te quiero desde que era pequeña, te quiero desde que te vi en la academia, hubiera deseado tantas veces abrazarte cuando te he visto , solo y triste y no lo hice , porque con solo acercarme a ti, siento que me paralizo y no puedo más que mirarte, desearte, amarte y yoo…yo…

Hinata sintió que la mano de Naruto levantaba su barbilla y sus ojos azules se perdían en ese par de luceros abrillantados de lágrimas que eran sus bellos ojos atemorizados, entonces sintió sus labios sobre los suyos.

Hinata sintió que aquel beso era aún más bello que en sus sueños, porque este se lo daban despierta , ni más ni menos que la persona que amaba, su primer beso, sus manos acariciaron las mejillas de Naruto, mientras que con su delicada mano derecha dejo explorar sus dedos entre la espesa cabellera rubia .

Naruto entre tanto aprovechó para abrazarla muy cerca suyo. La romántica escena se enmarcaba con aquella puesta de sol espectacular y deslumbrante que pintaba todo de dramáticos tonos carmesí y dorados

Cuando se separaron, tomaron aire un segundo y luego sus miradas se encontraron.

-Soy tan ciego que no pude verlo por mi mismo… tenían que hacerme notar que la felicidad me rondaba- dijo Naruto al oído de Hinata mientras una lagrima se le escapaba a ella de sus hermosos ojos-shhh sin lagrimas –dijo él limpiando la lagrima que surcaba sus mejillas - me gustas más cuando tu carita sonríe… además quiero que todos vean que pudo hacer que mi novia sonría siempre ¿Quieres ser mi novia?- preguntó el rubio

-Hai- asintió Hinata y sin embargo seguía sonrojada y conmovida no podía detener sus lagrimas aunque sus labios esbozaban una sonrisa dulce, que Naruto tomo en un beso aun más profundo.

Fin……

bueno no es el fin pero si quieres un final lait , son lemon bueno….. jejejej creo que hasta aquí debes leer pero si quieres ver lo que paso después , solo te advierto es nc17 y con eso estas advertido jjijiji

De aquella declaración habían pasado un mes Konohamaru sacaba a Hanabi de su casa casi a escondidas con un pretexto u otro para ir a pasearse, Naruto pasaba a veces por Hinata a su casa y otras la esperaba a una esquina dos cuadras de distancia, de una u otra forma, si bien Konohamaru y Hanabi aun no levantaban sospechas, definitivamente Neji y Hiashi ya presentían que aquel nuevo afán de Naruto por frecuentar a Hinata, tenía un trasfondo romántico.

Si bien Hiashi aun no le daba a esto peso suficiente, Neji ya se había encargado de advertirle a Naruto que si él le arrancaba el corazón a su prima, él le arrancaría a Naruto algo más, con lo que se aseguraría que el rubio no tuviera ya motivos para buscarse una pareja.

Naruto pese a la dura advertencia del Hyuga no lo tomó a mal, pensó que todo aquello eran simplemente celos sobre protectores de hermano mayor por parte de Neji, sin embargo le dejo claro que las cosas iban muy en serio con Hinata y que su encaprichamiento romántico con Sakura había quedado ya muy atrás.

Aquel día Naruto llevó a Hinata algo más lejos que de costumbre había estado ahorrando y planeando las cosas con cuidado, demasiado cuidadosamente, tan era así que había convencido a Hinata para decir que se iría con Kiba y con Shino un par de días a entrenar. Lo cual no extraño a nadie, ellos ciertamente irían pero Naruto les había ido a decir que Hinata , no podía ir por que debía atender asuntos familiares, y dado que el clan Hyuga era uno de los más estrictos y ocasionalmente pasaban cosas así, los compañeros de Hinata se fueron sin sospechar nada.

-Naruto kun… etto..aa… ¿a dónde vamos? -Preguntó la sonrojada chica que había empacado una muda de ropa, tal como él lo había pedido, Naruto sonrió y apretó su mano

-¡Ya verás! será un lugar realmente lindo, estuve ahorrando, pero te lo mereces dijo besándola devotamente

-Mmhmhmm..Hinata... ¡te quiero! ¡Te quiero aun más por lo que has esperado por mí!, ya quiero que lleguemos a donde te llevo amor.- dijo abrazándose de ella

-Si yo también yo... no sabes cuánto te quiero Naruto-kun

-Bueno si esta es una competencia esta vez te lo voy a demostrar a mi manera- dijo el rubio riendo y acariciando sus largos cabellos

Hinata sonrió y recordó momentos del pasado que ya había vivido con Naruto, cosas que le habían vuelto loca

Como su primera cita formal en un día de campo
...

Flash back

-¿Dónde estamos… Naruto-kun?

-Es mi lugar secreto, nuestro lugar secreto –rectificó pronto él - solo yo sé llegar y pronto podrás hacerlo tú también- dijo el rubio con una enorme sonrisa en los labios.

Hablaron por cerca de dos horas, y el tiempo se les había hecho corto. Habían comido, habían tendido a sus pies un mantel enorme que les servía para ese improvisado picnic, todo era simplemente perfecto:

-Así que, te gusto mucho…- dijo él, con una sonrisa traviesa dibujada en los labios.

-Si… desde hace mucho, pero te fuiste y no volviste hasta hace poco – Naruto tomó entonces su mano besándole

-Creo que si ahora tenemos una oportunidad no deberíamos desperdiciarla. Te lo digo en serio Hinata yo quiero una relación seria contigo, ¡te amo!

-Yo también te amo –contestó ella besándose con él, Naruto aprovechó esto y suavemente la empujo hacia atrás quedando ella recostada sobre el mantel bajo el cuerpo de Naruto, el rubio tomó con sus dedos un poco de miel de un frasco luego dejo caer un par de gotas en los labios de ella y los lamió.

El rubio vio entonces los labios entreabiertos y metió suavemente sus dedos y Hinata comenzó a chuparlos, mientras el rubio la miraba como fascinado e imaginaba perversas intenciones para con esa boquita.

-Mi amor… cuando te haga mía mi cielo, te juro que va a ser uno de los momentos más dulces de tu vida y la mía. -Dijo sacando finalmente sus dedos para aprovechar esa boquita y probar con su lengua los residuos de miel.

El beso terminó y Hinata estaba muy nerviosa y seria.

-Este… pero… para… para eso tendremos que esperar un poco -dijo Hinata con el mismo tono serio y temeroso.

-¡Claro! -dijo Naruto en tono bromista - ¡como 15 min!

-No… más bien como un mes-dijo ella demasiado roja- yo he soñado tanto con esto que quiero que sea algo especial, de lo que estés seguro, sin arrepentimientos después, yo solo quiero estar contigo pero no creo que este bien hacerlo en la primera cita, no estoy lista – sus ojitos demostraban cierto temor y Naruto se detuvo la beso de nuevo y sonrió

-En un mes haré que te sientas segura y confiada conmigo ¡voy a demostrarte que no tendremos de que arrepentirnos Hinata!
...

...
Fin del flash back

Y ahora un mes después de toda eso. Ella finalmente había comprobado que el amor de Naruto era sincero, limpio...

- mmm… tal vez –pensó ella con las mejillas coloreadas - demasiado candente pero algo era seguro -de eso no tenía duda.

Naruto si la ama y a lo largo de un mes de anhelos de razonamientos y otras muchas cosas Hinata estaba dispuesta a entregarse a él en un 100 %

Naruto había llegado a una conclusión. Que era obvia después de; ese maravilloso mes juntos, él también amaba a Hinata con todas sus fuerzas. Era un amor más allá de lo físico, y más importante que un mero sentimiento de compañía o de placentero manoseo. Sentía deseo, pasión, amor deseaba estar con ella aun si no había sexo entre ellos. Y de algún modo al completar el mes Naruto había demostrado parte de esos mismos sentimientos.

Al poco tiempo llegaron a una posada Naruto había reservado una habitación de lujo con sus ahorros de un mes y aunque quien atendía el establecimiento miraba a la pareja de forma sospechosa las reservaciones se habían hecho por correo y pagado con anticipación así que no pudo más que callarse.

Hinata nerviosa y sonrojada miraba al suelo algo temerosa, pero Naruto no le dio importancia a aquel hombre y tomando a Hinata de la mano se la llevó fuera de la posada un minuto.

Entonces teniendo total cuidado para no despertar sospechas de parte de su novia, Naruto se adelanto un poco y haciendo un rápido sello creó un clon que se adelanto a la habitación para preparar varias cosas, de modo que todo fuera perfecto llevando consigo varias cosas que Naruto le había dado un maletín

Quería disfrutar de todas las bondades del lugar, caminaron juntos por los extensos jardines antes de disfrutar de las aguas termales, que para decepción de Naruto había de ser por separado dado que los baños de hombres y mujeres estaban divididos por una enorme pared de roca en medio de ambas.

Naruto se reencontró con Hinata y se la llevo finalmente a su habitación el abrió la perta y la cargo solo para cruzar el umbral para Hinata era una acción romántica y tierna como la de los recién casado aunque ellos no lo estaban, era el simbolismo de un nuevo nivel en sus vidas. El que se esforzara así por ella la conmovía aunque no podía evitar pensar que no saldría de la habitación siendo aun virgen pero cuando vio aquel lugar no pudo evitar mencionarlo

-Oh… Naruto kun… ¡Es un lugar tan bello!

-¡Quiero que todo sea perfecto para ti! –Contestó él con sencillez - se que este día te causa mucha ilusión, y quiero que cuando lo recuerdes sientas una inmensa felicidad en tu interior mi vida- le susurró al oído con una voz erótica y seductora.

Para Naruto esto era un sueño hecho realidad, su Hinata finalmente suya. Había valido un mes de sueldo por la noche y los dos días que había alquilado, pero los valía por completo la habitación era espaciosa como un departamento, tenía una pequeña cocina y un comedor una salita y dos puertas, una al baño que tenia regadera y otra a la recamara, tenía su propio jacuzzi grande como una piscina, lo bastante grande para los dos, donde lleno de pequeños platitos verdes con formas de hojas acuáticas que flotaban con un velita encima

Hinata lo miró con lagrimas en los ojos aun no había empezado a hacerle el amor y ya sentía que aquello era mágico

-Te amo, te amo más que a nada en el mundo.

Naruto la abrazo muy fuerte y levantó su barbilla con una mano para limpiar sus ojos, luego la tomo de la mano y la guió hasta donde estaba la mesita para dos, le acomodo el asiento antes de sentarse y destapo un rico platillo de ramen con trocitos de langosta.

Al menos el equivalente para Naruto de una cena lujosa

Naruto estaba sentado a al lado de ella y le hablaba bajito al oído se había sentado muy junto a ella y con el tenedor le daba pequeños bocados en la boca, entre un bocado y otro lo besaba en el cuello en las mejillas y la ojiblanca lo imitaba haciendo lo mismo por él, hasta que se acabo la langosta y el ramen.

-Gracias por ser tan bueno conmigo… esto es aun mejor que mis más bellos sueños

Ella sonreía con la mirada dilatada, se abrazo a él y escuchaba el latir del corazón de Naruto seguro y sin embargo cada vez más acelerado, sabía que en verdad se esforzaba para que esto no fuera brusco y repentino sino una; seducción gradual.

Naruto sonrió a su vez, él siempre cumplía sus promesas y aún cuando ella lo ignoraba, él tenía una promesa que cumplirle; hacer que su realidad fuera mejor que sus sueños hacia un mes cuando durmió con ella sin ella ser consciente de ello que se lo había prometido

Y Hinata caía en esa seducción cada vez más, una de las manos del rubio tomó la de ella y dejó que sus dedos juguetearan con los de Hinata que se acariciaran que se buscaran entre tanto sus labios se posesionaron de los de su novia y su lengua jugó a explorar esa boca con lujo de detalle, con cuidado y maestría. Finalmente Naruto tomó en sus brazos a Hinata y lo llevo a la habitación.

A Hinata ya no le importaba, ni se acordaba de sus temores ni dudas, sabía que lo que fuera que sucediera, sería quizás uno de los momentos más perfectos de su vida.

En el cuarto tenían un candelabro de velas que lo iluminaban todo tenuemente, y las cortinas cerradas daba la impresión de que hubiera anochecido y estuvieran a media luz en el piso había una alfombra hermosa y en la cama mullidos y variados cojines que parecían estar cubiertos de pétalos de rosas blancas junto a la cama había una mesilla redonda con varias cosas en sima

Naruto deposito a Hinata sobre una cama circular, y la beso en los labios

-No tengas cuidado amor, no haré nada que te lastime - Dijo besándole su cuello, su boca chupó con gusto su cuello haciendo gemir suavemente a la joven Hyuga él acariciaba sus cabellos, y ella con una de sus manos se aferraba a la sabana, algo nerviosa.

-Na... Na... Naruto-kun estoy nerviosa sé que no debería pero nunca lo he hecho y ¿si me equivoco? ¿Si no lo hago bien? Podría estropearlo y no quiero

Las temerosas palabras de Hinata y sus sonrojadas mejillas le recordaban a Naruto lo tímida que era su novia

-No hay forma de que estropees el amor, mi vida, no se puede, no importa si nunca lo has hecho solo déjate llevar por mi y por tu instinto todo estará muy bien, todo. Yo te cuidare muy bien esta noche y todas las que faltan en nuestras vidas... si tú así lo quieres.

-Sí, sí quiero -dijo besando a Naruto en la mejilla y dejando que su otra mano acariciara esa otra mejilla tentadora.

Naruto desvestía lentamente a su nerviosa novia, sus manos estaban calientes, le parecía que la sangre le hervía. Acarició con cuidado el vientre plano y sensual, y esos pechos firmes. Repitió una y otra vez esas caricias haciendo que el cuerpo junto a él se calentara y suspiraba.

-Hinata –dijo tomando su mano- y guiándola para que abriera del mismo modo la parte superior de su ropa- Hinata pasó saliva y comenzó a desvestirlo. Metió sus manos y encontraron el firme torso del rubio y sin pensarlo mucho empezó a recorrerlo con sus manos, sentía mucho deseo, algo de miedo de estropearlo, y más que nada curiosidad.

Sintió como sus manos y las de Naruto danzaban solas sobre sus cuerpos, y sentía un poco de aprensión cuando sin darse cuenta bien de cómo lo había hecho cayó al suelo la parte de ropa que había desabrochado. De algún modo también esa prenda había desaparecido de ella y no sabía bien ni como.

Naruto se inclinó sobre ella murmurando

-Lo haces muy bien, mi amor, demasiado bien pero hay que dejar a tras esa pequeña sensación de tensión –añadió él besándola en la frente – vamos a jugar un pequeño jueguito y consiste en que todo lo que yo haga contigo lo harás tu conmigo después, solo que en cualquier otra parte del cuerpo que tú quieras… si, ¿quieres?

La Hyuga asintió con una mirada inocente que hacía que Naruto se desesperara en deseo de poseerla pero si algo había servido un mes de espera , era para ayudarle hacer paciente ante su propio ímpetu.

Así que se sentó y tomo algo de la mesita

-¿Qué es eso Naruto kun? -era una especie de plumero muy suave y pequeño, lo hundió en un platito que tenía una especie de talco, y casi con malicia empezó a sacudir el cuerpo de Hinata con el plumero, lo hacía de tal forma que esparcía una capa de ese polvo sobre ella, y Hinata se excitaba y se movía inquieta su rostro se hallaba decorado por una sonrisa cada vez mas juguetona que Naruto encontró adorable y divertida

-¿Sabes? viajar dos años y medio con un sabio pervertido, que hace investigaciones indecentes, te enseña algunas cosas – la sonrisa de Naruto se amplió un poco más, a sus quince años había estado ya en varias sex-shop y sabía bien lo que vendía y como usarlo, ero sennin investigaba allí seguido para que los personajes de sus novelas tuvieran variedad en sus acciones

Naruto se inclinó y con su lengua empezó a levantar el fino polvillo que sabía a dulce de frutas – Hinata se inquieto y empezó a moverse más y más ahora sí que se agarraba de las sabanas y gemía cada vez más fuerte y más excitada.

Su espalda sentía los pétalos como pequeñas caricias individuales que la enloquecían mientras que la lengua de Naruto empezaba a hacer que su cuerpo reaccionara sus pezones se endurecieran y cierta cálida humedad entre sus piernas la enloquecía cada vez más, hasta ese momento, esas partes suyas... contra todo pronóstico imaginable había recibido menos atención que el resto de su cuerpo.

-Naruto… que rico, mas...dame mas... quiero sentirte aún más.- pero Naruto parecía evitar apropósito los endurecidos pezones... aunque tras esa dulce suplica empezó a llenarlos de talco haciendo cosquillitas con el plumero y luego a chupar el dulce pulverizado que parecía talco, este hacia una pequeña reacción calentando aun más la zona que cubría de saliva-haaaaaaaaaa siiiiiiiiiiiiiiiiiii así

Pero Naruto se detuvo después de un largo suspiro de su novia y le dedico un excepcional beso en los labios, en las mejillas y cuando llego a su oído murmuro:

-Tu turno bebe

Naruto tomó a Hinata de la cintura y se giró en la cama dejándola sentadita en sus caderas, con una pierna a cada lado de Naruto, Hinata se incorporó y al hacerlo pudo sentir la erección de Naruto presionándola entre sus piernas separada apenas por las telas del pantalón de ambos, iba a tomar el pequeño sacudidor para jugar pero al inclinarse sintió un roce delicioso Hinata cerró los ojos y empezó a mover sus caderas dejándose guiar solo por lo la sensación, incrementando cada vez más el movimiento ...-

-Naruto amor esto se siente bien se siente bien amor.

-Aaaaaaaaaahhhh si...si mi vida que instinto tienes mi amor...aaaaaaaaaaaaaahhh- Naruto suspiraba y trataba de controlarse pero era cada vez más y más difícil lo que Hinata estaba haciendo lo estaba enloqueciendo, así que de pronto la detuvo con sus manos y le giro de nuevo dejándola debajo de él y con cuidado le bajo los pantalones, hasta sacárselos.

Hinata se sintió de pronto algo nerviosa.

-Tranquila Hinata tranquila relájate y disfrútalo ¿sí?- dijo besándolo en la boca apasionadamente y luego bajo besando y lamiendo cada parte de su pecho, su torso y así como también su ombligo, jugó en el, hasta que ella empezó a gemir y a reír sin control tenía cosquillas. Naruto aprovechó para bajar hasta su sexo y empezó a darle a Hinata una de las mejores experiencias de su vida, dedicando de cuando en cuando una mirada a la forma en que se remolinaba en la cama.

-Naruto, ¿Naruto qué haces? ¿Qué es...?

-Tranquila amor vas a empezar a sentir mis dedos dentro de ti, te va ir doliendo un poquito pero se te pasara lo prometo lo haré con cuidado. No quiero que sientas demasiado dolor cuando ocurra Hinata

Naruto metió un dedo dentro de ella y Hinata cerró los ojos soltando una pequeña lágrima de dolor y al mismo tiempo de ilusión, Naruto lo iba a hacer, le iba a robar su virginidad y ya estaba empezando con los preparativos

-Shhhhhhhh chiquita, tranquila -dijo y al cabo de un rato de preparativo

-Eso es ya está listo- dijo desacomodándose un segundo y poniéndose de pie para ver la carita de puchero que hacia Hinata demasiado excitada y deseosa. Naruto sonrió y se quito el pantalón que traía quedando desnudo ante sus ojos y se acostó junto a ella, la abrazó y le susurró al oído:

-Tranquila amor enreda tus brazos a mi cuello y no te sueltes mi vida, te voy a cuidar bien ya verás- después de decir esto empezó a penetrarla inquietando a la Hyuga, Naruto se detuvo y espero a que se acostumbrara un poco, un hilillo de sangre brotaba entre sus piernas por tal intrusión pero a Hinata ya no le importaba solo quería que Naruto estuviera finalmente dentro de ella, el rubio empujó poco a poco y calmaba a besos a su novia hasta que finalmente estaba a dentro en su totalidad. Tomo poco a poco un ritmo dentro de ella cada vez más fuerte y más rápido.

Pronto sentían que la pasión de ambos los inundaba en un momento de íntimo e infinito placer

-¿Eres feliz Hinata? ¿Me quieres amor?- le preguntó Naruto en medio de un frenesí de pasión

–Sí, si te quiero te quiero con toda mi alma, te quiero dentro de mi siempre quiero ser tuya siempre... amor, te quiero, te amo, Naruto kun... con esas últimas palabras Naruto inundó el interior de ella y cayó rendido en el final de un dulce orgasmo.

Poco a poco se fueron desacoplando y ella pudo sentir como Naruto le abrazaba protectoramente, besando su frente y acariciando su cuerpo el cual cubrió con una de las sabanas

-Lamento que sangraras, no quería que te lastimaras.- dijo el rubio un tanto preocupado.

-No importa es que… no sabía que fuera tan grande. -Dijo con una sonrisa escondiendo su cara en el pecho de Naruto - ¿Vamos a estar siempre juntos ahora verdad que si Naruto?

Naruto sonrió mientras asentía

-Estaremos juntos mi amor, siempre juntos para verte a diario, para vivir a tu lado , para espiar tus sueños

-¿Espiar mis sueños? ¿Para qué?- dijo Hinata con inocencia

-Para cumplirlos todos quiero ser tu pervertido espía para una eternidad-dijo sonriendo antes de quedarse dormido junto con ella en sus brazos

Aunque en aquel contexto, aquellas palabras le parecieron a Hinata, nada más que una dulce promesa de eterno amor

Fin