Tinieblas.

By: Fesabi

Otro caso se presenta en Shibuya Psychic Research Center, solo que en este se pondrá a prueba cualquier tipo de sentimiento que nuestros intrigantes puedan tener, detrás de cada tiniebla que aparezca a su alrededor hay un peligro, ¿se podrá superar?.

Amor, venganza, celos, odio, felicidad, terror, armonía y agonía… son todos elementos que se desatarán en el siguiente caso…

El superarlos depende de TODOS…

Capitulo I.- Papeles…

Shibuya Psychic Research Center

Suspira con pesar, recordando que es el tercer año que pasa trabajando para ese lugar, se encamina hacia el trabajo con sus diecinueve años cumplidos, va a la universidad en la mañana y en la tarde Shibuya Psychic Research Center.

Sigue suspirando con pesar al caminar por las calles de Tokio, hace tres años atrás que entro por primera vez al trabajo que tiene con Naru, pero nadie se ha acordado de ello como los dos años pasados, recibe felicitaciones de sus demás compañeros pero de Naru ninguna, hasta Lin que es demasiado reservado le ha dicho un "felicidades"…

-¡¡Mai!!.- escucha gritan a cierta persona que corre hacia ella, al darse la vuelta.

- Osamu.- le saluda como suele hacerlo, sonriendo al verlo llegar.

-¿vas hacia las oficinas?.- se lo pregunta.

-si, ¿tu también?.- responde y pregunta, al girarse y comenzar a caminar con él.

-si…- responde pensativo al mirar a Mai de arriba a bajo, cerciorarse que esta con una falda que le llega al muslo y un suéter de tortuga que demuestra sus curvas perfectamente acomodadas.

Y pensar que conoció a Mai hace dos años y medio atrás, ha cambiado mucho esos años, se ha formado como toda una mujer, su cabellera larga llegándole a un poco mas arriba de la cintura, lacia y hermosa para su figura, sus ojos cafés expresivos y brillantes, una lastima que Naru no se diera cuenta de que aquella mujer hermosa esta enamorada de él.

-¿planeas salir a cenar a algún lugar?.- pregunta curioso, sabe desde hace dos años atrás, que esa fecha Mai entro a trabajar con Naru, anteriormente en las dos celebraciones atrás, los demás hacían un pequeño convivió, pero en esta ocasión, tanto como John, Houshou, Ayako y Masako se encuentran trabajando en algunos proyectos de investigación que no requieren del equipo completo, por ello ella, Lin, Naru y él se encuentran en las oficinas, organizando e investigando información de fantasmas.

-no lo creo, creo que volveré temprano a casa.- se lo hace saber con pesar, al seguir caminando, al estar en abril, hace algo de frío y todo por el huracán que se encuentra asechando las costas de China.

-¿no quieres ir al cine?.- se lo pregunta al ver como Mai gira la cabeza sorprendida por s proposición- solo como amigos.- se lo aclara rápidamente, aunque sus intenciones reales sean otras.

-mmmm… bueno, pero yo escojo la película.- se lo hace saber con una risa, al subir las escaleras que les conducen a la oficina.

-que no sea de terror.- bromea al ver como Mai se ríe a un mas.

-¡no es justo Osamu, yo deseo una de terror!.- finge aquella exclamación al después seguir riéndose, al abrir la puerta, solo que no cuenta que con paso enfrente chocara con una persona que la sostendrá entre sus brazos, cortando su risa.

-lo siento.- lo dice al reír un poco, alzando su rostro para ver quien es, abriendo sus ojos enormemente al darse cuenta de que es…

-llegas tarde.- se lo dice aquel hombre de ojos azules, con una mirada dura.

-lo siento…- susurra al separarse de los brazos de Naru al agachar la cabeza avergonzada.

-hazme un té, Mai.- se lo dice como de costumbre, sin emoción alguna, dando paso a que Mai entre a la oficina- acompáñame Yasuhara-san.- termina de decir al entrar al lugar.

-.-

-Aquí tienes Naru.- lo dice suavemente al dejarle su té en el escritorio- ¿no quieres tu uno Osamu?.- pregunta al ver como le sonríe al decirle no.

-Iré a recoger y acomodar las cosas…- lo anuncia al darse la vuelta con la charola que trae en manos.

-Mai espera.- la llama el propio hombre que le roba sus sueños.

-¿deseas algo mas Naru?.- le lo pregunta al girarse.

-Hay un nuevo caso y en este es necesario que estemos todos.- se lo comienza a informar.

-¿es complicado?.- pregunta con curiosidad.

-Parece que si, se han registrado demasiadas personas desaparecidas, en especial mujeres y parece ser que es cosa de algún espíritu ya que nadie ha encontrado al responsable.- termina informando al tener los papeles en su escritorio.

-Lo que he leído que solo desaparecen las mujeres de las cuales se encuentran casadas.- lo dice el propio Osamu.

-Eso parece, por ello pediré que alguien de ustedes finja estar casado, puede ser Houshou-san y Ayako-san o bien John con Hara-san.- lo comunica al elegir a las posibles parejas.

-¿y que hay de Mai conmigo?.- pregunta aquel hombre de ojos grises.

-¿yo?.- pregunta sorprendida Mai al abrir sus ojos enormemente.

-Podríamos mañana viajar y esperar a los demás aya.- comienza a explicar el propio Osamu, al tratar de no ser notorio su interés por aquel papel.

-no creo que sea correcto eso.- se lo hace saber, sin pensar bien aquello, observando como tanto Mai y Osamu se le quedan viendo curiosos.

-solo le llevo a Mai un años, es normal que algunas parejas se casen con esa diferencia, y bien podríamos decir que apenas acabamos de casarnos.- lo explica aquel hombre al ponerse de pie y caminar hacia donde la chica.

-yo…yo… yo…- balbucea la propia Mai al sonrojarse por sentir su mano entre las del ojigris.

-¿Qué dices Mai?.- pregunta impaciente el joven al tener una respuesta.

-¿Qué dices tu Naru?.- lo pregunta al ver al hombre sentado en el asiento observándola.

-no puedo interferir en eso.- se lo hace saber algo molesto al levantarse.

-pero Naru…-

-no le veo problema alguno, Naru no se queja… ¿Por qué no aceptas Mai?.- termina preguntando aquel hombre.

-yo… yo…- balbucea al ver como Naru simplemente se da la vuelta y mira hacia la ventana ignorando lo que esta pasando.

Aunque Naru te hable solamente a ti por tu nombre de pila, no tienes esperanzas… Naru sale conmigo…

Cierra sus ojos con pesar al recordar las palabras de Masako, es verdad el que Naru la llamara con su nombre de pila desde hace tres año no le da un trato especial en todo ese tiempo, así… ¿Qué caso tiene que se ilusione que Naru se ofrezca a interpretar el papel con ella?.

-si eso es necesario, acepto.- lo concluye al suspirar, Mai.

-¡podremos ver los detalles en el cine esta noche!.- anuncia al comunicar aquello, hacia la persona masculina presente.

-¿cine?.-

-eso veníamos discutiendo hace rato, Mai quiere ver una película de terror y lo la convenzo que no.- explica con una sonrisa al seguir sosteniendo la mano de Mai entre las suyas.

-hay películas buenas de terror.- se justifica al hacer una mueca de inconformidad ante las palabras de su amigo.

-pero también hay buenas de acción.- repela al seguir sonriendo, sabiendo bien que interiormente irá a ver lo que Mai deseara, solo le gusta hacerla enojar un rato, observando lo adorable que se ve al terminar inflamando sus caches como ahora.

-¡Osamu!.- exclama al inflar sus cachetes, aquello siendo presenciado por el jefe de ambos, el cual hace una mueca de disgusto.

-vamos Mai tu sabes que…-

-hasta que te encuentro Osamu.- se escucha la voz de un tercer hombre en la habitación, el cual abre la puerta al estar asomado.

-¿me necesitas?.- pregunta el ojigris.

-hay una llamada.- comunica al entrar a la habitación.

-vaya, creo que iré a ver- exclama al inclinarse a besar la mano de Mai y retirarse del lugar, dejando sonrojada a Mai.

-yo iré a preparar mas té.- lo anuncia Mai, al caminar hacia la salida.

-me llevas uno a mi oficina.- lo dice con una sonrisa.

-claro, Lin.- responde al ponerse de puntitas y besar el cachete de aquel hombre que recibe gustoso, como un gesto de hija a padre.

Cierra la puerta al saber que Mai se ha ido, fijando su vista en donde esta el hombre del cual ha cuidado todos estos años y seguirá haciendo, al igual que lo hara por Mai, tanto ella como Naru han sido los únicos que han traspasado esa barrera que el mismo se encargo de poner, por ello a Mai le sonríe y le permite darle un beso en la mejilla a los demás no, simplemente mantiene sus distancias.

-¿se te perdió algo?.- pregunta al ver a Lin de pie.

-¿Por qué no le dices simplemente lo que sientes?.- pregunta al ir directamente al grano refiriéndose a lo que pasa.

-que te importa.- responde fríamente al seguir contemplando lo que hay afuera de la ventana, personas pasando y los coches transitando.

-¿dejaras que Osamu, Houshou o algún otro te la quite?.- lo dice al saber de los sentimientos de Naru, al conocerlo de tantos años eso le permite el averiguar la verdadera personalidad de aquel hombre.

-que te importa.- vuelve a responder groseramente, molesto que Lin lo aya notado, cuando los demás no lo han hecho.

-yo solo te digo que Mai esta enamorada de ti, pero claro como un tonto la vas a dejar.- se lo informa al ver la sorpresa en los ojos azules de Naru.

-¿enamorada?.- lo dice como eco.

-¿y dices ser inteligente?.- pregunta con burla al sonreír mientras se da la vuelta, al volver al trabajo.

-mañana…-

-lo se, saldremos y Mai fingirá estar casada con Osamu.- lo interrumpida diciendo lo ultimo con pesar.

¿enamorada?... ¿Mai de él?...

-.-

-¡no!, ¡no! Y ¡no!.- lo exclama al mismo tiempo que sus brazos se encuentran debajo de sus pechos.

-oh vamos, Mai que te cuesta ver esa película.- la trata de persuadir pero parece ser que Mai se niega a ver una de acción, ocasionando que él sonría.

-mucho, yo no veo ese tipo de películas.- se lo hace saber al inflar sus cachetes en signo de enojo, no planea ceder a ver una película de acción cuando puede ir a ver una de terror.

-bien, bien, tu ganas pero no te enojes.- lo dice al fingir un poco de fastidio lo cual causa la risa de aquella mujer de diecinueve años.

-tonto…- murmura Mai entre risa al tomar su mochila del sillón.

-un tonto que le gusta estar en compañía de una mujer hermosa.- se lo hace saber ocasionando el sonrojo en las mejillas de Mai y la risa se ha apagado en sus labios, a diferencia de los suyos que demuestran una muy amplia.

-¿ya se van?.- escucha la voz masculina que reconoce de inmediato, lo cual sus ojos marrones lo buscan, encontrándolo a unos metros de ellos, con aquel traje negro y camisa blanca.

-vamos al cine, ¿deseas acompañarnos Naru?.- pregunta aquel hombre de ojos grises, al girarse y encontrarse a su rival en secreto, a pesar de que Naru no sepa de sus sentimientos por Mai, él sabe de los sentimientos que tiene Mai por Naru y aquello lo convierte en su rival.

-Yasuhara-san, necesito que vayas a la joyería a comprar las alanceas de matrimonio y el anillo de compromiso.- se lo hace saber al mientras dentro de su cuerpo se siente un calor en todas sus venas y como su estomago empieza a presentar algo de malestar.

-pero…-

-después de que los tengas, regresa con Lin por que debe de ponerles algo.- se lo hace saber, ignorando cualquier tipo de protesta.

-lo siento Mai, creo que cambiamos de planes.- lo dice con pesar al soltar un suspiro volteando a ver a la mujer de ojos marrones.

-no te preocupes entiendo.- contesta aquella mujer de cabello café largo.

-pero si deseas vamos a la ultima función, terminando de entregar los anillos.- se lo sugiere cosa que Mai sonríe.

-tendrán que dejarlo para otro día ya que mañana partimos temprano.- lo dice el propio Naru sorprendiendo a ambos individuos, Osamu se queda inmóvil en aquel lugar, observando con sus ojos griseasos al jefe, el cual les esta prohibiendo la salida a ambos… ¿que demonios sucede?.

-entonces… nos vemos mañana.- lo dice con pesar la propia chica, despidiéndose de ambos, al darse la vuelta.

-espera Mai.- la llama su jefe deteniendo su salida.

-¿que pasa?.- se lo pregunta al mostrar sus ojos tristes, simplemente fijos en aquel hombre de veinte años.

-¿puedo hablar contigo?.- se lo pregunta suavemente al ver al hombre que los acompaña, como expresándole que los deje a solas.

-iré por el pedido… jefe.- concluye al salir del lugar, no sin antes despedirse Mai, con un beso en la mejilla, del cual el hombre que no expresa sentimiento alguno no se mueve del lugar.

Espera impaciente lo que Naru debe de decirle, solo que este simplemente la mira fijamente, ocasionando que se sienta incomoda, ante su presencia, sonrojándose un poco al recordar como Naru es muy diferente en sus sueños y en la realidad.

-Si no quieres representar el papel que ha surgido no debes de hacerlo.- comienza a decirlo sintiéndose por primera vez en su vida estupido por no poder simplemente expresar un "¿quieres ir al cine?".

-se que es por trabajo Naru, y no me molesta…- comienza a decirlo sonriendo- recuerdo la vez que fingí como pareja del monje-san.- ríe.- y a lo largo de los años he hecho otros papeles.- concluye con una sonrisa

Se queda callado, al tratar de callar sus emociones, el no tener algún impulso que no va con él, Mai desde hace tres años que la conoció ella tenía dieciséis años y ahora diecinueve, se ha trasformado en una hermosa mujer.

-nos vemos mañana, Naru.- se despide al darse la vuelta y comenzar abrir la puerta.

-Mai, ¿no quieres ir al cine?.- lo pregunta rápidamente, viendo como la chica se queda congelada en el lugar.

-yo…yo…yo…- balbucea al no saber que responder.

¿Naru esta hablando enserio?

-.-

Y vaya que si hablaba enserio…

La prueba esa que Kazuya Shibuya, alias "Naru", como ella misma lo bautizo en el primer caso que ambos compartieron, simplemente por que Shibuya, parece un Narcisista, que en diminutivo es Naru; él esta con ella en esos momentos.

Las imágenes en la pantalla grande se trasmiten a pesar de sus pensamientos están en otro lugar.

-¿hablas enserio Naru?.- pregunta tímidamente al dejar un sonrojo intenso en sus mejillas.

-¿acaso te da repugnancia mi presencia?.- se lo pregunta fríamente.

-¡oh no, claro que no!.- exclama nerviosa y sonrojada.

-entonces, andando.- lo ordena al salir de lugar, siendo seguido por Mai.

-iré por algo de refresco, ¿quieres algo Mai?.- pregunta en susurro cerca del odio de la chica, ocasionando que esta sienta cosquillas recorrer su cuerpo.

-helado…- murmura débilmente al sentir como Naru se levanta del asiento, dejando que en su cuerpo pueda percibir, un ligero temblor con un calor que nace desde la boca de su estomago.

Sigue sonrojada simplemente al saber que se encuentra en una "cita" con Naru, había envidiado tanto a Masako por que ella sale con Naru y él no se niega a esos paseos, solo que ahora el hombre por el cual late su corazón tan deprisa se encuentra en esos momentos en el cine con ella, viendo ambos una película de la cual ella no sabe de que se trata.

Fija su vista en la pantalla, llegándole las imágenes a su mente, una sombra pasa rápidamente en la habitación donde esta situada la escena de la película saltando un poco a su corazón, al asustarse.

Se escucha por toda la sala el grito de una mujer, provocando el grito de los espectadores junto con el suyo, ni siquiera dar tiempo de reaccionar da otra escena donde el espejo se encuentra solo sin ningún reflejo, ocasionando el suspenso de las personas que ven la película.

-Mai…- escucha aquel susurro que la llama, el cual llega asustarla causándole el brincar en su asiento al escapar también de sus labios un pequeño grito.

-Naru…- murmura su nombre con un reproche al verlo sentarse a su lado.

-de Coco.- se lo hace saber al mostrarle el helado con cono que le da.

-mi favorito… ¿Cómo lo sabías?.- primero susurra sorprendida al terminar preguntando, fijando sus ojos en los ojos azules de Naru.

-como te dije en una ocasión Mai, te conozco muy bien.- se lo recuerda al sonreír ocasionando que el sonrojo en las mejillas de Mai sea mucho mas intenso.

-Primero te sientes deprimida, entonces te sientes enojada, finalmente te calmas, y después te vuelves optimista…- se lo hace saber al darle una mirada indiferente como si eso lo supiera desde hace mucho tiempo

-De verdad me conoces muy bien.- lo dice asombrada Mai.

-Esta escrito por todo tu rostro…- y aquel ultimo comentario la hace sonrojar.

El sonrojo de sus mejillas no desaparece al recordar aquella ocasión hace dos años y medio atrás, cuando ambos estaban en el tercer caso, el que ella por sus impulsos orillo a Naru caer en el poso, dejándolos a ambos atrapados.

-gracias.- murmura al bajar la vista al helado que yace en su regazo entre sus manos.

-¿te gusta la película?.- pregunta al fijar su vista azulada en el perfil de su acompañante.

-prefiero los casos.- se lo hace saber al subir sus mirada y sonreír un poco.

-Mañana tendremos uno.- se lo recuerda, al girar su mirada a la pantalla fingiendo interés.

No logra entender que es lo que sucede, la primera vez que sale con Naru en esos tres años y precisamente el día que es el "aniversario" de ello.

Suelta un suspiro con pesar al comenzar a comerse su helado de coco…

Hombres… ¿Quién los entiende?... en especial a Naru

-.-

-gracias por acompañarme Naru.- se lo dice suavemente al ambos estar en la entrada del lugar donde vive.

Se mantiene en silencio, sin saber que decir, ha salido con algunas chicas por que ellas se lo pidieron incluso ha salido con Masako, pero al dejarlas en las puertas de sus casas el simplemente dice un adiós y se va, pero con Mai se siente completamente diferente.

-nos vemos mañana, Naru.- se despide al abrir la puerta de su departamento.

-Mai…- susurra lo sufriente algo para detener a la joven.

¡demonios!... ¿ahora que hace?... él y esos malditos impulsos que comienza a tener.

-¿Qué pasa Naru?.- le pregunta al hombre.

-mañana debemos salir temprano.- comienza a decirlo al ver como Mai asiente un si, de que aquello lo sabe muy bien- y como es algo tarde, … ¿Por qué no vienes a quedarte conmigo en el departamento que comparto con Lin?.- termina preguntando maldiciéndose mentalmente al no saber si fue buena idea o no, total ya lo ha dicho.

-¿hablas enserio?.- pregunta demasiado asombrada, sin creer en las palabras de su jefe.

-tienes veinte minutos para hacer la maleta, antes de que Lin se preocupe y decida venir por ambos.- se lo comenta al pasar al departamento de la chica, sin darle tiempo de responde una negativa.

-ahora vuelvo.- anuncia al entrar por un pasillo dejando a Naru en la sala, todavía sintiéndose asombrada por aquella petición, ¿acaso esta viviendo aquello?, ¿no será uno de esos sueños que tiene tan reales?.

Si fuera aquello, que no la despertaran…

-.-

-buenas noches Mai.- saluda sorprendido Lin al ver entrar a Naru con aquella chica, encontrándose en él sentado en el sillón con un solo pantalón cómodo de vestir, ya que su pecho esta descubierto.

-bue-bue-nas… nno-ches… Lin.- murmura sonrojada al ver el estado de aquel hombre.

-ire a vestirme, para no pervertir tu mente.- lo dice en burla al notar como las mejillas de Mai se encuentran rosadas.

-espera aquí Mai, iré a sacar unas cosas de mi habitación.- se lo hace saber al dirigirse por el pasillo.

iré a sacar unas cosas de mi habitación…

¿Qué quería decir con eso?...

Toma asiento en el sillón café que hay en la sala, admirando a su alrededor, recordaba que cuando Naru cumplió los dieciocho, sus padres le regalaron un departamento para que el pudiera tener privacidad, pero vivía con Lin, eso quería decir que Lin sigue protegiéndolo.

-El poder de Naru es comparable…- se lo hace saber al posar sus manos en los hombros de Mai.

-¿Incomparable?.- pregunta sorprendida.

-Cuando era niño, a menudo causaba fenómenos poltergeist.- comienza a decirlo- le enseñe los métodos del Kikiou para que pudiera controlar el "ki" que fluía de su cuerpo, dado a que su mente sola no podía hacerlo, pero… el poder que tiene Naru es demasiado grande para que lo posea un ser humano mortal, por lo tanto… siempre que lo usa su cuerpo no lo resiste.- termina aquella explicación al ponerse de pie.

Cierra sus ojos al recordar aquel día que por su culpa Naru acabo en el hospital, aunque Lin trato de decirle que no fue culpa de nadie, todavía se llega a sentir culpable, por ello trataba de no perder la calma en los demás casos, no deseaba arriesgar de nuevo a Naru por sus comentarios hirientes.

-acompáñame Mai.- aquello la saca de sus pensamientos, ocasionado que sus ojos se abran y vea a Naru frente suyo.

-si…- susurra al levantarse.

Camina por el pasillo detrás de Naru, sintiéndose intimidada por él a pesar de que su corazón late rápidamente.

-dormirás aquí, ya que mañana nos vamos temprano.- se lo dice al dejar la maleta de Mai encima de la cama matrimonial, con cobijas azul oscuro.

-gracias… ¿de quien es la habitación?.- pregunta curiosa al ver todo a su alrededor perfectamente acomodado.

-mía.- responde secamente al tratar de no perder el mismo la compostura, tiene desde hace tiempo las ganas de besar a Mai, aquellos labios carnosos que lo llaman.

-¿tuya?...- pregunta sorprendida al ver a Naru- ¿Dónde vas a dormir?.- termina con aquello llena de curiosidad.

- en la sala.- se lo dice al girarse y dejar a Mai en su habitación- buenas noches, Mai.- se despide al cerrar la puerta de su habitación.

-buenas noches Naru…- murmura débilmente al fijar su vista en la puerta de la habitación.

-.-

-¿para que la trajiste?.- pregunta curioso, mientras sonríe al estar sentado en uno de los sillones.

-¿lo cuestionas?.- pregunta al tomar asiento al estar vestido con su pijama.

-supongo que habrás quitado la fotografía que tienes en tu habitación de ella, ¿no?.- pregunta burlonamente sin deshacer su sonrisa.

Trata de no reír al ver la cara que pone Naru, es como si con ella quisiera matarlo lentamente por su comentario, aunque él no tiene la culpa de que Naru tenga una fotografía de Mai en su habitación, esa misma fotografía que le sacaron a Mai el día de su cumpleaños; ese día lo recuerda perfectamente bien, tanto como Houshou, Ayako, John, Osamu y Masako organizaron una pequeña reunión sorpresa para Mai, en la cual se dedicaron a tomar fotografías, en una Houshou tomo a Naru para llevarlo con Mai, el cual se resistió un momento y comenzó a decir cosas como: este lugar es de trabajo… yo si trabajo no que otros..., total al final le tomaron la foto a ambos, Mai abrazando a Naru y este mirando hacia la cámara con una Mai sonriente y sonrojada; el que se encargara de revelar las fotos fue una ventaja para Naru ya que le saco una fotografía a escondidas sin que nadie se enterara exceptuando él.

-leeré un libro antes de dormir.- lo anuncia al decirle indirectamente que se vaya y lo deje solo.

-te diría, despertare mañana a Mai, pero creo que ese placer lo quieres tu.- vuelve a decírselo burlonamente al levantarse del sillón, dando su ultima marida a aquel hombre.

No llega a decirle nada a Lin ya que este se dirige a su habitación, suspira con pesar al tomar las cobijas que saco de su habitación para que se acomode en la sala, el departamento es algo amplio ya que fue al gusto de sus padres, tiene tres recamaras, una de él, otra de Lin y la tercera como un pequeño gimnasio.

Toma uno de los libros que trajo de su habitación para comenzar a leer, mientras su cuerpo descansa extendido en el sillón suave de la sala, su cabeza en el cojín, dedicándose a concentrarse un poco en a lectura.

El titulo del libro puede verse en la portada de este: tipos de espectros que existen.

-.-

La puerta de aquella habitación perfectamente acomodada donde yace en la cama matrimonial una mujer de cabello castaño y ojos marrones que son tapados por dos parpados.

Con el mismo silencio en el que camina hacia la cama, lo utilizo para cerrar la puerta de la habitación, fijando su vista en la mujer que yace en su cama, cómodamente dormida en medio de ella; no puede dormir y el darle demasiadas vueltas al sillón no le ayuda en nada, tomando aquel otro impulso en ir a ver a Mai.

Se sienta a un lado del cuerpo de Mai, escuchando como ella suspira y se mueve un poco, dejando descubierto su hombro el cual esta sujetando un fino tirante rosado.

¿Cuándo piensas decirle a Mai lo que sientes?...

¡que importaba!, total Lin no tenía toda la razón del mundo, aunque el le llevara cinco años eso no significaba que era mucho mas maduro que él.

-¿Naru…?.- murmura soñolienta la propia Mai al abrir sus ojos pesadamente.

No hace algún movimiento, se queda observando a Mai.

-no estamos en un caso, Naru…- susurra débilmente al bostezar un poco en señal de que todavía tiene sueño.

-¿caso?...- murmura curioso.

-si, siempre que estamos en un caso me visitas en sueños, ¿no lo te acuerdas?.- se lo explica con aquella voz lenta a causa del sueño, parpadeando sus ojos para no quedarse dormida, aunque en sus labios se asoma una sonrisa.

-entiendo…- susurra al ver a Mai sonreírle un poco, ocasionando que su corazón salte.

-¿sabes?... me gusta cuando me miras.- lo confiesa al murmura soñolienta todo aquello.

Se dedica a escuchar a Mai, sonriendo ante sus palabras de la misma manera que se inclina un poco hacia delante, si Mai creería que era un sueño podría aprovecharse un poco de aquello.

-¿Qué haces Naru?.- pregunta la pelicafe, al no comprender que hace el chico.

-¿Qué desearías que hiciera Mai?.- pregunta roncamente al acercar su rostro al de la chica acostada en la cama.

-besarme…- se lo hace saber débilmente al estar sonrojada.

-será todo un placer…- murmura sonriente al capturar los labios de Mai, escuchando como un suspiro se hace presente en sus labios, primero tensa y después el comenzarse a relajarse, sus labios hacen movimientos lentos y su cuerpo comienza a dejarse llevar al igual que su mente ante el dulce sabor que esto le produce.

Las manos de Mai se colocan en el pecho cubierto por la pijama de Naru, abriendo sus labios para que este penetre con su lengua su boca ocasionando un gemido ronco en su garganta.

Se separa de los labios de Mai, no sin antes chupar suavemente su labio superior, al seguir sintiendo todo aquel cosquilleo por todo su cuerpo, sonriendo al mirar los ojos de Mai abrirse poco a poco con aquel brillo intenso.

Ambos se quedan en silencio, simplemente mirándose uno al otro, sin querer estropear aquello con palabras.

-duerme…- murmura al inclinarse a besar de nuevo aquellos labios que Mai susurra un si, al dejarse llevar por aquellos labios.

Apenas puede creer que Naru este besándola en ese sueño, el imaginar tantas veces aquello, ahora se convierte en uno de esos sueños que tiene con Naru, sin tan solo fuera real…

-buenas noches Mai…- susurra entre los labios, separándose con dificultad al levantarse de la cama y girar hacia la puerta.

-Naru…- lo detiene.

-¿Qué pasa?.- pregunta al tratar de tener un poco de tranquilidad dentro de su cuerpo.

-duerme conmigo.- lo pide Mai hacia aquel Naru que le sonríe tantas veces.

Se gira al ver a Mai levantada un poco mostrándole aquel camisón rosa que cubre su cuerpo, con aquellos ojos cafés que piden que sea cumplida su petición.

Si se levanta mucho antes de que Mai despierte no tendría que explicar absolutamente nada y Mai crearía que fue un sueño.

Ve como Naru se encamina de vuelta a la cama, metiéndose dentro de las cobijas al extender un brazo e indicarle que se acerque a él, lo cual no desaprovecha, recuesta su cabeza en el pecho de Naru al abrazarlo, sintiendo como poco a poco el sueño vuelve a vencerla, sonriendo al saber que por lo menos en sueño tiene un recuerdo hermoso de Naru.

Sus ojos azules comienzan a cerrarse poco a poco dando paso a que Kami los lleve a un mundo de sueños…

-.-

Abre sus ojos lentamente bostezando y fijar su mirada a lo que abraza, sintiéndose decepcionada que su sueño aya terminado, deja caer su rostro en la almohada que tiene entre sus brazos, hundiéndolo y amortiguando un grito de sus labios.

¡baka Mai!, ¡baka Mai!...

Solo a ella se le ocurre tener ese tipo de sueños, el que Naru viene a la habitación y la besa, donde Naru se queda a dormir con ella…

¡Mai Tonta!, ¡Mai Tonta!...

Escucha como la puerta se abre de la habitación obligando que alce su rostro, sonrojándose al ver quien es.

-partiremos dentro de una hora.- se lo informa aquel hombre de ojos azules, a la mujer que se encuentra acostada en su cama.

-en un momento bajo.- responde sonrojada al recordar la sensación que tuvo cuando soñó besarlo.

-Lin prepara el desayuno.- lo concluye al cerrar de nuevo la puerta, dejando a Mai dentro, sintiéndose orgulloso por que aquel sonrojo es provocado por él.

Se encamina a desayunar esperando que Mai baje ante su llamado, tendrían que partir al aeropuerto donde tomaran un vuelo hacia Ôita, en el situó donde se encuentra aquel caso que lo tiene algo inquieto, las desapariciones que se presentan en aquel hotel no es normal para cualquier caso paranormal, lo cual le recuerda a cierto caso que hubo en la casona de un ministro, el cual como única solución se quemo aquel lugar.

-espero que no tarde.- escucha que Lin se lo dice.

-se acababa de despertar, así en lo que se alista.- se lo explica al tomar asiento.

-debes tu también que cambiarte.- se lo hace saber al verlo todavía puesto con la pijama, aunque Naru no tenga ni idea que él ya sabe que paso la noche con Mai, sonríe al saber que ese pequeño secreto podrá decirlo cuando le crea que sea conveniente.

-lo se…- susurra al dejar perdida su vista azulada en el desayuno, recordando la noche anterior en la cual Mai estaba entre sus brazos, el despertarse una hora antes de que Mai se levantara fue una ventaja ya que su cuerpo se negaba a separarse de ella; una vez que Mai terminara de usar su habitación se ira a cambiar y preparar lo que necesita para salir de viaje.

Salir de viaje… un presentimiento no muy bueno hay respecto a ello.

-.-

-¡Mai!, ¡Mai!... ¡Mai!...- se escucha aquel grito masculino al llamarla, gira su cabeza en busca de la persona que la lleva observando a cada una de las personas que hay en el aeropuerto.

-¡Houshou-sama!.- grita Mai al ver quien se acerca hacia donde esta con Naru y Lin.

-¿Cómo es eso que fingirás ser la esposa de Osamu?.- pregunta al estar algo molesto, al traer en su espalda una mochila.

-es parte del caso Houshou-sama.- lo explica al dar un pequeño paso donde puede estar un poco Naru enfrente de ella.

-me voy con John a terminar un caso y cuando regreso la mujer que adoro finge casarse con otro.- se lo hace saber al darle una mirada triste.

-Houshou-sama… por favor…-

-¿por que no finges estar conmigo Mai?.- pregunta al hacer a un lado a Naru el cual se encuentra molesto al ver a que las manos de Mai son tomadas entre las de aquel monje.

-Houshou-sama…-

-suelta las manos de mi esposa, Houshou-sama…- se escucha aquella voz masculina ocasionando que las personas lo miren.

-¿no crees chiquillo que Mai es demasiado para ti?.- se lo pregunta en burla al girarse a enfrentar aquel hombre.

Mai por su parte se sonroja y al mismo tiempo se esconde detrás de Lin al ver como comienzan a discutir dos hombres.

-¿por que no están en Ôita?.- pregunta fríamente Naru al hombre de cabellera amarrilla.

-Houshou-sama se entero de los papeles que van a interpretar Mai y Osamu, por lo cual decidió regresar, trate de persuadirlo de lo contrario pero no pude hacerlo.- se termina disculpando al ver como ambos hombres siguen discutiendo quien es mejor para Mai.

-Naru…- lo murmura Lin, al hacerle entender lo que pasara.

-lo se, será mejor parar esto antes de que perjudique al caso.- se lo dice a Lin al saber que tiene en mente.

-¡yo me quedare con Mai!.- exclama aquel monje.

-¡yo ya tengo todo listo!.- lo contraataca aquel otro hombre.

-cambio de planes.- lo dice Naru al llamar la atención de los cuatro hombres presentes y la de la chica- no planeo tener en este caso alguna discusión, así que interpretare yo el papel que le corresponde a Yasuhara-san.- concluye al ver la cara de asombro de los tres hombre, el sonrojo de la chica y la sonrisa de aquel hombre alto de origen chino.

Continuaraaaaa!!...

¡Konichiwa!, la verdad yo soy autora de historias que pertenecen al Manga Inuyasha, nunca he probado hacer de otro Manga/Anime, hasta ahora que la historia de Ghost Hunt me capturo en todo su trama y el personaje de Naru… ¡que puedo decirles!, me enamore de ese hombre, al ver que no hay historias en español me anime con ayuda de mi hermanaza a escribir esta historia, no se si es buena, mi especialidad es Inuyasha y Kagome, en el anime de Inuyasha.

Espero que la disfruten… como yo lo hice al escribirla…

Solo les pido un favor, no soy escritora profesional y para esto no me pagan, así que sus criticas la verdad no me interesan, siento que esto sea duro, pero en este trabajo no me pagan para soportar lo que a mi no me agrada.

Como digo en cada una de mis historias, si no les gusta solo cierren la ventana y busquen otra que les agrade…

Muchas gracias por leer…

Se despide

Fesabi…