TRES PROMESAS QUE NO PUDE CUMPLIR

By: K. G. Á. É.

Sasuke y Sakura van a casarse, pero… Advertencia: muerte de un personaje, Shonen ai. SxN

DEDICADO A: Azula.x, linux-chan, jennita ¡Gracias por su apoyo en mi fic 'CONEXIÓN'!

NARUTO no me pertenece.

TRES PROMESAS QUE NO PUDE CUMPLIR

Prometí que te traería de vuelta, pero no pude cumplir porque tú regresaste por tu propia cuenta.

Me prometí convertirme en Hokage, pero no en cualquier Hokage sino en el mejor, pero no pude hacerlo porque fui quien destruyó la aldea.

Me prometí no llorar ni hacer sufrir a nadie.

Pero cuando tomé aquella decisión, me pareció la correcta.

No quería ser yo el padrino de los anillos que te unirían a ella, pero tampoco quería alejarte de la que creía tu felicidad, sin saber que con mi decisión lo haría, te la arrebataría cruelmente.

Lo siento, pero ¿cómo iba a saber yo que cuando me dijiste que amabas a Sakura-chan esperabas que te dijera el secreto que mi corazón ha guardado?

¿Cómo saber que con dos palabras que no dije y con dos que sí, mataría nuestra felicidad?

Porque al decirte "está bien" y sonreírte negándote que la amara a ella, deseándote felicidad con un "felicidades amigo" mientras te abrazaba fuertemente, tomaste una decisión, la cual era parte de un trato.

Un trato hecho con anterioridad entre tú y ella; un trato del cual yo no sabía nada…

Y al final, justo el día de tu boda, hice lo que tiempo atrás había decidido en un trato hecho también con una joven, la cual carga sobre sí la eternidad.

Quería que fuera feliz, pero no soportaría verle con esa persona que no sería yo, cuando llegó ese momento partí para siempre, para no sufrir con su recuerdo, con nuestros recuerdos, que para él no tendrían la misma valía que para mí.

Y así, con ese líquido de despedida eterna, me marché diciéndote adiós en silencio…

Un silencio, que de algún modo escuchaste. Apresurándote…

Dejándole en el altar antes de que dijeran sus votos, desconcertándolos a todos; ella tras de ti poco después, habiendo escuchado en tus labios mi nombre y siendo embargada por tu preocupación, pues era también una buena amiga.

Pero al llegar a donde estaba…

Al encontrarme recargado en un árbol, con una sonrisa en los labios con el cielo oculto por mis párpados, y los rayos de sol sobre mi cabeza movidos por la brisa del momento, tan tranquilo como si dirigiera mi visión al agua que caía en aquel lugar, aquel Valle del Fin.

…Comenzaste a llorar…

… porque era yo quién se había ido en esta ocasión, porque a diferencia mía, tú jamás podrías hacerme volver y por mucho que me buscaras, no me encontrarías.

Y entonces me dijiste, aquellas dos palabras que yo no te dije: "Te amo".

Teniéndome en tus brazos me preguntabas el '¿por qué?' sin saber que la respuesta había salido ya de tus labios.

"Te amo"

Esa había sido mi razón, pero, al igual que tú, nunca sabría que era correspondido…

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¿Qué había pasado?

No podía evitar preguntarte el '¿por qué?' de una forma tan desesperada, sin importarme en aquel momento que Sakura llegara y me viera en ese estado.

Teniéndote entre mis brazos te aferraba a mí, queriendo que mi calor llenara tu cuerpo, que de pronto abrieras esos ojos tuyos con un azul más hermoso que el del cielo y me dijeras "Caíste, baka", sonriéndome como si de una broma se tratase y entonces ambos discutiéramos como siempre.

Pero ese momento no llegaba y cada vez te sentía más lejano.

—Te amo—volví a repetir esperando me respondieras, quizá no me habías escuchado anteriormente, pero nuevamente tu mutismo.

Trataba de evadir los golpes de la realidad, pero no podía y los recibía todos en mi corazón que dolía fuertemente.

Te habías negado a ser nuestro padrino.

Te pregunte el '¿por qué?' poniendo como excusa que Sakura me preguntaría."Tengo algo que hacer, lo siento no podré asistir a la boda" fue lo que dijiste y te alejaste.

"Adiós, Sasuke" en esa ocasión, tu mente pareció olvidar el insulto que suele acompañar mi nombre al salir de tus labios; en ese momento, sentí más dolor del que ya sentía, como si debiera ir tras de ti y decirte lo que realmente había querido decirte; pero no, simplemente te deje ir.

Porque yo le prometí, que si tú no te oponías de manera alguna me casaría con ella. Había aceptado pues dijo que mi felicidad era importante para ella.

Y es que, me había prometido que te protegería y también a tu felicidad. Siempre dijiste amarla a ella, por lo que eso, me llevó a recordar cuando casi te mato en aquel tiempo para obtener el mangekyo sharingan; aquel instante en que no pude hacerlo, porque tenía por ti un fuerte sentimiento que reconocí mucho tiempo después, prometiéndome que no te lastimaría nunca más, pero…

—Sasuke—su voz era un susurro apenas audible, volteé hacia ella, lloraba, aun con su vestido de novia puesto me había dado alcance, sin duda era una gran kunoichi.

—Sakura lo siento yo no…—traté de decirle que no podía continuar con la boda.

—Sasuke…—pero ella me interrumpió, sollozando, de pronto aferrada a mi espalda.

—En ese momento…—comenzó a hablar—pensé que era tu gran amistad hacia Naruto… la que no quería verle sufrir… porque siempre había dicho amarme…—con trabajo, entre sollozos decía, decidí esperar a que terminara.

—Pero me doy cuenta ahora… que era amor… un muy profundo amor… ¡Que jamás sentirás por mí…!—abrí aún más los ojos, sorprendido.

—No sabes cuánto lo siento…—entendía mi dolor—No tienes por qué continuar… con lo que dejamos pendiente… Sasuke…—quedó en silencio y entendí que no diría más.

—Lo siento…—susurré, ella sabía que ello encerraba un 'gracias'.

El veneno que Naruto había tomado era demasiado potente, por lo que había muerto casi de inmediato, sin mucho dolor, cumpliendo el trato que todos tenemos con la muerte…

Nunca llegué a casarme con Sakura y ella sabía el '¿por qué?'.

Los demás sufrieron también al saber lo sucedido. Iruka-sensei y Hinata fueron los que lo tomaron peor, cayendo inconscientes ante la noticia; al despertar ambos parecían ausentes, se negaban a la verdad, afortunadamente ninguno está sólo…

En cuanto a mí, tenía la sensación de haber abierto en ti una profunda herida aquel día en que me dijiste adiós, me sentía peor por no saber qué era tu felicidad y también por hecho de no haber podido protegerte de mí ni de ti…

Convirtiéndose mis acciones en tres promesas que no pude cumplir…

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N/A: ¡GRACIAS POR LEER ESTO…!

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¡Espero les haya gustado…!