Esta es una versión personal de lo que podría haber sucedido en el último libro si Harry se ubiera acercado a Ginny en lugar de "esperar". Una escena después de la muerte de Voldemort, cuando todos se encuentran sentados en el Gran Salón.
Ojalá les guste.


Al Fin Juntos

Ahora podría trasladarse por el salón sin que lo vieran. Localizó a Ginny sentada dos mesas más allá, con la cabeza apoyada en el hombro de su madre.
Una extraña sensación se apoderó de su cuerpo, después de haber pensado que ella tenía toda una vida por delante, ahora, él también la tenía.

Notó a Ron y Hermione sentados en unas mesas, un poco más lejos. Ya habría tiempo para hablar con ellos, había algo más importante que quería solucionar.
A tientas, y con los ojos cansados, intentó vislumbrar la pequeña silueta de la que había solido ser su novia. ¿Era mejor esperar, o seguir adelante?

No. No iba a dejar pasar ningún segundo más.

Con cuidado, se acercó hasta la mesa dónde se escuchaban los lastimeros sollozos de la señora Weasley. Su corazón se detuvo y pensó que tal vez no era el mejor momento para hacerlo. Pero ya estaba ahí, no podía esperar más, luego tendría tiempo para dormir y comer algo.

Una mano invisible se apoyó en el hombro de Ginny, su corazón se aceleró cuando ella se volteó para ver quien la llamaba, y no le sorprendió ver que su rostro dibujaba una sonrisa.

-¿Estás ahí? –Murmuró con los ojos irritados a causa del llanto, y las mejillas manchadas producto de la batalla.

Harry sonrió y se quitó la capa, quedando visible ante todo el mundo. Las personas y alumnos que acompañaban la mesa de los Weasley miraron curiosos, pero felices, al héroe que los había salvado. Pero él tenía ojos solamente para Ginny.

Como un acto impropio de él, sin saber cómo ni porqué, le ofreció su mano, la que ella tomó sin reparo. Harry sentía su respiración cortada, salvar al mundo lo había dejado agotado, ¿o era la forma en que ella lo miraba?
No sabía qué decir, estaban los dos de pie, uno frente al otro, tenían tantas cosas que decirse pero ninguno sabía por dónde empezar.

-Felicidades –Sonrió ella.

Harry sintió una felicidad incontrolable, un júbilo indescriptible, el cansancio y el hambre se habían esfumado, sólo estaban ellos dos, nadie más. Era ahora, o nunca.

Lentamente se acercó a su rostro, y de forma refleja lo tomó con ambas manos. No controlaba su cuerpo, pero tampoco hacía intentos por detenerse.
Finalmente, la besó.

La besó como nunca antes la había besado, la alegría que sentía no se podía comparar con ninguna satisfacción pasada. Ella rodeó su cuello con los brazos y él la abrazó con más fuerza. El comedor entero no podía hacer otra cosa, excepto, mirarlos impresionados. Eso era algo que no se esperaba.

Harry y Ginny se miraron, ahora sabía lo que era tener esperanzas. Por fin comprendía lo que Dumbledore tantas veces le había explicado: el amor, es lo único que vence a la muerte.
Entonces, sintió lástima por Voldemort, porque comprendió que él jamás, ni siquiera en la muerte, sentiría algo como eso.


Notas de la Autora:

Está es mi versión del beso que nos faltó a todos en DH, la reconciliación de Harry y Ginny al final del último capítulo.

Es lo mejor que pude hacer. Las primeras líneas son originales del libro, lo demás, bueno... traté de que se pareciera en lo posible a la narración de JK.
Como ella no es de las que describen un beso, me imaginé que sería romántico pero no muy explicativo.

Espero que les haya gustado.