Esta
historia se da en un universo alterno El deseo del rey
Capitulo 1Una nueva vida empezaba, un nuevo reinado tenia que empezar en la Tierra, solo era cuestión de tiempo, y el planeta Tierra se llenaría de fiestas, el planeta era muy pacifista y sobre todo estaba llena de tecnología, tecnología que le brindaban a Freezer, para que este ser tan poderoso no la terminara destruyendo, como era de costumbre, lo satisfacían con los mejores equipos, armas, naves, todo lo que para Freezer le era necesario, todo a cambio de seguir vivos… Para Bulma no le era difícil hacer cuanto le pedía Freezer, ella aparte de ser una princesa de su planeta, era muy buena científica, conocimientos heredados de su padre, para ella le era muy respetable su padre, el Rey de su planeta y también su padre.
El tiempo transcurría y Bulma se hacia mas grande, estaba lista para casarse con el futuro Rey del Planeta Tierra, ella tenia decidido a quien elegir por esposo, las leyes del planeta Tierra eran claras y estrictas, se tenia que casar con alguien de su misma especie humana y este tiene que ser de un cargo muy elevado, ya sea por militar o por linaje, todos acataban las leyes como debe de ser, y ella no las iba a desobedecer. Había escogido a alguien muy importante para ella, era el embajador de su planeta, el mejor candidato que ella no se hubiera imaginado, y lo mejor de todo es que era su amigo de la infancia…
- Creo que debe de estar todo listo Yamcha – se iba poniendo poco a poco su vestido, era un vestido de seda – Mi padre se debe de enterar que nos debemos de casar – dijo Bulma dándole un beso a Yamcha.
- Lo se Bulma… - levantándose de la cama y poniéndose su traje, era un traje de combate, echo por Bulma tenia la insignia real – Creo que en cuanto antes mejor, se que si tu padre no acepta el compromiso, no nos podremos casar y sabes lo mucho que te amo, nunca me permitiría verte en manos de otro hombre que no sea yo.-
- Yamcha, yo tampoco me imaginaria verte en manos de otras mujeres – se sentó en una silla, cepillaba su cabello largo y sedoso, al momento en el que acabo se puso la tiara en su cabeza - ¡Bien! Creo que es hora de que le informemos al rey en cuanto antes, que nosotros nos queremos casar, yo creo que el rey sabe de antemano que los dos nos gustamos, ya ansió el día de nuestro compromiso – Se levanto de la silla y prosiguió – Pero antes creo que debo de bañarme y darme una vuelta por el laboratorio, he tenido un proyecto muy espectacular, he descubierto algo.
- ¿Así? Y que es lo que descubriste princesa – dijo Yamcha muy entusiasmado, todo lo que hacia Bulma lo tenia maravillado, ella era un genio en estas cosas – Ansió cuanto antes en verlo, sabes que tus proyectos me tienen encantado, si no fuera por ese maldito de Freezer – golpeo la pared – No le temeríamos en nada y la Tierra viviría en paz.-- No te preocupes Yamcha, tengo la fe, de que en alguna manera vamos a hacer libres – abrió la puerta de su cuarto – Y ese proyecto del cual te cuento, es un secreto hasta que no tenga nada concreto no te pienso decir nada, tengo el presentimiento de que pueda ser nuestra salvación, creo que nos veremos al rato mi querido embajador.-
- Nos veremos al rato princesa – le hizo una reverencia y los dos partieron en sentidos contrarios, cada quien a sus respectivas responsabilidades.Bulma llego a una puerta grande, abrió la puerta y se introdujo en él. Aquel cuarto era demasiado grande, todo estaba adornado por oro, solo la familia real podía entrar ahí, nadie mas excepto tal vez la criadas de estas pero con la autorización de la familia. Bulma se despojo de su ropa y se metió a la gran bañera que se encontraba ahí, el lugar tenia un aroma demasiado agradable, despedía vapor en ella, un espejo inmenso estaba en la habitación, una fuente en medio del baño, era todo un lujo el baño. La puerta se abrió y en ella entro una joven, no era mas alta que Bulma, y esta era una de sus mejores amigas, era la verdadera amiga de la princesa, las dos se tenían un cariño mutuo.
- ¡Milk! Has llegado amiga – la cara de Bulma se volteo hacia su criada que había llegado para darle un masaje en la espalda como era de costumbre.
- Lo siento princesa – la joven morena se sentó para empezar a hacer su trabajo, darle un masaje a la espalda de Bulma – No era mi intención llegar tarde.-
- No te preocupes Milk, ya sabes, yo también acabo de llegar – recogió su pelo para que Milk empezara su trabajo, y así un ligero masaje con la esponja empezó – Ayer fue muy ajetreado el día, necesitaba un descanso – empezó a reír muy suavemente, con solo de acordarse de que Yamcha era un buen amante, eso le reconfortaba.
- ¡Vaya princesa! Veo que realmente le gusta mucho ese joven embajador Yamcha o ¿Me equivoco? – Seguía dándole el masaje a Bulma - ¿El rey ya sabe esto?-
- Milk, sabes que cuando estamos solas, no necesitas decirme princesa, llámame por mi nombre, no es necesario esas cosas – se quedo un poco pensando y después prosiguió – Si, creo que me gusta Yamcha… el rey no sabe nada, este día espero utilizarlo, para aclarar mi matrimonio con él – la joven se levanto, el agua recorría todo su cuerpo desnudo y Milk enseguida le dio una toalla – Estoy un poco entusiasmada con esto ¿Sabes? Además… ¿no has sabido si me ha llegado algo?-
- Me alegra que este demasiada entusiasmada Bulma, me permití en escoger su atuendo, espero no le moleste esto – dijo la mujer muy gentilmente – No se nada de eso Bulma, ¿Tiene que llegarle algún paquete? – estaba muy interesada.
- No te preocupes por el atuendo – Milk le ayudaba a poner el atuendo que ella misma le escogió, era de seda, se pegaba al cuerpo, así que se podía ver la esbelta figura de ella, tenia un escote en el pecho, y tenia una cola larga, era de color vino, resaltaba mas el color de su piel blanca - ¡Si! Tiene que llegarme un paquete muy importante al menos para mi lo es, es que en la Tierra no existe ese tipo de material, así que indagué y el único lugar en la cual existe el material es un planeta llamado Vegetasei – decía eso mientras se ponía las joyas que debían adornar su cuerpo, un brazalete en el brazo y un collar que le dieron cuando era niña.
- Dijo ¿Vegetasei? – Dijo Milk sorprendida – En ese planeta me dijeron que solo viven salvajes, mercenarios, son los que conquistan planetas para Freezer ¿No es así? – dijo un poco confundida mientras cepillaba el cabello de Bulma.
- Si así es, pero a mi no me interesa en lo absoluto ese planeta de salvajes, si mas no recuerdo ahí viven los saiyajins – estaba pensando, mientras se veía en el espejo - ¡Milk! Si llega un paquete para mi, quiero que lo custodies y de inmediato me avises sobre ese paquete, es de suma importancia – se le quedo viendo a los ojos negros de Milk "Puede que este invento sea la salida de todo" – Creo que tal vez sea el momento de hablar con mi padre hace tanto tiempo que no lo he visto y tengo entendido que hoy regresa a la Tierra, tengo que hablarle cuanto antes sobre el compromiso que quiero que se lleve con Yamcha – se paro de la silla y se iba directo hacia la puerta pero fue detenida por Milk.
- ¡Bulma! No se si sea cierto, solo lo he escuchado de otras criadas algunos chismes, pero... – bajo la cabeza Milk, no podía ver a su amiga a los ojos – Espero que todo lo que me hayan dicho sea mentira. Me he enterado de dos cosas muy graves y de suma importancia para ti – trago saliva, mientras recogía las cosas que había dejado Bulma en el baño – Una de ellas es que… es que el rey esta mal herido no se por que, pero eso me entere, y la otra, la otra es que Henshi, sabes que es muy amigo del rey, así que él quiere casarse contigo, de eso fue lo que me entere, lo siento – bajo la mirada Milk.
- No lo sientas Milk – agarro su barbilla y la alzo – Te voy a comprobar de que lo que dijeron esas criadas es mentira – abrió la puerta – Por eso mismo, quiero hablar con mi padre, no me quiero casar con Henshi, sabes que la única persona que amo es a Yamcha, y Henshi… Henshi simplemente siento que no es persona de fiar, tengo el presentimiento de eso, y lo de mi padre, no creo en esas estupideces, espero que tú no las hayas creído, si así fuera, creo que hubiera sido la primera en enterarme ¿No lo crees? Es mi padre – le guiño un ojo – Te encargo eso Milk, esa mercancía es de suma importancia – después cerro la puerta tras de ella.
- Espero que todo haya sido mentira, mi amiga Bulma – Dijo resignada, Milk prosiguió recogiendo lo que Bulma había ocupado para bañarse.
Bulma iba acelerando el paso, para llegar a la puerta principal en donde seguro se encontraba su padre. "Malditas criadas estúpidas, como se les ocurre decir semejante estupidez, que mi padre esta mal herido, mi padre solo fue a entregarle mercancía a Freezer y no hizo mas, si tan solo las hubiera escuchado, hubieran tenido un castigo por osar decir eso de mi padre" Le molestaba lo que decían en el palacio, y su amiga Milk era de fiar, ella sabe todo de ella, era como la hermana que nunca tuvo.
- ¡Princesa! – dos soldados dijeron al unísono al ver a la princesa ahí enfrente de ellos, se inclinaron ante ella.
- ¿Mi padre se encuentra ahí adentro? – dijo muy impaciente Bulma, de alguna forma no le agradaba que esos rumores rondaran por el castillo "Mi prioridad es casarme con Yamcha, yo lo amo, así que en cuanto antes le haga saber mi petición, ya no le rondara esa tonta idea a mi padre de casarme con Henshi".
- Si princesa, pero en estos momentos no puede atenderte – dijo uno de los soldados.
- ¿Y por que no me puede atender? – Bulma se desesperaba, le dijo muy fríamente a los soldados quería entrar al cuarto cuanto antes.
- Por que el soldado Dodoria esta con él princesa – dijo temeroso el mismo soldado
- ¿Dodoria? – Alzo la ceja - ¿Qué tiene que estar haciendo ese soldado aquí? – no obtuvo respuesta de los soldados, la situación le estaba cansando - ¡Contesten a su princesa! – dijo en forma de orden "Supongo que esta viendo nuevos proyectos que quiere que le hagamos a Freezer, no veo otra opción de la cual ese soldado este aquí"...
La puerta se abrió, el soldado Dodoria salio de la habitación, seguido de otros soldados, se paro en seco el soldado Dodoria enfrente de Bulma.
- Siempre has sido demasiado hermosa princesa – le hizo una reverencia y sonrió maliciosamente – Veo que has crecido lo suficiente como para hacerte cargo de tu imperio – empezó a reírse mientras se apartaba de ahí.
- ¡Quítense! – le grito a las guardias que obstruían el paso "Ese estúpido de Dodoria que se cree" Seguía un poco confundida por lo que le había dicho Dodoria "Estoy lista para gobernar, eso que significa" cerro la puerta tras de ella - ¡Padre! ¿Qué es lo que quería Dodoria?-
- ¡Hija! Calma – dijo el padre de Bulma muy calmadamente – Solo quería ver lo que Freezer quería – se paro de su asiento y le dio la espalda a su hija – Deberías de darme la bienvenida hija, acabo de llegar – volteo a verla y se empezó a reír.
- Lo siento padre… - se sentó en la silla – Perdón padre, es que, acababas de llegar y Dodoria vino y… - recordó lo que le había dicho Dodoria hace unos cuantos minutos, y desecho todo lo que había dicho él y también los rumores, estaba bien su padre, así que iba a lo que realmente había venido – Padre… vengo para decirte algo de mucha importancia para mi.-
- Lo se hija… - se volvió a girar y se quedo contemplando el cielo – Yo espero que reines este planeta con sabiduría hija – se volvió a voltear e hizo una sonrisa.
- Padre no entiendo – Bulma se paro de su asiento – Pero creo que si, seré igual que tu… pero padre, vengo a otra cosa, algo de suma importancia para mi – toco el hombro de su padre – Vengo a hablar sobre mi matrimonio, creo saber con quien me voy a casar, mi corazón me lo pide, ese es al hombre que quiero.-
- Yo se que lo quieres hija, lo se – su padre se volteo – Sabes lo mucho que te quiero ¿Verdad hija? Eres muy importante para mi.-
- ¿Por qué dices esas cosas padre? Estas actuando muy extraño y creo que me estas asustando – Bulma aparto su mano del hombro de su padre – Me sorprende que sepas que lo quiero mucho – de repente el pulso de Bulma se acelero mas, todo paso demasiado rápido, su padre se cayo ante sus ojos, esta por instinto lo agarro - ¡Padre, Padre! ¿Qué te ocurre? ¡Guardias! ¡Necesito ayuda! – Bulma le temblaba la mano, se había quedado en shock.
Los guardias rápidamente entraron y pusieron en los hombros al rey, ya afuera de la puerta, se quedaron parados esperando la orden de la princesa, pero ella seguía tirada en el piso, estaba en shock, hasta que la voz de uno de ellos la hizo despertar.
- ¡Princesa! ¿A dónde lo llevábamos? – le dijo el mismo soldado que le había denegado la entrada.
- ¡No sean estúpidos! Llevenlo a la enfermería – Bulma se levanto de golpe y le dijo muy encolerizada a los soldados que estos se quedaron atónitos a la reacción de la princesa, los soldados nunca la habían visto actuar de esa manera, Bulma se dio cuenta de eso - ¡Perdón! Solo llévenlo a la enfermería.-
- Como lo ordene princesa – y de inmediato se fueron en dirección a la enfermería.
- Tengo que avisar a Yamcha, debe de estar entrenando – a paso veloz se dirigió al ala oeste, donde se encontraba la sala de entrenamiento y ahí lo vio, entrenando como siempre - ¡Yamcha! ¡Yamcha! – le gritaba muy insistentemente.
- ¡Princesa! – Vio la cara que tenia sorprendida Bulma - ¿Qué ocurre? Te conozco lo suficiente ¿Acaso tu padre no acepto el compromiso? – esperando que no fuera eso cierto.
- No, ni le he podido decir
de eso – hablaba muy entrecortada, aun seguía en shock por
todo lo que había sucedido - ¡Mi padre Yamcha! Algo le
ha ocurrido, todo fue demasiado rápido yo… - empezó a
llorar.
- Calma princesa – empezó a acariciar su mano y
alzo su barbilla para limpiar sus lagrimas – Tenemos que ir con él,
se que el rey es muy fuerte… - y la jalo en dirección a la
enfermería.
- Yamcha… - se detuvo en un pasillo y su vista se perdió en un cuadro – Tengo miedo, él es lo único que tengo, mi madre ya se murió, no se que haría si él se muere también, me quedaría sola – dijo amargamente.
- Bulma – se aseguro que nadie lo vea decirle por su nombre, era una osadía dirigirse a si ante cualquiera de la realeza – Me tienes a mi – le dio un beso tierno – Creo que tenemos que ir en donde esta tu padre él te necesita.-
- Tienes razón – alzo la vista y se aferro a la mano de Yamcha – Debo de desechar esa estúpida idea de mi cabeza.-
Llegaron a la enfermería, ahí se encontraba recargado en la pared y cruzado de brazos, el fiel amigo de su padre Henshi, era el único que se encontraba ahí, salvo ellos
- Princesa – se movió de su lugar e hizo una reverencia – En cuanto escuche la noticia de que su padre estaba aquí, inmediatamente vine a verlo – dijo muy preocupado.
- Gracias Henshi – volteando a ver a la habitación en donde reposaba su padre - ¿No sabes como esta él? – antes de que Henshi pudiera articular palabra alguna una enfermara salio del lugar.
- Ya ha llegado princesa – se quedo observando todo a su alrededor, era una persona corta de estatura, usaba lentes grandes y su pelo era canoso, a juzgar por su apariencia parecía una persona ya grande, pero su rostro decía otra cosa – Su padre desea verla, pase, es por aquí – la joven princesa asintió y siguió a la enfermera.
Pudo ver a muchos heridos ahí, no sabia que hubiera tantos, de un momento le volvió a venir la idea de que su padre estuviera muerto, descarto esta idea, hasta que por fin lo vio, era una escena triste su padre yacía ahí, tendido en la cama, veía Bulma como respiraba muy forzosamente, Bulma volteo a ver a la enfermera, esperando que ella descifrara lo que ella quería preguntarle, la enfermera lo descifro.
- Princesa, me da pena decir esto – desvió su mirada hacia otra cosa – Pero, no hemos podido hacer nada, solo es cuestión de tiempo, minutos, su padre va a morir, fue un veneno muy fuerte.-
- ¿Veneno? Alguien quiso matar al rey – grito Bulma - ¿Quién hizo esto? No quiero que nadie lo sepa, de la verdadera causa de la cual va a morir, si escucho algún rumor de esto mandare que la maten ¿Entendió?-
- Si princesa – bajo la mirada por temor y se alejo del lugar.
- Padre – Bulma se abalanzo hacia donde estaba la cama – Yo no se que sucedió… - empezó a llorar, de repente sintió la mano de él, que acariciaba su cabeza - ¡Dodoria! ¿Dodoria hizo esto verdad padre? – fuertemente abrazaba a su padre.
- Hija…- empezó a toser – Eso no importa, lo que importa es que estés bien, se que no me queda mas tiempo – empezó a toser sangre, vio que su hija iba a hablar para traer a la enfermera, pero le negó con la cabeza – Ya no hay tiempo para esto, quiero que sepas que tu siempre serás todo para mi, se que eres fuerte, y llevaras este imperio a la grandeza, pero para eso necesitas un prometido hija – tosió mas fuerte.
- Si padre lo se – bajo la mirada – Y eso era a lo que vine el día de hoy, a ver por mi prometido, yo quiero que sea… - fue interrumpida por su padre.
- Hija, no hay tiempo – como pudo saco un pergamino dentro de su traje – Este… aquí viene… - su padre ya no podía hablar bien, beso la frente de su hija – Espero que seas feliz.
- ¡Padre! –Bulma empezó a llorar, ya no sentía pulso, ni el calor de su padre – He quedado sola otra vez – beso la mano de su padre se separo de él a medida que iba caminando iba desenrollando el pergamino que hace unos cuantos minutos le dio, salio de la enfermería, se puso una mano en la boca - ¡No! ¡No puede ser! – se recargo en la pared, y se dejo caer junto con el pergamino, empezó a llorar nuevamente.
- ¿Qué sucede princesa? – Yamcha recogió el pergamino que yacía a lado de Bulma, leyó con detenimiento todo, una ceja se alzo - ¿Cómo es posible esto? – Yamcha estaba atónito ante lo que sus ojos habían leído, Henshi le arrebato el pergamino de las manos y empezó a leer.
- Vaya, vaya – cínicamente se dirigía ante Yamcha – Tal parece ser, que soy el prometido de la princesa ¿No les da gusto de esta fantástica noticia? – al parecer Henshi, ya sabia la respuesta, sabia que iba a hacer el nuevo Rey del planeta Tierra – Me parece estupendo la idea – dejo caer el papel al suelo, Henshi era de la misma estatura de Yamcha, era el líder del escuadrón del emperador, tenia el pelo rubio, ojos verdes, buen cuerpo escultural, era el candidato perfecto para la princesa, mientras que reía por los pasillos.
- Yo… - Bulma se levanto – Trate de hablar con mi padre, pero no me dejo, Yamcha, sabes que odio a ese hombre – trato de componer su postura.
- ¿Te piensas casar con él? – Yamcha vio muy duramente a Bulma.
- ¡Claro que si! Así dicta la ley y debo de respetarla como tal – bajo la cabeza Bulma, vio que Yamcha se enfureció y golpeo la pared, ella salto por el golpe - ¡Bien! La decisión se ha tomado y ya no hay mas – conservo la postura – Tengo muchas obligaciones embajador y creo que usted también – Yamcha se sorprendió por el acto de Bulma – Así que con su permiso, me retiro – agarro el pergamino y se lo llevo – La noticia de mi compromiso será dado en poco tiempo.-
- ¡Maldita sea! ¡Maldito Henshi! – Golpeo la pared – Sabes mas que nadie que amo a la princesa y tu… y tu me quitaste lo que era mío, esto no se quedara así Henshi – regreso a la sala de entrenamiento.
Pasaron los días, y el funeral del rey se hizo, aun no se decía del compromiso de la princesa y Henshi, a Bulma tan solo de pensar en su compromiso con Henshi le repugnaba la idea, seguía viendo a Yamcha, no tan frecuentemente como antes, pero aun seguía sintiendo amor al joven embajador.
Un día sin nada mas que hacer Bulma se cepillaba su cabello, había arreglado cuentas con Freezer, ahora ella le correspondía ese cargo, era la Reina del planeta Tierra, ella tenia que ver por todos, para seguir vivos al otro día, ya le era común y ameno estar con Henshi, solo hacia lo que tenia que hacer, no iba a defraudar a su reino, ahora que mas lo necesitaban, pronto las sospechas de que Henshi y ella estaban juntos se hacia mas y mas fuerte, era cuestión de tiempo para decirles su compromiso. Alguien toco la puerta de su cuarto.
- Adelante – sin ánimos dijo Bulma, no dejaba de cepillar su larga cabellera.
- Perdone su majestad – cerro la puerta tras de si Milk – Ahora si Bulma, ha llegado mercancía de lo cual usted me dijo que era de suma importancia para usted – se quedo viendo a la cara de Bulma que al parecer no recordaba nada, era de suponerse todo lo que le había pasado – Esos hombres llamados saiyajins están aquí vienen de Vegetasei.-
- Perdón Milk – salto de su silla – Con todo lo que ha pasado me he olvidado de esto, ni he pasado al laboratorio, lleveme -
- Si Bulma – abrió la puerta y las dos salieron – Es por aquí su majestad.-
Llegaron a una bodega, ahí se encontraban dos saiyajins, eran altos, su cabellera era rebelde, se les podía ver cicatrices de que habían peleado en batallas anteriores, toscos por naturaleza, antisociales, en cuanto vieron a Bulma le hicieron una media reverencia.
- Ahí esta su pedido – con su pie aventó el paquete - ¡Que hermosa esta princesa! – Sin ningún pudor se quedaba viendo el cuerpo de Bulma – Me han dicho que la princesa de este planeta es demasiado hermosa y no mentían – la veía con ojos lujuriosos.-
- Lo se… - agarro el paquete – No necesita decirme. Bien, gracias – siguió sintiendo la mirada de los saiyajins en ella - ¡Cuidado saiyajins! Si me llegan hacer algo, recuerden que están en mi planeta y ustedes son solo dos, vamonos Milk – se fue hacia la puerta.
- ¡Maldita mujer estúpida! – gruño el sayajin y se metió nuevamente a la nave.
- Gracias Milk, te debo mucho – ya habían llegado a la habitación de la princesa – Nos veremos mañana – Bulma se despidió de Milk con la mano y cerro la puerta.
Dejo el paquete debajo de su cama, era un proyecto del cual nadie tenia que enterarse, quería que de cierta forma sea una sorpresa para todos, se desvistió y se puso su pijama, abrió la puerta de su balcón y sin ningún temor se sentó en el barandal de este, vio en dirección hacia las estrellas.
"Esos saiyajins me han dejado muy sorprendida, son duros y fríos por naturaleza, muchas veces me he cuestionado lo mismo y por mas que trato de encontrar alguna respuesta nunca llego a una… ¿Por qué ellos no derrotan a Freezer? Son unos seres poderosos y sin embargo siguen a su merced" Respiro aire dejo pasar la brisa de aire por toda su cara "Tal vez su vida sea mas sencilla que la nuestra, tal vez encuentren un mejor camino para seguir… ¿Las cosas serán difíciles en Vegetasei como en la Tierra?"
CONTINUARA…
Esperemos
sus reviews, criticas quejas y demás son bienvenidas, para
saber si esta historia ha sido de su agrado…