Verano.
Si, verano. Esa estupida estación del año
Los días eran tan largos…
Los pájaros cantando entusiasmados, formando un escándalo tremendo. Además, no sabia que tenía el verano, pero Luffy tenía mucha más energía que de costumbre. Y eso implicaba que le estuviera pidiendo que jugara con el cada diez minutos aproximadamente. Y por si eso no fuera poco, hacía calor. Mucho, mucho calor.
Y eso hacía que dormir fuera más molesto y difícil.
No podía dormirse al sol (¡podía quemarse!)
No podía dormirse en el camarote (allí estaba Usuff haciendo experimentos con pólvora…que solían acabar con explosiones)
Si. Definitivamente, Zoro Rolonoa odiaba el verano.
Precisamente, en esos momentos, estaban a 37º grados. Se podía freír un huevo en la arena. El barco estaba detenido en una pequeña y desierta isla tropical.
Zoro intentaba dormitar bajo la sombra de una enorme palmera, mientras escuchaba los chillidos entusiastas de Chopperd y Luffy jugando al voleibol. (Y recibiendo un pelotazo cada vez que se les escapaba la enorme pelota con la cual estaban jugando, que era un 90 de las veces)
Su mal humor era tal, que estaba dispuesto a hacer que se tragaran la pelota como recibiera un solo pelotazo más ¡Valla que lo haría!
Escucho un chillido.
Y su cuerpo se tenso, esperando el objeto redondo, que solía golpearle después del grito.
Pero nunca llego. Los chillidos eran por otra causa.
Por una causa pelirroja.
Por una causa pelirroja, atractiva, y en bikini.
-¡Que guapa estas Nami! – alabo el renito mirándola.
Nami llevaba su corto cabello rojo suelto, y un bikini azul marino. Ella guiño un ojo a Chopperd agradeciéndole el cumplido y entro en el agua.
Zoro la siguió con la mirada fascinado.
Las olas acariciaban el cuerpo de la chica y el sol caía sobre ella destacando su piel ligeramente morena.
Parecía una sirena.
Y mientras la observaba, una vocecita susurro al oído de Zoro…que el verano no estaba tan mal… después de todo.
Ya van dos vicios!! Que ilusión!!
Agradecimientos a:
Nami OP, y EspadachinaSuly